CAPITULO 3 - Segunda Parte
Había sido una estúpida al creer que podría escapar al control de su padre. Él se había anticipado a sus planes en todos los sentidos. Desde que había recibido la carta de su hermana melliza, poco después de cumplir los dieciocho años, su correo había sido registrado y censurado. Su hermana, Misty, quería ponerse en contacto con ella y al padre de ______ lo había enfurecido que los servicios sociales hubieran desvelado el registro de adopción para ayudarla, sin pedir su consentimiento. A ______ no le habían permitido responder a la carta y solo sabia que su hermana era, o había sido, la amante de un magnate siciliano, información que su padre había leído en un periódico. Ella no había visto el artículo, pero Minos le había comunicado que la hermana con la que deseaba reunirse no era mas que una prostituta.
Desde entonces, lejos de reaccionar con el rechazo que su padre había pretendido provocar, deseaba desesperadamente encontrar a su melliza y ayudarla. Para ______ no era fácil imaginarse una vida distinta a la que siempre había llevado, pero Misty se había convertido en su meta, en su único objetivo. Se ilusión parecía alejarme más y más y no sabia que hacer. Agotada, después del largo y tenso día, ______ se ducho y se acostó.
Ya dormida, se removió inquieta en la cama. Tenía sueños confusos y agitados, en los que los recuerdos se mezclaban con acontecimientos del día.
En cuanto su anfitrión se retiro, Nick fue a buscar a ______. Ya no le asombraba la oferta de su futura esposa de que sería lo que el deseara. Veinte años supeditada al dominio de un padre así derrotarían al espíritu mas fuerte. Era lógico que la idea de vivir en Lexos la horrorizara. Lo natural era que ______ deseara su propio hogar, y más aún, que deseara ver una de las ciudades más románticas del mundo y disfrutar de la libertad que le había sido negada hasta entonces. Pero ______ tenía que comprender una cosa; él no era un empleado de su padre, y no permitiría que lo intimidaran.
Se pregunto si debía advertirle de que Minos seguía siendo un hombre muy enfermo que, lejos de estar recuperándose, tenia escasas posibilidades de sobrevivir. Minos no quería que su hermana y su hija supieran la verdad y él no se atrevía a interferir en ese sentido. Pero tampoco le parecía correcto guardar silencio.
Una sirvienta lo condujo a la puerta de la suite de ______. Llamo, espero unos segundos y entro en la espaciosa sala de estar. Durante un instante, tuvo la sensación de estar en una tienda de juguetes, pues había ositos de peluche en todos sitios. En estanterías, sillas, agrupados alrededor de mesas... Osos gigantescos, medianos y pequeños, algunos peludos y esponjosos, pero la mayoría despeluchados y viejos. Se quedo clavado en el sitio, sintiendo la mirada de cientos de ojos de plástico. Suprimió un gruñido, con la esperanza de que los osos no estuvieran incluidos en el pacto.
La puerta del dormitorio estaba abierta y las lámparas encendidas, pero lo que capto su atención fue un gemido. Se acerco al umbral. No eran más que las 11, pero ______ estaba dormida. Pensó que debía haberlo supuesto, las mujeres nunca hacían lo que se esperaba de ellas. Esperaba encontrarla desecha en lagrimas, pero se había ido a la cama tranquilamente, ¡como si ver a su padre y a su prometido a punto de pegarse no la afectara lo mas mínimo!
______ se removió y una cascada de pelo sedoso y rubio se desparramo sobre la almohada. Tenía un cabello precioso y mucho mas largo de lo que él había creído. Y, aunque de día su horrorosa forma de vestir se remontaba a la moda de 30 años antes de haber nacido, dormía con un diminuto camisón color melocotón, que se pegaba a cada deliciosa curva de su cuerpo. ______ arqueo la espalda para darse la vuelta y, fijándose en la redondez puntiaguda de sus pequeños senos, decidió que quizá aceptaría vivir con “uno” de esos osos.
Cuando volvió el rostro hacia él, vio las huellas de las lagrimas y la tensión aun manifiesta en su delicado rostro. Movió la cabeza inquieta, agarro con fuerza la sabana y sus labios se entreabrieron con un largo gemido de miedo.
En su sueño, ______ estaba en la playa, unos fuertes brazos la agarraban y la obligaban a mirar cada golpe que Yannis recibía, ambos estaban atrapados, pero la responsabilidad era únicamente de ella. Solo su padre podía decretar un castigo tan brutal. Solo su padre podía obligarla a ser testigo del fruto de su rebelión.
Impotente, deseando que Yannis se derrumbara y no volviera a intentar levantarse para recibir otro terrible puñetazo de los dos hombres que lo castigaban, echo la cabeza hacia atrás y grito. Grito una y otra vez, sabiendo que antes o después, vendría alguien del pueblo, y que era su unica esperanza de poner fin a la brutal paliza. Se incorporo de golpe en la cama, abrió los ojos de par en par y miro con terror al hombre alto que había junto a su cama.
—Solo ha sido una pesadilla —Nick se sentó al borde de la cama con un movimiento fluido y la rodeo con un brazo. Temblando, ______ se aparto de él.
—Ocurrió... ¡pegaron a Yannis hasta dejarlo casi muerto!
—¿Qué ocurrió? —pregunto Nick que, poco acostumbrado a que lo rechazaran, al oír el nombre de otro hombre, se había puesto rígido y había fruncido el ceño.
______, ya despierta, contuvo un sollozo, mientras se preguntaba que hacia Nick en su dormitorio e intentaba recuperar el control. Hacía mucho que no tenía esa pesadilla. Desde pequeña, se había acostumbrado a enterrar en su mente los hechos desagradables. Lo que no podía cambiar, tenía que tolerarlo. Volvió a dejarse caer sobre la almohada y se tumbo de costado.
—¿Qué ocurrió? —repitió Nick, apoyando una mano suavemente en su espalda cuando ella volvió a estremecerse con un sollozo.
—Me encontré con Yannis a escondidas y papá hizo que le dieran una paliza mientras yo miraba —musito temblorosa—. Reían a carcajadas mientras le pegaban.
Nick, desconcertado, trago una bocanada de aire. ______ movió la cabeza, alzo su rostro triangular y arrebolado y clavo en él unos ojos verdes y tormentosos.
—Él me quería, y casi lo mataron por eso.
A Nick no le gustaba nada lo que estaba oyendo, pero otras respuestas más primarias le impedían reaccionar. ______, con el cabello revuelto, los labios hinchados y rosados y los ojos brillantes era pura sensualidad. Unas finas tiras sujetaban el diminuto pedazo de seda sobre sus delicados y blancos hombros, que dejaba entrever la provocativa curva de sus senos. La respuesta viril de Nick fue instantánea y un fuerte deseo sexual lo recorrió como una descarga de adrenalina.
—¿No vas a decirme que todos los padres griegos deben salvaguardar la virtud de sus hijas? —presiono ______.
—No, y menos de esa manera. Pero, ¿qué futuro podría tener una Gakis con el hijo de un pescador? —inquirió Nick con frialdad.
—Yannis estudiaba el último año de Medicina y lo conocía de toda la vida —se defendió ______.
Aunque la inteligencia de Nick le advertía que las malas noticias sobre el hijo del pescador estaban alcanzando dimensiones intolerables, luchaba con el deseo de aplastarla en sus brazos, como un hombre de las cavernas, hasta borrar de su mente cualquier pensamiento que no se centrara unica y exclusivamente en el.
En el pesado silencio que siguió, los ojos de ______ se encontraron con los de él, oro fundido enmarcado por pestañas negras como la tinta. Su mirada ardiente hizo que se le secara la boca y el corazón se le desbocara. Sintió como su cuerpo la traicionaba; sus senos se endurecieron e irguieron, y noto un calor abrasador y desconcertante entre las piernas.
Él se inclino hacia ella y enredo los dedos, largos y morenos, en su cabellera, para luego acariciarle la mejilla. ______ alzo los ojos hacia él, sin aliento, examinando sus bellas facciones: nariz afilada, ojos centelleantes, mentón marcado y fuerte y una boca amplia y sensual. Sintió que se derretía por dentro como un helado al sol, y su excitación se disparo.
—Ni siquiera me has preguntado que hago aquí —recrimino Nick con voz ronca—. Vine a hablar contigo. No esperaba que estuvieras ya en la cama.
______ alzo la mano y paso los dedos delicadamente por el espeso pelo negro que caía sobre su frente. Su deseo la electrificaba y aterrorizaba a un tiempo, pero anhelaba enterrar los dedos allí y atraerlo para volver a sentir su boca. El agarro su mano temblorosa.
—Si te toco, me quedare, pero creo que deberíamos esperar hasta nuestra noche de bodas —dijo, con una sonrisa cariñosa que iluminaba sus facciones.
______ se sonrojo violentamente. Hablaba como si “ella” lo hubiera invitado a compartir su cama y su orgullo se resintió al tiempo que su mente divagaba confusa.
—Shh —silencio Nick poniendo un dedo sobre sus labios entreabiertos. La estudio con ojos brillantes de satisfacción masculina, como si ya formara parte de su corazón y su alma—. Me halaga que estés tan deseosa como yo, pero esperar acrecentara el placer.
Cuando Nick salió del dormitorio, ______ sintió un espasmo de ira que la dejo sin aliento y sin conciencia durante unos segundos. ¿Cómo se atrevía a pensar que se había ofrecido a él como si fuera una desvergonzada necesitada de amor? ¿Cómo se atrevía a suponer que el deseo momentáneo de querer ser besada equivalía a una invitación a acostarse con ella?
Nick regreso a su suite sonriente, pensando que su matrimonio no iba a ser tan malo. ______ no había tenido ninguna libertad con su padre, y vivir con un marido tolerante y generoso solo podía parecerle mejor. No le costaría mucho mantenerla contenta. Además, a no ser que se equivocara, tenía la impresión de que había sido agraciado con una mujer tan apasionada como él mismo. Aunque le dolía haber tenido que controlar el impulso sexual, estaba convencido de que la noche de bodas compensaría ese sacrificio...
Disfrutenlo