Capítulo 10: Perdida y Encontrada.Tu: El límite de x es... -murmuró para sí misma. Era sábado en la tarde y ella no busco mejor forma de distraerse que estudiar. Se apoyó en un codo sobre su cama y miró fijamente el último modelo de su libro de cálculo cubierto solo con una bolsa marrón-
Ladeó su cabeza. ¿Fue eso un pequeño, tentativo golpe en la puerta? Soltando mecánicamente su lápiz, _____ miró afuera de la gran ventana de su cuarto. Hubo un golpe de nuevo. Abrió la puerta.
Brant: Hey. -susurró- ¿Estoy interrumpiendo?
Tu: Por supuesto que no. -abrió la puerta ampliamente-
Brant: ¿Cómo te va?
Tu: Bien.
Desde que lo conocío, había pasado soñando despierta con todos los posibles escenarios para estar a solas con Brant, pero nada comparado con tenerlo realmente aquí mismo, a su lado.
Brant: ¿Te gusta que la gente te esté mirando desnuda? -señaló a la ventana abierta de la pared del fondo-
Tu: Hay persianas. -dijo, su boca se sentía algodonosa-
Brant: Lastima. -dijo en voz baja- Parecías tan hermosa en la cocina... Esperaba que consiguiera verte... así... de nuevo.
Cuando _____ se dio la vuelta, ¿qué acababa de decir? Brant la estaba mirando fijamente. Cerró sus ojos, se estiró, y la beso justo en los labios. _____ no vaciló. Le devolvió el beso, y luego se aferró a la parte de atrás de su cuello y lo besó más duro. _____ abrió los ojos, y vio un reflejo en su espejo... El de Melissa, y se separó de Brant de inmediato.
Brant: ¿Qué pasa?
Melissa estaba de pie en la puerta, su pelo desordenado y como Medusa, su rostro absolutamente inexpresivo. Algo vibró en el pantalón de _____. Era su teléfono, un nuevo mensaje había llegado.
Ya te dije que: besar al novio de tu hermana está mal. -ATroian se tambaleó por la escalera de caracol al ver a su padre, vestido solamente con delgados bóxer y una camiseta sin mangas, leyendo el “Philadelphia Inquirer”.
Troian: Hey. -murmuró bajo, arrastrándose hacia la maquina de café expresso. Se quedó mirando por mucho tiempo a su pálido padre, al azar los hombros peludos, movía sus pies y hacia ruidos “hmmm” en el papel- ¿Papá? -su voz se quebró ligeramente-
Byron: ¿Mmmm?
Troian: -Tomó un poco de café- ¿Pueden los fantasmas enviar mensajes de texto?
Byron: -Levantó la vista, sorprendido y confuso- ¿Qué es un mensaje de texto?
Troian: No importa.
Byron: ¿Estás segura?
Troian se mordió el labio nerviosamente. ¿Qué es lo que quería preguntar? ¿Está un fantasma enviándome mensajes? Pero vamos, lo sabía.
De todos modos, no sabía porque el fantasma de Miley volvería a hacerle esto a ella. Era como si quisiera venganza, ¿pero eso era posible?
Sonó el timbre.
Troian: Yo voy. -abrió la puerta de la entrada lentamente, y vio a Nick Jonas del otro lado, su cabello marrón desordenado y sus ojos hinchados-
Nick: Hey. -graznó-
Troian: Hey. -contestó-
Nick: -Hinchó sus mejillas con aire, su viejo hábito cuando estaba nervioso- Debería irme. -empezó a girar-
Troian: Espera. -lo tomó por el brazo- ¿Qué? ¿Qué está pasando?
Nick: Umm... está bien... pero esto va a sonar extraño.
Troian: Está bien. -sus ojos bailaron- Dime.
Nick: Yo... estaba pensando. -se mordió ligeramente el labio- ¿Puedes salir conmigo?
Troian: ¿Qué? -preguntó, sorprendida-
Nick: Como amigos. -bajó su cabeza- Necesito hablar con alguien. Iba a ir donde _____, pero vi que Melissa estaba molesta y mi hermano salió. -dijo, prácticamente rogando-
Troian: Papá. -gritó- Voy a salir un rato con Nick. -sólo escucho a su papá gritar
“Está Bien”- Vamos.
La forma en que Brant la había cogido se sintió tan... diferente. _____ nunca antes había sentido algo ni remotamente como eso. Pero entonces ese MSM. Y la expresión calmada, misteriosa de Melissa. Ella fue a la sala.
Peter: Te hemos estado esperando. Siéntate. -dijo. Ella arrastró la silla de madera y se sentó junto a su madre-
Verónica: Ni siquiera sé que decir. ¿Cómo pudiste? -el estómago de _____ cayó. Abrió su boca, pero su madre levantó su mano- Tú no tienes derecho a hablar en este momento.
Peter: ¿En que estabas pensando? Era el novio de ella. Estaban planeando mudarse juntos. ¿Te das cuenta de lo que has hecho?
Tu: Yo... -comenzó-
Peter: Quiero decir... -interrumpió, entonces ella miró abajo- Tú eres menor de edad, lo que significa que somos legalmente responsables por ti. Pero si fuese por mí, te hubiese echado fuera de esta casa ahora mismo.
Melissa: Desearía no tener que verte nunca más.
_____ se sintió desfallecer. Ella medio había esperaba que ellos dejaran sus tazas de café y le dijeran que sólo estaban bromeando, que todo estaba bien. Pero ellos ni siquiera podían mirarla. Las palabras de su padre picaban sus oídos:
Si fuese por mí, te hubiese echado fuera de esta casa ahora mismo.Tu: Lo siento. -dijo, mirando a su madre-
Verónica: _____, no. -lágrimas comenzaban a correr por las mejillas de _____- No es conmigo con quién necesitas disculparte, de todas maneras.
_____ miró a Melissa lloriqueando, a través de la mesa. Por mucho que odiara a Melissa, nunca la había visto así de miserable, no desde que Liam rompió con ella en el Instituto. Estuvo mal coquetear con Brant, pero _____ no había pensado que pudiera ir tan lejos como fue. Trató de ponerse en el lugar de Melissa, si ella hubiese conocido a Brant primero, y Melissa lo hubiese besado, estaría destrozada también.
Tu: -Su corazón se ablandó- Lo siento. -susurró-
Melissa: -Se estremeció- Púdrete en el infierno.
Tu: Lo siento tanto. -dijo, llorando-
Verónica: Es sólo que es tan despreciable. -murmuró-
Melissa: Eres una perra. -hizo un pequeño chirrido y empujó su silla. Ella lloriqueó todo el camino subiendo las escaleras hasta tirar la puerta de su dormitorio-
Peter: Brant se fue hace unos minutos. -dijo, parando en la puerta- No vamos a escuchar de él de nuevo, y si sabes lo que te conviene, no vas a hablar de él nunca más.
Tu: Por supuesto. -murmuró, y apoyó su cabeza en la fresca mesa de roble-
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Troian: ¿Qué cosa querías contarme? Confía en mí, soy tu mejor amiga. -sonrió-
Nick: Confío en tí. -miró a Troian- Es que... es complicado.
Troian: Mira. Yo también tengo que contarte algo. Así que, dime lo que te preocupa y luego yo te digo lo que me pasa.
Nick: -Sus palabras se obstruyeron en su garganta- Alguien me mando un mensaje de texto. -finalmente, habló-
Troian: -Lo miró sorprendida- ¿De
“A”?
Nick: Era...
Troian: Personal. -lo interrumpió-
Nick: S-sólo Miley lo podría saber. -balbuceó-
Troian: Creo que ella esta jugando con nosotros. -susurró, asustada-
Nick: ¿Tu crees?
Troian: Es Miley de quién hablamos. ¿No era su deporte favorito? -dijo, con un tono de burla-
Nick: ¿Le diremos a los chicos? -preguntó, nervioso-
Troian: No sé tú pero... yo no puedo.
Nick: Yo tampoco.
Nick decidió acompañar a Troian a su casa. Ya habían salido del parque, cuando de repente escucharon un ruido y vieron una sombra acercandose a ellos. Era Joe.
Nick: ¿Qué haces aqui? -preguntó, apenas Joe se paró en frente de ellos-
Joe: Mamá me dijo que te buscara. -comenzaron a caminar. De repente, cuando estaban a unas cuadras de su calle, se escuchan sirenas- Oh Dios mío. -susurró-
Joe corrió furiosamente, Troian y Nick lo siguieron. Si las sirenas de la ambulancia se detienen en el momento en que doble la esquina, pensó Joe, Ashley estará bien. Pero entonces la ambulancia se detuvo en frente de la casa de Ashley. Las sirenas todavía estaban chillando. Autos de la policía estaban por todos lados.
Joe: No. -susurró. Médicos de bata blanca salían de los vehículos y corrían a la casa. Un montón de personas llenaban el patio de Ashley, algunos con cámara. Joe corrió torcidamente hacia la casa-
Ashley: ¡Joe! -irrumpió a través de la multitud. Joe se sobresaltó y corrió a los brazos de Ashley, lágrimas corriendo desordenadamente por su rostro-
Joe: Estás bien. -sollozó- Tenía miedo de...
Ashley: Estoy bien.
Pero había algo en su voz que claramente no estaba bien. Joe dio un paso atrás. Los ojos de Ashley estaban rojos y mojados. Su boca estaba abierta nerviosamente.
Joe: ¿Qué es? ¿Qué pasa?
Ashley: -Tragó- Hallaron a tu amiga.
Nick: ¿Qué? -dijo soprendido, poniendose al lado de Joe con Troian-
Luego miraron la escena en el césped de Ashley. Era todo tan inquietantemente familiar: la ambulancia, los autos de la policía, la multitud de personas, las cámaras de largo alcance. Un helicóptero de noticias sobrevolaba la zona. Esta era exactamente la misma escena que hace tres años, cuando Miley desapareció. Joe miró a Ashley, sonriendo aliviado. ¡Lo que él había estado esperando! Miley estaba de vuelta en su casa, como si nada hubiera pasado.
Joe: ¡Lo sabía! -susurró-
Ashley: -Tomó la mano de Joe- Estaban cavando para nuestra cancha de tenis. Mi mamá estaba ahí. Ella... la vio. Escuché su grito desde mi cuarto. -dijo, mirando a los tres-
Troian: Espera. ¿Qué? -susurró-
Ashley: Traté de llamarte Joe.
Nick, Troian y Joe estaban confundidos. Entonces miraron al equipo de veinte efectivos de la policía. A la Sra. Benson sollozando por el columpio. En la cinta LÍNEA POLICIAL, NO CRUCE curvándose alrededor del patio trasero. Y después en la furgoneta aparcada en la entrada. Decía, MORGUE ROSEWOOD PD. Joe lo había leído seis veces para darle sentido. Su corazón se aceleró y de repente no pudo respirar.
Joe: No... entiendo. -dio un pasó atrás- ¿Qué hallaron?
Ashley: -Los miró compasivamente, sus ojos brillando por las lágrimas- A su amiga Miley. -susurró- Acaban de encontrar su cuerpo.
_____ y Selena aparecieron detrás de ellos. Estaban todos destruidos, los seis lloraban mientras veían como se llevaban el cuerpo -sin vida- de Miley.
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