The Other Side Of The Door [Joe&Tu&Nick] - [Todo Tipo]

Hola chicas The Other Side Of The Door [Joe&Tu&Nick] - [Todo Tipo] Icon_smile

Bueno por fin me decidí a escribir una nove en este foro The Other Side Of The Door [Joe&Tu&Nick] - [Todo Tipo] Icon_smile

Generalmente las hacía en univisión.

Antes de empezar la novela:
-> La protagonista eres tú, pero para hacerlo más fácil, te pondré un nombre en la Novela. Así que, para no pensar mucho, te llamarás Anna. Ya sabes que, cuando salga "Anna", eres tú. Es que es más sencillo que poner *___* The Other Side Of The Door [Joe&Tu&Nick] - [Todo Tipo] Icon_smile

-> No necesariamente es real. Habrán cosas que ustedes dirán "Los Jonas no hacen eso." pero, en mi novela, estos Jonas serán un poco diferentes. (:

Sinopsis.

Después de haber luchado tanto para lograr estudiar en Estados Unidos (Cinematografía), Anna (tú), lo había logrado.
Anna se había ido totalmente sola y por su cuenta a los States, donde no sabía el destino que le depararía, donde sólo perseguía un sueño. El más díficil de todos.
Anna (tú) a pocas semanas de su llegada ya había conseguido amigas que, sabía que con el tiempo, serían inseparables. Pero, inesperadamente, un solo día pudo cambiar todo aquello: El día que encontraron aquel celular en la calle.

Salir con un hermano Jonas sería increíble. Pero, ¿salir con dos hermanos Jonas, sería igual de bueno?
¿A quién escogerías tú?

The Other Side Of The Door
(Al Otro Lado de la Puerta)

Capítulo #0

Los Angeles. ¿Qué ciudad podría ser mejor que Los Angeles? Tenía el clima ideal, llena de jóvenes soñadores, todos como yo: En busca de un sueño. Y aquel sueño era díficil de alcanzar, pero yo sabía que lo haría. Si otros han podido, ¿por qué yo no?
Y sí, ya había dado el paso más grande todos. Había venido a los Estados Unidos de América, aunque mis padres estuvieran es desacuerdo, así como mis amigos y todos mis conocidos. Me había ganado una beca para estudiar aquí y no la iba a desperdiciar.

Tú: ¿Quién es ese? -le pregunté a Abigail mientras veíamos MTV.
Abigail: Justin Bieber. ¿No es adorable?
Tú: Es un bebé -me reí-, debe tener como 14 años.
Abigail: No, creo ya tiene 15.
Tú: De eso es lo que hablo. En este país hasta niños tan pequeños tienen la oportunidad de ser grandes estrellas. Se ve tan fácil.
Abigail: No lo es. Necesitarías mucha suerte para ser famosa. Pero tienes talento, Anna, llegarás lejos. Es mejor que sólo pienses en tus estudios.
Tú: Lo sé.
Abigail: Bien -dijo levántandose de la cama-, señora Manager, es hora de ir con la banda. Se nos hará tarde.

La banda. Desde que había llegado a casa de Abigail, no tardé mucho en conocer a "Changes" y casi al instante me volví parte de ellos. Le cantanban a los problemas del día a día, de los demás, de las dificultades, hablaban de la superación. Algo que me gustaba de ellos es que no eran una banda que sólo le hablaba de amor. Y sabía que ellos sí tenían futuro en la música.

Antes de llegar al estudio, como hacíamos cada sábado, Abigail y yo pasábamos rápidamente por Starbucks. Eramos adictas a aquel café.

Abigail: ¿Nos sentamos?
Tú: ¿No se supone que estabas apurada? -me burlé
Abigail: Siempre hay tiempo para un café.

Mientras caminábamos hacia las mesas, Abigail me contaba de cómo terminó con Matt, otra vez. Y decía que aquella era la última vez que lo perdonaba, que buscaría a alguien que la supiera apreciar. Y no es que yo estuviera en desacuerdo, pero Abigail decía eso cada dos semanas y siempre volvía a caer por Matt.

Abigail: He estado saliendo con otros chicos... A espaldas de Matt.
Tú: ¡Aby!
Abigail: Ay, Ann, no te pongas así. Sabemos que Matt también lo hacía. Además nunca pasó nada con los otros chicos.
Tú: De todas maneras, no debiste de haberlo hecho. Como sea, ¿alguien interesante?
Abigail: No -suspiró-, bueno sí. Está este chico.. Davis, pero creo que está saliendo con alguien.

De repente, su mirada se posó detrás de mí y frunció el ceño.

Abigail: ¿Qué es eso? -señaló a una planta que se encontraba detrás de mí.
Tú: ¿Una planta?

Abigail torció los ojos, se levantó y se dirigió hacia aquella planta. Con cuidado, introdució su mano en la tierra y sacó algo. Era un objeto pequeño y delgado y... ¿era un celular?
Abigail lo escondió rápidamente en su bolsillo y se sentó a mi lado.

Tú: ¿Qué es?
Abigail: Un iPhone -dijo sonriendo con malicia.
Tú: No te lo piensas quedar, ¿verdad?
Abigail: ¿Por qué no? Me siento mal por la persona que lo haya dejado ahí, pero ya lo perdió. No podemos hacer nada.
Tú: ¡Aby! Dame el teléfono -ordené seriamente. No quería salir de un país lleno de delincuentes, para convertirme en uno.
Abigail: No. Yo lo vi. Yo me lo quedo.
Tú: ¿Y si el dueño está aquí mismo, buscando el celular? -Abigail miró a todos lados-, y si no está aquí, no importa. No podemos simplemente agarrar algo que estaba por allí.
Abigail: Anna, no seas monja. Si el teléfono estaba ahí es porque a esa persona no -el rostro de Abigail se llenó de pánico de repente, y me miró asustada- ¡Están llamando!
Tú: Dame el celular.

Una cosa que me causaba gracia de Abigail era que, de lejos parecía ser muy valiente, pero dentro, era solo una niña.
Me dio el celular nerviosa. Decía "Home Calling". Me debatí entre contestar o no, pero, me coloqué en el lugar de la persona que se encontraba en la otra línea. Tenía derecho a tener su celular de nuevo.
Llené mis pulmones de todo el aire que pude y contesté la llamada.

Tú: ¿diga?
-----: Veo que has encontrado mi celular -dijo una voz ronca al otro lado de la línea, en un tono enojado. Con escuchar aquella voz, me imaginé rápidamente a un hombre alto y musculoso. Y sexy.
Tú: Eh.. Sí. Usted lo había dejado en Starbucks. Imagino que lo desea recuperar.
-----: Por supuesto -dijo nervioso-, ¿dónde nos podríamos ver? ¿Cuándo? Necesito ese celular lo más pronto posible.
Tú: En el muelle de Santa Mónica -dije tratando de hacerme cargo de la situación sin mostrar nerviosismo.
-----: A las cinco de la tarde. ¿Le parece señorita?
Tú: Sí, claro.
-----: ¿Sabe quién soy yo? -preguntó serio, pero pude distinguir el nerviosismo de su voz, muy oculto.
Tú: ¿Debería?
-----: Bien. Entonces hoy en el muelle de Santa Mónica a las 5 de la tarde.
Tú: De acuerdo.
-----: Adiós.

Y cortó la línea.

Tú: Mal educado -gruñí.
Abigail: ¿Quién era?
Tú: No sé. Pero lo veré hoy. ¿Me acompañas?
Abigail: ¡claro! -dijo emocionada.

Después del ensayo con la banda, las horas pasaron demasiado rápido. Faltaban sólo cinco minutos para la hora acordada entre el señor gruñón. Abigail no había podido venir pues, Matta la había llamado, y para ella es imposible decirle que no.
Algo dentro de mí, ya sentía repelencia hacia el señor. Pero, también, en mi mente estaba la imagen de un joven alto, musculoso, de ojos azules y cabello castaño... Aquella voz tenía que ser de un hombre sexy.
Santa Mónica era muy grande, así que senté en la playa, a pesar de que él no sabía que yo estaría allí. Hice mis ejercicios de relajación mientras veía como el Sol bajaba hacia el horizonte. Esto de entregarle el celular a un desconocido me causaba demasiados nervios. ¿Y si era una trampa? ¿Y si él era un violador? Mi respiración se fue agitando más y más....
Hasta que, para reventar mis nervios, el celular empezó a sonar.

Unknown number Calling. (Número desconocido llamando)

Tú: ¿Diga?
-----: ¿Cómo te puedo reconocer?
Tú: Estoy en la playa.
-----: De acuerdo. Iré para allá -mi corazón empezó a latir más rápido-, ¿cómo la puedo reconocer?
Tú: No. La pregunta es, ¿cómo lo puedo reconocer a usted?

El hombre que se encontraba en la otra línea empezó a reír, y traté de encontrarle el humor a mi pregunta.

Tú: ¿Qué es tan gracioso?
-----: ¿De verdad no sabes con quién hablas?
Tú: No -dije inocentemente. ¿Debía saber quién era él?
-----: Ya estoy en la playa. Estoy con un sueter gris y lentes oscuros. Me sabrás reconocer.

A pesar de que era Sábado no había mucha gente en la playa, teniendo en cuenta que las playas de Santa Mónica son lindas.
Tranqué la llamada y con la mirada busqué al hombre con sueter gris y lentes oscuros. Mis ojos se posaron en todas las personas que se encontraban en aquella playa, pero nunca encontré a un hombre con aquella descripción. ¿Me había tomado el pelo?

-----: Creo que ése es mi iPhone -me susurró una voz masculina, de manera lenta, baja y sensual en el oído. Estaba detrás de mí.

NUEVA LECTORA

siiguellaaaaaaaaaaaaaa ... Razz

esta super la nove
quien es el dueño del iPhone ??
y como es eso de enamorarme
de dos Jonas ?=?
siiguelaaaaaaaaaaaaaa ... Razz

Nueva lectoraa!!
sta Geniial!! ^^

Siguuuuuuuelaaaaaaaaa!!

seguila! esta muy buena!

SIGUELAA NUEVA LECTORA

noooo qe feooo!!!¬¬
no la sigueeess!!!???
SIGUELAA LUEGOOOOOOOOoooo
please *-*
SIGUELAA LUEGOOOOOOOOoooo
please *-*
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la vas a seguir ??

siiguellaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa ... Razz

]b]Hay! Seguila me encanto!
Esta muy muy buena tu Nove de verdad!
Es que aaaaaaaww! Que nervios!
Quien sera..?? Seguila please! Besos![/b]

ay me gusta ^^ me gusta la trama ^^
de verdad ke esta super
me gusta tu manera de escribir
y narrar las cosas Very Happy

te he visto x ahi comentando en algunas noves
pero no sabia ke tu tambn escribias Razz

siguela pronto Smile

gabriela la vaas a seguir?? T_T

nueva lectoraaaaa
siigueelaaa
siigueelaaa
nO me dejes hasta hay
esta de mas de wuenaaaa

Nueva Lectora.!

quiero saber quien es el dueño
puede ser...Nick...o...Joe
io creo que es Joe x)
pero bueh para la salir de la duda
mejor...SIGUELA! pleasee

uu .. la vas a seguirr ??
yo quieroo capp !!

NEW READER!!!!

hey! cuando la sigues??
esta buenasaa!!
siguelaa plizz!!
kien sera el de la sexy vozz??
awww seguro es joe....
es tan sexyy1!
jajaja...
bueno siguela ehh!!
no te olvides!!

Biee!*

Gracias a todas (: (K)
Si la voy a seguir xd Es que estaba de vacaciones y no habia internet! So.. estuve desconectada del mundo!
Gracias por sus comentarios <3 Mañana les dejo cap Smile

Graciasss (K)

siiguellaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa ... Razz

^^

wiiiiiiiiii dale Very Happy

entoncs espero cap ^^

Capítulo 1 -Desconocidos

Al escuchar aquella voz sentí miles de mariposas recorrer mi vientre -sin razón alguna- y del susto volteé a ver quién se había acercado tanto a mí.
Al parecer me había equivocado en todos los sentidos al tratar de adivinar cómo sería el dueño del celular. No era un señor, todo lo contrario, aquel joven no pasaba de tener 20 años. Vestía un sueter gris, con la capucha puesta y unos grandes lentes de sol -los cuales identifiqué inmediatamente como Ray-Ban-, una barba de dos o tres días, y a su mano una botella de agua. No era tan corpulento como lo había imaginado, aunque no me había decepcionado del todo, ya que había algo en él que lo hacía lucir encantador y sumamente sexy. Y, podría jurar que lo había visto en algún lado.

Tú: ¿Es usted el dueño del teléfono? -pregunté y me retracté inmediatamente. Tenía que ser, sino, no me hubiera dicho aquello.
-----: Sí -dijo sin dejar de mostrar su lado serio, con aquella voz ronca.
Tú: Lamento haberlo tenido tanto tiempo -le entregué el celular rápidamente y el lo tomó, revisándolo-. No le he hecho nada.
-----: ¿Por qué no lo revisaste? -preguntó con mucha curiosidad.
Tú: Porque, si fuera usted no me gustaría que revisaran mis cosas personales.

Frunció el ceño y se quitó los lentes de sol, dejándome ver su rostro. Tragué saliva al descubrir lo apuesto que era. Tenía los ojos castaños pero de alguna manera ese color se acercaba al verde; Quizá, solo era la mirada, pero había algo que le hacía lucir encantador. Y sólo viendolo así, sin lentes, podía decir que su nariz era perfecta y sus labios estaban pintados de una tonalidad rojiza y se veían muy carnosos.

-----: ¿No me reconoces? -preguntó, con aún más curiosidad que antes.
Tú: Ya le dije que no. No sé quién es -dije harta de la misma pregunta. ¿Qué acaso no entendía?
-----: Bien -dijo al fin sonriendo-, gracias por recuperar mi celular. Creo que no pudo haber caído en mejores manos. ¿Cómo te llamas?
Tú: Anna.¿Y usted?
-----: No me digas usted, y me llamo... -dudó antes de hablar-, Adam. Sí, me llamo Adam Miller. Es un placer, Anna.

En mi mente recorrí la lista de famosos llamados Adam: Adam Sandler, Adam Broody, Adam Lambert... Pero aquel joven no era ninguno de ellos, ni alguno que yo había escuchado antes. Quizá solo era un actor de telenovelas que ni siquiera era reconocido.

Tú: Supongo que igual.

Noté como su sonrisa no había desaparecido de sus labios desde que le había dicho, con mucha sinceridad, que no sabía quién rayos era. ¿Cómo debía conocerlo? Como sea, parecía ser alguien agradable, e indiscutiblemente apuesto y...
Ya era hora de irme. En vez de estar pensando en el lindo joven que tenía al frente debería estar haciendo mis deberes. Cualquier otra cosa sería mejor, ¿cierto?

Adam: ¿Anna? -al pronunciar mi nombre, sentí como mariposas recorrían mi vientre.
Tú: ¿Qué? -fue lo que contesté
Adam: No sé como pagarte lo de mi celular así que...
Tú: No te debes molestar por eso -lo interrumpí-, cualquier hubiera hecho lo mismo.
Adam: No, creeme que no lo hubieran hecho. Pero, como manera de pagarte, quisiera.. Invitarte a caminar por la playa. ¿Quieres?

Sus ojos verdosos me miraron de una manera que, inevitablemente me dejaron sin aliento. Pero, no descartaba la idea de que aquel hombre podría ser peligroso. Además, jamás lo había visto en tele o haber escuchado de él. Además...
Interrumpiendo mis pensamientos, mi celular empezó a vibrar en mi bolsillo.

Tú: Disculpa -le dije mientras veía quién me llamaba.
Adam: No hay problema.

Número desconocido.

Tú: ¿Diga? -contesté-
Abigail: ¿Anna? ¡Anna! -me dijo llorando- necesito hablar contigo. ¿En dónde estás?
Tú: Calmate, Aby. ¿Qué pasó?
Abigail: Necesito hablar contigo -dijo desesperada-. ¿Nos podemos ver en el apartamento? Ya estoy cerca.
Tú: Claro, voy en seguida. Calmate. Estaré ahí en veinte minutos.

Ella tracó la llamada y mi corazón empezó a latir rápido. Sonaba desesperada, en lágrimas, y ya la había escuchado así antes. Pero, aquella vez, todo salió mal.
De cualquier manera, mi fantasía de conseguir a un príncipe desconocido, mediante un celular, había desaparecido.

Tú: Lo siento -dije con un gran suspiro. Él se dio cuenta que lo decía de verdad-, pero debo irme ya.
Adam: No te preocupes -me guiñó un ojo.
Tú: Fue un placer haberte... conocido.

Él sonrió.

Adam: El placer fue mío.

Sus ojos verdes de tornaron dulces y amables. Por una fracción de segundo no sabía si irme de verdad o quedarme allí admirándolo. Pero, recordé todo lo que Abigail había hecho por mí, no podía simplemente dejarla sola, sabiendo que ella era capaz de cometer cualquier locura. Con último suspiro, dí media vuelta.

Adam: Espera -me detuvo, colocando su mano en mi hombro. Aquel contacto causó que mi mundo se voloviera de cabeza, y no sabía cómo ni por qué-, ¿Te puedo llamar alguna vez?
Tú: Claro -sonreí.

Ambos nos miramos por varios segundos. No sabía si era obvio lo que yo pensaba, pero aquel hombre era tan... ¿guapo?
Volvió a colocarse la capucha de su sueter y con el iPhone en su mano, me pidió mi número.

No había salido tan mal.

Adam: Te llamaré.
Tú: De acuerdo -sonreí para disimular la emoción. Aunque por dentro, ¡no lo podía creer!

Sin decir más, me alejé. No volteé a verificar si él se había quedando mirando, pero tenía aquella sensación.. Esa cuando estás de espaldas y sientes la mirada de alguien. Sonreí para mí misma, y me enfoqué en una sola cosa: Abigail.
La manera más rápida de llegar, era en taxi. Con el dolor que me causaba pensar en que gastaría más dinero de lo que generaba usaba, detuve uno y le dí mi dirección.
Sentí mi teléfono vibrar.

Número desconocido.

Tú: ¿Diga?
Adam: Eh, era sólo para confirmar que tenía tu verdadero número.Eh, adiós.

Cortó la llamada de inmediato, y sonreí todo el camino.
Había algo en todo esto que me gustaba.

Awwwwwwwwwww!!!
Que linnnnndooo JOEEE!!!
por eso lo amo tanto!!
siguelaaa!! que me encanto el capp!!
Ojala que me quede con joe..
pero bueh...igual siguelaaaaaaa!!

biee!!