Encuentros Sexuales!!! (Nick y tu) (solo mayores)

Capítulo VII

Elegancia”

Mi padre iba conmigo en el coche camino a la que sería mi nuevo hogar, si la casa de mi madre era lujosa, exquisita y costosa, la de mi padre era el doble, vivía en un pent-house de tres pisos en un edificio de solo diez elegantes apartamentos, diez exclusivos pisos, si la elite era vecina de me madre, no había manera de describir a los vecinos de mi padre, solo la realeza tenía la capacidad de pagar un apartamento de esta índole, la recepción del lugar era majestuosa, todo estaba detalladamente tallado en oro y mármol, de una manera muy fina, los diseñadores habían logrado jugar con las combinaciones de colores naranjas y ocres, que se despejaban por las grandes paredes, el ejercito de escoltas de mi padre se iba despejando a medida que nos adentrábamos en el pasillo que nos dirigía al ascensor, cuando entramos al elevador solo tres de ocho escoltas nos acompañaban, nunca había venido a la casa de mi padre, no había tenido la oportunidad, mi madre había insistido a que volviera con ella a su casa pero no le permitiría volver a correrme debido a que nunca dejaría a Nick como ella quería que lo hiciera, las mozas me guiaron a mi habitación ubicada en el tercer piso del palaciego apartamento, las paredes eran olivas y blancas, mientras se abrían paso a una terraza llenas de hortensias y rosas blancas, con una vista directa al Central Park, la cama de tamaño descomunal parecía diminuta en dimensión al tamaño de la recamara, el piso de caoba oscura le daba un toque de sobriedad mientras varias puertas se despejaban por las paredes norte y este del cuarto, abrí una puerta por curiosidad y me encontré con un cuarto de baño gigante lleno de fragancias y cremas que reconocía, eran mías sin duda alguna, salí de ese sector y me dirigí a las otras puertas, un enorme closet se abría paso, me adentre y me encontré con todos mis costosos conjuntos, tanto los que había dejado en la casa de mi madre, como los del hotel y los de la universidad, todos ordenados por diseñador, color y estilo de tela, salí en dirección a la tercera y última puerta para encontrarme con un armario con todos mi zapatos, incluso los que había olvidado, esos que solo se compran por antojo –creí que te ayudaría a sentirte más en casa– me dijo una voz gruesa que se adentraba en la habitación –pues lo lograste, me has dejado fascinada, gracias papá– le dije mientras le daba un fuerte abrazo –se que no será igual que vivir con tu madre pero espero que te sientas bien aquí mientras resolvemos lo de tu apartamento propio–
–Todo está perfecto, además en la casa de mi madre no tenía un closet como ese ¡me encanta! Voy a poder comprar aun más–
–Ya le pedí al banco que te enviaran un par de tarjetas mas, tu madre me conto lo sucedido, no quiero que creas que estoy completamente de acuerdo con lo que estás haciendo pero sé que de nada servirá que te lo prohibamos–
–En eso tienes razón papá, lo amo, nada haría que decidiera dejarlo–
–Entonces no tengo opción que suavizarte el camino, debes estar consciente de lo difícil que será todo, no creo que todos lo veamos de la misma manera, tienes a tu madre como ejemplo–
–Gracias papá– fue lo último que le dije antes de que saliera de la habitación, quería ducharme y relajarme, mientras me encontraba en la ducha meditaba todo, Kevin había reaccionado de una manera muy extraña, no era él, todo era muy raro, no estaba acostumbrada a verlo de esa forma, al salir de la ducha me aplique las cremas hidratantes, me coloque un camisón de seda que llegaba un tanto más arriba de mis rodillas y me deslice en la cama, paseaba por los canales del televisor pero no podía concentrarme en nada, el anochecer llego rápidamente, había dormido tanto en la clínica que no podía pegar ojo alguno en este momento “Quiero fondue” me dijo Alicia por un mensaje desde su blackberry, decidí hacer caso aceptar su invitación y me dedique a elegir que ponerme, ver mi closet tan ordenado me emocionaba, elegí un Valenciaga azul rey que hacia contraste con mi hombros blancos descubiertos por el corte del vestido que llegaba justo a mis rodillas, era un vestido de hilo que solo podía acompañarse con el cabello suelto y lacio por lo que me dedique a secarme el cabello, estaba particularmente esmerada en mi aspecto por lo que acompañe mi cuello con una gargantilla fina de oro blanco y diamantes, junto a unos zapatos y una cartera de sobre Louis Vuitton de color azul dos tonos más oscuros que el vestido, intente maquillar las marcas de mis muñecas que eran las únicas descubiertas pero no pude ocultarlas, así que coloque un brazalete de trenzas en la que más se notaba, baje las escaleras en busca de mi padre pero una de las empleadas me indico que había salido, le avise por un mensaje y salí en encuentro de mi amiga, en la entrada de mi actual residencia me esperaba un hermoso sedan negro marca Roll Royce, con un impecable chofer vestido negro y guantes blancos, mi padre me lo había asignado, Alicia había elegido un lugar que extrañamente no conocía, era un nuevo local en la ciudad, me impacto ver la multitud en la entrada, uno de los empleados del restaurante me abrió la puerta del coche mientras otro me ayudaba a salir, me aturdieron un poco los flashes que se dirigían hacia mi de todos los ángulos en la entrada, alce la mano para saludarlos con una sonrisa un tanto forzada, al entrar un mesonero me indico cual era mi camino, Alicia estaba sentada en una mesa del lujoso restaurante, aun aturdida pude ver como varias caras conocidas dirigían su atención hacia mi –estas muy linda amiga– me dijo Alicia con una sonrisa encantadora mientras soltaba una copa de champan –todos nuestros viejos conocidos están acá– le dije horrorizada, había hecho bien en vestirme de esta forma –lo sé, cuando llegue no podía creerlo, aunque tal vez era un poco obvio, es el lugar de moda– ella estaba completamente despreocupada, Alicia estaba radiante esta noche, llevaba un vestido color tabaco y blanco, con sus bucles sueltos que le llegaban a los hombros, resaltaba su elegancia y hermosura aun más –Por cierto Nick ya viene en camino, me tome el atrevimiento de invitarlo–
–Gracias– le dije mientras el camarero me traía una copa también, la mirada de Alicia se clavo en la entrada del local, cuando voltee me percate del motivo, la belleza de Nick estaba deslumbrando a todas las presentes, cada chica volteaba a verlo mientras el sin intención derrochaba una sensualidad exquisitamente masculina, su mirada estaba clavada en mi como la mía en él, el traje Armani negro que llevaba lo hacía ver a un mejor, con la camisa blanca que descubría ligeramente su pecho y garganta marfileños con los tres botones del inicio abiertos tenía el aspecto de un súper modelo Europeo, me dedico una sonrisa que respondí inmediatamente, se acerco a nuestra mesa, saludo a Alicia y luego se dedico a mi, nos quedamos viendo intensamente por un momento y luego beso mi mejilla rosando ligeramente el inicio izquierdo de mis labios –¿Quién es él?– pregunto Alicia aun impactada –discúlpenme, él es mi hermano, Joe– había estado tan inserta en la mirada de Nick que no había notado la presencia de Joe, quien estaba hermosamente vestido hoy con un traje Dolce gris acompañado de una clásica camisa blanca logrando el mismo impacto que su hermano, Joe era un tanto más blanco pero su cabellera negra lo hacían ver sensual, el problema era que yo solo tenía ojos para Nick, pero sin duda Joe podía ser aun más deseable que mi pareja y Alicia se había dado cuenta de eso, no le quitaba la mirada de encima y Joe en un gesto de caballero beso su mano delicadamente antes de sentarse en la mesa, dejándola aun mas atontada, esta era una noche llena de elegancia.