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| Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. | |
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+4BETTY DE JONAS Lady_Sara_JB VaLeexD PidgeJonas 8 participantes | |
Autor | Mensaje |
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eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 3rd 2013, 21:52 | |
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| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 4th 2013, 20:18 | |
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| | | BETTY DE JONAS Novia De..
Cantidad de envíos : 613 Edad : 30 Localización : Con los jonas :) (en un cuarto AMANDONOS) Fecha de inscripción : 01/08/2011
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 4th 2013, 22:16 | |
| Por favor tienes que seguirla!!!! No puedo creer que por fin hayan decidido hablar sobre lo que pasó y que hayan estado juntos otra vez... Fue romántico y hot a la vez Me encantó!!!! Por favor siguela!!!!!!!! | |
| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 5th 2013, 15:59 | |
| Capitulo 14 Haría cualquier cosa por ser tu todo. —Joe… ¿O ____ ? {____}Creo que por fin he entrado en ese cuento de hadas en el que siempre quise vivir desde que era una niña. Lo estoy viviendo, justo en este momento, vistiéndome y alistándome para un tranquilo domingo con Joe. Él me despierta besando suavemente cada parte de mi cara. Suaves besos que me hacen soltar risitas, ya que sus labios cosquillean contra mi piel. Cuando desliza sus manos entre nosotros y comienza a hacerme cosquillas en el estómago, me río más fuerte, nuestras piernas juntas, nuestros cuerpos desnudos chocando uno con el otro. Lo que nos lleva a tener un lento y delicioso sexo matutino. Pero antes del lento y delicioso sexo matutino, recorro su cuerpo como prometí. Trazándolo con mis labios, mi lengua, mis manos y mis dedos. Imaginen mi sorpresa cuando descubro un tatuaje en su caja torácica, escrito en elegantes letras. Es un párrafo, más como una cadena de palabras en un poema. Delineo cada letra con mi dedo, tratando de descifrar su significado.For a passion that’s Able to shine like ours. Blessed are we to Love Each other.(“Por una pasión que es capaz de brillar como la nuestra bienaventurados somos por amarnos. El uno al otro.” Esa es la traducción del tatuaje de Joe, lo puse en ingles porque al unir las primeras letras se forma “FABLE” que es el nombre original de ____)
Estoy sorprendida de que el chico-bueno-futbolista Joe Jonas tuviera un tatuaje. Y que se lo hiciera luego de que estuvimos juntos.
—¿Qué significa?—pregunto,rozando las palabras más delicadamente con mi dedo índice. Se ve sorprendido ante la pregunta. —Léelo de vuelta —dice despacio—. Lentamente. Así lo hago, dándome cuenta de que la primera letra de cada oración deletrea mi nombre. Recordándome la nota del malvavisco que me dejó. Estoy sorprendida. Abrumada. Tocada a fondo, lágrimas se forman en mis ojos, y él las besa haciéndolas desaparecer mientras éstas caen por mis mejillas. —Escribí esas palabras para ti —murmura contra mi boca antes de besarme—. Me convertiste en un poeta, _____ . Dios, es tan dulcemente romántico. Quiero perderme en él por siempre. Tomamos una ducha juntos y eso eventualmente nos lleva a más delicioso sexo, dejándome tan cansada, que mis piernas son como fideos cuando finalmente salimos de la ducha. Él comienza a secarme con una toalla, sus dedos deslizándose entre mis aún mojadas piernas, y me lleva a otro orgasmo estremecedor. Juntos, somos absolutamente ridículos. No podemos mantener nuestras manos alejadas del otro. Y amo eso. Lo amo a él. Me pongo mis shorts de la noche anterior pero hace demasiado frío para usar ese estúpido top de encaje, así que Joe me deja tomar prestado una sudadera vieja. Me la pongo, riéndome cuando llegan justo sobre mis rodillas. Sé que luzco tonta, pero él dice que me veo linda, me arrastra a sus brazos y me besa. Otra vez. A fondo. Tan profundamente que finalmente tengo que golpear su pecho y decirle que tengo que ir a casa para ver cómo está mi hermano antes de que nos dejemos llevar de nuevo. La decepción en su rostro es evidente pero respeta mis deseos y nos dirigimos a mi feo departamento. Mientras más nos acercamos, más nerviosa me pongo. ¿Qué pasa si mamá se encuentra en casa?‖de ninguna manera quiero que conozca a Joe, no todavía, porque si esto iba a continuar entre nosotros, eventualmente ellos tendrían que conocerse. Es sólo una realidad a la que no quiero enfrentarme.
Mamá es increíblemente buena en avergonzarnos con sus alcohólicos modales vulgares, tira la casa por la ventana y no le importa nada o nadie más excepto ella misma. Joe piensa que su familia está jodida —bueno, lo está, no nos engañemos con respecto a eso— aunque mi mamá no es ninguna santa tampoco. Lo que da miedo es que constantemente temo convertirme en ella. Sería tan fácil. Nos parecemos mucho, a pesar de que odio admitirlo. Cuando nos detenemos en el estacionamiento del complejo de apartamentos, noto que el auto de mamá no está ahí, gracias a Dios. El alivio que me inunda es palpable e inmediatamente me siento más ligera. Joe viene conmigo a pesar de que le sugerí marcharse, ya que yo trabajaría hasta tarde. Pero insiste en acompañarme hasta la puerta como alguna clase de caballero. Creo que tiene miedo de dejarme ir, la verdad. Y yo me siento igual. Mientras saco el llavero de mi bolso para abrir la puerta, ésta lo hace por si sola y me sorprende tanto que dejo caer las llaves. Owen está parado ahí, vestido con pantalones de chándal y una camiseta vieja, además de que su cabello es un absoluto desastre. Se arroja hacia mí, sus brazos tan apretados alrededor de mi cintura que casi no puedo respirar. —¿Dónde has estado? —Me pregunta, dándome una sacudida cuando se aleja—. ¡He estado muy preocupado! —Pensé que estabas en la casa de tu amigo. —Su arrebato me sorprende. Hablando de un cambio de roles. No puedo recordar la última vez que lo había visto tan nervioso. —Estuve en casa solo toda la noche. Mamá se quedó con Larry. Ella pensó que volverías a casa. También yo. Traté de mandarte mensajes y llamarte pero nunca respondiste. Mierda. —Mi celular debe haber muerto. —Me inclino para recoger mis llaves. Suena como una pobre excusa, pero es la verdad. Owen mira por encima de mi hombro y repara en la presencia de Joe. —¿Quién rayos es este? Cielos, ¿por qué suena tan hostil? La mirada que le está enviando a Joe podría matarlo, es demasiado intensa.
—Um… —No sé cómo responder. Esto es incómodo. No esperaba que mi hermano estuviera aquí para recibirnos. —Espera un minuto. —Owen me rodea para que de esa forma pueda pararse directamente delante de Joe, que es mucho más alto que mi hermano—. Eres Joe Jonas , ¿no es cierto? Oh, mierda. No esperaba que mi hermano lo reconociera, pero Joe es uno de los jugadores estrellas en el equipo de la Universidad. Ellos tienen un pequeño estatus de fama aquí en la ciudad. —Si, lo soy. —La sonrisa de Joe es despreocupada y cálida—. Tú debes ser Owen. —Sip. Y tú eres el imbécil que le rompió el corazón a mi hermana. Sin advertencia, Owen levanta su brazo y golpea a Joe justo en el mentón. Y lo envía al suelo. —¡Oh por Dios! —Tomo a Joe por los hombros, pero él ya se está levantando por su cuenta, su expresión llena de incredulidad. Gracias a Dios, no parece enojado. Más que nada sorprendido. Yo también estoy sorprendida. —¿Por qué rayos fue eso? —le pregunto a Owen, quien está frotándose los nudillos como si le dolieran. Pequeña basura. Probablemente le duelen. Se lo merece por hacer una payasada como esa. —Él es la razón por la que has sido tan miserable estos últimos meses. No puedo creerlo, maldita sea. ¿Saliste con Joe Jonas ? —Owen señala con un dedo a Joe —. ¿Cuándo diablos sucedió esto? —¡Cuida tu lenguaje! —Es la única cosa que se me ocurre decir. No sé cómo responderle. Desde luego, no quiero confesar exactamente cómo Joe y yo nos conocimos en primer lugar. Suena tan sórdido. —Te escabulliste para verlo y no entiendo por qué. Él no es poca cosa, ____ . —Owen sacude la cabeza—. Soy tan estúpido. No puedo creer que no llegué a unir todo, principalmente por las iniciales en tu pie. —¿A qué se refiere? ¿Tienes mis iniciales en tu pie? —La mirada de Joe cae a mis pies. Estoy usando mis tacones negros de la noche anterior, y el tatuaje es evidente en la luz del día. Diablos, era evidente anoche y temprano esta mañana, pero no creo que él estuviera prestando mucha atención más allá de mis muslos. El simple pequeño bosquejo de un corazón se encuentra en la parte superior de mi pie izquierdo, las letras J y J se apilan una encima de la otra en el medio. Mi homenaje a Joe y a la semana que pasamos juntos. Al amor que siento por él. Me hice el tatuaje en un arrebato de irracionalidad. Quería probar que lo amaba lo suficiente para tenerlo permanentemente grabado en mi piel. Algo que él nunca me mostró a mí. Un deseo insensato por mi tonto corazón, supongo. Esta no era la forma en que quería que se enterara del tatuaje. Además, comparada con el hermoso poema que él escribió para mi, mi tatuaje parece una pequeñez. Algo sin sentido. —Se lo hizo después de Acción de Gracias —aclara Owen, lanzando dagas a Joe con la mirada—. No le explicó a nadie el porqué del JJ. —añade cuando nota que yo estoy lista para golpearlo por haber maldecido. —Te hiciste un tatuaje. Con mis iniciales en tu pie. —Joe sacude su cabeza, su expresión es de incredulidad—. ¿Por qué no me lo dijiste? ¿Me lo muestras?
Me encojo de hombros, deseando no tener esta conversación frente a mi hermano. —Es tonto. —Definitivamente, no es tonto. —Se para frente a mí y toma mis manos, su mirada cayendo a mis pies. Noto que su mandíbula está roja, se ve un poco hinchada, y no puedo creer que mi hermano lo haya golpeado tan fuerte. El elemento sorpresa definitivamente estuvo a su favor—. Me encanta. —El tuyo tiene más significado —murmuro mientras me jala a sus brazos justo en frente de mi hermano. Puedo sentir la mirada aburrida de Owen a nuestras espaldas pero la ignoro—. Tú escribiste un poema para mí. —Tú pusiste mis iniciales en tu pie para siempre, _____ . Creo que ambos estamos en la misma página o algo así. Lo abrazo para acercarlo más a mí y río, porque no se cómo más reaccionar. Owen se aclara la garganta, recordándome por qué estoy aquí en primer lugar, y me alejo de Joe, dándole una sonrisa confiada. —Tal vez debamos hablar más tarde. ¿Luego de que salga del trabajo?
—Sí. —Joe sonríe, sus ojos azules brillando—. Suena bien. ¿Quieres que te pase a buscar? —Claro, me parece perfecto. —Se inclina y me besa de nuevo como si no pudiera evitarlo—. Salgo a las ocho. —¿Tienes cómo ir al trabajo? —Ya pensaré en algo —le sonrío y comienza a alejarse, mirándome por sobre su hombro una última vez antes de bajar las escaleras y dirigirse a su camioneta. —¿Qué diablos fue eso? —pregunta Owen cuando lo arrastro a nuestro departamento y cierro la puerta. —¿De qué estás hablando? —Meto las manos en el bolsillo de la sudadera y respiro profundo, inhalando la esencia de Joe. Dios, huele bien. Tal vez no quiera devolvérsela. Tal vez no quiera volver a lavarla tampoco. Asqueroso pero cierto. —¿Estás viendo a Joe Jonas ? ¿Es tu novio? —Los ojos de Owen se amplían—. Esto es una total locura, _____ . Él es toda una superestrella. Como, una leyenda universitaria. ¿Y tú estas con él?
Me encojo de hombros. —No estoy totalmente segura de cómo definir lo que está sucediendo entre nosotros, pero sí. Estoy con él. Supongo. —Santa mierda. —Owen empieza a reír—. Necesito decirles a mis amigos. ¡Wade va enloquecer! ¿Mamá lo sabe? —No, nadie lo sabe. Todavía no quiero que nadie lo sepa. —Quiero tener a Joe cerca y mantenerlo como mi pequeño secreto por un par de días más. Una vez que las personas se enteren que somos una pareja, las cosas podrían ponerse un poco raras. —¿Por qué diablos no? ¡Él es asombroso! —Owen frunce el ceño, como si recordara mi miseria—. Bueno, no tanto, considerando cómo de mal debe de haberte herido para tenerte tan miserable. Nunca te he visto así. ¿Qué pasó entre ustedes? —Es demasiado difícil de explicar. —Hago un gesto con la mano, despidiendo a mi pasado con Joe. Cómo si fuera a decirle a mi hermano algún detalle—. Además, hablemos del hecho de que lo golpeaste. ¿Qué diablos estabas pensando? —Eso fue increíble. Mi mano todavía me duele. Lo siento. —Lo golpeo en la cabeza antes de que se aleje de mi alcance—. No puedo creer que realmente le di un puñetazo a Joe enloquecido Jonas y él no me noqueó por ello. —Creo que estaba demasiado sorprendido por el hecho de que un niño trató de darle una patada en el culo —dije con ironía. Owen niega con la cabeza. —Ya no soy un niño pequeño, _____ . ¿Cuándo van a darse cuenta de eso? Pongo los ojos en blanco, pero me abstengo de hacer una observación. Piensa que con catorce años ha madurado. Él sabrá la verdad algún día. —Me muero de hambre. ¿Aún quieres ir a desayunar? —Sí, claro. Pero, ¿cómo vamos a llegar? No tenemos ruedas. Deberías haber dejado que tu novio se quedara para darnos un aventón. —Podemos caminar a ese pequeño restaurante en la calle. No está demasiado lejos —le sugiero. Tengo que hablar con mi hermano en paz, no con Joe como testigo. Estoy ansiosa por tenerlo de vuelta en mi vida, pero tengo que aliviar su paso al caos que es mi familia en este momento. | |
| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 5th 2013, 17:41 | |
| sigueeee:) | |
| | | Lady_Sara_JB Casada Con
Cantidad de envíos : 1582 Edad : 28 Localización : México Fecha de inscripción : 24/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 5th 2013, 18:28 | |
| jejeje me encanto la reaccion de owen darle el golpe a joe y despues alegrarse jejeje q genial siguela | |
| | | BETTY DE JONAS Novia De..
Cantidad de envíos : 613 Edad : 30 Localización : Con los jonas :) (en un cuarto AMANDONOS) Fecha de inscripción : 01/08/2011
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 5th 2013, 21:25 | |
| OH POR DIOS!!!! No puedo creer que el hermano de ______ golpeara a Joe...!!!!!! Pero de cierta forma se lo merece por hacer sufrir a ______ Por favor tienes que seguirla!!!!!! Ahora que están juntos me muero de ganas por leer que es lo que pasará!!!!! | |
| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 6th 2013, 17:33 | |
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| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 6th 2013, 18:07 | |
| Capitulo 15 {JOE}¿Alguna vez has estado en la total y completa cima, sólo para que ésta se derrumbe en cuestión de minutos? Sí. Yo también. Durante toda la mañana me he sentido increíble. Como si caminara a diez metros del suelo. Incluso ser golpeado por el hermano de la _____ no me perturba, aunque mi mandíbula todavía duele. El chico está ganando un poco de fuerza, le daré eso. Regreso a mi departamento y me lanzo directamente a la cama con la cara hundida en la almohada. _____ la utilizó anoche. Puedo olerla, su aroma llena mi cabeza y la quiero. Tanto. Sin embargo, tiene una vida. Un trabajo al que tiene que asistir y un hermano al que tiene que cuidar. Lo entiendo, lo capto. Estoy malditamente agradecido de que me permitiera volver a su vida y me esté dando la oportunidad de compensar todo el daño que le ocasioné.
Me dejo invadir por el sueño con su olor rodeándome, su rostro entre mis pensamientos. Me despierto con el sonido del móvil y tengo la esperanza de que sea ella, pero no lo es. Es mi padre. Genial. —¿Qué ocurre? —Intento transmitir cierta jovialidad en mi voz, pero me temo que suena falso. Lo vi ayer por la mañana. ¿Qué ha pasado que tiene que llamarme después de las veinticuatro horas después de verme? —Tuve una larga conversación con Adele anoche —dice, con voz sombría. Se me encoge el estómago. Sólo escuchar su nombre me pone enfermo. —¿Sí?— Dios, ¿qué podría haberle dicho? ¿Qué le contó? —Estoy reconsiderando los procedimientos de divorcio. Maldición. Justo cuando pensaba que podríamos tenerla fuera de nuestras vidas para siempre. —¿Por qué? —Ella jura que nunca ha sido infiel. Que todo son un montón de rumores maliciosos propagados por algunas mujeres en el club que le aborrecen. —Papá hace una pausa y respira hondo—. ¿Debería creerle? —Eso no es algo que tenga que decirte yo —digo automáticamente, porque infiernos, no. No voy a jugar ningún papel en su decisión. Además, sé que no le ha sido infiel a él por experiencia personal. Dios, siento que voy a vomitar. —Está jugando con mi cabeza. Me llamó cuando regresaba de verte y cuando le dije dónde había estado, se excitó. Exigió que fuera a verla de inmediato. Así que me fui a casa y ella... me atacó. Cierro los ojos, deseando que se calle. —Estuvo alucinante. Fue como si no se cansara de mí. Sé que no quieres oírlo, pero fue el mejor sexo que he tenido en... años. No lo entiendo. No la entiendo. —Está usando el sexo para mantenerte con ella, papá. —Mi voz es fuerte y me siento completamente amarrado. No me gusta escuchar todos estos detalles. Lo que es peor, no me gusta escuchar que lo atacó después de que supo que había pasado tiempo conmigo. ¿Qué significaba eso? Sólo puedo suponer que tal vez pensó en mí cuando... Mierda. No puedo terminar el pensamiento. —Probablemente —concuerda papá tranquilamente—. Pero si sigue así, podría no estar listo para dejarla ir todavía. Es un idiota. Quiero decírselo, pero mantengo la boca cerrada. Sus problemas no son de mi incumbencia. —Supongo que eso depende de ti. —Es todo lo que digo en respuesta. —Escucha. Anoche hablábamos mucho Adele y yo. Desea que vuelvas a casa para el verano. Dice que te echa de menos y quiere que pases más tiempo por aquí. Y estoy de acuerdo. ¿Podrías considerarlo? ¿Por nosotros? Eso sería un rotundo no, pero no voy a ser un idiota con mi padre en este momento. Él sigue demasiado frágil por este asunto de si debería o no divorciarse de Adele. Y mírala a ella, arrastrándose como un gusano de arrastrarse a mi vida. Tratando de conseguir que regrese allí de nuevo. ¿Acaso piensa que soy un idiota? —Me tengo que ir, papá. Llámame si necesitas hablar de nuevo. —Dime que por lo menos lo vas a considerar, hijo. Adele te extraña y te quiere mucho. Desde que perdimos a Vanessa, ella no ha sido la misma. Lo sabes. Puedes traer un poco de felicidad de nuevo en su vida. —Nos vemos, papá. —Cuelgo antes de que pueda decir nada más. No creo poder soportarlo.
Mi apetito se ha ido, mis nervios estallan y me paseo por el departamento, completamente al borde de derrumbarme. Me pongo unos zapatos y trato de salir a correr, pero lo único que puedo pensar es en mi padre quedándose con Adele. En ella tratando de convencerme para que vaya a casa y pase el verano con ellos. No puedo volver allí. Acción de Gracias fue lo suficientemente malo. Todavía no he aceptado plenamente lo que ella me dijo. Es difícil para mi cabeza aceptar una revelación como esa. ¿Podría mi hermana realmente haber sido mi hija...? El pánico me llena y dejo de correr, mirando alrededor mientras estoy en el medio de la acera. Deseando tener a alguien con quien hablar. Cualquier persona. _____ . Pero está en el trabajo. Es tarde y su cambio se inició a las tres o cuatro. Demonios, no puedo recordarlo. No puedo bailar el vals y a la vez dejar caer todos mis problemas en su vida, de todas formas. Desearía tanto que hoy no fuera domingo, porque de otra forma llamaría a la Dra. Harris. Decidiendo lidiar con ello, saco el teléfono del bolsillo de mi suéter y marco su número. Ella responde a la tercera llamada.
—Estoy sorprendida de saber de ti un domingo. —Es como ella me saluda—. ¿Estás bien? —No realmente —admito, agradecido de que no me regañe por contáctatela en su día libre—. Mi padre llamó. —Umm. Eso no suena bien. Afortunadamente para ti, estoy de humor para un café. ¿Quieres que nos encontremos en, digamos, veinte minutos? Me siento aliviado. ¿Cómo fui tan afortunado de encontrar a la Dra. Harris en primer lugar? Tal vez esto de reunirse con un paciente para tomar un café en una tarde de domingo no sea una situación común, pero tengo sacar toda esta mierda de mi pecho. No sólo las cosas malas que ocurrieron con mi padre, sino también mi noche y mi mañana con _____ . —Estaré a allí —digo después de que ella recita la dirección de un Starbucks cercano.
***
—Entonces, ¿cómo te sientes acerca de lo que dijo tu padre? Tomo un sorbo de mi café helado. —Preferiría que se divorcie de ella. La quiero fuera de mi vida para siempre. —Pensé que Adele ya estaba fuera de tu vida. —La Doc. me mira de esa manera característica que tiene. Esa que me recuerda que soy un adulto y el responsable de lo que me ocurre. —Lo está. Pero la quiero fuera de la vida de mi padre también. Mientras ella seguia casada con él, es una barrera entre nosotros. Una que no quiero cruzar —digo con una finalidad que desesperadamente quiero creer. —Hay una decisión que puedes tomar y por supuesto es una que tienes permitida. Sabes que dañarás a tu padre si cortas por completo la relación sin una explicación. —Sorbe un poco de su bebida, con una expresión de total satisfacción, pero yo sé lo que está tratando de hacer. —De ninguna manera le diré lo que pasó entre Adele y yo. Va a odiarme. —Niego con la cabeza. —No debería. Eres su hijo. Eras un niño cuando esto empezó. Eras un niño cuando le pusiste un alto. Ella estaba mal. ¿No crees que él vaya a comprender eso? —me pregunta con voz suave. No tengo idea. Estoy demasiado asustado para correr el riesgo. —Él comprenderá lo que quiera comprender. Creerá lo que quiera creer.
—¿De verdad tienes tan poca fe en tu padre? Ouch. Nunca lo pensé de esa manera. —No es que yo no tenga fe en él. Es que... ella sabe cómo torcer todo. Es una maestra de la manipulación y ha estado jugando con nosotros durante años. —Le das demasiado poder. Ella lo sabe y lo disfruta —señala la Dra. Harris. Me encojo de hombros. —Tal vez. Es más fácil evitarla que enfrentar la verdad. —Sabes, lamento que constantemente huyas de tus problemas. No es saludable. Van a alcanzarte tarde o temprano. —Toma otro sorbo de su bebida y luego empuja la taza a un lado para poder descansar sus brazos al borde de la mesa. —Basta de centrarse en lo malo. Vamos a hablar de lo bueno. Hablamé de_____. —Sólo así, estoy sonriendo mientras estudio mi taza, pasando mi dedo a través de la condensación que se forma allí —Ya te dije que pasé la noche con ella. —¿Hablaron mucho? —Le dije que lo sentía. —¿Por qué? —Por abandonarla. —Me encuentro con la mirada de la doctora al otro lado de la pequeña mesa. El Starbucks está vacío, ya son cerca de las seis. La mayor parte de la gente está en su casa preparando la cena o lo que sea—. Tenemos que hablar más. —¿Quisieras estar seguro de lo que haces? ¿Vas a explicarle por qué huiste? Parece que es buena para ti —dice la Dra. Harris con una leve sonrisa—. Creo que jamás te he visto tan feliz. Mi sonrisa crece. —Es buena para mí. Estoy enamorado de ella. — Decir las palabras en voz alta lo hace mucho más real. Y da miedo. —¿Se lo has dicho? —Todavía no. —¿Por qué? —¿Y si no me corresponde? —Mi mayor temor es soltarlo todo y dejarlo en claro para que luego ella no sienta lo mismo. O peor aún, que se ría de mi. Sin embargo, sé que nunca haría eso. También sé que, en el fondo, siente lo mismo por mí que yo por ella.
Es fácil escribir las palabras te amo, componer poemas en su honor y declararle mi amor eterno con un puñado de lindas frases. Pero otra cosa completamente distinta es hacer esa declaración a la cara. Ya estoy lo suficientemente asustado por sólo decirle las palabras en voz alta a mi psiquiatra. —Amar a alguien es estar en constante riesgo con tus emociones. Cuando encuentres a la persona correcta, aquella con la que sabes que quieres estar, esa persona hace que el riesgo valga la pena. —La Dra. Harris se detiene, estudiándome cuidadosamente—. ¿Crees que ____ vale el riesgo para ti? —Sí —digo sin dudar. Sonríe. —Si eso es lo que crees, entonces ella querrá oír las palabras, Joe. Apuesto a que piensa que tú también eres un riesgo que vale la pena correr. | |
| | | BETTY DE JONAS Novia De..
Cantidad de envíos : 613 Edad : 30 Localización : Con los jonas :) (en un cuarto AMANDONOS) Fecha de inscripción : 01/08/2011
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 6th 2013, 19:46 | |
| OWWWW!!!! Joe va a declararle su amor a _______ Que hermoso!!!! Pero por otro lado sigue el tema de su padre... Por favor tienes que seguirla por que yo muero por saber qué mas pasara!!!! | |
| | | Lady_Sara_JB Casada Con
Cantidad de envíos : 1582 Edad : 28 Localización : México Fecha de inscripción : 24/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 6th 2013, 19:47 | |
| maldicion q el papa se divorcie de adele!! siguela
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| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 6th 2013, 21:27 | |
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| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 7th 2013, 14:24 | |
| Capitulo 16 Tenemos miedo de querer demasiado por miedo a que a la otra persona no le importe en absoluto. — Eleanor Roosevelt {____}El restaurante está relativamente tranquilo, supongo que es la norma para una noche de domingo, de acuerdo con Jen. Mi turno pasa lento, las cuatro horas se sienten como doce, sobre todo porque no me estoy manteniendo constantemente ocupada, lo que normalmente ayuda a pasar el tiempo. Reviso el reloj y veo que son las siete y media. Finalmente. Treinta minutos hasta que vea a Joe y no puedo esperar. Sin embargo, apesta que Colin esté aquí. No quiero que vea a Joe recogerme. Le prometí que no habría ningún drama y que iba a mantener a Joe muy lejos de aquí. ¿Cómo iba a saber que, literalmente, nos besaríamos —y un montón de otras cosas— y nos reconciliaríamos? En serio, creí que habíamos terminado. Listo. Terminado. Además, había estado tan malditamente cabreada con él. Enojada por que Joe volvió a entrar en mi vida como si nunca se hubiese ido e hizo todo lo posible para volverme loca. Besándome, diciendo que me extrañaba. Todas las cosas que quería escuchar, pero no así. Una confrontación en mi trabajo no es el camino a seguir para la reconciliación de un romance. Gracioso, como las cosas cambian completamente en unas horas. Siento que mi vida se ha volteado completamente al revés. En el buen sentido. —Estás inquieta —dice Jen mientras pasa a mi lado. Estoy rebotando sobre mis talones. Algo difícil de hacer teniendo en cuenta los tacones que estoy usando. Usamos los uniformes de noche. Son negros, se deslizan en nuestros cuerpos y terminan a mitad del muslo, sin embargo, la falda siempre se sube. Es el único en el que me aseguro de usar las bragas tipo bóxer por miedo a que con un movimiento en falso muestre todo lo que tengo. Me pregunto qué pensará Joe de mi vestido. Me gusta la forma en que hace lucir mis pechos y estoy usando un sostén especial solo para él. —Llena de energía y nerviosa —explico, eso suena estúpido pero bueno, no estoy mintiendo. —¿Por qué? —Levanta una ceja y cruza los brazos delante. Estamos pasando el rato en la estación de camareras cerca del bar, fuera de la vista de los pocos clientes que aún permanecen en la zona del comedor — ¿Tiene algo que ver con el chico de anoche? Bueno, mierda. No hay secretos en este lugar, ¿los hay? —Tal vez. Jen sonríe y niega con la cabeza. —Colin va a matarte. —Oh, dame un respiro. —Agito una mano pero mi estómago comienza a girar. ¿Qué pasa si Colin se enoja porque estoy con Joe? No es que pueda controlar mi vida personal, pero me hizo prometerle que no habría problemas de novios —Está preocupado por ti. Creé que el tipo que estaba rondando por aquí anoche podría convertirse en un problema. ¿Quién es, de todos modos? Me pareció algo familiar. No voy a decirle. Ya es bastante malo que Owen aún esté vuelto loco porque estoy saliendo con Joe. Si es que lo puedo llamar así. —No es nadie que conozcas —miento, porque prácticamente todo el mundo en este pequeño pueblo ha oído mencionar su nombre una o dos veces. —Eh, bueno, si fuera tú, lo mantendría en secreto —advierte Jen. Está bien, ahora me estoy irritando. —¿Por qué Colin es tan entrometido en nuestra vida personal, de todos modos? Es algo raro, ¿no crees? Quiero decir, sé que es nuestro jefe. ¿No tiene miedo de cruzar la línea? —Confía en mí, siempre se queda lo suficiente sobre la línea para no hacer nada incorrecto —dice Jen, corriendo en su defensa, lo que no es ninguna sorpresa. Vive con el hombre, después de todo. Hablando de lo incorrecto, pero ¿quién soy para juzgar?—. No quiere problemas en el trabajo. Ha habido drama en sus restaurantes en el pasado, sobre todo con las personas que han trabajado para él. Tiene una estricta política de no citas para sus empleados. Oh, apuesto a que sí, entonces ¿por qué vive Jen con él? —Y estoy seguro que te estás preguntando qué está pasando entre nosotros, pero no es nada. Absolutamente nada —dice Jen como si pudiera leer mi mente—. Es sólo lo suficientemente amable cómo para ofrecerme un lugar donde quedarme mientras pueda volver al ruedo. —Es muy amable de su parte —le digo y ella rueda los ojos. —Estoy segura de que piensas que estamos teniendo algún tipo de romance secreto. —Si dices que no, entonces no lo hacen. —Me encojo de hombros.
—Sólo... ten cuidado, _____ . Me gustas. Eres la persona más agradable en este lugar, porque como te darás cuenta, trabajamos con un montón de perras. —Ambas reímos de esto. Las otras chicas prácticamente nos ignoran. Por suerte, sólo T está trabajando con nosotros esta noche y ella es demasiado profesional cómo para ser maliciosa—.Pero Colin te considera en periodo de prueba, por lo que un movimiento en falso y podría despedirte. —No haré ningún movimiento equivocado —La tranquilizo. De ninguna manera puedo permitírmelo. Necesito este trabajo. —Bien. —Jen sonríe y me da una palmada en el brazo—. Tengo que ir a ver a mi mesa. La veo salir, preguntándome si alberga alguna clase de enamoramiento secreto por Colin. Si lo hace, no puedo culparla. Puede que tenga sentimientos por Joe y piense que es el hombre más hermoso en el planeta, pero no se puede negar lo atractivo que es Colin. Es encantador también. Puedo ver por qué las chicas podrían arriesgarlo todo sólo por una oportunidad de con él. Por un breve y brillante momento, casi quise salir con él. Tiene un poderoso atractivo que es difícil de negar. Pero estoy demasiado envuelta en Joe como para querer a cualquier otro tipo. Por una vez, me siento relativamente segura sobre mis sentimientos y la relación con Joe también. Siendo relativamente la palabra clave, ya que no sé muy bien cómo llamar a lo que está pasando entre nosotros. Necesito una definición. Esta noche, vamos a hablar, Joe y yo. Voy a llegar al fondo de esto y averiguar qué está pasando entre nosotros. Si intenta joder el momento en que lo enfrente con esto, podría patearle el culo. Los últimos treinta minutos pasan rápido y estoy agradecida porque Joe no entra en el restaurante para recogerme, tan superficial y tonto como suena. Pero Colin está persistentemente alrededor de la recepción de la anfitriona, su mirada cuestionando cuando le digo buenas noches mientras me dirijo hacia la puerta. Estoy preparada cuando pregunta si necesito que me lleve a casa y le ofrezco un rápido ―no, gracias‖ mientras empujo la puerta y salgo a la oscura y vigorizantemente fría noche. Diviso la camioneta de Joe en el aparcamiento y me apresuro a ella, la emoción corre a través mí cuando lo veo abrir la puerta del lado del conductor y salir. Lleva pantalones vaqueros y una sudadera con capucha y se ve increíble. —Hola —dice cuando me acerco y ofreciéndome una sonrisa torcida—. Lindo abrigo. Es el mismo tonto abrigo hinchado que usé la noche en que me pidió que fingiera ser su novia. Lo odio con loca pasión, pero es el abrigo más caliente que tengo y es una noche muy fría. Decidí olvidar ser vana y fui por el factor de calor cuando me lo puse antes de salir para el trabajo. —Gracias. Lo odio —digo con una sonrisa, haciéndolo reír también—. Es muy hinchado. Me hace ver como una pequeña bola redonda. —Definitivamente no te hace ver como una bola —dice, con la mirada haciendo un lento examen de mí—. En realidad, parece que no llevas nada debajo de eso, lo que sé que no puede ser el caso. A menos que este soñando y sea cierto que en realidad estás desnuda ahí debajo.
Me estremezco. No sólo por el frío, sino por sus palabras, por el calor de su mirada. —Sigue soñando. Me temo que tendré que decepcionarte. —Maldición. —Riéndose, agarra mi mano y me atrae hacia él, dándome un rápido y cálido beso—. ¿Lista para irte? Asiento lentamente. Podría acostumbrarme a esto, mi novio viniendo a recogerme al trabajo, ofreciéndome dulces besos y palabras sexys. Luego podemos ir a su casa y desnudarnos juntos. Sí, eso suena como un sueño hecho realidad.
Subo a la camioneta y nos dirigimos a su casa, aunque me pregunta si prefiero ir a casa, así puedo estar con Owen. Encuentro dulce la oferta pero le aseguro que Owen está en la casa de su amigo para pasar la noche. Están trabajando juntos en un proyecto que es para mañana y la madre de Wade me prometió que los supervisaría. Me encanta esa señora. Es tan buena para Owen y para mí, también. Creo que sabe que nuestra madre apesta y esta raramente alrededor, así que hace todo lo posible para ayudarnos. Le di un regalo de Navidad para mostrar mi aprecio y casi lloró cuando se lo entregué.
—¿Tienes hambre? —Joe me mira por el rabillo del ojo, manteniendo su concentración en el camino—. Estoy hambriento. —Podría comer, supongo —digo con un encogimiento de hombros. No me importa comer. Podría vivir en lo alto si consigo sólo estar en presencia de Joe . Es estimulante tenerlo tan cerca, sabiendo que es todo mío. —¿Quieres ir a algún sitio? O podemos pedir algo. —Me mira cuando se detiene en un semáforo, su mirada ardiendo. Eh, ¿como si quisiera prolongar esto por más tiempo? —Vamos a pedir algo —le sugiero—. ¿Tal vez una pizza?
—Pizza será. —Se estira, y une nuestras manos—. Hay algunas cosas que quiero hablar contigo. La preocupación roe mis intestinos y sé que está escrito en mi cara. Me aprieta la mano tranquilizadoramente cuando no contesto. —Nada malo sobre nosotros. Se trata de mi padre. Y... ya sabes. Tuve que tener una sesión de emergencia con mi psiquiatra antes. —No sabía que los psiquiatras ofrecían sesiones de emergencia. — Debe ser malo, lo que quiere decirme. —La mía es extremadamente genial. Te agradaría. Tú le agradas — dice, aflojando su apretón en mi mano. Extraño su tacto, tan estúpido como parece. —¿Lo hago? —Oh, sí. Le he hablado mucho sobre ti. Está contenta de que estés de nuevo en mi vida. —No parece demasiado molesto, lo cual es prometedor. Me alegra que tenga a alguien con quien hablar de sus cosas personales objetivamente. Si menciona el nombre de esa perra, sólo quiero ir y patear su culo. Realmente, realmente la odio. Hablamos de cosas sin sentido el resto del viaje a su apartamento. Le digo lo muerto que estaba el restaurante, cuánto tiempo he trabajado allí, como he hecho una amiga. También le cuento sobre mi desayuno con Owen y lo mal que se sentía por haberlo golpeado. Está bien, la última parte es mentira. Mi hermano todavía está muy emocionado porque golpeó a Joe en la mandíbula, pero no le puedo decir eso. ¿Qué tan grosero es este chico, emocionándose por el hecho de que golpeó a mi nuevo novio en el rostro por hacer mi vida miserable? Sin embargo, secretamente como que amé lo rápido que mi hermano me defendió. Es dulce. Y demuestra que me quiere. No importa qué tan frustrada me pongo o que piense que no me escucha, lo hace. Me ama y quiere asegurarse de que estoy bien. Tanto como yo lo amo y siempre quiero estar segura de que él está bien también. Bueno, probablemente soy la más protectora de los dos, pero soy la mayor. La responsable. Tengo que cuidar de él. —Eres una buena hermana —dice Joe mientras entra en el estacionamiento de su complejo—. Espero que tu hermano aprecie todo lo que haces por él. —Creo que lo hace. —¿Qué hay de tu madre?
Estoy inmediatamente a la defensiva. —¿Qué pasa con ella? Estaciona la camioneta y apaga el motor. —¿Aprecia todo lo que haces? —La mitad del tiempo no creo que se dé cuenta de que existimos.— Mi voz es amarga, pero no puedo evitarlo. Pienso en ella y me lleno de amargura al instante. Es como el café instantáneo, sólo que peor—. Nunca está. Perdió su trabajo antes de Acción de Gracias y ahora siempre está saliendo con su novio perdedor en vez de cuidar de Owen o, ya sabes, trabajar. —¿No ha encontrado otro trabajo? —Suena incrédulo. —No es tan fácil cuando no tienes un gran conjunto de habilidades. —Entonces, ¿quién está pagando la renta en tu casa? —Estás viéndola. —Indico con mi pulgar hacia mi pecho. —¿Y todas las cuentas? ¿Los comestibles y todo lo que tiene que ser pagado? —Esa sería yo. Sacude la cabeza lentamente, el respeto es claro en su mirada. — ¿Por qué eres tan jodidamente increíble?
Sus palabras envían una oleada de calor a través de mí, pero bateo la sensación hacia abajo. —Sólo estoy haciendo lo que tengo que hacer. No me hagas quedar como una especie de héroe. —Cualquier persona de tu edad se largaría. En serio. —No lo creo —empiezo pero me interrumpe. —Yo lo creo. Sólo tienes veintiuno, _____ . Y llevas el peso del mundo sobre tus hombros. Cuidas de tu hermano y pagas todas las cuentas. Siempre estás trabajando y tratando de hacer todo lo posible para mantener la cabeza fuera del agua. —Sacude la cabeza lentamente—. Te admiro mucho. Eres tan fuerte, no importa lo que la vida te lance. —No tengo otra opción —digo con un encogimiento de hombros—. Hago lo que tengo que hacer para salir adelante. —Podría tomar lecciones de ti, ¿sabes? —Se inclina sobre la consola central y acuna con su mano mi mejilla, tirando de mí para un largo beso— . Siempre tenemos una opción y tú elegiste quedarte. Nunca le restes importancia a eso. La mayoría de las personas correrían como el viento de toda esa responsabilidad. Yo lo haría. Miro fijamente a sus ojos y veo toda la admiración, la pasión y... algo más en sus hermosas profundidades azules. —Te subestimas, Joe. Como siempre. —Está bien. Antes siempre huía, pero tu _____ , haces que me quiera quedar. | |
| | | Lady_Sara_JB Casada Con
Cantidad de envíos : 1582 Edad : 28 Localización : México Fecha de inscripción : 24/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 7th 2013, 18:51 | |
| q romantico es joe siguela quiero ver cuando le diga q su papa quiere (o queria) divorciarse...
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| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 7th 2013, 19:55 | |
| insisto, me encanta Joe:( síguela prontoo | |
| | | BETTY DE JONAS Novia De..
Cantidad de envíos : 613 Edad : 30 Localización : Con los jonas :) (en un cuarto AMANDONOS) Fecha de inscripción : 01/08/2011
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 7th 2013, 20:34 | |
| OH POR DIOS!!!! COMO LA DEJAS AHÍ???? Yo tengo tantas preguntas... Por ejemplo... Cual será la reacción de _______ cuando Joe le cuente lo de su padre??? Por favor tienes que seguirla!!!!!!!!!!!! | |
| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 13:13 | |
| Capitulo 17 Parte 1 JOEAl minuto de entrar en mi apartamento, _____ baja la cremallera del abrigo hinchado que odia y lo tira en la silla más cercana a la puerta. Revelando un corto vestido negro que le queda muy apretado, juro que casi me trago mi lengua la primera vez que la vi en él. Su cuerpo es increíble. Sus piernas, a pesar de que es pequeña, lucen interminables y estuve tentado a desprender el vestido lentamente de su cuerpo y hacer todas las cosas perversas que he imaginando hacerle desde que la dejé con su hermano esta mañana. En vez de eso, le pregunto qué ingredientes prefiere en su pizza y ordeno una. Después de que cuelgo, me dice que quiere quitarse el vestido y ponerse algo más cómodo, así que le ofrezco una camiseta mía. Me sigue de vuelta a la habitación, su dulce olor me rodea mientras se para junto a mí y buscamos juntos en mi closet. Cuando saco la camiseta de la percha, miro incrédulo como casualmente se saca el vestido sobre su cabeza, dejándolo caer al suelo. De pie frente de mí con tan solo un sujetador de encaje negro y unos pantis negros que lucen más como pantaloncillos, pero siguen siendo de alguna manera increíblemente sexys, extiende su mano y menea sus dedos hacia mí, indicándome que quiere la camiseta, se la paso, mi boca demasiada seca para hablar, y pasa la camiseta sobre su cabeza; es vieja, azul pálido con un diseño Hawaiano en frente, la compré cuando fui a unas de esas vacaciones familiares del asco a la gran isla y rara vez la uso ya que me recuerda a un tiempo —y a una persona— que preferiría olvidar. Pero me encanta verla en _____ . Como se la traga, el borde la golpea casi a la mitad del muslo. Sé exactamente que lleva bajo esa camiseta demasiado grande, lo que la hace aun más sexy. Es malditamente caliente. La deseo. Pero estoy esperando, haciendo mi mejor esfuerzo por ser paciente. Necesitamos hablar como dos adultos responsables a punto de embarcarse en una relación seria. Y necesitamos comer, porque me muero de hambre como un condenado ya que apenas he comido en todo el día. La pizza llega menos de treinta minutos después y comemos nuestra cena sentados en el suelo con las piernas cruzadas frente a mi mesa de café, riendo, mientras vemos una tonta película de comedia en la televisión. Es una distracción que ambos necesitábamos después de la seria conversación que tuvimos en mi camioneta. No era mi intención hablar allí, solo pasó, no es que me arrepienta. Espero que me haya creído cuando le dije que pienso que es increíble. Realmente admiro la forma en la que se maneja frente a la adversidad. Es jodidamente fuerte y yo me he sentido principalmente débil toda mi vida. Sintiendo lástima por mí mismo y escapando de mis problemas no he llegado a ninguna parte. Estar con _____, aunque solo fuera por esa breve semana, me cambió para siempre. Me hizo dar cuenta de que puedo ser fuerte. Podía recaer y volver a los viejos hábitos, pero estar con ella de nuevo es el recuerdo que necesito para seguir adelante. Continuar siendo fuerte. Acabamos con la pizza y la película terminó, ya que la vimos desde más de la mitad. Es como si ambos nos hubiésemos dado cuenta de que la única cosa restante por hacer es hablar. Está tranquila, astillando el esmalte rojo brillante que cubre sus uñas cortas. Su pelo cuelga delante de su cara y lo estudio, notando que la sombra es diferente. —Tu pelo es más oscuro —digo de la nada Levanta la mirada hacia mí con una pequeña sonrisa. —Finalmente te has dado cuenta. —¿Cuando lo cambiaste? —Hace unos días —concentra su atención en mí en vez de en sus uñas astilladas—. ¿Prométeme que no te enfadarás? Bien, eso es raro. —Lo prometo. —Mi jefe me pidió que lo cambiara, me dijo que mi color anterior me hacía ver barata. La ira me llena. —Suena como un idiota. —Mi impresión de él disminuye con cada cosa que aprendo acerca de este tipo. —Realmente no lo es, porque ¿sabes qué? Tenía razón. Soy rubia natural pero empecé a aclarar mi cabello en la secundaria. Seguí decolorándolo y dañándolo demasiado también. Así que Colin me llevó a un salón, les hizo cortar unos pocos centímetros y oscurecer el color. Ahora soy como una nueva versión de mí misma. —Me gustaba la vieja versión también —digo rígidamente—. No usas tanto maquillaje tampoco. —Dejé eso una vez que regrese de Carmel. Sólo me estaba escondiendo detrás del delineador de ojos, ya sabes —Sacude su cabeza—. ¿Te gusta la nueva yo? —Me gusta todo de ti —digo—. La vieja tú, la nueva tú, toda tú. Sonríe y se escabulle más cerca de mí. —Dices las cosas más dulces. —Quise decir cada palabra. —Lo sé. —Apoya sus manos en el borde la mesa de café y se pone de rodillas, acercándose tanto que roza sus rodillas contra mi muslo—. Amo eso de ti. Nunca, jamás retienes lo que quieres decir cuando se trata de mí. Volteando mi cabeza, me encuentro con su mirada. Usó la palabra amor tan casualmente y eso hace que me pregunte. Me hace recordar lo que dijo la Dra. Harris. Como ____ debería valer el riesgo si realmente estoy enamorado de ella. Y sé sin lugar a dudas que estoy enamorado de ella, no puedo negarlo. —Dime que paso hoy —susurra, sus bonitos ojos verdes brillando con la tenue luz que la lámpara arroja sobre nosotros—-. Con tu papá.
Suspiro deseando que no tuviéramos que ir allí. Sabiendo que es necesario para mantener nuestra relación honesta. —Mi papá vino aquí hace unos días a visitarme. Se ve sorprendida. —¿En serio? —Sí, anuncio que se estaba divorciando de Adele. Sus ojos se estrechan a la primera mención del nombre de Adele y amo eso: Su inmediata defensa de mí en contra de la mujer que irrevocablemente me daño es alucinante. —Eso debería de ser algo bueno. —Lo es. —Dejo salir un áspero suspiro—. Me llamó esta tarde y dijo que estaba reconsiderando su decisión. —¿Por qué? —Dijo que cuando fue a casa, ellos como que… se reconciliaron. — No entraré en detalles como mi padre lo hizo. Me imagino que _____ no quiere saber toda esa otra mierda que yo desearía poder olvidar. —¿Puedo ser honesta? —pregunta. —Por favor. —Necesito su opinión. —Tu papá es un idiota si regresa con ella.
Me rio en voz baja. —Créeme, ya lo sé. —¿Por qué habría siquiera de considerarlo? —Arruga su nariz, y es tan lindo. Me inclino y la beso allí. —Porque ella es una experta manipuladora y porque tiene la clave de mi papá. —La que debe ser sexo y un montón de promesas que definitivamente pueden romperse. —Así que tu padre te dio la esperanza de pensar que ella estará para siempre fuera de tu vida y luego lo arruinó todo diciendo que volverán a estar juntos. — _____ se inclina hacia atrás en cuchillas, apoyando sus manos apretadas en su regazo. Luce como si estuviera lista para golpear a alguien—. Y entraste en pánico y llamaste a tu psicóloga para una sesión de emergencia un domingo por la tarde. Ella suena como una loquera milagrosa, si me lo preguntas. Algo así como mi novia milagrosa, aunque no digo eso, ¿Cómo logré ser tan afortunado de tener no una, sino dos mujeres apoyándome en mi vida? —Has dado en el clavo. —Lo siento mucho, Joe. —Tendiendo la mano, toca mi mejilla, sus dedos acariciando suavemente mi piel—. ¿Te ayudó hablar de todo con ella?
—Sí. —Cierro los ojos porque sus dedos en mi rostro se sienten tan condenadamente bien y quiero saborear su toque un poco más. La siento acercarse, siento el rose de sus labios contra los míos, tan ligeros como una pluma, y me quedo completamente quieto, atemorizado de moverme por miedo a romper el hechizo que ha caído de repente sobre nosotros. —¿Ayudaría hablarlo conmigo? —Me besa de nuevo, sus labios capturando sólo mi labio inferior, dándole un pequeño tirón antes de liberarlo. Mierda, eso se siente increíble. Anoche y esta mañana con ella ha sido asombroso, pero me apresuré en mi necesidad de estar dentro de ella. Se merece más que eso. Se merece ser besada por horas. —Siempre ayuda hablar contigo —Extiendo la mano antes de que pueda alejarse, mis ojos siguen cerrados, aunque sé exactamente donde está. Enrosco mi mano alrededor de su nuca y la acerco, nuestros labios perfectamente alineados, su aliento dulce y caliente contra mi boca—. Sin embargo, tal vez deberíamos hablar más tarde. Me estoy quejando mucho. Apoya sus manos en mi pecho, sus dedos agarrando la tela de mi camisa. —Si estás tratando de evitar una conversación seria usando el sexo como una distracción, podría tener que protestar.
Abro mis ojos de golpe para encontrarla sonriéndome. —¿En serio? Lentamente mueve la mano, colando sus dedos bajo el dobladillo de mi camiseta para así poder acariciar mi estómago. —No realmente — murmura antes de inclinarse y capturar mis labios con los suyos una vez más. Deberíamos hablar, sé que deberíamos. Aún hay más por decirle. Pero casi no puedo pensar cuando está frente a mí, tocándome, besándome. Me quiero ahogar en ella. Así que lo hago. Solo por un momento. La toco con mi lengua y abre sus labios fácilmente, dejándome entrar. Mi puño se aprieta en su pelo, tirándolo un poco para que su cabeza se arquee hacia atrás, exponiendo su bonito cuello. Gime y rompo el beso, recorriendo con mi boca a lo largo de su garganta, lamiendo y mordisqueando la fragante piel. Susurra mi nombre y el sonido envía una chispa directamente a mi polla. He esperado por esto todo el día. Pensé en hacerle esto todo el maldito día, con ella. Soy un hombre obsesionado. —Tal vez… —contiene el aliento cuando muerdo el lóbulo de su oreja—. Tal vez deberíamos hablar un poco más antes de hacer… esto.
—¿Hacer qué? —Levanto mi cabeza para poder estudiar su hermoso rostro. Sus mejillas están rosadas, sus labios hinchados, sus ojos vidriosos. Me estoy burlando de ella y lo sabe. Una pequeña sonrisa cosquillea en la esquina de sus labios. —Ya sabes. —Hace un túnel con sus manos por debajo de mi camiseta, sus uñas rozando mi piel y me estremezco—. Estás siendo un chico malo, Joe. No pensé que lo tenías en ti. —Tú lo sacas de mí —La atraigo hacia mí, y cae en mi regazo, envolviendo sus piernas alrededor de mis caderas. Creo que esta es nuestra posición favorita. Sé que es mi posición favorita esta noche, mas con ella sólo llevando esos pantis y mi camiseta. Puedo sentir su calor incluso a través de mis jeans y gruño cuando se mece contra mí. —Mmm, ¿qué más puedo sacar? —Está tirando de mi camiseta y mantengo mis brazos hacia arriba, dejo que la saque. Su mirada corre con avidez sobre mi pecho, mientras se lame los labios y ahogo un gemido que quiere escapar. Está tratando de matarme. Lo sé. —Te he extrañado. —Sus palabras me sorprenden y por la mirada en sus ojos creo que se sorprende así misma—. Estar contigo, verte, tocarte. Es difícil para mí aceptar el hecho de que estamos sentados aquí juntos y no es solo un sueño. —Definitivamente no es un sueño. —Toco su rostro, suavemente trazando sus labios. Esta temblando, puedo sentir los sutiles temblores vibrando bajo mis dedos y llevo sus labios a los míos, conectándolos, conectándonos por un largo y silencioso momento. No hay lenguas, no apasionados besos fuera de control, simplemente nuestras bocas tocándose, estamos inhalando la respiración del otro, mientras nos absorbemos mutuamente. Necesito esta conexión, creo que ella la necesita también. Tal vez nos necesitamos demasiado el uno al otro, pero no puedo preocuparme por eso ahora, no cuando tengo la mujer que amo en mis brazos, toda envuelta alrededor de mí. | |
| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 13:15 | |
| Capitulo 17 Parte 2 La mejor demostración de amor es la confianza. —Dr. Joyce Brothers {____}Entro a mi departamento canturreando. Nunca hago eso. Pero estoy tan jodidamente feliz que siento como si pudiera romper a cantar en cualquier momento. Considerando que lo hago fatal, creo que es más seguro tararear la canción que escuché en la radio cuando Joe me trajo a casa. Puedo sentir la sonrisa en mis labios y el roce de mis dedos en un intento de borrarla. No funciona. Tocarla me recuerda a la manera en que él me besó antes de que saltara fuera de la camioneta. La manera en que me miró cuando le pregunté si podía verme está noche. Yo tenía la tarde libre de trabajo, pero él debía ir a la escuela y ya había estado a punto de faltar para que pudiéramos pasar el día juntos. Sin embargo, lo obligué a ir. Que novia tan adusta y mandona que soy. El apartamento está oscuro, todas las cortinas y persianas se encuentran cerradas a pesar del maravilloso día que hay fuera, por lo que camino hacia cada ventana, tirando de las cortinas y abriendo las persianas. El fregadero está lleno de platos sucios y maldigo a Owen, haciendo una notar mental para hacerlo lavar todo apenas llegue de la escuela. Cuando comienzo a ir hacia el pasillo, noto que la puerta de mi habitación está abierta. Una extraña sensación se instala en mí, haciendo que me inquiete. Nunca dejo mi puerta abierta. Siempre está firmemente cerrada. Si pudiera bloquearla con llave, lo haría. No es que no confíe en Owen o en mamá. Lo que me molestan son todos esos idiotas que mamá trae, aunque últimamente es sólo uno. Y los amigos de mi hermano tampoco son unos verdaderos santos. Recuerdo a los chicos que conocí en el tercer año. Diablos, a las chicas también. Yo era tan mala como ellas. Todos robábamos como locos, llevándonos el maquillaje y los dulces del supermercado local. Idiotas. Imagina mi sorpresa cuando me detengo en el marco de la puerta y encuentro a mamá en mi habitación, paseándose por el revoltijo de cosas que invaden la cima de mi armario. Descansando las manos sobre mis caderas, me aclaro la garganta y ella jadea, volteándose hacia mí con una mano presionada contra el pecho. —¡____ ! ¿Cuándo llegaste a casa? —Se abanica la cara como si fuera alguna especie de belleza sureña a punto de desmayarse por el maldito calor—. Me has dado un susto de muerte. —Bien —Hago un rápido movimiento de barbilla en su dirección—. ¿Qué estás haciendo aquí? Me mira con desagrado, el acto de belleza sureña evaporándose como el humo. —Nada de: Hola, mamá, ¿cómo estás?‖¿Desde cuándo eres tan grosera? —Casi desde el mismo momento en que comenzaste a descuidarnos completamente —Entro a mi habitación, ya cansada de pelear. Mis fantasías se han venido abajo y no me queda más que afrontar la relación de mierda con mi no-tan-buena madre—. ¿Por qué estás revolviendo mis cosas? —He perdido algo —Arruga la nariz, una clara señal de que está mintiendo—. Un anillo mío ha desaparecido. Como si yo fuera a robarle su horrorosa joyería. —¿Qué estás intentando decir? —¿Lo tomaste? —¿Por qué habría de tomar tus feas y viejas joyas? Probablemente ella fuera a empeñarlo o venderla, de todas maneras. Hace tiempo dejó de tener cosas de valor. Yo tampoco tengo nada de valor, pero si vamos al caso nunca las tuve. Tengo unos ahorros en mi habitación, sin embargo. Están escondidos en el bolsillo de un suéter en lo profundo del armario. —Cristo, eres una malcriada —murmura mamá, sacudiendo la cabeza mientras comienza a ir hacia la puerta—. Ni siquiera puedes tener una conversación decente conmigo. —Tú no puedes simplemente entrar a mi habitación y revolver mis cosas —digo en respuesta. Ella necesita conocer sus límites. Más que nada, necesita saber que no es bienvenida aquí. —Puedo —se gira hacia mí, su expresión indignada, sus ojos verdes tan parecidos a los míos a pesar de estar un poco más deteriorados y mucho más cansados ardiendo en fuego mientras me mira—. Este es mi departamento. El contrato de arrendamiento está a mi nombre. Me pertenecen todas estas cosas. Te compré todo lo que tienes aquí. Si quiero revolver, tengo todo el derecho. —Dame un respiro. El mobiliario me lo han dado parientes y amigos. Todas las cosas aquí, ¿la ropa, las joyas baratas y todo lo que ves? — Señalo con mis dedos alrededor—. Lo compré con dinero que yo gané. Y tu nombre puede estar en la escritura, pero soy yo quien paga las cuenta todos los meses. Por lo tanto, no actúes como una perra honrada que puede tomar todo de mí sólo porque eres mi madre. Soy un adulto. No te pertenezco. Suelto un suspiro tembloroso, sorprendida por mí arrebato. No puedo creer lo que le acabo de decir. Lo he estado conteniendo por meses. Diablos, por años. Y ahora estoy tan enojada que me encuentro literalmente temblando. ¿Dónde está la milagrosa loquera de Joe cuando la necesito? —¿Cómo te atreves a hablarme de esa manera? —susurra mamá, su voz áspera y su quijada tensa—. Eres la niña más desagradecida de todas. Bien, si eres la alta y poderosa princesa que puede cuidarse por su cuenta sin mi ayuda, entonces ve a encontrar tu propio maldito lugar para vivir. —He estado pensando que en realidad tendrías que ser tú la que se marche. No puedes permitirte pagar este lugar por tu cuenta y lo sabes. Ni siquiera tienes un trabajo. Al menos, yo pago la renta y cuido de Owen. La odio. No me había dado cuenta cuán profundamente la odiaba, pero esta conversación, todo lo que ella está diciendo, el cómo está actuando, termina por cerrar el trato. Es una persona horrible. Una mujer despechada que no puede dar ni un poco por mí o por Owen. Todo lo que le importa es ella misma.
—No puedes echarme de mi propia casa —Endereza sus hombros y se aparta el cabello rubio descolorido de la cara. Mi mamá luce cansada. Vieja. Pequeña y miserable. Sus ojos parecen confusos y me pregunto si está borracha. O drogada. Me da asco. Apenas puedo soportar mirarla. Sin embargo… también siento pena por ella. Es mi mamá. Tiene sólo cuarenta y dos años; mírala con su horrorosa vida y novio de mierda, yendo a ninguna parte. Durante muchos años he tenido miedo de terminar de la misma manera que ella. Pero no soy como ella. Tengo ambiciones y sueños. Simplemente los he puesto en espera hasta que Owen sea lo suficientemente mayor para cuidarse por sí solo. —Regresa a lo de Larry, mamá. Ve a quedarte ahí y déjanos a Owen y a mí solos, ¿está bien? ¿Necesitas dinero? ¿Eso es por eso que estás revolviendo mi habitación? Te daré dinero. Sólo… déjanos en paz. — Voy a la cocina donde dejé mi bolso sobre el mostrardor y meto la mano en él, buscando mi billetera y sacando un fajo de billetes provenientes de las propinas de la última noche—. ¿Esto es lo que estabas buscando? —le pregunto cuando me sigue a la cocina, tendiéndole el dinero. Ella lo arrebata de mis dedos y lo mete en el bolsillo delantero de sus jeans. —No lo rechazaría. Genial. Ni siquiera se molesta con una gracias‖. Ella es una verdadera meritoria del dinero. —Tal vez debería quedarme en casa hasta que Owen llegue — Mamá se inclina contra el mostrador de la cocina, haciendo todo lo posible para verse despreocupada. Sé que lo que realmente está intentando hacer es sacarme de mis casillas. Otra vez—. Necesito pasar más tiempo con mi niño. Me abstengo de rodar los ojos, pero a duras penas. —Se quedará en la casa de un amigo después de la escuela. —¿Qué quieres decir? —Quiero decir que está trabajando en un proyecto escolar con su amigo después de la escuela. No vendrá a casa en horas —Estoy mintiendo totalmente. Ellos trabajaron en el proyecto anoche. Pero no quiero tenerla al acecho aquí, esperando a Owen para hacerlo enloquecer. Él siempre está incómodo a su alrededor. Es bastante triste que un niño no quiera estar ceca de su madre porque ella lo quitó de su día-a-día. —Genial. Así que yo no estoy por aquí, tú tampoco, ¿en qué tipo de problemas se mete si nosotras estamos demasiado ocupadas como para atenderlo? Chico estúpido —murmura, sacudiendo la cabeza. Es suficiente. ¿Cómo se atreve a criticar a Owen? —Es un niño. ¿Qué esperas de él si no hay nadie a su alrededor para supervisarlo? —Bueno, ¿tú dónde estás? —acusa. —¡Trabajando! —Las palabras explotan de mi pecho—. ¿Dónde diablos estás tú? Oh, ya lo sé, te estás emborrachando y drogando con tu novio. ¿Tal vez estás durmiendo todo el día cuando deberías estar ahí afuera, buscando trabajo? Cuando tendrías que estar, ya sabes, ¿en casa para cuidar de tu hijo? No me culpes a mí por tus insuficiencias como madre. No es mi culpa que tengas mejores cosas que hacer. Me he puesto como loca otra vez. Nadie más logra esto en mí. Nadie. Generalmente soy la calma en la tormenta. Al instante corro para defender a alguien, pero no me pongo nerviosa con facilidad. Yo también soy leal a un error. La lealtad a mi madre desapareció hace años. No puedo contar con ella. Nadie puede. Siempre actúa como la víctima o culpa a todos los demás por sus errores. No puede admitir que apesta como madre y que es una perezosa. Así que no me importa recordarle todo ello. —No voy a tolerar la falta de respeto. Soy tu madre —subraya. —Entonces actúa como tal —Mi voz suena tranquila. Como escalofriantemente tranquila. Me cruzo de brazos, prácticamente desafiándola a dar un paso al papel que ella supuestamente abraza cada día de su vida. Sabiendo perfectamente que no lo hará. —No necesito este tipo de abuso —Toma su bolso desde la mesa de café y lo desliza por su brazo, dirigiéndose hacia la puerta sin mirarme ni una sola vez—. Te puedes ir al infierno,____. Cierra la puerta detrás de ella y yo me desmorono. Sólo… caigo completamente rota como un bebé fuera de control, llorando. Me hundo en el sofá y me presiono las manos contra la cara, las lágrimas empapándome las palmas. Todo mi cuerpo está temblando, estoy tan enojada, tan frustrada, tan…Ugh. Hay demasiadas emociones pasando a través de mí en un intento por liberarse. He pasado desde el extremo más alto al extremo más bajo en cosa de minutos, y ahora tanto mi mente como mi corazón no pueden soportarlo por más tiempo. A pesar de mi ira, se siente bien llorar. Es una liberación para todo el resentimiento construido y las emociones tumultuosas que han estado circulando en mí durante los últimos meses. Diablos, durante los últimos años. No sé cuánto tiempo permanezco sentada aquí, llorando hasta que mi pecho duele y mis ojos arden, cuando finalmente levanto la cabeza y miro el techo. Mi mama me odia y yo la odio a ella. Tengo que conciliar ese hecho y llegar a un acuerdo con él. También necesito proteger a Owen de ella. Probablemente debería tomar en serio la búsqueda de otro departamento porque yo no dejaría pasar que mamá guarda un as bajo la manga y de alguna manera nos joderá por vivir aquí. Hay mucho por hacer, ¿pero cuál es la novedad? Yo me ocupo de todo y de todos. Ni siquiera se me ocurrió que podría haberle pedido ayuda a Joe hasta este preciso momento. Un mensaje de texto, una simple palabra, y él dejaría todo para venir corriendo a mi rescate. ¿No es así? Como odio el hecho de no dudarlo ni siquiera un poco. | |
| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 13:19 | |
| Capitulo 17 Parte 3 JOE Estoy en medio de la planificación de una noche especial para ____ cuando llega la llamada de la persona que me da miedo hablar con más que cualquier otro. Estoy tan concentrado en la búsqueda del lugar adecuado para llevar a cenar a ____esta noche, que no me molesté en comprobar quién está en el otro extremo cuando cojo mi celular y respondo con un saludo distraído. —Joseph . Joder. El sonido de la voz de Adele envía fríos escalofríos por mi columna. —No puedo creer que contestaras. —Fue un error, créelo. Aparto el teléfono lejos de mi oído, listo para terminar la llamada, pero puedo oírla diciendo frenéticamente mi nombre, rogando que no cuelgue. Como un idiota, traigo el teléfono a la oreja, esperando en silencio su explicación. ¿Qué demonios puede tener que decirme? ¿Por qué le doy la oportunidad de explicarme algo? ¿Lo estoy haciendo por mi padre? Porque estoy seguro que no tengo ninguna razón para hablar con ella nunca más. No después de la bomba que lanzó sobre mí el día que ____ y yo fuimos a Carmel. “Vanessa no era tu hermana, Joseph. Ella era tu hija.” Cierro los ojos ante el recuerdo. Cuan francamente emocionada sonó Adele cuando hizo esa declaración indignante. He hablado de Vanessa con la Dra. Harris. Ella sabe las circunstancias que rodean la muerte de Vanessa, mi culpa por dejarla sola. ¿Cómo es mi culpa que esté muerta? ¿Cómo mi aventura con mi madrastra podría haber dado lugar al nacimiento de Vanessa? Mi hermana, mi hija… Caray, yo todavía no sé qué creer. También existe el temor subyacente de que Adele confesará todo a mi papá y me odie por lo que he hecho. La amenaza de divorcio hace que la gente haga cosas locas para mantener su matrimonio junto. También hace que las personas hagan cosas escandalosas para romper su matrimonio para siempre.
Adele es una bala perdida. Me asusta que vaya a revelar todos mis secretos y me voy a quedar como el peor hijo del mundo. La última cosa que quiero hacer es decepcionar a mi padre. Demasiado tarde para eso. Lo he decepcionado innumerables veces y la mayoría de las cosas que he hecho, él no las conoce. —Tu padre quiere dejarme —dice finalmente. Entrecierro los ojos, miro las palabras en la pantalla de la portátil borrosa en frente de mí. —Pensé que ya habían hecho las paces. —Sé que fue a verte este fin de semana. La pregunta que tengo es, ¿por qué? No es que sean muy cercanos. ¿Qué le prometiste decirle? ¿Han hablado de mí? ¿Qué has dicho? Ella parece asustada y completamente absorta en sí misma. Típico. —Apenas hablamos de ti, no más allá de él explicando brevemente que los dos estaban teniendo problemas y que está listo para solicitar el divorcio.
No puedo creer que se lo esté explicando, pero tan mal como parece, estamos en el secreto juntos. Ambos tenemos mucho que perder si el secreto se revela. —Estás mintiendo. Estás tratando de convencerlo de que me deje y no voy a permitirlo, Joseph. Tú eres tan culpable en esta situación entre nosotros como yo. Me niego a asumir la culpa por ello —Su voz es baja, llena de veneno frío como el hielo. —Su razonamiento para dejarte no tiene nada que ver con…nosotros. Me ahogo en la última palabra. Nunca hubo nosotros entre Adele y yo. Todo siempre se concentró en ella misma. —Tiene que ver contigo follando a algún golfista. Aspira una fuerte bocanada de aire. Culpable. —¿Es eso lo que te dijo? —No debería estar teniendo esta conversación contigo —Maldita sea, ¿por qué sigo hablando con esta perra?—. Voy a colgar ahora. No te molestes en llamarme otra vez.
Antes de que pueda decir otra palabra, termino la llamada, lanzando el teléfono a través de la habitación, chocando contra la pared y rebotando en la alfombra con un ruido satisfactorio. Pero todavía no estoy satisfecho. Estoy loco. Conmigo mismo por haber respondido la maldita llamada y escuchar lo que ella tenía que decir. Con Adele por contactarme cuando explícitamente le dije que nunca más me hablara. Rompí mi propia regla, sin embargo, ¿no es así? Entonces, ¿cómo puedo culparla cuando yo también soy culpable? Mi teléfono suena donde lo deje tirado y voy a recogerlo, temeroso de que pueda ser un mensaje de Adele. Pero no lo es. “¿Tienes clases todavía?” A pesar de mi ira, sonrío y le respondo a ____. “Sí. ¿Qué pasa?” “¿Puedes venir a buscarme?”
Estoy escribiendo mi respuesta cuando otro texto de ella viene a través. “Entiendo que si estás ocupado. Sólo… necesito verte.” La preocupación se estrella a través de mí y le escribo: “Dame diez minutos.” | |
| | | Lady_Sara_JB Casada Con
Cantidad de envíos : 1582 Edad : 28 Localización : México Fecha de inscripción : 24/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 14:52 | |
| pobre ____ y owen x tener una madre asi siguela quiero saber q pasa tngo una idea pero no creo q sea | |
| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 19:20 | |
| lalkaklfkldsa siguelaaaa gracias por subir tanto ((: | |
| | | BETTY DE JONAS Novia De..
Cantidad de envíos : 613 Edad : 30 Localización : Con los jonas :) (en un cuarto AMANDONOS) Fecha de inscripción : 01/08/2011
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 8th 2013, 19:36 | |
| OH POR DIOS!!!! No puedo creer que Adele siga molestando a Joe!!! Es una odiosa!!!! Y la pelea de _______ con su madre fue terrible pero Joe va en su rescate:enamorada: Por favor tienes que seguirla por que presciento que como siempre viene algo muy bueno!!!!! | |
| | | PidgeJonas Casada Con
Cantidad de envíos : 1666 Edad : 32 Fecha de inscripción : 23/04/2012
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 9th 2013, 13:56 | |
| Capitulo 18 JOEElla me está esperando al pie de la escalera que conduce a la puerta principal y me estacionó a su lado ella. Se sube a la camioneta y cierra la puerta, mirando al frente como si casi no pudiera verme, y yo estoy en silencio volviéndome loco. —¿Estás bien? Apago el motor, mis nervios haciendo volteretas en mi estómago. Ella no está actuando bien. Un suspiro se le escapa y ella niega con la cabeza lentamente. —Me metí en una pelea con mi madre. —¿Ahora? —Hace unas horas —Agacha su cabeza, mirando a sus rodillas—. Le dije cosas terribles. Lo peor es que no me arrepiento. —¿Hace horas,_____? ¿Por qué no me llamaste antes? Se encoge de hombros. —No quería molestarte. Mierda. ¿Ella no lo entiende? Me gustaría ir a los confines de la tierra por ella. Después de todo lo que ha hecho por mí. Cuan desinteresada es, mientras qué siempre, siempre viene a mi rescate... Extendiendo la mano, me conformo con mi mano en su delgado hombro y le doy un suave apretón. —No puedo ayudarte si no me dejas entrar. _____ lanza un suspiro tembloroso y finalmente, me mira. Su piel es pálida, con expresión impasible. —Estoy acostumbrada a hacer las cosas por mi cuenta, ¿sabes? Nunca he tenido a nadie a mi lado. En realidad, nunca. —¿Y Owen? —Él no cuenta, es sólo un niño. —Bueno, definitivamente salió a tu defensa cuando me golpeó ayer—señalo. Una pequeña sonrisa aparece y luego pone los ojos. —Fue un asombroso mini hombre cuando lo hizo, ¿no? —Mi mandíbula todavía me duele —Me paso la mano sobre el lugar donde su puño conectó con mi cara. —Lo siento —No suena como si lo lamentara y lo dejo pasar. Si ella hubiera sido mi hermana y alguno idiota hubiera roto su corazón: Yo habría hecho lo mismo. —_____—Su mirada tironea la mía, una vez más—. Quiero estar allí para ti. Siempre. Sé que no te he demostrado que puedes confiar en mí todavía, pero lo haré. Te lo juro. Quiero hacerte una promesa. Se aclara la garganta, pareciendo nerviosa. —¿Qué clase de promesa? Llego al otro lado de la consola central, agarrándole la mano y encajando nuestros dedos juntos. —No importa lo que pase, desde este día en adelante, estoy aquí para ti. Tú me necesitas y yo iré corriendo. Sus labios se separan, como si ella fuera a decir algo, pero luego los presiona juntos con una mueca de dolor. —Quiero creerte, lo hago. Pero temo que vayas a dejarme de nuevo. Y no sé si pudiera soportarlo. Aprieto su mano. —¿Qué puedo hacer para demostrarte que no voy a dejarte? Dime. Lo haré. —¿Harías lo que sea? —Lo que sea —asiento con la cabeza con furia, dolor en mi corazón. Si ella me rechaza, me pierdo. Pero también me he preguntado por ello. Ella es frágil en este momento. Yo, entrando de nuevo en su vida, la pelea con su madre, su preocupación por Owen... Ella carga tanto. Sólo hay algunas personas que pueden manejar tanto antes de que lleguen a su punto de ruptura. Ella lanza un suspiro áspero. —Quiero fingir que tenemos una relación normal y divertida. Sin preocuparse, sin estrés. Quiero olvidarme de mi mamá, ¿cómo voy a pagar las cuentas, donde voy a encontrar un nuevo lugar para vivir? —Espera un minuto —interrumpo—. ¿Estás buscando un nuevo lugar para vivir? —He pensado en ello —admite—. El alquiler es mucho aquí, ya que son tres dormitorios y mi mamá nunca está aquí. Utiliza nuestro lugar para dejar sus cosas, más que nada. Quiero encontrar un lugar más barato para Owen y para mí. Mi mente da vueltas a las ideas, todas ellas involucrando a ____ y su hermano viviendo conmigo. Ella se reiría en mi cara. Hemos estado juntos antes ¿si pudiera llamarlo así a esto? ¿Hace un par de días? De ninguna manera iba a vivir conmigo. —Pero no quiero que te preocupes por nada de eso en este momento —dice con firmeza mientras saca su mano de la mía. Ella lo agita en el aire, como si desaparecieran todos sus problemas con un movimiento de sus dedos—. Estoy harta de preocuparme y estar estresada por el dinero, lo que está haciendo Owen, si él está sacando buenas notas, si me está mintiendo. Preocuparme de mi mamá y lo que está haciendo y por qué nos odia tanto. —Ella no los odia. —Nos odia —repite _____ , interrumpiéndome—. Ella me odia especialmente. Somos una carga. Si fuera capaz de hacernos desaparecer, probablemente lo haría.
Diablos. Nos centramos siempre en mis problemas, pero ella tiene más desastre que yo. Su madre parece una puta de clase mundial. —Olvídala. Mírame —Sonríe, pero no acaba de llegar a los ojos—. Déjame fingir por un poco que estamos bien. Que no tenemos problemas y secretos, que nuestra vida es fácil y sólo somos dos personas enamoradas el uno por el otro. Ya estoy completamente enamorado de ella. Pensé que ella sentía lo mismo. —Si eso es lo que quieres, lo haremos. Te daré lo que quieras. La sonrisa crece, ilumina sus ojos. Esa es mi chica. —Gracias —susurra. Incapaz de aguantar más, la toco. Paso mis dedos por su pelo así que puedo acariciar un lado de su cabeza y llevar sus labios a los míos. —¿ Por qué me das las gracias? —Gracias por tenerte. Y por querer hacerme feliz. Cierra los ojos cuando la beso y estudio su rostro, sus espesas pestañas, su pequeña nariz.
—Estamos probablemente evitando lo inevitable, pero estoy cansado de lidiar con las cosas pesadas. Estoy celoso de las personas sin problemas. —Todo el mundo tiene problemas —me señala. Abre los ojos. —¿Tan pesados como los míos? ¿Tan pesado cómo como los tuyo? —Buen punto. | |
| | | Lady_Sara_JB Casada Con
Cantidad de envíos : 1582 Edad : 28 Localización : México Fecha de inscripción : 24/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 9th 2013, 18:50 | |
| siii q los dos salgan juntos jejeje me gusta siguela
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| | | eschio Amiga De Los Jobros!
Cantidad de envíos : 405 Localización : Chile Fecha de inscripción : 03/03/2013
| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. Agosto 9th 2013, 20:56 | |
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| Tema: Re: Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. | |
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| | | | Second Chance Boyfriend (Joe y tú) 2da Temporada. | |
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