Dirty Little Secrets (Jonas y Tu) - 2da Temporada

Capítulo 6: Milagro en la Iglesia de los Jonas.

El lunes por la noche, después de la práctica de natación, Nick se sentó en el sofá de la sala a ver televisión mientras Joe subió por las escaleras hasta la habitación que él y Nick compartían, cerró la puerta y se dejó caer sobre la cama. La práctica no había sido tan agotadora, pero se sentía cansado, como si todos sus miembros se hubiesen cambiado por ladrillos.

Encendió la radio e hizo girar el dial. Al pasar por una estación de noticias escuchó un nombre escalofriante, familiar y se detuvo.

X: El juicio de Liam Hemsworth comienza el viernes en la mañana en Rosewood. -dijo una áspera pero eficiente voz con sonido de reportera- Sin embargo, el Sr. Hemsworth niega firmemente su implicación en la muerte de Miley Cyrus, y algunas fuentes cercanas a la oficia del fiscal del distrito opinan que el caso no puede ir siquiera a juicio debido a la insuficiencia de pruebas.

Joe se sentó en la cama con una sensación de mareo. ¿Insuficiencia de pruebas? Por supuesto que Liam estaba negando que mató brutalmente a Miley, pero ¿cómo alguien podía creerle? Sobre todo con el testimonio de _____. Joe pensó en una línea de una entrevista que había descubierto hace unas semanas, una que Liam había dado desde el interior de la cárcel del condado de Chester.

En ella repetía: “Yo no maté a Miley. ¿Por qué la gente piensa que lo hice? ¿Por qué alguien diría eso?” Gotas de sudor se aferraban a su frente, y se veía pálido y demacrado. Al final de la entrevista, justo antes de que el video terminara, Liam soltó: “Alguien me quiere aquí. Alguien está ocultando la verdad. El que sea lo va a pagar”. Al día siguiente, cuando Joe se conectó en internet para ver la entrevista de nuevo, el video había desaparecido misteriosamente.

Subió el volumen, esperando para oír si el locutor diría algo más, pero la radio había pasado a informar sobre el tráfico.

Se escuchó un golpe suave en la puerta del dormitorio. La Sra. Jonas asomó la cabeza dentro.

Denisse: La cena está lista. Hice macarrones con queso caseros.

Joe puso su almohada favorita contra su pecho. Por lo general, se comería un bote entero de los macarrones con queso de su madre, pero hoy su estómago estaba hinchado y se sentía enojado.

Joe: No tengo hambre. -murmuró-

La Sra. Jonas entró en la habitación, secándose las manos en su delantal con dibujos de pollos.

Denisse: ¿Estás bien?
Joe: Uh-huh. -mintió, tratando de hacer una sonrisa valiente-

Aunque durante todo el día, había luchado con la necesidad de echarse a llorar. Había tratado de ser fuerte cuando echó el ritual de limpieza de Miley ayer, pero en el fondo lo odiaba, Miley estaba muerta y enterrada. Terminada. El final. Joe no podía ni siquiera contar cuántas veces había sentido la imperiosa necesidad de sacar su caja de zapatos que tenía encima de su closet, y leer la carta que le envio a Miley.

Más que eso, estar de vuelta en Rosewood Day, se sentía incómodo. Joe había pasado todo el día esquivando a Ashley, temiendo un enfrentamiento. Y estaba viendo las propuestas para el equipo de natación. No había sido capaz de deshacerse de sus persistentes pensamientos de dejar todo e irse, y su ex-novia Jenna y su mejor amiga, Alison Cardiff, habían estado dándole indirectas, claramente por el amargo hecho de que él había engañado a Jenna.

La Sra. Jonas apretó sus labios, haciendo su cara de no comprendo lo que estás diciendo. Ella apretó la mano de Joe.

Denisse: ¿Por qué no vienes a recaudar fondos para Santísima Trinidad conmigo está noche? Nick también va a ir.
Joe: -Levantó una ceja sospechoso- ¿Quieres que vaya a algo en la iglesia?
Denisse: El padre Tyson me pregunto por ti. Él está preocupado por cómo estabas después de todo lo qué pasó con Demi el último semestre. Y recaudar fondos será divertido, van a tener música y una subasta silenciosa. Tal vez tú podrías sentarte pacíficamente ahí atrás.

Joe se inclinó sobre el hombro de su mamá de manera pensativa. Su familia había dado un ajuste de 180 grados en su actitud por lo ocurrido con “A”. Y tal vez su mamá tenía razón. Todo lo que Joe quería era que su vida volviera a ser como antes. Y eso sucedió. Su familia había ido a la Santísima Trinidad, la más importante iglesia católica en Rosewood desde que podía recordar. Tal vez ahí podrían ayudarlo a sentirse mejor.

Joe: De acuerdo. -dijo, escalando sobre la cama- Voy a ir.
Denisse: Bien. Me voy en cuarenta y cinco minutos.

Y con eso, salió de la habitación.

Joe se levantó y se acercó a la gran ventana de su dormitorio, y apoyó los codos en el alféizar. La luna se había elevado por encima de los árboles, los campos de maíz oscuro detrás de su casa se cubrían de nieve virgen, y una espesa capa de hielo cubría el techo de la casa de sus vecinos en forma de castillo.

De repente, algo blanco veteado pasó a través de una hilera de cañas de maíz muertas. Joe se enderezó, sus nervios hormiguearon. Se dijo que era sólo un ciervo, pero era imposible saberlo a ciencia cierta. Porque cuando entornó los ojos, sólo había oscuridad.

Santísima Trinidad era una de las iglesias más antigüas de Rosewood. El edificio de la iglesia estaba hecho de ruinas de piedra, y el pequeño cementerio de atrás había dispuesto de manera desordenada las lapidas, que le hacían recordar a Joe, filas de dientes torcidos. Cerca del Halloween de séptimo grado, Miley les había contado una historia de fantasmas sobre una chica que embrujaba los sueños de su hermana menor. Se habían atrevido, Joe y los demás, a ir a hurtadilas a este cementerio a la medianoche y cantaron “los huesos de mi hermana muerta”, veinte veces sin gritar y salir corriendo. Sólo Selena, que había corrido desnuda por Rosewood Day para probarle a Miley que era genial, había sido capaz de quedarse.

El interior de la iglesia olía igual a como recordaban Nick y Joe, una extraña mezcla de hongos, carne a la cacerola, y orina de gato. Las mismas ventanas de vitrales hermosos, que asustaban un poco, por todas las historias bíblicas que representaban, se alineaban en las paredes y el techo. La Sra. Jonas saludó al padre Tyson, el bondadoso sacerdote de pelo blanco que había bautizado a Joe y a Nick, que le enseñó los diez mandamientos, y a amar la Trilogía del Señor de los Anillos. Su madre tomó dos cafes del bar que estaba junto a una gran estatua de María y los llevó hacia Joe y Nick.

Mientras se acomodaban detrás de un hombre alto y sus dos niños pequeños, la Sra. Jonas miró el programa de música.

Denisse: Ahora hay una banda llamada Carpe Diem. ¡Oh, que diversión! La gente de la banda son jóvenes de la Academia de la Santísima Trinidad.

Joe y Nick se quejaron. Entre el cuarto y quinto grado, sus padres los habían enviado al campamento Long Pines, a Sleepaway Bible Camp. Jeffrey Kane, uno de sus consejeros, tenía una banda, y tocaron la última noche de campamento. Cantaron covers de Creed, y Jeffrey hizo unas caras muy retorcidas, como si hubiese tenido una especie de epifanía divina. Joe sólo podía imaginar lo que una banda de escuela católica llamada Carpe Diem sería.

Los acordes gangosos comenzaron a llenar la sala. Su punto de vista de la banda fue parcialmente oscurecida por un amplificador grande, por lo que Joe sólo vio a un tipo con el pelo desaliñado tocando la batería. A medida que el instrumento avanzaba, Carpe Diem sonaba más rock emo que Creed II. Y cuando la cantante comenzó la primera estrofa, Joe se sorprendió de que su voz sonara bien.

Empujó a su hermano y a unos niños, que estaban junto a él para obtener una mejor vista de la banda. Una chica de cabello negro estaba frente al micrófono, una guitarra acústica de color miel colgaba sobre su pecho. Vestía una camisa suelta color harina de avena, jeans negros, y los mismo zapatos Skater Vans que Joe tenía. Fue una agradable sorpresa, esperaba que la cantante fuera una versión femenina de Jeffrey Kane.

Nick, quién ahora estaba junto a Joe, comenzó murmurando las palabras. Escuchando la letra, Joe se dio cuenta al instante que la banda estaba cantando su -y también la de Nick- canción favorita, “Nobody's Home” de Avril Lavigne. Nick le había confesado a Joe que había escuchado la canción una y otra vez en su viaje en avión a Iowa.

Cuando la banda terminó la canción, la cantante dio un paso atrás desde el micrófono y miró hacia la multitud. Sus ojos, de color verde claro aterrizaron en Joe, y sonrió. De pronto, una electricidad se precipitó a través de él, desde la parte superior de su cabeza hasta los pies. Sentía como si el café hubiese bombeado diez veces su cantidad habitual de cafeína.

Joe miró disimuladamente alrededor. Su madre se había alejado hacia el quiosco para hablar con sus amigas, la Sra. Jamison y la Sra. Hart. Nick seguía a su lado preocupado más en su café que en lo que estaba pasando. Un grupo de señoras mayores se sentó en las bancas como si se trataran de un servicio de la iglesia, mirando confusamente al escenario. El padre Tyson estaba por el área de la confesión, doblándose de la risa de algo que un hombre mayor acababa de decir. Era increíble que nadie hubiera sido testigo de lo que acababa de suceder. Había sentido este rayo sólo dos veces antes. La primera vez fue cuando besó a Miley en su casa del árbol en el séptimo grado. La segunda vez fue cuando besó a Ashley en el stand de fotos de Noel Kahn el otoño pasado. Pero probablemente era sólo una reacción a la práctica de natación tan difícil de hoy. O una reacción alérgica al nuevo sabor de PowerBar que había comido antes de la práctica.

La cantante puso su guitarra en un soporte y saludó a la multitud.

X: Soy Maya, y estos son Keith y Chris. -dijo señalando a sus compañeros de banda- Vamos a tomar un pequeño descanso, pero vamos a volver.

A medida que Maya hablaba, ella miraba a Joe de nuevo y dio un paso hacia él. El corazón de Joe martillaba y levantó su mano para saludarla, pero justo en ese momento a su baterista se le cayó uno de su platillos. Maya volvió su atención a su banda.

Maya: Idiota. -dijo riendose-

Ella se puso su guitarra en su pecho y agarró otra con una mano antes de seguir a sus compañeros a través de una cortina de color rosa pálido, que llevaba a la parte de atrás del escenario improvisado en la iglesia.

Joe apretó los dientes. ¿Por qué la había saludado?

Nick: ¿La conoces?

Joe se volvió. Su hermano había terminado su café y se había dado cuenta de lo que acababa de pasar.

Joe: Uh, no.

Una chica y un chico vestidos en camisas de la Academia Santísima Trinidad y un uniforme blanco, la chica con una falda y el chico con un pantalon negro comenzaron a hablar.

X: Maya está en mi clase de matemáticas. -soltó la chica- Es tan misteriosa. Yo ni siquiera sabía que tenía una banda.
Y: ¿Tiene novio? -murmuró su amigo-

Joe pasó de un pie al otro. Eran versiones de escuelas católicas de Selena Gomez y Noel Kahn: la chica súper delgada, con el pelo largo y brillante, el maquillaje perfecto, y el chico musculoso con pelo brillante, y al parecer poco inteligente. Joe tocó su propio débil por el cloro y rizado cabello, él era musculoso así como su hermano pero no se sentía muy seguro.

No tenía, por supuesto, ninguna razón para sentirse en competencia con el chico. No era como si a Joe le gustara Maya. Esa sensación eléctrica que había pasado por él y todavía resonaba en sus dedos, había sido sólo... un bache. Sí, eso había sido todo. En ese momento, Joe sintió un golpecito en el hombro. Él saltó y se dio vuelta.

Era Maya. Y ella le sonreía.

Maya: Hola.
Joe: Uh, hola. -dijo, ignorando el aleteo en su pecho- Soy Joe.
Maya: Maya. ¿Y tú? -señaló a Nick-
Nick: Soy Nick.

De cerca, Maya olía un poco como el Body Shop champú de color naranja, que Ashley solía utilizar.

Nick: Me encantó tu versión de “Nobody's Home”. -dijo antes de que Joe pudiera hablar- Esa canción realmente me ayudó a soportar un viaje que hice a Iowa.
Maya: Iowa, ¿eh? Creo que pueden ser un poco duros allí. -bromeó- Yo fui con mi grupo de jóvenes una vez. ¿Por qué fuiste?

Nick vaciló, rascándose la parte posterior de su cabello. Podía sentir a los chicos de la escuela católica mirando. Tal vez había sido un error hablar de Iowa, o contarle que se identificaba con una letra tan desesperada.

Joe: Oh, simplemente fue a visitar a la familia. -lo salvó-
Nick: Sí, mi tía y tío viven fuera de Des Moines.
Maya: Te sigo.

Se apartó para dejar a un montón de niños en edad preescolar pasaran con un juego de dardos.

Maya: Yo te entiendo acerca de identificarte con la canción. Al principio me burlaba cuando empecé a cantarla pero me di cuenta que la canción se aplica a todo el mundo. Es como todos esos sentimientos de “¿Dónde encajo yo?” y “¿Por qué no puedo encontrar a alguien con quién hablar?” Creo que todo el mundo se siente así de vez en cuando.
Joe: Yo también.

Joe estuvo de acuerdo, impidiendo que Nick hablara. Miró por encima del hombro a su madre. Ella apartó su mirada de sus amigas y llamó a Nick. Nick fue donde su madre a ver que necesitaba.

Maya tamborileó con los dedos en el banco desgastado de la iglesia que estaba junto a ellos.

Maya: Tu hermano y tu no van a la Academia Santísima Trinidad ¿verdad?
Joe: -Sacudió la cabeza- Vamos a Rosewood Day.
Maya: Ah. -bajó los ojos tímidamente- Escucha, tengo que volver al escenario en un minuto, pero tal vez si quieres ¿podemos hablar de música y otras cosas en otro momento? ¿ir a cenar? ¿ir a dar un paseo? Ya sabes, como una cita.

Joe casi se ahogó con un sorbo de café. ¿Cómo una cita?

Joe: ¿Un paseo en este tiempo? -soltó, señalando al montón de nieve que recubrían las vidrieras-
Maya: ¿Por qué no? -se encogió- Tal vez podríamos ir en trineo. Tengo un par de inflables para la nieve, y hay una gran colina detrás de Hollis.
Joe: -Abrió mucho los ojos- ¿Quieres decir la gran colina detrás del edificio de química?

Maya se quitó el cabello de la frente y asintió con la cabeza.

Maya: Esa es la única.
Joe: Yo solía arrastrar a mis amigos ahí todo el tiempo.

Algunos de los recuerdos más preciados de Joe eran de invierno cuando él, Miley, y los otros se deslizaban por Hollis Hill. Miley había considerado tonto usar un trineo después de sexto grado, y Joe nunca había encontrado a nadie más que quisiera ir con él.

Después de una respiración profunda, Joe dijo.

Joe: Me encantaría ir en trineo contigo.
Maya: -Sus ojos brillaron- ¡Bien!

Intercambiaron sus números de teléfono, y los chicos de Santísima Trinidad quedaron con sus bocas abiertas. Cuando Maya se despidió, Joe fue hacia su madre, su hermano y su grupo de amigas, y se preguntó qué diablos había acordado hacer. Él no acaba de arreglar una cita con ella. Ellos iban a andar en trineo sólo como amigos. Lo esclarecería, y se lo iba a decir la próxima vez que la viera.

Sólo que, Joe vio a Maya alejarse entre la multitud, deteniéndose de vez en cuando para hablar con otros niños o alguno de los miembros de la congregación, y ya no estaba segura de si quería que fueran sólo amigos. De repente, no estaba seguro de nada.

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Capítulo 7: Una Gran Familia Hastings Feliz.

Temprano en la mañana del martes, _____ seguía a su hermana por las escaleras del palacio de justicia de Rosewood, el viento azotaba en su espalda. Su familia y sus parientes se encontraban con Ernest Calloway, el abogado de la familia Hastings, para la lectura del testamento de Nana.

Melissa sujetó la puerta principal para ella. El vestíbulo del palacio de justicia era ventoso y oscuro, iluminado sólo por unas cuantas luces amarillas del vestíbulo, era demasiado temprano para que cualquiera que trabajara aquí llegara. _____ se estremeció de temor, la última vez que había estado aquí fue por el procesamiento de Liam. Y la próxima vez que estaría aquí sería al final de esta semana, para testificar en su juicio.

Sus ruidosos pasos hacían eco en los duros pisos de mármol mientras subían por las escaleras. La sala de juntas donde el Sr. Calloway había programado la lectura todavía estaba cerrada; _____ y Melissa era las primeras en llegar. _____ se deslizó por la pared del vestíbulo hasta la alfombra oriental, mirando una gran pintura al ólea de un William W. Rosewood de aspecto estreñido, quien había fundado la ciudad en el siglo diecisiete con un montón de otros cuáqueros. Por más de cien años, la ciudad de Rosewood había pertenecido a sólo tres familias de agricultores y habían tenido más vacas que personas. El centro comercial Rey James había sido creado encima de un enorme y antigüo pastizal de vacas.

Melissa cedió contra la pared al lado de ella, aún presionando otro Kleenex rosado hacia sus ojos. Había estado llorando y sollozando desde que Nada había muerto. Ambas hermanas escucharon el viento presionando contra las ventanas, haciendo rechinar al edificio entero. Melissa tomó un sorbo del cappuccino que había agarrado del Starbucks antes de que llegaran. Atrapó la mirada de _____.

Melissa: ¿Quieres un poco?

_____ asintió. Melissa había estado especialmente simpática últimamente, un cambio bizarro del patrón usual de hermanas en pelea-de-gatas-y-rivales, con Melissa generalmente ganando. Probablemente era porque sus padres estaban furiosos con Melissa, también. Le había mentido a la policía por años, diciendo que ella y Liam, quien era su novio en ese entonces, habían estado juntos toda la noche en la que Miley se había perdido. En realidad, Melissa se había despertado en una oportunidad y encontró que Liam se había ido. Había estado demasiado asustada para decir algo porque ella y Liam habían estado ebrios, y la Pequeña Perfecta Señorita que quedó en Primer Lugar en su Promoción no hacía tales cosas de tan mal gusto como emborracharse y compartir una cama con su novio. Aún así, Melissa parecía extra caritativa esta mañana, lo que hacía activar pequeñas campanas de advertencia en la cabeza de _____.

Melissa tomó un gran sorbo de su café y miró a _____ cuidadosamente.

Melissa: ¿Has oído algo de las últimas noticias? Están diciendo que no hay suficientes pruebas para que Liam sea condenado.
Tu: -Se tensó- Oí un informe sobre eso esta mañana.

Pero también había oído una objeción de Jackson Hughes, el Fiscal de Rosewood, diciendo que había un montón de pruebas, y que las personas de Rosewood merecían que este horrible delito se acabara. _____ y los chicos se habían reunido con el Sr. Hughes incontables veces para discutir las pruebas. _____ y Nick se habían reunido con Jackson unas pocas sesiones más que los demás porque, de acuerdo al Sr. Hughes, sus testimonios -que ellos recordaron ver a Miley y Liam juntos una fracción de segundos antes de que Miley desapareciera- era la pieza más importante de todas las pruebas. Él les había repasado qué preguntas les iban a preguntar, cómo deberían responder, y cómo, deberían y no deberían, actuar. Para _____, no parecía tan diferente de formar parte en una obra, excepto que todos aplaudieran al final, alguien iba a ir a prisión por el resto de su vida.

Melissa dejó escapar un pequeño sorbido, y _____ la miró. Los ojos de su hermana estaban bajados y sus labios estaban fruncidos de preocupación.

Tu: ¿Qué? -preguntó con recelo. La alarma en su cabeza se volvía más y más fuerte-
Melissa: Sabes por qué están diciendo que las pruebas son insuficientes, ¿verdad? -preguntó quedadamente-

_____ negó con la cabeza.

Melissa: Es por la cosa de la Orquídea de Oro. -la miró por el rabillo de su ojo- Mentiste sobre el ensayo. Así que no están seguros de que tú seas exactamente... confiable.
Tu: -Su garganta se sentía estrecha- ¡Pero esto es diferente!

Melissa frunció sus labios e intencionalmente se quedó con la mirada fija en la ventana.

Tu:Tú me crees, ¿no? -preguntó urgentemente-

Durante mucho tiempo, no había recordado nada sobre la noche en que Miley desapareció. Luego pequeñas piezas empezaron a regresar a ella, una por una. Su recuerdo suprimido final era el de dos figuras oscuras en el bosque, una era Miley, y el otro definitivamente era Liam.

Tu: Yo sé lo que vi. -siguió- Liam estaba allí. Incluso Nick también lo vio.
Melissa: Solo estoy diciendo. -masculló. Luego recorrió con la mirada a _____, mordiendo duramente su labio superior- Hay algo más. -tragó- Liam de alguna manera... me llamó anoche.
Tu: ¿Desde la cárcel?

_____ sintió la misma sensación que tuvo la vez que Melissa la echó del gran roble en su patio trasero, primero el shock, y luego, cuando cayó al suelo, el dolor abrasador.

Tu: ¿Qu... Qué dijo?

El vestíbulo estaba tan callado, que _____ podía oír a su hermana tragar saliva.

Melissa: Bueno, en primer lugar, su mamá está muy enferma.
Tu: ¿Enferma... cómo de qué?
Melissa: Cáncer, pero no sé qué clase. Él está devastado Liam era tan cercano a su mamá, y él tiene miedo de que su condena y su juicio la hagan avanzar.

_____ sacudió una pequeña pelusa de su abrigo de cachemira, sin emoción. Liam había llevado el juicio en sí mismo.

Melissa aclaró su garganta, sus redondos ojos estaban rojos.

Melissa: No entiende por qué le hicimos esto a él, _____. Él nos rogó a nosotras que no testificáramos en su contra en el juicio, sigue diciendo que todo fue un malentendido. No la mató. Sonaba tan... desesperado.
Tu: -Su boca cayó abierta- ¿Estás diciendo que no vas a testificar en contra de él?

Una vena en el cuello de cisne de Melissa revoloteó. Jugó con su cadena de llavero Tiffany.

Melissa: Simplemente no puedo superarlo, eso es todo. Si Liam lo hizo, nosotros habíamos estado saliendo en ese momento. ¿Cómo pude no haber sospechado nada?

_____ asintió, repentinamente agotada. A pesar de todo, entendía la perspectiva de Melissa. Melissa y Liam habían sido la pareja modelo en la secundaria, y _____ recordaba qué tan contrariada había estado Melissa cuando Liam terminó la relación con ella a la mitad de su año novato en la universidad. Cuando Liam volvió de golpe a Rosewood como entrenador del equipo de hockey de _____ -¡espeluznante!- él y Melissa volvieron a estar juntos rápidamente. Exteriormente, Liam había lucido como el novio ideal: atento, dulce, honesto, y genuino. Era la clase de chico que ayudaría a ancianas a cruzar la calle. Era como si _____ y Nick Jonas estuvieran saliendo de nuevo y él quedara arrestado por distribuir droga fuera de su Audi.

Un quitanieves sonó afuera, y _____ miró hacia arriba abruptamente. No es que ella y Nick alguna vez volvieran a ser pareja. Era solamente un ejemplo. Porque Nick la había engañado y ella no podía perdonarlo. Era simplemente otro ejemplo de un Chico Dorado del Rosewood Day, eso era todo.

Melissa comenzó a decir algo más, pero las puertas principales, escaleras abajo se abrieron, y el Sr. y la Sra. Hastings caminaron hacia el vestíbulo. El tío de _____, Daniel, su tía Genevieve, y sus primos Jonathan y Smith seguían por atrás. Daniel, Genevieve, Jonathan, y Smith, todos lucían cansados, como si hubiesen conducido a través del país para venir, cuando de hecho ellos vivían en Haverford, a sólo quince minutos de distancia.

El Sr. Calloway fue la última persona en atravesar la puerta. Subió por las escaleras, abrió la sala de juntas, y guió a todos adentro. La Sra. Hastings pasó por delante de _____, sacando sus guantes de gamuza Hermés con sus dientes, Chanel No. 5 estaba flotando detrás de ella.

_____ se sentó en una de las sillas giratorias de cuero alrededor de la gran mesa de negociaciones color cereza. Melissa sacó el asiento al lado del de ella. Su papá se colocó al otro lado del cuarto, y el Sr. Calloway se sentó al lado de él. Genevieve se escabulló de su abrigo de cebellina mientras Smith y Jonathan apagaban sus BlackBerrys y enderezaban sus corbatas Brooks Brothers. Ambos muchachos habían sido remilgados desde que _____ podía recordar. Antes, cuando las familias celebraban la Navidad juntas, Smith y Jonathan siempre cortaban cuidadosamente el papel de envolver en rodajas en los filones así no lo desgarrarían.

Sr. Calloway: Vamos a empezar, ¿de acuerdo?

El Sr. Calloway empujó sus gafas de color concha más arriba de su nariz y sacó un grueso documento de una carpeta manila. La luz aérea destellaba encima de su cabeza calva mientras él leía a través del prefacio abridor de la última voluntad de Nana y el testamento, indicando que ella estaba sana en cuerpo y en mente cuando lo redactó. Nana manifestó que dividiría su mansión de Florida, la casa de playa de Cape May, y su pent-house de Filadelfia junto con la mayor parte de su patrimonio entre sus niños: el padre de _____, el tío Daniel, y la tía Penelope. Cuando el Sr. Calloway dijo en voz alta el nombre de Penelope, todo lucían sorprendidos. Miraron alrededor, como si Penelope estuviera allí y nadie la había notado. Por supuesto, ella no estaba.

_____ no estaba segura de cuándo había visto por última vez a la tía Penelope. La familia siempre se quejaba sobre ella. Era la bebé de la familia y nunca se había casado. Había rebotado de profesión en profesión, intentando su mano en el diseño de moda, luego moviéndose al periodismo, incluso comenzó una lectura de tarot en línea, leyendo en voz alta en sitios de su casa de playa en Bali. Después de eso, había desaparecido, viajando a través del mundo, comiendo su fondo del fideicomiso, y olvidando visitarlos por años. Estaba bastante claro de que todos estaban horrorizados de que Penelope hubiese heredado algo. _____ repentinamente sintió una afinidad con su tía, tal vez cada generación Hastings necesitaba una oveja negra.

Sr. Calloway: En cuanto a otros activos de la Sra. Hastings. -dijo, volteando una página- Deja en herencia dos millones de dólares para cada uno de sus nietos de acuerdo a lo siguiente.

Smith y Jonathan se inclinaron hacia adelante. _____ se quedó con la boca abierta. ¿Dos millones de dólares?

Sr. Calloway: -Entrecerró los ojos en las palabras- Dos millones de dólares para su nieto Smithson, dos millones de dólares para su nieto Jonathan, y dos millones de dólares para su nieta Melissa.

Hizo una pausa, sus ojos se posaron momentáneamente en _____. Una mirada embarazosa revoloteaba sobre su cara.

Sr. Calloway: Y... bien. Simplemente necesitamos que todos firmen aquí.
Tu: Uh. -comenzó. Salió como un gruñido, y todos la miraron- Lo-lo siento. -tartamudeó, autoconscientemente tocando su pelo- Creo que usted olvidó un nieto.

El Sr. Calloway abrió su boca y le cerró de nuevo, como uno de los peces dorados que nadaban en el patio trasero de los Hastings reflejándose en el estanque. La Sra. Hastings se puso de pie abruptamente, haciendo la cosa del pez dorado con su boca también. Genevieve aclaró su garganta, quedándose intencionalmente con la mirada fija en su anillo esmeralda de tres quilates. El tío Daniel hinchó sus enormes fosas nasales. Los primos de _____ y Melissa se reunieron sobre el testamento.

Sr. Calloway: Justo aquí. -dijo quedamente, apuntando hacia la página-
Tu: Uh, ¿Sr. Calloway? -insistió. Ella batía su cabeza de aquí para allá entre el abogado y sus padres. Finalmente, dejó escapar una risa nerviosa- Yo soy mencionada en el testamento, ¿no?

Sus ojos anchos, Melissa cogió el testamento desde Smith y se lo dio a _____. _____ contempló el documento por un momento, su corazón estaba como un martillo perforador.

Allí estaba. Nana había dejado dos millones de dólares para Smithson Pierpont Hastings, Jonathan Barnard Hastings, y Melissa Josephine Hastings. El nombre de _____ no estaba en ninguna parte.

Tu: ¿Qué está pasando? -susurró-
Peter: -Se puso de pie abruptamente- _____, tal vez deberías esperar en tu auto.
Tu: ¿Qué? -chilló, horrorizada-

Su padre tomó su brazo y comenzó a guiarla fuera del cuarto.

Peter: Por favor. -dijo bajo su aliento- Espéranos allí.

_____ no estaba segura qué más hacer excepto obedecer. Su padre cerró la puerta rápidamente, el portazo retumbo en las tranquilas paredes de mármol del palacio de justicia. _____ escuchó su propia respiración por unos cuantos momentos, y luego, suprimiendo un sollozo, se volteó, corriendo hacia su auto, presionó el encendido, y salió rápidamente del estacionamiento. Que se jodan esperando. Quería estar tan lejos de este palacio de justicia -de lo que sea que acabara de ocurrir- mientras ella posiblemente pudiera.

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COMENTEN!!!!!!!!!!!

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que mala nana como no le dejo nada a rayita!!!
yo quiero que vuelva con nick sii??
SIGUELA PORFA!!!

Tatu d'Jonas escribió:

que mala nana como no le dejo nada a rayita!!!
yo quiero que vuelva con nick sii??
SIGUELA PORFA!!!

Jajajaja, eso se vera después. Si Nick y rayita regresan... o no xD

Ahorita pongo dos caps más!!!

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no se vale!!!
SIGUELAA

Tatu d'Jonas escribió:

no se vale!!!
SIGUELAA

Sorry por no haber subido cap!!!

Se me complicaron las cosas con mis clases y lo que quede con unos amigos para ver una obra.

Ahorita subo dos caps!!!

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Capítulo 8: ¿No Son Geniales las Citas Por Internet?

Temprano en la noche del martes, Troian se sentó en un taburete de tela en el baño de su madre, con su bolsa floral, Orla Kiely, de maquillaje en su regazo. Se miró a sí misma en el espejo.

Troian: Oh Dios mío, no. -dijo rápidamente, mientras ensanchaba sus ojos mirando las rayas anaranjadas en las mejillas de Ella- Eso es demasiado bronceado. Se supone que debes parecer bronceada, no asada a la parrilla.

Su madre frunció el ceño y se limpió las mejillas con un pañuelo de papel.

Ella: ¡Es el final del invierno! ¿Qué idiota pareceré bronceada ahora de todos modos?
Troian: Querías parecer como cuando estuvimos en Creta. ¿Recuerdas el bronceado que todos nosotros recibimos de ese crucero en el barco de observación a los frailecillos? Y...

Troian se detuvo abruptamente. Quizá no debía de haberse referido a Creta. Byron había estado en ese viaje, también.

Pero Ella no parecía sorprendida.

Ella: La piel muy bronceada grita melanoma. -tocó los rulos de color rosa, y esponjosos en su pelo- ¿Cuándo sacamos éstos?

Troian miró su reloj. La gran cita de Ella en Match.com, con el misterioso hombre amante de los Rolling Stones, llamado -escalofriantemente- Wolfgang, estaría aquí en quince minutos.

Troian: Ahora, supongo.

Retió el primero rulo. Un mechón de pelo rubio de Ella cayó en forma de cascada bajo su espalda. Troian deshizo el resto, agitó la lata de aerosol, y dio un chorrito rápido a la cabeza de su madre.

Troian: ¡Voilà!
Ella: -Se echó hacia atrás- Se ve bien.

El cabello y el maquillaje normalmente no eran la cosa de Troian, pero no sólo había sido divertido ayudar a Ella para su gran cita, había sido también la mayor parte del tiempo que habían pasado juntas desde que Troian se volvió a instalar. Incluso mejor, el cambio de imagen de Ella había sido una buena distracción de pensar en Xavier. Troian se había obsesionado durante su conversación en la galería de los últimos dos días, tratando de recoger además si había sido una burla coqueta o una charla amistosa. Los artistas eran tan sentimentales, que era imposible decir lo que realmente querían decir. Todavía, esperaba que él llamara. Troian había firmado con el nombre y el número de su celular en el registro de la galería, poniendo un asterisco en el. Los artistas miraban los libros de registros, ¿no? No podía imaginar dejar su imagen en su primera cita... que comenzará pintando con los dedos y terminara con una desordenada sesión en el suelo del estudio de Xavier.

Ella recogió la máscara de rímel y se apoyó en el espejo.

Ella: ¿Estás segura que estoy bien para ir a mi cita?
Troian: Claro.

Pero la verdad era que Troian no estaba segura cómo de prometedora iba a ser esta cita. El nombre del tipo era Wolfgang, por el amor de Dios. ¿Y si él hablaba con rimas? ¿Y si él era la personificación de Wolfgang Amadeus Mozart para los Grandes Compositores del Conservatorio de Hollis en la fiesta de la Historia? ¿Y si se presentaba con un jubón, mallas y una peluca empolvada?

Ella se levantó y volvió a entrar en el dormitorio. A mitad de camino por la alfombra, se detuvo bruscamente.

Ella: Oh.

Sus ojos estaban puestos en el vestido verde azulado que Troian había puesto sobre la cama de matrimonio. Al principio de esa tarde, Troian había pasado por el armario de Ella para buscar un conjunto apropiado para la cita, preocupada de que no encontrara nada entre los dashikis, túnicas y mantos de oración tibetanas que Ella llevaba normalmente. El vestido se había metido en la parte de atrás, todavía envuelto en la bolsa de plástico de la lavandería. Era simple y ligero, con sólo un pequeño festón en el cuello. Troian había pensado que era una elección perfecta... pero a juzgar por la cara de su madre, de repente no estaba tan segura.

Su madre se sentó junto al vestido, tocando su tejido sedoso.

Ella: Me olvidé que tenía esto. -dijo en voz baja- Lo llevé en el plan Hollis cuando Byron consiguió el puesto finalmente. Era la misma noche que te quedaste a dormir por primera vez en la casa de Miley Cyrus. Nosotros tuvimos que correr para conseguir un saco de dormir porque no tenías ninguno, ¿recuerdas?

Troian se sentó en la silla de alas a rayas en la esquina de la habitación. Recordó la primera fiesta de pijamas en casa de Miley a la perfección. Fue justo después de que Miley se hubiera acercado a Troian el día de la recaudación de fondos de Rosewood Day y le había pedido su ayuda para clasificar los artículos de lujo. El primer instinto de Troian había sido que Miley lo había hecho por una apuesta. Simplemente la semana anterior, Miley le había pedido a Chassey Bledsoe que probara un corrito de un nuevo perfume que había descubierto. Resultó que el perfume era realmente agua oscura, llena de caca del estanque de los patos de Rosewood.

Ella: -Acunó el vestido en su regazo- Así que supongo que sabes sobre Byron y Meredith... -ahuecó sus manos cerca de su estómago, imitando un vientre de embarazada-

Troian mordió su labio y asintió en silencio, con el corazón dolorido. Ésta fue la primera vez que Ella había mencionado la condición de Meredith. Había intentado muy duramente apartar a Ella lejos de todas las referencias al embarazo el último mes, pero era absurdo pensar que pudiera evitarlo para siempre.

Ella: -Suspiró, con su mandíbula tensa- Bueno, supongo que ya es hora de crear un nuevo recuerdo con este vestido. Es hora de continuar. -miró a Troian- ¿Y tú? ¿Qué pasó?
Troian: -Levantó una ceja- ¿De Byron?
Ella: -Se apartó el pelo ondulado por encima del hombro- No. Me refería a tu maestro. El señor... Montgomery.
Troian: ¿Tú... sabes de eso?

Ella trazó su dedo en el laterar de la cremallera del vestido.

Ella: Tu padre me lo dijo. -sonrió incómoda- Supongo que el Sr. Montgomery fue a Hollis. Byron oyó hablar algo de él pidiéndole dejar Rosewood Day... gracias a ti. -le echó un vistazo a Troian de nuevo- Me hubiera gustado que hubieras venido a mí acerca de esto.

Troian miró a través de la habitación a una gran pintura abstracta que Ella había hecho de Troian y Mike flotando a través del espacio exterior. No había pedido ayuda a Ella en ese momento porque Ella no había estado respondiendo a sus llamadas.

Ella bajó los ojos tímidamente, como si se hubiera dado cuenta de esto también.

Ella: No lo hizo... no se aprovechó de ti, ¿verdad?

Troian negó con la cabeza, escondiéndose detrás de su pelo.

Troian: No. Fue muy inocente.

Pensó en las pocas veces que había pasado realmente con Kevin, la oscura y pegajosa sesión hecha en el baño del Snooker, un beso en su oficina de la escuela, un par de horas robadas a su apartamento en el Viejo Hollis. Kevin había sido el primer hombre que Troian pensó que amaba, y le había parecido que él la amo, también. Cuando había dicho a Troian que lo buscara en unos pocos años, Troian había calculado que eso significaba que esperaría por ella. Pero alguien que la estaba esperando habría llamado de vez en cuando, ¿no? Se pregunto si había sido muy ingenua.

Troian: -Tomó una respiración profunda- Quizás no éramos el uno para el otro. Pero yo podría haber encontrado a alguien nuevo.
Ella: ¿En serio? -se sentó en la cama y comenzó a sacar sus zapatos y calcetines- ¿A quién?
Troian: Sólo... a alguien. -dijo a la ligera. No quería atraer la mala suerte en esa cosa- No estoy segura de ello todavía.
Ella: Bueno, eso es genial.

Ella tocó la parte superior de la cabeza de Troian con tanto amor, que se llenaron las lágrimas en los ojos de Troian. Finalmente estaban hablando. Quizás las cosas se estaban convirtiendo en algo normal entre ellas de nuevo.

Ella levantó el vestido de su percha y se lo llevó al baño. En cuanto cerró la puerta y abrió el grifo, el timbre sonó.

Ella: Mierda. -asomó su cabeza fuera de la puerta del baño, con los ojos muy abiertos- Llega temprano. ¿Lo atiendes?
Troian: ¿Yo? -chilló-
Ella: Dile que estaré en un segundo. -cerró de golpe la puerta-

Troian parpadeó. El timbre volvió a sonar. Corrió al baño.

Troian: ¿Qué debo hacer si él es realmente feo? -susurró en voz alta a través de la puerta- ¿Y si él tiene pelo que le crece fuera de las orejas?
Ella: Es sólo una cita, Troian. -se echó a reír-

Troian cuadró sus hombros y caminó hasta el pie de la escalera. Podía ver una figura oscura que cambia de un lado a otro a través del cristal tintado de la puerta principal.

Tomando una respiración profunda, fustigó la puerta abriéndola. Un tipo con el cabello corto estaba de pie en el porche. Durante un momento, Troian no pudo hablar.

Troian: ¿... Xavier? -gritó finalmente-
Xavier: ¿Troian? -entrecerró los ojos con recelo- ¿Eres... tú...?
Ella: ¿Hola?

Ella se deslizó por las escalera detrás de ellos, sujetando un pendiente de aro en la oreja. El vestido verde azulado se le adaptaba perfectamente, y su pelo rubio ondeándole por la espalda.

Ella: ¡Hola! -gritó a Xavier, mientras le sonreía ampliamente- ¡Debes de ser Wolfgang!
Xavier: Oh Dios, no. -su mano voló hacia su boca- Ése es mi nombre de perfil.

Sus ojos se lanzaron de Troian a Ella. Una sonrisa floreció en sus labios, casi como si él estuviera tratando de no reírse. De pie bajo la luz del hall de la entrada, se veía un poco mayor, probablemente de unos treinta años, por lo menos.

Xavier: Mi nombre es Xavier, en realidad. ¿Y tú eres Ella?
Ella: Sí. -puso su mano en el hombro de Troian- Y ésta es mi hija, Troian.
Xavier: Lo sé. -dijo despacio-

Ella parecía desconcertada.

Troian: Nos conocimos el domingo. -intervino rápidamente, todavía incapaz de sacudir el tono desconcertado de su voz- En la apertura de la galería. Xavier era uno de los artistas.
Ella: ¿Eres Xavier Reeves? -gritó alegremente- Yo iba a ir a su exhibición pero le di mi invitación a Troian en cambio. -miraba a Troian- ¡Yo estuve tan ocupada hoy que ni siquiera le pregunté ni por ella! ¿Era buena?
Troian: -Parpadeó rápidamente- Yo...
Xavier: -Tocó el brazo de Ella- ¡No puede decir nada malo sobre mi conmigo aquí de pie! Pregúntale a ella después de que me haya ido.

Ella se rió como si fuera la cosa más divertida que nadie había dicho nunca. Luego echó el brazo sobre los hombros de Troian. Troian podía sentir el antebrazo de su madre temblando. Estaba nerviosa, pensó Troian. Ella había caído totalmente por Xavier a primera vista.

Xavier: Esta es una loca coincidencia, ¿eh?
Ella: Es una coincidencia maravillosa. -le corrigió-

Se volvió hacia Troian expectante. Troian sintió la necesidad de pegar la misma sonrisa tonta en la cara.

Troian: Es maravilloso. -repitió-

Maravillosamente extraño.

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Capítulo 9: No Eres Paranoico Si Él de Verdad Está Detrás de Ti.

Más tarde ese mismo martes, Nick cerró de golpe la puerta de su casa y siguió a Joe camino a través del patio delantero de la vieja casa de Miley hasta la de _____. Se habían saltado la segunda mitad de la práctica de natación para encontrarse con sus amigas, como Marion había sugerido, para ponerse al día los unos a los otros y hablar.

Justo cuando Joe estaba a punto de tocar el timbre, su Nokia sonó. Joe lo sacó del bolsillo de su chaqueta y miró la pantalla. Maya le había enviado un tono. Cuando lo abrió, escucho su canción favorita de Jimmy Eat World, la que incluía la línea, ¿todavía puedes sentir las mariposas? La había escuchado un montón el pasado septiembre cuando se había enamorado de Ashley. Hey Joe, decía el mensaje que la acompañaba. Esta canción me recuerda a ti. ¡Nos vemos en Chem Hill mañana!

Joe se sonrojó, contento. Él y Maya se habían mandado mensajes todo el día. Lo había llenado con detalles de su clase de religión -enseñado por el mismísimo Padre Tyson, quien también había metido a Maya en los libros del Señor de los Anillos- y Joe le había recapitulado el horror que había sido su informe oral sobre la Batalla de Bunker Hill para historia. Habían comprado sus libros favoritos y programas de TV y habían descubierto que a ambos les gustaban como Gerard Butler interpretaba al Fantasma en The Phantom Of The Opera. Joe nunca había sido de esos chicos que estaban pegados a su teléfono durante las horas de escuela -y de todos modos, técnicamente estaba prohibido en Rosewood Day- pero cada vez que escuchaba a su teléfono hacer un pequeño sonido metálico, sentía la urgencia de escribirle de regreso a Maya inmediatamente.

Se había preguntado a sí mismo varias veces ese día exactamente qué estaba haciendo y peleaba para calcular el valor de sus sentimientos. ¿Le gustaba Maya?

Nick tosió, sacando a Joe de sus pensamientos. Ellos miraron por el camino de _____ hacia su oscura y tranquila calle. El aire olía helado, como a nada. Una gruesa capa de hielo había convertido a la bandera del buzón de los Cavanaugh de roja a blanca. Por la calle estaba la de los Lovato, misteriosamente desocupada, la familia de Demi había desaparecido de la cuidad después que ella muriera. Un temblor pasó por la columna vertebral de Joe. “A” había vivido sólo a unos pasos de ellos y de _____ todo el tiempo, y ninguno de ellos había sabido.

Estremeciéndose, Joe dejó caer su teléfono de regreso dentro del bolsillo de su chaqueta y Nick presionó el timbre delantero de _____. Hubo un sonido de pasos, y entonces _____ abrió la puerta, su cabello castaño derramándose por sus hombros.

Tu: Estamos en la sala de cine. -dijo entre dientes-

El olor a mantequilla invadía el aire, y Troian y Selena estaban encaramadas sobre el borde del sillón sacando palomitas de microondas de un gran tazón plástico. La TV había cambiado a The Hills, sin sonido.

Nick: Entonces. -dijo, dejándose caer pesadamente sobre el sillón- ¿Se supone que tenemos que llamar a Marion, o qué?
Tu: -Se encogió de hombros- Realmente no dijo eso. Sólo dijo que deberíamos... hablar.

Todos miraron alrededor, en silencio.

Selena: Así que, chicos, ¿todos estamos haciendo nuestros cánticos? -dijo en una voz falsamente preocupada-
Troian: Ommmm. -tarareó, explotando en risitas tontas-

Joe tomó un hilo suelto de su pantalon azul marino de Rosewood Day, un poco queriendo defender a Marion. Estaba tratando de ayudar. Miró alrededor de la habitación, notando algo apoyado contra la base de una larga escultura de alambre de la Torre Eiffel. Era la fotografía en blanco y negro de Miley de pie en frente de los anaqueles para bicicletas de Rosewood Day, su blazer de la escuela colgaba sobre su brazo, la que Nick le había pedido a Joe que no quemara.

Joe la estudió sinceramente. Había algo muy afilado y realista sobre ella. Prácticamente podía sentir el fresco aire de otoño y oler los árboles de manzana silvestre en el césped delantero de Rosewood Day. Miley estaba mirando fijamente a la cámara en un punto muerto, su boca abierta en una risa. Había un pedazo de papel en su mano derecha. Joe entrecerró los ojos a las palabras. ¡La cápsula del tiempo comienza mañana! ¡Prepárense!

Joe: Whoa. -se bajó del sillón y levantó la foto para que los otros la viera-

Troian leyó el volante y también amplió sus ojos.

Joe: ¿Recuerdan ese día? ¿Cuando Miley anunció que iba a encontrar una de las piezas de la bandera?
Selena: ¿Qué día? -desdobló sus largas piernas y caminó hacia ellos- Oh. Huh.

_____ estaba detrás de ellos ahora, finalmente curiosa.

Tu: El área común estaba totalmente lleno. Todos vieron el letrero al mismo tiempo.

Nick se acercó a ellos también, él no había pensado sobre ese día en un largo tiempo. Había estado tan emocionado cuando había visto el volante sobre el comienzo del juego de la Cápsula del tiempo. Y entonces Miley había ido afuera con Naomi y Riley, empujando por la multitud, había roto el letrero, y había anunciado que una de las piezas era para ella.

Nick levantó la vista, asustado por el recuerdo de lo que había pasado después.

Nick: Chicos. Liam fue hacia ella. ¿Recuerdan?
Tu: -Asintió lentamente- La molestó sobre que no debería jactarse de que iba a encontrar una pieza, porque alguien podría tratar de robársela.
Selena: -Su mano voló hacia su boca- Y Miley dijo que no había forma de que eso pudiera ser verdad. Quién quiera que quisiera la pieza tendría que...
Joe: ...matarla para conseguirla. -su rostro estaba pálido- Y luego Liam dijo algo como, “Bueno, si eso es lo que se necesita”.
Troian: Dios. -susurró-

El estómago de Joe rugió. Las palabras de Liam había sido tan misteriosamente proféticas, pero ¿cómo podrían haber sabido para tomarlo seriamente? En ese entonces, la única cosa que Joe había sabido sobre Liam Hemsworth era que era un chico inteligente de Rosewood Day y si necesitaban a un representante de último año para ayudar con el día de campo de la escuela primaria o juntar a los niños en la cafetería cuando una gran tormenta de nieve que hacía que los buses se retrasaran, era él. Ese día, después de que Miley se fuera con su grupo, Liam se había dado la vuelta y había caminado casualmente hacia su auto. No parecía como el comportamiento de alguien que estuviera planeando un asesinato... lo que hacía toda la cosa más espeluznante.

Tu: Y entonces a la mañana siguiente era tan engreída. Todos sabían que había encontrado una pieza.

Dijo con el ceño fruncido, como si todavía le molestara que Miley hubiera encontrado la bandera en vez de ella.

Selena: -Miró fijamente la fotografía- Quería demasiado la pieza de Miley de la Cápsula del Tiempo.
Nick: Yo también. -admitió.

Miró hacia Joe y Troian, quienes se movieron incómodamente y parecían estar evitando calculadamente los ojos de todos.

Tu: Todos queríamos ganar. -se volvió a sentar sobre el sillón y abrazó una almohada de satín azul contra su pecho- De otro modo no tendríamos que haber aparecido en su patio dos días más tarde para robársela.
Selena: ¿No sería raro que alguien más le robara la pieza a Miley primero? Me pregunto ¿qué le habrá pasado a eso?

De repente, la hermana de _____, Melissa, entró en la habitación. Usaba un suéter suelto color beige y unos vaqueros de piernas anchas. Su cara redonda estaba pálida.

Melissa: Chicos. -su voz tembló- Pongan las noticias. Ahora. -señaló la televisión-

Los chicos miraron fijamente a Melissa por un latido de corazón sin moverse. Frustrada, Melissa agarró el control remoto y puso el canal cuatro por sí misma. La pantalla mostró a una multitud de personas empujando micrófonos en la cara de alguien. La cámara de las noticias se tambaleó, como si estuviera siendo constantemente empujada. Entonces, algunas de las cabezas se separaron. Primero, Darren Wilden, el policía más joven de Rosewood, el oficial que las había ayudado a encontrar a _____ cuando Demi la había secuestrado. Cuando Darren se alejó, la cámara se detuvo en alguien en un traje arrugado. Su desordenado cabello rubio era inolvidable. Todo el cuerpo de Nick se puso en blando.

Nick: ¿Liam?

_____ agarró la mano de Nick. _____ miró fijamente a Melissa, su rostro completamente blanco.

Tu: ¿Qué está pasando? ¿Por qué no está en prisión?
Melissa: -Sacudió su cabeza impotentemente- No lo sé.

El cabello rubio de Liam brillaba como si fuera de una pulida estatua de bronce, pero su rostro lucía agotado. La pantalla cambio al reportero de las Noticias del 4.

Reportero: La madre del Sr. Hemsworth ha sido diagnosticada con un agresivo cáncer pancreático. -explicó- Sólo ha sido una sesión de emergencia, y a Hemsworth se le ha otorgado una fianza temporal para visitarla.
Selena: ¿Qué? -gritó-

Un anuncio en la parte de abajo de la pantalla decía: JUEZ BAXTER AUTORIZA LA FIANZA TEMPORAL DE HEMSWORTH. El corazón de Joe martilleó en sus oídos. El abogado de Liam, un hombre con el cabello plateado en un traje de raya diplomática, empujó en frente a la multitud y se paró delante de las cámaras. Los flashes estallaron en el fondo.

Abogado: Es el deseo de la madre moribunda de mi cliente pasar sus últimos días con su hijo. -anunció- Y estoy emocionado de que lográramos ganar la fianza temporal. Liam estará bajo arresto domiciliario hasta que su juicio comience el viernes.

Joe se sintió desfallecer.

Nick: ¿Arresto domiciliario? -repitió, dejando caer la mano de _____-

La familia de Liam vivía en una gran casa estilo Cape Cod a menos de una milla de la finca de los Hastings. Una vez, cuando Miley todavía estaba viva y Liam y Melissa estaban saliendo, Nick había oído por casualidad a Liam diciéndole a Melissa que podía ver el molino de viento de los Hastings desde la ventana de su dormitorio.

Troian: Esto no puede estar pasando. -dijo con una voz catatónica-

Los periodistas empujaban micrófonos en el rostro de Liam.

Periodista: ¿Cómo te sientes sobre la decisión? ¿Cómo ha sido la prisión del condado para ti?
Periodista2: ¿Sientes que has sido erróneamente acusado?
Liam: Sí, he sido erróneamente acusado. -dijo, con una fuerte y enojada voz- Y la cárcel ha sido exactamente lo que hubieras esperado, el infierno. -apretó sus labios, mirando directamente hacia la lente de la cámara- Voy a hacer todo lo que esté en mi poder para no regresar nunca ahí.

Un escalofrío corrió por la columna vertebral de Joe. Pensaba en Liam en esa entrevista en línea que había visto antes de navidad. Alguien me quiere aquí. Alguien está ocultando la verdad. Ellos lo van a pagar.

Los periodistas siguieron a Liam mientras caminaban hacia la limosina negra que estaba esperándolo.

Periodista3: ¿Qué quieres decir con que no vas a regresar ahí? -gritó- ¿Alguien más lo hizo?

Liam no respondió. Sólo dejó que su abogado lo guiara hacia la limosina que lo esperaba. Joe miró a los otros. La cara de Selena era verde. Troian estaba mordiendo el cuello de su suéter. Nick se estaba pellizcando su mano, lo cuál siempre hacía cuando estaba nervioso. Melissa salió corriendo de la habitación, dejando que la puerta se cerrara de golpe detrás de ella. _____ se levantó y los miró a todos.

Tu: Vamos a estar bien. -dijo forzadamente- No podemos volvernos locos.
Joe: Quizás venga a buscarnos. -susurró, su corazón retumbando- Está tan enfadado. Y él nos culpa.

Un pequeño músculo cerca de la boca de _____ tembló.

La cámara de la televisión hizo un acercamiento a Liam mientras subía en el asiento trasero de la limosina. Por un momento, parecía como si sus transtornados ojos estuvieran buscando por los lentes de las cámaras, como si pudiera ver a Joe, Nick y sus amigas. Selena soltó un pequeño “eep”.

Los chicos observaron mientras Liam se sentaba en un asiento de cuero y buscaba algo en el bolsillo de su chaqueta. Luego el abogado de Liam cerró de golpe la puerta detrás de él, y la cámara se alejó, cambiando de regreso al reportero de las Noticias del 4. Debajo de ella el anuncio ahora leía: JUEZ BAXTER LE CONCEDE LA FIANZA TEMPORAL DE HEMSWORTH.

De repente, el teléfono de Joe sonó, haciéndolo saltar. Al mismo tiempo, unas campanas sonaron del bolso de Selena.

Luego, hubo dos pitidos. El Treo de Nick y de Troian, se iluminaron. El Sidekick de _____ sonó, dos altos pitidos como un antigüo teléfono Inglés.

La televisión parpadeó en el fondo. Todos podían ver las luces traseras de la limosina de Liam, saliendo a la calle y alejándose lentamente. Joe intercambió miradas con sus amigos, toda la sangre drenaba lentamente de su cabeza.

Joe miró fijamente la pantalla LCD de su teléfono. UN NUEVO MENSAJE. Sus manos temblaron cuando apretó Leer.

Honestamente idiotas... ¿realmente creen que los dejaría tan fácilmente? No han tenido ni de cerca lo que se merecen. Y no puedo esperar para dárselos. ¡Mwah! -A

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what????????????????
A otra vez hay nooo
SIGUELA!!!

Como ayer no pude poner cap... Porque era mi cumple... Por fin 18 años xD

Bueno, ahorita pondré tres caps más!!!!

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Capítulo 10: La Sangre es Más Espesa Que el Agua... Si Eres Realmente Familia, Ese es el Asunto.

Segundos después, _____ estaba en el teléfono con el Oficial Darren. Ella puso la llamada en altavoz para que sus amigos pudieran escuchar.

Tu: Así es. -vociferó en el auricular- Liam nos acaba de mandar un mensaje amenazador.
Darren: ¿Estás segura que es Liam? -su voz crepitaba en el otro extremo-
Tu: Positivo.

Miró a los otros, y ellos asintieron. ¿Quién más pudo enviar esto, después de todo? Liam tenía que estar furioso con ellos. Su evidencia lo había enviado a la cárcel, y su testimonio específicamente su -y el de Nick- testimonio... en su próximo juicio lo pondría en la cárcel por el resto de su vida. Además, él había metido las manos en su bolsillo en cuanto la puerta de la limosina se cerró, como si estuviese buscando por un celular...

Darren: Estoy a un par de millas de tu casa. -replicó- Estaré allí en un segundo.

Escucharon su auto estacionarse en el camino de entrada un minuto después. Darren usaba una pesada chaqueta de plumón del Departamente de Policía de Rosewood que olía un poco a naftalina. Había un arma en su funda y su siempre-presente walkie-talkie. Cuando se quitó su gorro de lana negro, su cabello estaba enredado.

Darren: No puedo creer que el juez lo haya dejado libre. -su voz era nítida- En serio no puedo creerlo.

Él irrumpió en el hall de la entrada con una gran cantidad de energía acumulada, como un león merodeando en torno a su hábitat en el zoológico de Filadelfia.

_____ levantó una ceja. No había visto a Darren tan excitado desde el instituto, cuando el director Appleton trató de expulsarlo por tratar de robar su motocicleta clásica Ducati. Incluso en la noche que Demi murió, cuando Darren tuvo que hacerle frente a Liam en el patio trasero de _____ para asegurarse que no corriera, se mantuvo estoico e imperturbable.

Pero era reconfortante saber que estaba tan furioso como estaba.

Tu: Aquí está el mensaje. -dijo, empujando su Sidekick bajo la nariz de Darren-

Frunció el ceño y estudió la pantalla. Su wakie hizo unos pocos chillidos y pitidos, pero él no les hizo caso.

Finalmente, Darren le regresó el aparato a _____.

Darren: ¿Entonces, ustedes piensan que esto es de Liam?
Joe: Por supuesto que es de Liam. -instó-

Darren se metió las manos en los bolsillo. Se dejó caer sobre el sofá orejón tapizado de rosas de la sala.

Darren: Sé cómo se debe ver esto. -comenzó a decir cuidadosamente- Y prometo que lo investigaré. Pero quiero que ustedes chicos se entretengan con la posibilidad de que es sólo un imitador.
Troian: ¿Un imitador? -chilló-
Darren: Piensen en ello. -se inclinó hacia delante, apoyando los codos en las rodillas- Desde que su historia ha estado en las noticias, ha habido toneladas de personas mandando mensajes de amenaza, llamándose a sí mismo “A”. Y aunque hemos tratado de mantener sus números de celulares privados, la gente tiene maneras de obtener información.

Él señaló el celular de _____.

Darren: Quién sea el que lo haya escrito probablemente sincronizó con la salida de Liam haciéndolo lucir como si él lo hubiese mandado, eso es todo.
Tu: ¿Pero si realmente es Liam? -chilló. Agitó sus manos en la sala, donde el televisor todavía estaba encendido- ¿Qué pasa si él quiere asustarnos para que guardemos silencio en su juicio?

Darren le dio un silencio condescendiente, con la boca cerrada con una sonrisa.

Darren: Puedo ver por qué llegaste a esa conclusión. Pero piensa acerca de esto desde la perspectiva de Liam. Incluso si él está loco, está fuera de la cárcel ahora. Quiere mantenerse afuera. No trataría de hacer algo descaradamente estúpido como esto.

_____ corrió su mano detrás de su cuello. Se sintió cómo cuando llegó a probar una de las máquinas de entrenamiento de astronauta de la NASA en un viaje familiar al Centro Espacial Kennedy en Florida, con náuseas e insegura de cuándo iba a terminar.

Joe: Pero él mató a Miley. -dejó escapar-
Nick: ¿No puedes simplemente volverlo a arrestar hasta su juicio? -sugirió-
Darren: Chicos, la ley no funciona así. No puedo ir por allí arrestando a cualquiera que me plazca. No está en mí decidir eso.

Él miró a cada uno de ellos, notando su descontento.

Darren: Voy a echarle un vistazo a Liam personalmente, ¿bien? Vamos a tratar de localizar desde dónde llegó ese mensaje de texto. Quién sea que lo esté mandando será detenido, lo prometo. Mientras tanto, traten de no preocuparse. Alguien simplemente está jugando con sus mentes. Más que probable, es sólo un chico tonto que no tiene nada mejor que hacer. Ahora, ¿podemos tomarnos un respiro y tratar de no pensar tanto acerca de esto?

Ninguno dijo una palabra. Darren inclinó su cabeza.

Darren: ¿Por favor?

Un estridente timbre sonó de su cinturón, lo que hizo estremecerse a todos. Darren miró abajo desenganchando su celular.

Darren: Tengo que tomar esta llamada, ¿bien? Nos vemos después chicos.

Les dio un pequeño, apologético ademán con la mano, y se fue.

La puerta se cerró silenciosamente, llenando el hall de entrada con una ráfaga de estridente frío congelante. La habitación estaba silenciosa excepto por el lejano murmullo del televisor. _____ puso su Sidekick en sus manos.

Tu: Supongo que Darren podría tener razón. -dijo reservadamente, no creyendo realmente sus propias palabras- Tal vez es un imitador.
Selena: Sí. -dijo, haciendo una pausa para tragar- He recibido un par de notas de imitación.

_____ apretó los dientes. También los había recibido, pero ninguno como éste.

Troian: ¿La misma rutina, supongo? -sugirió- Si recibimos más notas, ¿nos lo decimos el uno a al otro?

Todos se encogieron de hombros en acuerdo. Pero _____ sabía cuán bien había salido ese plan antes, “A” le había enviado un montón de notas devastadoramente personales que no se habían atrevido a decir a los demás, y sus amigos no habían compartido los de ellos tampoco. Sólo que esas notas habían sido de Demi, gracias al diario de Miley, ella sabía sus más oscuros secretos, y por ello pudo zafarse, desenterrando lo más sucio de ellos a diestras y siniestras. Liam había estado en la cárcel por más de dos meses. ¿Qué podía realmente saber acerca de ellos, además de que estaban asustados?

Nada. Y Darren había prometido averiguarlo. No es que eso la hacía sentir mejor. No había nada más que hacer que acompañar a sus amigos a la puerta principal.

_____ observó mientras caminaban por la acera hacia el auto en el camino circular de entrada cuidadosamente limpiado de nieve. El mundo estaba totalmente inmóvil, aturdido por el invierno. Una parcela de carámbanos largos y afilados colgaban fuera del garaje, brillando debajo de los focos.

Algo parpadeó cerca de la línea gruesa de los árboles negros que separaban parte del patio de _____ del de Miley.

Luego escuchó un tosido, y _____ se volteó y gritó. Melissa estaba detrás de ella en el vestíbulo, sus manos en la cintura, con una expresión fantasmal en su cara.

Tu: Dios. -dijo, presionando su mano contra su pecho-
Melissa: Lo siento. -graznó. Se movió sigilosamente dentro de la sala y recorrió con sus manos la parte superior de una antigüa arpa- Eschuché lo que le dijiste a Darren. ¿Recibieron otro mensaje?

_____ levantó una ceja sospechosamente. ¿Melissa había estado rondando en la puerta, espiando?

Tu: ¿Si estabas escuchando, por qué no le dijiste a Darren que Liam te llamó desde prisión y te suplicó que no testificáramos? -demandó- Así Darren tal vez hubiese creído que Liam escribió ese mensaje. Tal vez hubiese vuelto a arrestarlo.

Melissa cogió una cuerda del arpa. Había una expresión impotente en su cara.

Melissa: ¿Viste a Liam en la TV? Lucía tan... delgado. Es como si no le hubiesen ni permitido comer mientras estaba en prisión.

La rabia y la incredulidad se precipitaron a través del cuerpo de _____. ¿Melissa realmente se sentía mal por él?

Tu: Sólo admítelo. -escupió- Piensas que estoy mintiendo acerca de ver a Liam con Miley esa noche, así como mentí acerca de la Orquídea de Oro. Y prefieres que Liam nos lastime que creer que la pudo haber matado y que merece estar de nuevo en la cárcel. Pero recuerda que yo no soy la única que lo vi. También lo vio Nick.

Melissa se encogió de hombros y cogió otra cuerda. Una nota amarga llenó la habitación.

Melissa: Por supuesto que no quiero que nadie te lastime. Pero... como te dije. ¿Qué pasa si todo es un error? ¿Qué pasa si Liam no lo hizo?
Tu: Él lo hizo. -gritó, su pecho ardía-

Interesante, pensó _____, que Melissa no admitiera si pensaba que ella estaba mintiendo o diciendo la verdad.

Melissa agitó la mano con desdén, como si tuviera ganas de discutirlo nuevamente.

Melissa: En cualquier caso, si pienso que Darren tiene razón acerca de esas notas. No es Liam. No sería tan estúpido para amenazarlos. Liam puede estar molesto, pero no es un idiota.

_____ se alejó de su hermana, frustrada, y se asomó sobre el frío y vacío patio delantero en cuanto el auto de su madre se detuvo en el camino de entrada. Momentos después, la puerta del garaje a la cocina se cerró de golpe, y los tacones de la Sra. Hastings resonaban a través del piso de la cocina. Melissa suspiró y se deslizó hacia la sala. _____ las eschucó murmurar, a continuación, el crujido de las bolsas de supermercardo.

El corazón de _____ comenzó a latir con fuerza. Tenía ganas de correr escaleras arriba, esconderse en su habitación, y tratar de no pensar acerca de Liam o cualquier cosa, pero ésta era la primera oportunidad para confrontar a su madre acerca de la voluntad de Nana.

Girando sus hombros hacia atrás, _____ tomó un profundo respiro y caminó a través del pasillo hacia la cocina. Su madre estaba reclinada sobre el contador, tirando de un recién horneado pan de romero de una bolsa de Fresh Fields. Melissa caminando rápidamente desde el garaje, con una caja de champán Moët en sus brazos.

Tu: ¿Para qué es toda esa champagne? -preguntó, arrugando la nariz-
Melissa: La recaudación de fondos, por supuesto. -le dio una mirada de no es obvio-
Tu: -Frunció el ceño- ¿Qué recaudación de fondos?

Melissa bajó la barbilla, sorprendida. Miró a su mamá, pero la Sra. Hastings continuaba desempacando organizando vegetales y pastas de trigo entero, con los labios casi apretados.

Melissa: Vamos a tener el Día de la Recaudación de Fondos de Rosewood aquí este fin de semana. -explicó-

Un pequeño chillido se escapó de la garganta de _____. ¿Una recaudación? La planificación de eventos era algo que ella y su madre siempre hacían juntas. _____ organizaba las invitaciones, ayudaba con el menú, tomaba las llamadas de RSVO, e incluso arreglaba la lista de reproducción de música clásica. Era una de las pocas cosas que _____ hacía mejor que Melissa, pocas personas eran lo suficiente TOC (trastorno obsesivo-compulsivo) para crear un expediente de cada invitado, con información como quién no comía carne de ternera y a quién no le importaba sentarse al lado de los Vil Pembrokes en la cena.

_____ volteó la cara hacia su madre, su corazón latía apresuradamente.

Tu: ¿Mamá?

La madre de _____ se dio la vuelta. Tocó su brazalete de diamante tipo tennis protectoramente, como si pensara que _____ podría tratar de robarlo.

Tu: ¿Necesitas... ayuda con la recaudación? -su voz se quebró-

La Sra. Hastings agarró los lados de un frasco de conserva de mora orgánica.

Verónica: Ya lo tengo cubierto, gracias.

Hubo un nudo frío y duro en la boca del estómago de _____. Respiró hondo.

Tu: También quería preguntarte acerca de la voluntad de Nana. ¿Por qué fui dejada afuera? ¿Es incluso legal dar dinero a algunos nietos y a otros no?

Su madre puso las conservas en un estante de la despensa y dejó escapar una risita escalofriante.

Verónica: Por supuesto que es legal _____. Nana puede hacer lo que quiera con su dinero. -puso su capa de cashimira negra en sus hombros pasando junto a _____ hacia el garaje-
Tu: Pero... -sollozó-

Su madre no se volteó. Cerró la puerta al salir. Los cascabeles colgando de la manilla de la puerta sonaron con fuerza sacando a los dos perros de su sueño.

El cuerpo de _____ se aflojó. Así que eso era. Ella era, realmente repudiada. Tal vez sus padres le dijeron a Nana acerca del debacle de la Orquídea de Oro unos pocos meses atrás. Tal vez ellos incluso alentaron a Nana a alterar su testamento, dejando deliberadamente a _____ fuera porque había desgraciado a la familia. _____ cerró los ojos, preguntándose cómo sería su vida ahora si simplemente se hubiese quedado callada y hubiese aceptado el premio de la Orquídea de Oro. Podía haber ido a Good Morning America, como los otros ganadores lo habían hecho, y aceptar las felicitaciones de todos. ¿Podía realmente haber asistido a la universidad que le había dado su temprana admisión basada en un ensayo que no había escrito, y que ni siquiera entendía?

Se se hubiese quedado callada, ¿todavía hubiese acontecido esta charla de la cual Liam iba a ser absuelto debido a la falta de pruebas confiables?

Se recostó en contra de la isla de granito y dejó salir un pequeño, patético gemido. Melissa soltó una bolsa doblada en la mesa y caminó hacia ella.

Melissa: Lo siento tanto, _____. -dijo silenciosamente. Vaciló un momento y luego envolvió sus brazos delgados alrededor de los hombros de _____. _____ estaba demasiado entumecida para resistirse- Están siendo terribles contigo.

_____ se dejó caer en una silla de la mesa de la cocina, alcanzó una servilleta del dispensador, y secó sus ojos llorosos.

Melissa: -Se sentó cerca de ella- Simplemente no lo entiendo. Es que lo pienso una y otra vez, y no sé por qué Nana te dejaría fuera de su herencia.
Tu: Me odiaba. -dijo rotundamente, su nariz estaba poniéndose irritada, con esa sensación de cerca de estornudar como siempre lo hacía cuando estaba a punto de empezar a berrear- Robé tu ensayo. Luego admití que lo robé. Soy una gran desgracia.
Melissa: No creo que tenga nada que ver con eso.

Melissa se reclinó más cerca. _____ podía oler su protector solar de Neutrogena, Melissa era tan escrupulosa, se ponía protector solar incluso cuando iba a pasar todo el día dentro.

Melissa: Algo acerca de esto es realmente sospechoso.
Tu: -Bajó la servilleta de los ojos- Sospechoso... ¿cómo?
Melissa: -Arañaba la silla más cercana- Nana dejó dinero a cada uno de sus nietos naturales.

Le dio tres golpecitos a la mesa de la cocina para enfatizar las últimas tres palabras, y luego miró inquisitivamente a _____, como si _____ tenía que deducir algo de esto. Luego Melissa vio hacia la ventana, donde su madre todavía estaba descargando las compras del auto.

Melissa: Creo que hay un montón de secretos en esta familia. -susurró- Cosas que a ti y a mí no se nos permite saber. Todo tiene que lucir perfecto por fuera, pero... -se calló-

_____ entrecerró los ojos. A pesar de que no tenía idea de lo que Melissa estaba hablando, una sensación vertiginosa de malestar comenzó a arrastrase sobre ella.

Tu: ¿Podrías simplemente escupir lo que estas tratando de decir?
Melissa: -Se echó hacia trás- Nietos naturales. -repitió- _____... quizás eres adoptada.

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Capítulo 11: Si No Puedes Derrotarla, Une Fuerzas Con Ella.

La mañana del miércoles, Selena se escondió debajo de su edredón, tratando de ahogar el sonido de las escalas que Kate cantaba en la ducha.

Selena: Está tan segura de que va a obtener el protagónico en la obra. -refunfuñó en su Blackberry- Desearía poder ver su cara cuando el director le diga que es Shakespeare, no un musical.
David: -Se rió entre dientes- ¿De verdad te amenazó cuando le dijiste que no le darías un tour por la escuela?
Selena: Básicamente. -gruñó- ¿Puedo mudarme contigo hasta que nos graduemos?
David: Desearía. -murmuró- Aunque tendríamos que compartir un cuarto.
Selena: A mí no me importaría. -ronroneó-
David: A mí tampoco.

Selena podía decir que David estaba sonriendo.

Hubo un golpe en la puerta, e Isabel metió su cabeza adentro. Antes de que se hubiera comprometido con el padre de Selena, había sido una enfermera en la sala de emergencias, y todavía vestía las batas del hospital para dormir. Agg.

Isabel: ¿Selena? -sus ojos estaban aún más caídos de lo usual- No hablar por teléfono sino has hecho tu cama, ¿recuerdas?
Selena: -Frunció el ceño- Bien. -dijo debajo de su aliento-

Segundos después de que Isabel se había arrastrado en su maleta Tumi y reemplazado las persianas hechas a la medida colonial con púrpura, cortinas aplastadas de terciopelo, se había establecido todas estas reglas: No se podrá usar Internet después de las 9 p.m. No se podrá utilizar los celulares si las tareas no están terminadas. Absolutamente no habrá chicos en la casa cuando el padre de Selena e Isabel no estén en casa. Selena básicamente estaban viviendo con un policía estatal.

Selena: Estoy siendo forzada a colgar el teléfono. -dijo en su Blackberry, lo suficientemente alto para que Isabel escuchara-
David: Está bien. Necesito empezar a moverme. El club de fotografía se reúne esta mañana.

Él hizo un sonido de un beso y colgó. Selena meneó los dedos de sus pies, todas sus preocupaciones e irritaciones derritiéndose. David era por mucho un mejor novio que Sean Ackard, y él casi arregló el hecho de que Selena era esencialmente una novia innecesaria. Entendió que tan difícil ella estaba tomando lo que Demi le había hecho, y siempre se reía disimuladamente de sus malvadas historias sobre Kate. Además, con un nuevo corte de salón y un bolso mensajero Jack Spade para reemplazar su andrajosa mochila JanSport, David no era ni la mitad de tonto de lo que había sido cuando por primera vez se hicieron amigos.

Una vez que Selena estuviera segura de que Isabel se había retirado hacia el pasillo de abajo hacia la habitación que ella y el padre de Selena compartían -doble ughh- se arrastró fuera de la cama, empujando las cubiertas al azar para que pareciera como si lo hubiera hecho. Luego se sentó en su tocador y encendió su televisión LCD. La canción del Reporte Mañanero de las Noticias de Acción sonó por los altavoces. ROSEWOOD REACCIONA ANTE LA LIBERACIÓN TEMPORAL DE LIAM HEMSWORTH destelló en letras negras grandes y cuadradas en la parte inferior de la pantalla. Selena se detuvo. Por mucho que no quisiera mirar el reporte, no podía apartar sus ojos.

Una pequeña, reportera pelirroja estaba en el local SEPTA de la estación del tren, solicitando las opiniones de los viajeros acerca del juicio.

X: Es despreciable. -dijo una delgada, majestuosa mujer mayor en un abrigo de cashimira de cuello alto- Ellos no deberían dejar a un chico fuera ni siquiera por un minuto después de lo que le hizo a esa pobre chica.

La cámara se movió hacia una chica de cabello oscuro en sus veintes. Su nombre, Alexandra Pratt, apareció debajo de su cara. Selena la reconoció. Había sido una vez la estrella en el Rosewood Day como jugadora en el campo de hockey, pero se había graduado cuando Selena estaba en sexto grado, un año por delante de Liam, Melissa Hastings, y el hermano de Miley, Jason.

Alexandra: Él es definitivamente culpable. -dijo, sin molestarse en quitarse sus lentes de sol de Valentino- Miley ocasionalmente jugaba en el campo de hockey con un grupo de nosotras los fines de semana. Liam algunas veces le hablaba a Miley después de los juegos. Nunca conocí a Miley tan bien, pero creo que él la incomodó. Me refieron a que, ella era tan joven.

Selena destapó su crema cicatrizante Mederma. Eso no era como lo recordaba. Las mejillas de Miley se ruborizaban y sus ojos se iluminaban cada vez que Liam estaba cerca. En una de sus pijamadas, cuando estaban practicando sus besos con la almohada de mono que Miley había cosido en Economía del Hogar en sexto grado, y Miley estaba practicando con Nick. _____ les había hecho confesar a cada una de las chicas qué chico querían besar en la vida real.

Liam Hemsworth, Miley había dicho bruscamente, y luego rápidamente quiso volver a besar los labios de Nick. Pero Nick incomodo por lo que ella había dicho decidio irse.

La imagen mayor de Liam estaba en la pantalla, su sonrisa tan blanca, amplia... y falsa. Selena miró hacia otro lado. Ayer, después de otra incómoda cena con su nueva familia, Selena había sacado la tarjeta de negociosos del Oficial Darren desde el fondo de su bolso. Quería preguntarle qué tan estricto iba a ser el arresto en la casa de Liam. ¿Estaría encadenado a su cama? ¿Tendría uno de esos brazaletes para el tobillo que Martha Stewart tenía que usar? Quería creer que Darren estaban en lo correcto sobre la nota de “A” -que era sólo una imitación- pero cada rato de tranquilidad ayudaría. Además, pensó que Darren le daría información de más. Él siempre había tratado de ser amigable con ella antes cuando él y su mamá salían.

Sólo es inútil, Darren había dicho. Lo siento, Selena, pero no me está permitido discutir el caso. Luego, colgó.

Selena apagó la televisión mientras las noticias de la mañana se movían a una historia acerca de un E. coli* en las lechugas que asustó a una tienda local de comestibles. Después de unas pocas capas de más del Mederma, base, y polvo, Selena decidió que su cicatriz estaba tan oculta como se iba a poner. Se roció a sí misma con el perfume de Narciso Rodríguez, enderezó su falda, tiró toda su basura en su bolso logo Fendi, y bajó las escaleras.

Kate ya estaba en la mesa del desayuno. Cuando vio a Selena, toda su cara rompió en una sonrisa deslumbrante.

Kate: ¡Oh Por Dios, Selena! -chilló- Tom trajo esta orgánica mielada de los Fresh Fields anoche. Tienes que probarla.

Selena odió cómo Kate llamó a su padre Tom, como si fuera de su edad. No era como si Selena llamara a Isabel por su primer nombre. Actualmente, evadía llamarla Isabel para cualquier cosa. Selena caminó a través de la cocina y derramó café en su taza.

Selena: Odio la mielada. -dijo remilgadamente- Sabe como a esperma.
Tom: Selena. -la regañó-

Selena no lo había notado por la cocina, terminando un pedazo de pan tostado con mantequilla. Isabel estaba junto a él, todavía en esos horribles matorrales color verde, viéndose particularmente de un falso bronceado naranja.

El Sr. Gomez se acercó a las chicas. Puso una mano en el hombro de Kate y otro en el hombro de Selena.

Tom: Me voy. Las veré está noche, chicas.
Kate: Adiós, Tom. -dijo dulcemente-

Su padre se fue, e Isabel subió fuertemente al segundo piso. Selena se quedó viendo a la página de enfrente del Investigador de Filadelfia que su padre había dejado en la mesa, pero desafortunadamente, todos los titulares eran sobre la fianza de Liam. Kate siguió comiendo su melón. Selena sólo quería levantarse e irse, pero ¿por qué debería ser ella la que se fuera? Ésta era su casa.

Kate: Selena. -dijo en una pequeña, triste voz-

Selena subió su mirada, dándole a Kate una mirada maliciosa.

Kate: Selena, lo siento. -se apresuro a decir- No puedo seguir haciendo esto. Solamente no puedo... siéntate aquí y no hables. Sé que estás enojada por está caída, acerca de lo que pasó en Le Bec-Fin. Era un desastre en ese entonces. Y de verdad lo siento.

Selena volteó la siguiente hoja del periódico. Los obituarios, bien. Pretendió estar fascinada por un artículo acerca de Ethel Norris, ochenta y cinco, coreógrafo de un grupo de danza moderna de Filadelfia. Murió ayer en su sueño.

Kate: Estoy encontrando esto difícil también. -su voz se sacudió- Extraño a mi papá. Desearía que siguiera con vida. Sin ofender a Tom, pero es que es extraño ver a mi mamá con alguien más. Y es extraño tener que estar feliz por ambos, al igual que eso. Ellos no piensan en nosotras, ¿no?

Selena estaba tan indignada, quería aventarle un melón a Kate a través de la cocina. Todo lo que salía de la boca de Kate era un guión tan preparado, era como si hubiera bajado algún perfecto discurso siente lastima por mí de Internet.

Kate: -Tomó aliento- Siento lo que te hice en Philly, pero tenía otras cosas andando ese día. Cosas que no debí haber tomado contra ti.

Hubo un pequeño tintineo mientras bajaba su tenedor.

Kate: Algo realmente aterrador me sucedió justo antes de la cena. No le había dicho a mi mamá todavía, porque estaba segura de que se iba a enojar.

Selena frunció el ceño, mirando hacia Kate por una fracción de segundo. ¿Problema?

Kate: -Empujó su plato lejos de ella- Estaba saliendo con este tipo, Connor, el verano pasado. Una noche, una de las últimas fines de semana antes de la escuela, las cosas se fueron un poco... lejos.

Su frente se arrugó, y su labio inferior comenzó a temblar.

Kate: Rompió conmigo al día siguiente. Cerca de un mes después, fui al ginecólogo, y hubo... complicaciones.
Selena: -Amplió sus ojos- ¿Estabas embarazada?
Kate: -Sacudió su cabeza rápidamente- No. Era... algo más.

Selena estaba bastando segura de que si su boca se abría más lejos, alcanzaría lo alto de la mesa. Su cerebro corrió un millón de millas en un minuto, tratando de averigüar a qué complicaciones se refería. ¿Un ETS? ¿Un tercer ovario? ¿Un chistoso pezón?

Selena: Entonces... ¿estás bien?
Kate: -Se encogió de hombros- Lo estoy ahora. Pero apestó por un tiempo. Fue realmente aterrador.
Selena: -Estrechó sus ojos- ¿Por qué me estás diciendo todo esto?
Kate: Por que quería explicarte lo que estaba pasando. -admitió. Sus ojos brillaron con lágrimas- Mira, por favor no le digas a nadie lo que te acabo de decir. Mi mamá sabe, pero Tom no.

Selena tomó un sorbo de su café. Estaba pasmada por las palabras de Kate, y además un poco relajada. Perfecto, Selena lo había estropeado. Y nunca en unos miles de millones de años pensó en ver a Kate llorar.

Selena: No diré nada. Todos tenemos nuestros problemas.

Kate dejó salir un grande, dudoso sorbo por la nariz.

Kate: Cierto. ¿Cuál es tu problema?

Selena puso abajo su taza de café con lunares, debatiéndose. Sin nada más, podría saber si Miley le había contado su secreto a Kate.

Selena: Bien. Pero es probable que ya lo sepas. La primera vez que pasó fue esa vez que Miley y yo fuimos a Annapolis.

Miró de reojo a Kate, tratando de estimar si entendió. Kate picó su tenedor en un pedazo de mielada, moviendo sus ojos inquitantemente por la habitación.

Kate: ¿Sigues haciendo eso? -preguntó quedamente-

Selena sintió una mezcla de emoción y decepción, entonces, Miley había vuelto corriendo y se lo había contado.

Selena: No realmente. -murmuró-

Hubo un silencio por un momento. Selena se quedó mirando afuera de la ventana hacia un montón de nieve en el patio de los vecinos. A pesar de que era muy temprano, los malcriados gemelos de seis años estaban afuera en la nieve, lanzando bolas de nieve hacia las ardillas. Luego Kate ladeó su cabeza con curiosidad.

Kate: Quería preguntarte. ¿Qué es lo que está pasando contigo, Naomi y Riley?
Selena: -Apretó sus dientes- ¿Por qué me lo estás preguntando? ¿No son ellas tus nuevas mejores amigas?

Kate empujó pensativamente un mechón de pelo rubio detrás de sus orejas.

Kate: Tú sabes, creo que quieren que seamos amigas. Tal vez les deberías de dar la oportunidad.
Selena: -Bufó- Lo siento, no hablo con chicas que me insultan en mi cara.

Kate se inclinó hacia delante con sus codos.

Kate: Probablemente dijeron esas cosas porque estaban celosas de ti. Si fueras agradable con ellas, apuesto a que también lo serían contigo. Y piénsalo un poco, si nos juntamos con ellas, podríamos ser imparables.
Selena: -Levantó una ceja- ¿Nosotras?
Kate: Afróntalo, Selena. -sus ojos bailaron- Tú y yo podríamos totalmente mandar en su grupo.

Selena parpadeó. Miró a la canasta colgante sobre la isla de la cocina, que sostenía un montón de ollas y panes de All-Clad que la madre de Selena había comprado hace unos años en Williams-Sonoma. La Sra. Gomez había dejado la mayoría de sus pertenencias atrás cuando se había ido a Singapur, e Isabel no había tenido ningún problema en reclamarlas como si fueran suyas.

Kate definitivamente tenía un punto. Naomi y Riley estaban inseguras para el núcleo, habían sido así desde que Miley Cyrus las había dejado por ninguna razón aparente en sexto grado y decidió ser amiga de Selena, Nick, Joe, _____, y Troian en vez de ellas. Sin duda sería bueno tener una pandilla de nuevo, especialmente uno en el que pudiera mandar.

Selena: Está bien. Estoy dentro. -decidió-
Kate: -Sonrió- Asombroso.

Levantó su vaso de jugo de naranja en un brindis. Selena lo tintineó con su taza de café. Ambas sonrieron y sorbieron. Luego Selena le echó una ojeada de vuelta al periódico, que aun seguía abierto en frente. Sus ojos fueron justo a un anuncio para unas vacaciones a Bermuda. Todos tus sueños se harán realidad, la copia del anuncio le aseguró.

Ellas tendrían los mejores.


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*E. coli: Es un virus que se encuentra en los intestinos de los animales, vive en la carne sin cocinar y en la leche y helado sin pasterizar, también en los vegetales sin lavar.

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Capítulo 12: Todo es Cuestión de Perspectiva.

Temprano en la noche del miércoles, Troian y Mike se sentaron en Rabbit Rabbit, el restaurante vegetariano favorito de la familia Bellisario. El cuarto olía a una mezcla de albahaca, orégano, y queso de soya. Una canción de Regina Spektor se reproducía ruidosamente sobre el estéreo, y el lugar estaba abarrotado de familias, parejas, y chicos de su edad. Después de la aterradora liberación de Liam y la nueva nota de “A” de ayer, se sentía bien estar rodeados por tantas personas.

Mike miró con ceño alrededor del comedor y levantó la capucha de su sudadera Champion de talla muy grande.

Mike: No entiendo por qué tenemos que conocer a este hombre de todas formas. Mamá sólo ha salido con él dos veces.

Troian realmente no entendía tampoco. Cuando Ella había regresado a casa de su cita con Xavier anoche, había delirado sobre qué tan asombrosamente la había pasado y cuán fácilmente ella y Xavier habían conectado. Aparentemente, Xavier le había dado un tour de estudio esta tarde, y hoy, cuándo había llegado a casa de la escuela, Troian había encontrado una nota de Ella en la mesa de cocina, pidiéndole que ella y Mike se asearan y la encontraran en Rabbit Rabbit a las 7 p.m. en punto. No sí, y Xavier venía. ¿Quién sabía que ambos de sus padres podría enamorarse otra vez tan fácilmente? Ellos ni siquiera estaban oficialmente divorciados.

Troian se sentía feliz por ella, claro está, pero también se sentía avergonzada de sí misma. Había estado tan segura de que Xavier estaba interesado en ella. Estaba mortificada de haber leído la situación en la galería tan equivocadamente.

Mike inhaló ruidosamente, sacando a Troian de sus pensamientos.

Mike: Huele a pis de conejo aquí dentro. -hizo un ruido nauseabundo-
Troian: -Rodó sus ojos- Simplemente estás molesto de que mamá escogió un lugar que no sirve alitas.
Mike: -Arrugó su servilleta- ¿Puedes culparme? Un hombre viril como yo no puede vivir sólo de verduras.

Troian se encogió, asqueada de que Mike se estaba refiriendo a sí mismo como viril y hombre.

Troian: Y... ¿cómo te fue en tu cita?
Mike: -Traqueó sus nudillos, hojeando el menú- Eso es algo que yo sé y no te diré, dejaré que te obsesiones.
Troian: -Arqueó la ceja- ¡Ajá! No me corregiste inmediatamente de que no fue una cita.

Mike se encogió de hombros, clavando su tenedor en el cactus del centro de mesa. Troian cogió un crayón azul anciano de la taza pequeña en la mitad de la mesa; Rabbit Rabbit colocaba crayones en cada mesa y animaba a sus clientes a dibujar en la parte trasera de sus manteles individuales. Los dibujos terminados eran colgados en las paredes del restaurante. Hoy en día, las paredes estaban todas cubiertas, así que el personal había empezado a colgar manteles individuales en el techo.

Ella pasó a través de la entrada con Xavier. El cabello recién teñido de Ella brillaba. Las mejillas de Xavier estaban adorablemente rosadas del frío. Troian trató de sonreír, pero tenía la sensación de que salió más como una mueca.

Hizo un gesto floreciente en Xavier.

Ella: Troian, ustedes dos ya se conocen. Pero Xavier, éste es mi hijo, Michelangelo.
Mike: -Lucía como si fuera a vomitar- Nadie me llama así.
Xavier: No lo contaré. -sacó su mano- Encantado de conocerte. -miró a Troian- Es bueno verte otra vez.

Troian le dio una sonrisa forzada, demasiado avergonzada para hacer contacto visual. Miraba alrededor del cuarto, buscando el último mantel individual que Miley había decorado antes de que desapareciera. Miley había venido aquí con la familia de Troian y había dibujado la caricatura de una chica y un chico sujetados de las manos, saltando hacia un arco iris. Ellos son novio y novia en secreto, Miley había anunciado a la mesa, sus ojos sobre Troian. Esto no fue mucho tiempo después de que Miley y Troian habían encontrado a Byron con Meredith... pero ahora, mirando hacia atrás, tal vez Miley había estado refiriéndose a su relación secreta con Liam... ¿o con Joe?

Xavier y Ella se encogieron de hombros sacando sus abrigos y se sentaron. Xavier miró alrededor, claramente entretenido por todos los dibujos en las paredes. Ella continuó cacareando nerviosamente, jugueteando con su cabello, sus joyas, su tenedor. Después de unos pocos segundos de silencio, Mike entrecerró sus ojos en Xavier.

Mike: ¿Qué edad tienes, de todas maneras?

Ella le disparó una mirada, pero Xavier contestó.

Xavier: Treinta y cuatro.
Mike: Sabes que nuestra mamá tiene cuarenta años, ¿cierto?
Ella: Mike. -jadeó-

Pero Troian pensó que era dulce. Nunca había visto a Mike ser el protector antes.

Xavier: Lo sé. -se rió- Me lo dijo.

Su mesera, una chica tetona con rastas y un perforado tabique, preguntó qué querían todos de beber. Troian ordenó té verde, y Xavier y Ella ordenaron copas de Cabernet. Mike intentó ordenar Cabernet también, pero la mesera simplemente frunció sus labios y se marchó dando media vuelta.

Xavier: -Miró a Mike y Troian- Así que oí que ustedes chicos vivieron en Islandia por un tiempo. He estado allí unas pocas veces.
Troian: ¿En serio? -exclamó, sorprendida-
Mike: Y déjame adivinar, lo amaste.

Interrumpió en una voz jocosa, jugueteando con el brazalete de caucho lacrosse de Rosewood Day alrededor de su muñeca.

Mike: Porque es tan cultural. Y tan prístinamente intocable. Y todos son tan educados allí.
Xavier: -Frotó su barbilla- De hecho, pensé que Islandia era extraña. ¿Quién quiere bañarse en agua que huele a huevos podridos? ¿Y qué con la obsesión del caballo miniatura? No lo entendí.

Los ojos de Mike titubearon. Él miró boquiabierto a Ella.

Mike: ¿Le dijiste que dijera eso?

Ella negó con la cabeza, luciendo un poco desanimada.

Mike: -Se volvió a Xavier, eufórico- Gracias. ¡Eso es lo que he estado tratando de decir a mi familia por años! ¡Pero noooo, todos ellos amaban los caballos! Todos pensaban que eran tan lindos. ¿Pero sabes qué pasaría si uno de esos caballos mariquitas entrara en un combate con un Clydesdale de los comerciales de Budweiser? El Clydesdale patearía su trasero. ¡No quedaría nada de ese pequeño caballo gay!
Xavier: Malditamente cierto. -asintió enfáticamente-

Mike restregó sus manos juntas, obviamente emocionado. Troian trató de esconder una sonrisa maligna. Tenía sus podrías sospechas sobre la verdadera razón de que Mike odiara los caballos islandeses. Unos pocos días después de que ellos habían llegado a Reykjavik, ella y Mike habían ido a una excursión en caballo más viejo, más gordo, más lento de Islandia para montar, al minuto de que Mike trepó en la silla de montar, su cara estaba perturbadamente pálida. Él afirmaba que tenía un calambre en la pierna y que debería quedarse atrás. Mike nunca había tenido un calambre en la pierna antes... o desde entonces, respecto a eso, pero él todavía se rehusaba a admitir que él estaba asustado.

La mesera entregó sus bebidas, y Mike y Xavier charlaron sobre todas las otras cosas que odiaban de Islandia: que uno de los manjares del país era el tiburón podrido. Cómo todos los islandeses creían que los huldufolk -duendes- vivían en rocas y acantilados. Cómo todos ellos raramente usaban sólo sus nombres, porque todos descendían de las mismas tres tribus incestuosas de Vikingos.

De vez en cuando, Ella miraba en dirección a Troian, probablemente preguntándose por qué Troian no estaba defendiendo a Islandia. Pero Troian simplemente no estaba de humor para hablar.

Al final de la cena, justo mientras terminaban un plato de las famosas galletas caseras de avena orgánica del restaurante, el iPhone de Mike timbró. Él miró la pantalla y se puso de pie.

Mike: Un momento. -masculló evasivamente, huyendo por la puerta principal-

Troian y Ella intercambiaron una mirada de complicidad. Usualmente, Mike no tenía problemas en hablar por teléfono directamente en la mesa del comedor, incluso si la conversación era sobre decir el tamaño de las bubis de una chica.

Ella: Sospechamos que Mike tiene una novia. -empezó a murmurar al oído de Xavier. Se puso de pie- Estaré de regreso en un minuto. -anunció, caminando hacia el baño de mujeres-

Troian jugueteó con la servilleta en su regazo, mirando impotentemente mientras zigzagueaba entre las mesas. Quiso seguir a su madre, pero no quería que Xavier supiera que no quería estar a solas con él.

Podía sentir los ojos de Xavier en ella. Él tomó un largo y lento sorbo de su segunda copa de vino.

Xavier: Haz estado realmente callada. -señaló-
Troian: -Se encogió de hombros- Tal vez siempre soy callada.
Xavier: Lo dudo.

Troian levantó la vista abruptamente. Xavier sonrió, pero su expresión no era particularmente fácil de leer. Él sacó un crayón verde oscuro de la taza y empezó a garabatear en su mantel individual.

Xavier: Entonces, ¿estás bien con esto? ¿Tu mamá y yo?
Troian: Ajá. -contestó rápidamente-

Troian comenzó a juguetear con la cuchara de su cappuccino después de la cena. ¿Estaba preguntando porque él sentía que a ella le gustaba? ¿O porque era la hija de Ella, y era cuestión de educación hacerlo?

Xavier regresó el crayón verde de nuevo a la taza y cavó alrededor por uno negro.

Xavier: Entonces, tu mamá dijo que era una artista también.
Troian: Supongo. -dijo lejanamente-
Xavier: ¿Quiénes son tus influencias?

Troian mordisqueó su labio, sintiéndose en aprietos.

Troian: Me gustan los surrealistas. Tú sabes, Klee, Max Ernst, Magritte, M. C. Escher.
Xavier: -Hizo una mueca- Escher.
Troian: ¿Qué hay de malo con Escher?
Xavier: -Negó con la cabeza- Cada chica en mi secundaria tenía un póster de Escher en su dormitorio, pensando que eran tan profundos. Oh, aves transformándose en peces. Wow, una mano dibujando otra. Diferentes perspectivas. Psicodélico.

Troian se reclinó en su silla, divertida.

Troian: Qué, ¿conociste a M. C. Escher personalmente? ¿Te pateó cuando eras un niñito? ¿Robó tu Rueda de la Fortuna?
Xavier: Él murió a comienzos de los años setenta, creo. -dijo, resoplando- No soy tan viejo.
Troian: Me pudiste engañar. -arqueó una ceja-
Xavier: -Sonrió burlonamente- Es sólo que... Escher es un vendido.
Troian: -Negó con la cabeza- ¡Él era genial! ¿Y cómo puede ser un vendido si estás muerto?

Xavier la miró por un momento, lentamente sonriendo.

Xavier: Está bien, entonces, Señorita Fan de Escher. ¿Qué tal una competencia? -hizo girar el crayón en sus manos- Ambos dibujamos algo dentro de este cuarto. El que dibuje mejor está en lo cierto sobre el Sr. Escher. Y el ganador obtiene esa última galleta de avena. -señaló el plato- He notado que te la comías con los ojos. ¿O no la has tomado porque estás secretamente en una dieta?
Troian: -Se mofó- Nunca he hecho dieta en mi vida.
Xavier: Eso es lo que todas las chicas dicen. -sus ojos centellearon- Pero todas mienten.
Troian: ¡Como si tú supieras algo sobre chicas! -alardeó, riéndose de su broma-

Ella se sentía como si estuviera en su vieja película favorita, Historias de Filadelfia, dónde Katharine Hepburn y Cary Grant salían con peleas constantemente.

Troian: Tomaré parte en tu pequeña competencia. -alcanzó un crayón rojo. Nunca podía resistirse de alardear sus habilidades de dibujo- Pero démosle un tiempo límite. Un minuto.
Xavier: Lo tengo. -comprobó el reloj con forma de tomate sobre la barra. El segundero estaba a las doce- Vamos.

Troian buscó alrededor del cuarto algo que dibujar. Finalmente se decidió por un hombre viejo encorvado en la barra, bebiendo de una gran taza de cerámica. Su crayón voló hábitualmente sobre el mantel individual, captando su expresión tranquila-pero-rendida. Después de llenar unos pocos detalles más, la mano en el reloj pasó rápidamente sobre las doce otra vez.

Troian: Tiempo.

Xavier cubrió su mantel individual con su mano.

Xavier: Tú primero.

Troian empujó su dibujo hacia él. Él asintió, impresionado, sus ojos oscilantes del papel hacia el anciano.

Xavier: ¿Cómo hiciste esto en tan sólo un minuto?
Troian: Años de práctica. -contestó- Solía dibujar en secreto a los chicos de mi escuela todo el tiempo. Entonces, ¿eso significa que tengo la galleta? -empujó la mano de Xavier, la cual todavía cubría su dibujo- Pobre Sr. Pintor Abstracto. ¿El tuyo es tan malo que te da vergüenza mostrarlo?
Xavier: No... -lentamente apartó sus manos de su mantel individual-

Su dibujo, todas las líneas suaves y el sombrado hábil, eran de una chica bonita, de pelo rubio. Tenía grandes pendientes de aro, como los de Troian. Y eso no era el único parecido.

Troian: Oh. -tragó saliva-

Xavier incluso había capturado el pequeño lunar en su mejilla y las pecas a través de su nariz. Era como si la hubiese estado estudiando toda la cena, esperando este momento.

El olor ácido de tahini flotando desde la cocina, haciendo que el estómago de Troian se agitara. Tomado de una manera, el dibujo de Xavier era dulce, el novio de su mamá trataba de liarse con ella. Pero tomado de otra... era un poco incorrecto.

Xavier: ¿No te gusta? -preguntó, sonando sorprendido-

Troian estaba abriendo su boca para responder cuando oyó el sonido de una campanilla en el interior de su bolso.

Troian: Um, dame un segundo. -masculló-

Sacó su Treo del bolsillo de su bolso: Dos nuevos mensajes de imagen. Troian ahuecó sus manos alrededor de la pequeña ventana del teléfono para reducir el resplandor.

Xavier todavía la estaba observando cuidadosamente, así que Troian luchó por no jadear. Alguien le había enviado una foto de Troian y Xavier en la exhibición de arte el domingo. Ellos estaban reclinados muy cerca, los labios de Xavier casi rozaban la oreja de Troian. La siguiente foto se abrió inmediatamente después, éste era de Troian y Xavier en esta misma mesa en Rabbit Rabbit. Xavier estaba cubriendo su dibujo con sus manos, y Troian se inclinaba a través de la mesa, empujándolo en broma, tratando de conseguir que se lo mostrara. La cámara había logrado capturar una fracción de segundo donde parecía como si estuvieran tomándose de las manos felizmente. Ambas fotos pintaban un cuadro bastante convincente.

Y la segunda había sido tomada hace unos segundos. Con el corazón en su garganta, miró con furia alrededor del restaurante. Allí estaba Mike, todavía charlando animadamente afuera. Su mamá acababa de salir del cuarto de baño. El hombre que ella había dibujado estaba en mitad de un ataque de tos.

Su teléfono timbró una última vez. Con manos temblorosas, Troian abrió su nuevo mensaje. Era un poema.


El teléfono celular se resbaló de los dedos de Troian. Se puso de pie abruptamente, prácticamente volteando su vaso de agua.

Troian: Me tengo que ir. -soltó, cogiendo el dibujo de Xavier de la mesa y metiéndolo en su bolso.
Xavier: ¿Qué? ¿Por qué? -parecía confundido-
Troian: Simplemente... porque...

Deslizó su apretada chaqueta alrededor de ella, y apuntó la galleta encima del plato con foma de mazorza de maíz.

Troian: Es tuya. Buen trabajo.

Entonces se dio la vuelta rápidamente, casi chocando con una mesera que llevaba una gran bandeja de tofu ligeramente frito. Copión de “A” o no, las fotos probaban una cosa: Mientras más lejos estuviera de su mamá y su nueva relación, mejor.


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*Ménages á trois: Es un término francés que originalmente describía un acuerdo doméstico en el que tres personas que tiene relaciones sexuales habitan el mismo hogar. La frase se traduce literalmente como “hogar de tres”. En la actualidad el término se lo asocia con un trío sexual.
*Ferme la bouche: Significa cierra la boca en francés.

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Ahí están los caps!!! Comenten!!!!!

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Nueva Lectora aquí!
*o* leí toda la 1 temporada y me gusto mucho que bueno que sigas con la 2 
por ti vi pretty little liars y me hice fan de la serie esta genial ya quiero que salga la 4 temporada 
bueno no me salgo del tema hehe  esta buenísima tu nove síguela síguela!!! 



SI PUEDES PASAR POR MI NOVE ESPERO QUE TE GUSTE ES NUEVA 

-*CASADA CON EL HOMBRE EQUIVOCADO-*
https://jbvenezuela.activoforo.com/t11535-casada-con-el-hombre-equivocado

drixy_doemita_jonas escribió:

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Ah Bienvenida

Me alegra que te guste!!!
En internet ya está el primer capitulo de la cuarta temporada de PLL, yo ya la vi!!

Más tarde subo dos caps

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Ahorita subo dos caps!!!!!!

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Capítulo 13: Extraña Química en Chemistry Hill.

 
En el mismo momento que el miércoles, justo mientras la luna se elevaba sobre los árboles y los proyectores encendieron el gran estacionamiento de Hollis, Joe estaba en la parte superior de Chemistry Hill, con un trineo de nieve en forma de anillo en su mano engüantada.
 
Joe: ¿Segura que quieres una carrera conmigo? -se burló de Maya, que tenía su propio trineo- Soy el más rápido en todos los trineos de Rosewood. 
Maya: ¿Quién lo dice? -sus ojos brillaron- Nunca me has visto en una carrera antes.
 
Joe tomó el trineo de nieve de color verde oscuro.
 
Joe: El primero que llegue a la parte inferior del gran árbol gana. Preparado... listo... 
Maya: ¡Ya! -lo adelantó, saltando en su tubo de nieve y zumbando por la colina-
Joe: ¡Hey! -gritó, dejándose caer sobre su vientre en trineo-
 
Se inclinó de rodillas, recogiendo sus botas para que no se arrastraran en el suelo, y ladeó su tubo hacia la parte más empinada de la montaña. Por desgracia, Maya llevó el suyo en esa dirección también. Joe se acercó a él a toda velocidad, y colisionó en medio de la montaña, rodeando fuera de sus trineos en la nieve blanda.
 
El tubo de Maya siguió cuesta abajo sin él, en dirección recta hacia el bosque.
 
Maya: ¡Hey! -exclamó, señalando el tubo, ya que deriva más allá del árbol que había designado como la línea de mata- Técnicamente, ¡he ganado!
Joe: Hiciste trampa. -se quejó de buen humor- Mi hermano comienza antes que yo también. Eso me vuelve loco.
Maya: ¿Significa eso que yo te vuelvo loco, también? -sonrió con picardía-
 
Joe se quedó mirando a sus guantes de nieves rojos.
 
Joe: No lo sé. -dijo con voz tranquila- Tal vez.
 
El color comenzó a subir a sus mejillas ya rosadas. En el momento en que Joe se había retirado en el estacionamiento del edificio de química y vio de pie a Maya junto a un camión con dos trineos en sus manos, su corazón había comenzado a golpear salvajemente. Maya parecía aún más linda vestida para jugar en la nieve que en su camiseta y pantalón al estilo emo-rock. Su sombrero de la lana azul marino estaba debajo de su frente, aplastando el pelo por encima de sus oídos y haciendo que sus ojos parecieran más verdes. Sus dos guantes tenían tejidos renos en las palmas. Ella había admitido que su madre le hacia un par nuevo cada año. Y había algo acerca de cómo su bufanda estaba colocada dos veces alrededor de su cuello, cubriendo cada centímetro de la piel, que le hacía parecer a un peluche y vulnerable, al mismo tiempo.
 
Joe quería pensar en algo asombroso, que los ágiles sentimientos en su interior no eran más que entusiasmo por hacer una nueva amiga... o tal vez los efectos secundarios de la hipotermia aguda, ya que en el termómetro dentro del Volvo de su madre decía que había diecinueve grados. Pero en realidad, no tenía idea de lo que estaba pasando con sus emociones.
 
Joe: No he estado aquí en años. -rompió el silencio, contemplando la edificación de química hecha en ladrillos al pie de la colina- Mi hermano y mi padre encontraron este lugar.
Maya: Tienes suerte de tener un hermano. -admitió- Soy hija única.
Joe: Yo solía desear ser hijo único. -gimió- Mi hermano es un año menor que yo, y aunque mis padres siempre dicían que jamás tuvieron un favorito, yo no sentía eso. Aparte que él tuvo que utilizar mi ropa, eso no me gustaba.
 
Maya se apoyó en un codo, frente a él.
 
Maya: No, siendo hija única, uno se siento solo. -lo interrumpió- Cuando yo era pequeña, mi familia vivía en un barrio donde no había muchos otros niños cerca, así que tuve que entretenerme yo misma. Yo solía ir en estos paseos sola, fingiendo que era una exploradora. Me narraba lo que hacia a mí misma. Ahora la Gran Maya forja una poderosa corriente. Ahora la Gran Maya descubre una montaña. Estoy segura de que todo aquel que me escuchó pensó que estaba loca.
 
Joe se rió, resultaba increíblemente linda.
 
Joe: La Gran Maya, ¿eh? -sonrió- Bueno, los hermanos pueden ser sobrevalorados. Felizmente mi hermano y yo nos comenzamos a llevar bien. Y ahora somos los mejores amigos.
Maya: Eso es bueno.
 
La nieve estaba empezando a filtrarse a través de los pantalones de Joe y a su larga ropa interior hacia su piel. Maya se levantó y advirtió que sería mejor bajar y rescatar su trineo de nieve del bosque antes de que se hiciera demasiado oscuro. Joe vio maltratado el objeto abajo de la colina.
 
Entonces, sus ojos se trasladaron al estacionamiento vacío del edificio de química. Un auto estaba haciendo un amplio círculo en torno a los espacios del estacionamiento, llegando a una parada como centro de atención en la parte inferior de Hollis Hill, no tan lejos de donde Maya y él se había estrellado. Rosewood PD estaba impreso al lado del auto. Joe miró, reconociendo el familiar conductor de cabello castaño. Era el Oficial Darren Wilden.
 
La frente de Darren aumentó en preocupación, y él estaba ladrando algo en su teléfono. Joe vio por un momento. Antes, cuando era más joven, él y Nick prendían el televisor de su habitación para ver películas de terror tarde en la noche a un volumen muy bajo. La lectura de labios de Joe estaba oxidada, pero estaba bastante seguro de que había capturado a Darren decir a quien estaba al otro lado del teléfono, sólo mantente alejado.
 
El corazón de Joe golpeó en su pecho. ¿Sólo que se mantenga alejado? En ese mismo momento, Darren se dio cuenta de que Joe estaba en la colina. Él abrió los ojos. Después de un segundo, le dio una inclinación de cabeza y luego miró hacia abajo bruscamente.
 
Joe se movió incómodo, preguntándose si Darren había venido aquí para obtener un poco de privacidad para hacer frente a algo personal. Era una tontería pensar que toda su vida giraba en torno al caso de Miley.
 
Cuando su teléfono, que estaba metido en un bolsillo pequeño con cremallera de su anork, comenzó a sonar, Joe dejó escapar un grito. Lo sacó de su bolsillo, su cuerpo electrizaba. El nombre de Troian aparecía en el identificador de llamadas.
 
Joe: Oye. -suspiró, aliviado- ¿Qué pasa?
Troian: ¿Has recibido algún mensaje extraño? -exigió-
 
Mientras Joe cambiaba su peso, la nieve bajo sus pies crujía. Vio a Maya desaparecer en la espesura bosque de pinos, en busca de su trineo de nieve.
 
Joe: No...
Troian: Bueno, yo sí. Ahora mismo. Sea quién sea tomó una foto mía, Joe. Esta noche. La persona que escribe estas notas sabe dónde estamos y lo que estamos haciendo.
 
Una ráfaga de viento apuñaló el rostro de Joe.
 
Joe: ¿Estás segura?
Troian: Llamé a Darren en la estación de hace veinte minutos. -continuó- Pero él dijo que iba a una importante reunión allí y no podía hablar.
Joe: Espera. -se frotó la mandíbula adormecida, confundido- Darren no está en la estación. Lo acabo de ver hace un segundo.
 
Miró hacia abajo la colina. El lugar en donde estaba el auto de Darren ahora se encontraba vacio. Un nudo se apretó en su vientre. Darren debe haberle dicho a Troian que estaría dando vueltas, no yendo a una reunión. Probablemente había escuchado mal.
 
Troian: ¿Dónde estás de todos modos?
 
Maya salió del bosque con su trineo. Ella lo miró y lo saludó. Joe tragó saliva, su corazón latía con fuerza.
 
Joe: Me tengo que ir. -dijo bruscamente- Te llamo después.
Troian: ¡Espera! -parecía preocupada- Pero yo no...
 
Joe cerró su teléfono, despidiéndose de Troian. Maya levantó su trineo de nieve sobre su cabeza, triunfante.
 
Maya: ¡La Gran Maya tuvo que luchar para recuperarla con un oso! -gritó-
 
Joe se obligó a reír, tratando de establecerse. Tenía que haber una explicación lógica para el texto de Troian. No podía ser nada grave.
 
Maya se dejó caer en su trineo y lo examinó cuidadosamente.
 
Maya: Así que nunca hemos decidido cual será mi premio por ganar la carrera cuesta abajo.
 
Joe: -Inhalaba, dejándose relajar en el momento- ¿Qué tal el título de la más grande tramposa del mundo? O ¿una bola de nieve, justo en la cara?
Maya: ¿O qué tal esto?
 
Antes de que lo supiera, Maya estaba apoyada en Joe, besándolo suavemente en los labios. Cuando se alejó, Joe se llevó las manos a la boca. Probó los Tic Tac que Maya había estado chupando, y sus labios se estremecieron, como si acabaran de ser picados.
 
Maya: -Abrió los ojos, registró la expresión de Joe- ¿Eso estuvo... apropiado?
Joe: -Sonrió adorablemente- Sí. -dijo lentamente-
 
Y tan pronto como las palabras salieron de sus labios, sabía que estaba bien.
 
Maya sonrió mientras tomaba su mano engüantada en la suya. La cabeza de Joe giraba como si hubiera estado sólo de unos cuantas rondas de un paseo del carnaval inclinándose en un torbellino.
 
De repente, su teléfono sonó de nuevo.
 
Joe: Lo siento. Mi amiga acaba de llamar. -explicó, alcanzándola- Probablemente es ella, de nuevo.
 
Se volvió un poco lejos y miró a la pantalla: Un nuevo mensaje de texto.
A Joe le subió el corazón a la garganta. Miró alrededor de la colina inmensa y oscura, pero él y Maya eran los únicos allí. Poco a poco, abrió el texto.
 
¡Hola, Joe! ¿No dice la Biblia que las buenas chicas cristianas no deben besar a traidores como tú? Así que, ¿Qué haría "A"? No voy a confesar tus pecados si no confiesas los míos. XX, A.
 
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Capítulo 14: ¡Viva la Selena!

 
Un poco después ese miércoles por la noche, Selena revoloteaba en la entrada del Rive Gauche, la tienda bistro del Rey James francés, apretando los puños y liberándolos. Serge Grains cantaba rítmicamente fuera de los altavoces cuidadosamente escondidos, y el aire olía como a bistec con papas fritas, queso de cabra fundido, y Dior J'Adore. Si Selena cerraba sus ojos, casi podía imaginar que era el último invierno y Demi estaba a su lado. Nada había ido mal aún, el cuerpo de Miley no se había encontrado en ese horrible agujero, no había una llamativa cicatriz en su barbilla, ningún horripilante Liam en libertad bajo fianza temporal, sin nuevas notas falsas de "A". Selena y Demi seguían siendo mejores amigas por siempre, mirando sus reflejos en los antigüos espejos colgados sobre los puestos y comiéndose con los ojos las nuevas copias de Elle y Us Weekly.

Ella había venido al Rive Gauche desde Demi, por supuesto, David trabajaba aquí los fines de semana, y él siempre le deslizaba gratis a Selena Coca-Cola de dieta con un mínimo toque de ron. Pero no era David quien estaba parado junto a ella esta noche tampoco. Era... Kate.
 
Kate se veía bien, fabulosa, incluso. Su cabello rubio estaba sujeto por una cinta de seda negra. Usaba un vestido top de listón color carmesí con un par de botas café oscuro de Loeffler Randall. Selena estaba utilizando sus favoritas zapatillas negras de charol de Marc Jacobs, un casimir fucsia con estilo de cuello colgando, vaqueros entubados, su lápiz labial favorito ultra rojo de Nars. Juntas, se veían miles de veces mejor que Naomi y Riley, que estaban acurrucadas como feos gnomos de jardín en la correspondiente mesa de Selena.
 
Selena las fulminó con la mirada. El cabello súper corto de Naomi y su cuello achaparrado le hacían verse como una tortuga. La nariz de rata de Riley tembló mientras se limpiaba sus labios inexistentes con una servilleta.
 
Kate le echó una ojeada a Selena, registrando que estaba pasando.
 
Kate: Ellas ya no son tus enemigas, ¿recuerdas?
 
Selena dejó escapar un suspiro. En teoría, dio marcha atrás en el plan de Kate si no puedes vencerlas, únetelas. Pero en realidad...
 
Kate enfrentó a Selena. Era tres pulgadas más alta que Selena, por eso tuvo que mirar abajo hacia ella cuando habló.
 
Kate: Las necesitamos como amigas. -dijo calmadamente- Fuerza en números.
Selena: Es sólo que...
Kate: ¿Ni siquiera sabes por qué las odias? -dijo abruptamente-
 
Selena se encogió de hombros. Las odiaba porque eran perras... y porque Miley las había odiado. Sólo que, Miley nunca había explicado la odiosa cosa que Naomi y Riley habían hecho, que le hizo dejarlas fríamente. Y no era como si Selena pudiera preguntarle a Naomi y Riley que es lo que habían hecho. Miley le hizo a Selena y los demás prometer nunca hablarles a Naomi y Riley, nunca.
 
Kate: Vamos. -puso sus manos en sus labios- Hagámoslo.
 
Selena gimió, contemplando con el ceño fruncido a su próxima hermanastra. Había una leve indicación de una mancha en esquina del labio de Kate. Selena no estaba segura si era sólo un grano... o algo más. Había estado obsesiva sobre el misterioso secreto que Kate había aludido ayer en el desayuno, que durmió con un chico, pero había dejado un problema. El herpes era claramente un problema, ¿no? ¿Y el herpes no dejaba herpes labial?
 
Selena: Bien, vamos. -gruñó-
 
Kate sonrió, agarró su mano otra vez, y procedió hacia la mesa de Naomi y Riley. Las chicas lo notaron, saludando hacia Kate pero mirando a Selena sospechosamente. Kate marchó hasta el banquete y se dejó caer en el rojo asiento de peluche.
 
Kate: ¡Como están chicas! -chilló mandando besos en el aire-
 
Naomi y Riley adularon sobre Kate por unos pocos momentos, admirando su vestido, brazalete, y sus botas, empujando sus papas fritas sin comer hacia su dirección. Luego Naomi hecho un vistazo hacia Selena, quien se había quedado parada por el carrito de postres.
 
Naomi: ¿Qué está haciendo ella aquí? -dijo en una baja voz-
 
Kate empujó una papa frita en su boca. Ella lo estaba, Selena había observado, el tipo de chica que podía agrandar cualquier cosa y no obtener una onza de ello. Perra.
 
Kate: Selena está aquí porque tiene algo que decirles chicas. -anunció-
Riley: -Levantó una ceja- ¿En verdad? 
Kate: -Asintió, plegando sus manos- Quiere disculparse por todas las crueles cosas que les ha hecho por años.
 
¿Qué? Selena estaba muy entumecida como para hablar. Kate había dicho que deberían ser amables, no que se los vendería. ¿Por qué debería disculparse con Naomi y Riley? Ellas habían hecho tanto como Selena por los años así como Selena les había hecho a ellas.
 
Kate: Quiere empezar de nuevo con ustedes, chicas. -continuó- Me dijo que ni siquiera sabía por qué estaban peleando en primer lugar.
 
Selena disparó una mirada hacia Kate que pudo haber congelado lava fundida. Pero Kate ni se inmutó. Confía en mí, decía su expresión. Esto funcionará.
 
Selena se enfrentó directamente, recorriendo su mano a través de su cabello.
 
Selena: Bien. -murmuró, bajando sus ojos- Lo siento.
Kate: ¡Bien! -alardeó. Enfrentó a las otras alentadoramente- ¿Entonces, tregua?
 
Naomi y Riley se miraron la una a la otra, luego sonrieron.
 
Naomi: ¡Tregua! -exclamó en voz alta, haciendo que la gente que cenaba en la mesa continua miraran hacia ellas con molestia- Demi nos arruinó, también. Ella actuó toda como una mejor amiga y luego nos abandono después de tu accidente de auto. ¡Sin ninguna razón!
Riley: Bueno, ahora sabemos la razón. -corrigió, levantando su dedo- Quería abandonarnos para conseguir volver a tu lado bueno entonces, como, nadie sospecharía que te atropello con su auto.
Naomi: Dios. -presionó su palma contra su pecho- Que malvada.
 
Selena hizo una mueca de dolor. ¿De verdad necesitaban meterse en eso ahora mismo?
 
Naomi: De todos modos, nos sentimos tan horribles por lo que tuviste que pasar Selena. -sonrió afectadamente- Y también sentimos nuestra pelea. Así que tregua, ¡Definitivamente!
 
Salto hacia arriba y abajo emocionadamente.
 
Kate: ¡Genial! -gritó. Le dio un suave codazo a Selena, y Selena también logró sonreír-
Naomi: ¡Entonces siéntate, Selena!
 
Selena se sentó cuidadosamente, sintiéndose como un Chihuahua que había caminado hacia el patio de un Rottweiler iracundo. Esto parecía demasiado fácil.
 
Riley: Justo estábamos viendo la nueva Teen Vogue. -anunció, arrojándoles una manoseada revista hacia ellas- Hay ese beneficio este fin de semana, después de todo. Tenemos que vencer a todas esas perras feas con los mejores vestidos.
 
Selena enarcó una ceja sospechosa, notando la fecha en la portada de la Teen Vogue.
 
Selena: Pensé que esta edición no salía hasta otras pocas semanas.
 
Riley bebió un trago de su jugo de agua con soda y arándanos.
 
Riley: Mi prima trabaja ahí. Esto sólo es una maqueta, pero la edición ya está lista. Ella me manda ediciones tempranas todo el tiempo. Algunas veces incluso me manda muestras locales, invitaciones a descuentos, cosas a las que el público nunca es invitado.
Kate: -Sus ojos azules estaban como platos- Increíble.
 
Riley miró a través de algunas páginas de la revista y señaló un coqueto vestido de coctel negro.
 
Riley: Oh Dios mío, esto luciría tan hermoso en ti, Selena.
Selena: ¿Quién hizo eso? -se inclinó hacia delante curiosamente-
Naomi: Y esto luciría asombroso con tus ojos, Kate. -señaló un vestido color azul huevo de petirrojo* de BCBG- Prada hizo estos hermosos zapatos de satín exactamente en el mismo color. ¿Ya fuiste a la tienda de Prada? Está justo ahí. -la señaló-
 
Kate sacudió su cabeza. Naomi cubrió su boca con su mano, en una mueca horrorizada.
 
Kate se rió tontamente y luego miró abajo en la revista de nuevo.
 
Kate: Apuesto a que se supone que debemos tener una cita para ese benéfico, ¿verdad? -dijo, tocando las páginas brillantes- Ni siquiera conozco a ninguno de los chicos de aquí.
Naomi: No tienes nada de qué preocuparte. -rodó sus ojos- Cada chico en la escuela ha estado hablando acerca de ti.
Riley: -Giró la página- Y Selena, ya tienes una cita.
 
Selena se tensó inmediatamente. ¿Sería por el sarcasmo que detectó en la voz de Riley? ¿Y por con esa fea sonrisa en la cara de Naomi? De repente, sintió... que iban a hacer un comentario sarcástico sobre David.
 
Sobre su obsesión después de clase con el club, quizás, o sobre el extraño chaleco con el cual él tenía que trasladar las tablas en autobús a Rive Gauche, o que él no era un jugador del lacrosse. Había incluso un ridículo, y muy falso, rumor que Miley había sembrado hace años de que David era un hermafrodita.
 
Selena apretó los puños, esperando. Había sabido que esto de perdonar y olvidar, era demasiado bueno para ser verdad.
 
Pero Naomi simplemente le dio una beatica sonrisa a Selena. Riley chasqueó su lengua.
 
Naomi: Perra afortunada.
 
Una camarera del tipo delgada depositó un cuadernillo de cuero con la cuenta en la esquina de la mesa. A través de la sala, una pareja joven de unos veinte años estaban sentados bajo el viejo cartel francés favorito de Selena, un diablo verde bailando con una botella de absenta. Selena atisbó a Naomi y Riley, las chicas que había sido sus enemigas durante tanto tiempo que pudiera recordar. Las cosas de las que ella y Demi se burlaban de repente, no parecen tan válidas ya. El amor de Riley por los legging era realmente adelantarse a la moda, había empezado a llevarlos antes de que Rachel Zoe los hubiera escogido para Lindsay Lohan. Y el nuevo corte de pelo de Naomi hacía su look elegante, y definitivamente consiguió crédito para probar algo tan atrevido.
 
Se quedó mirando la revista, sintiéndose de pronto magnánima.
 
Selena: Riley, te verías genial en este Foley y Corrina. -dijo, señalando a un vestido verde esmeralda-
Riley: ¡Yo estaba pensando lo mismo! -estuvo de acuerdo, chocando con Selena los cinco. Entonces, puso una mirada astuta en su cara- ¿Sabes, si el centro comercial seguirá abierto durante otra hora? ¿Quieren ir a Saks?
 
Los ojos de Naomi se iluminaron. Miró a Selena y Kate.
 
Naomi: ¿Qué dicen, chicas?
 
Selena se sentía de repente como si alguien la hubiera envuelto en un echarpe de cachemira grande, cómodo. Aquí estaba en Rive Gauche con un grupo de chicas, preparándose para asaltar todas sus tiendas favoritas. Hizo todo lo preocupada que había estado sólo unos minutos antes se escurriese lejos. ¿Quién tenía tiempo para estar amargada o asustada cuándo allí estaba yendo de compras con sus nuevas mejores amigas? Selena pensaba en el sueño que había tenido cuando estuvo en el hospital después del accidente, donde Miley se inclinó sobre la cama del hospital de Selena y le dijo que todo iba a estar bien.
 
Tal vez en el sueño, Miley se había referido a este momento.
 
Cuando se agachó para recoger su bolso para seguir a las demás, notó que su BlackBerry parpadeaba con un nuevo mensaje. Selena levantó la vista. Kate estaba encogiéndose de hombros para ponerse la chaqueta con su escudo princesa cosido, Naomi estaba firmando la factura, y Riley regresaba de aplicar su brillo de labios. Los camareros se arremolinaron alrededor del Rive Gauche, para tomar pedidos y llevando los platos. Se echó el pelo detrás de sus hombros y abrió el mensaje.
 
Querida Pequeña, Piggy,

Aquellos que no recuerdan el pasado están condenados a repetirlo. ¿Recuerdas tu desafortunado "accidente"?

Dile a alguien la más mínima cosa sobre "moi", y esta vez me aseguraré de que te despiertes. Pero sólo para demostrar que estoy dispuesta a jugar bonito, aquí está una sugerencia: Alguien de tu vida no es lo que parece. ¡Te amo! -A



Kate: ¿Selena?
 
Selena cubrió rápido la pantalla de su Blackberry. Kate estaba a unos pasos de distancia, esperando en la barra de mármol del bar.
 
Kate: ¿Está todo bien?
 
Selena respiró hondo, y lentamente, las manchas en frente de sus ojos retrocedieron. Dejó que su teléfono volviera a sumergirse en su bolso. Lo que sea. La imitación de "A" podía haber oído hablar de Pequeña Piggy y de algunas cosas de su accidente. Estaba de vuelta en la parte superior donde pertenecía, y no iba a permitir que algún estúpido tipo se metiera con ella.
 
Selena: Todo está perfecto. -gorjeó, cerrando la cremallera de su bolso-
 
Después cruzó el restaurante y se unió a las demás.
 
　
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*Azul huevo de petirrojo: El petirrojo es un ave, que se caracteriza por tener pelaje rojo en el área del pico. Sus huevos, sin embargo, son de un muy bonito tono de azul, bastante claro.

 
 
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siguela me gusta mucho la nove!!!
tienes que seguirla 


-*CASADA CON EL HOMBRE EQUIVOCADO-*
https://jbvenezuela.activoforo.com/t11535p45-casada-con-el-hombre-equivocado#500807

Voy a subir un cap porque soy buena xD

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Capítulo 15: Ni Siquiera las Bibliotecas Son Seguras.

_____ miraba inexpresivamente mientras el vapor de su jarra de café de acero inoxidable se evaporaba en el aire. Nick Jonas se sentó frente a ella, volteando una página de su abultado libro de AP de Economía. Él golpeteó una gráfica resaltada.

Nick: De acuerdo, esto habla sobre cómo la Reserva Federal controla la oferta monetaria. -explicó- Cómo, si el Fed se preocupara de que la economía se esté volviendo en una recesión, decrecen sus requisitos de reservas y sus tasas de interés por el dinero prestado. ¿Recuerdas cuándo hablamos de esto en clases?
Tu: Ajá. -masculló vagamente-

Lo único que sabía sobre la Reserva Federal era que cuando aminoraban las tasas de interés, sus padres se entusiasmaban mucho porque eso quería decir que sus acciones subirían y su madre podría redecorar la sala, otra vez. Pero _____ no recordaba haber hablado de eso en clase en absoluto. Sintió el mismo sentimiento frustrante, indefenso, sobre el AP de Economía como el que tenía sobre su sueño recurrente de estar atrapada en un cuarto subterráneo que lentamente se llebana de agua. Cada vez que trataba de marcar 911, los números en el teléfono se movían alrededor de ella. Y luego los botones se volvían osos de goma y el agua se levantaba sobre su boca y su nariz.

Eran pasadas las 8 P.M. de la noche del miércoles, y _____ y Nick estaban sentados en uno de los cuartos de estudios privados, revestidos de libros, de la Biblioteca Pública de Rosewood, repasando la última unidad de Economía. Porque había plagiado un trabajo de Economía, Rosewood Day le había promulgado que si no obtenía una A este semestre, sería removida de la clase permanentemente. Sus padres ciertamente no iban a gastar el dinero en un tutor, y todavía no habían reabierto las cuentas de la tarjeta de crédito de _____, así que _____ había sufrido una crisis nerviosa y había llamado a Nick, quien tenía la calificación más alta de la clase. Extrañamente, Nick había estado encantado de reunirse con ella, incluso aunque tenían toneladas de tareas de los AP de inglés, cálculo y química, esa noche.

Nick: Y luego está la ecuación de cambio monetario de aquí. -dijo, golpeando el libro otra vez- ¿Recuerdas esto? Hagamos algunos problemas del capítulo usándola.

Un rulo del cabello castaño de Nick cayó por su frente mientras él alcanzaba su calculadora. Ella detectó el olor castaño del Facial Fuel de Kiehl, su olor favorito de jabón para chicos. Nick lo usaba desde que _____ le dijo que era su favorito.

Nick: ¿Tierra llamando a _____? -ondeó su mano delante de su cara- ¿Hola?
Tu: -Parpadeó- Lo siento. -balbuceó-
Nick: -Dobló sus manos sobre el libro- ¿Has oído algo de lo que te he dicho?
Tu: Claro. -le aseguró-

Aun cuando trataba de recordar, su cerebro evocaba otras cosas en lugar de eso. Como la nota de "A" que habían recibido después de que Liam fuese puesto en libertad bajo fianza. O los reportajes sobre el próximo juicio de Liam, el viernes. ¿Cómo es que Nick no está preocupado por esas cosas?

Aparte de que su madre estaba planeando un evento para recaudar fondos sin ella. O, el argumento decisivo, de que _____ realmente no podía haber sido la heredera nacida Hastings.

Melissa no tenía mucho para respaldar la teoría que había soltado la noche del martes. Su única prueba de que _____ era posiblemente adoptada era que su primo Smith le había hecho bromas sobre eso una vez cuando eran pequeños. Genevieve rápidamente lo había castigado y lo había enviado a su cuarto. Y, volviendo a pensar, Melissa no podía recordar a su madre realmente estando embarazada con _____ por nueve meses, tampoco.

No era mucho, pero mientras más pensaba _____ en ello, más sentía como si un pedazo importante del rompecabezas se ajustaba en el lugar. Excepto por su cabello similarmente de un color marrón claro, ella y Melissa no se parecían en nada. Y _____ siempre se preguntó por qué su mamá había actuado tan idiotamente cuando encontraba a _____, Miley, y los otros jugando Todos Somos Hermanos en Secreto en sexto grado. Habían inventado esta fantasía de que su madre biológica era realmente mundana, rica, y conectada, pero había perdido a sus seis hijos en el aeropuerto de Kuala Lumpur (principalmente porque les gustaba la palabra Kuala Lumpur) porque era esquizofrénica (principalmente porque les gustaba la palabra esquizofrénica). Usualmente la Sra. Hastings pretendía que _____ y sus amigos no existían. Pero cuando escuchaba lo que estaban haciendo, rápidamente se interponía, diciendo que no era divertido estar bromeando sobre enfermedades mentales o madres abandonando a sus hijos. Pero, ¿hola? Era un juego.

Explicaba un montón de otras cosas, también. Como por qué sus padres siempre preferían a Melissa sobre _____. Por qué estaban siempre tan decepcionados de ella. Tal vez no era decepción del todo, tal vez estaban desanimándola porque no era realmente una Hastings. Pero, ¿por qué no lo habían admitido hace años? La adopción no era escandalosa. Kristen Cullen era adoptada; su madre biológica era de Sudáfrica. En el primer mostrar-y-contar de cada año de la escuela primaria, Kristen traía fotos de su viaje de verano a Ciudad Del Cabo, su lugar de nacimiento, y todas las chicas en la clase de _____ hicieron un ooh con celos. _____ solía desear haber sido adoptada también. Parecía tan exótico.

_____ se quedó mirando por la ventana de la portilla del cuarto de estudio en el enorme móvil azul de arte moderno colgado del techo de la biblioteca.

Tu: Lo siento. -admitió para Nick- Estoy un poco estresada.
Nick: -Arrugó su frente- ¿Por "A"? Yo también estoy igual. Pero trató de no pensar mucho en eso.

_____ empezó a tapar sus resaltadores multicolores y a colocarlos de regreso en su funda plástica, procurando asegurarse de que todos los rotuladores estuvieran vueltos de la misma manera exacta. Justo mientras deslizaba la pluma azul brillante en su lugar, todo dentro de ella comenzó a burbujear, como si fuese un volcán de la feria de ciencias a punto de hacer erupción.

Nick: Lo siento. -soltó-
Tu: ¿Qué cosa sientes? -preguntó, confundida-
Nick: Siento mucho haberte hecho daño. -suspiró- No debí engañarte, lo sé. Fui un idiota, pero quiero que me perdones. Estoy arrepentido.
Tu: No te preocupes. -murmuró- Eso ya está olvidado. -miró a Nick- También estoy mal por otra cosa.
Nick: Confía en mí. -agarró la mano de _____-
Tu: Mis padres están planeando un evento para recaudar fondos en Rosewood Day este fin de semana, pero mi mamá ni siquiera me dijo sobre ello. Usualmente la ayudo a planearlos. Y entonces mi abuela murió el lunes, y...
Nick: ¿Tu abuela murió? -sus ojos se ensancharon- ¿Por qué no me dijiste nada?

_____ pestañeó, fuera de lugar. ¿Por qué le diría a Nick que su abuela murió? Después de que terminaron, ya no volvieron a ser los amigos que eran antes.

Tu: No lo sé. Pero de todas formas, dejó un testamento, y yo no estaba en él. -siguió- Al principio pensé que era por este lío de la Orquídea de Oro, pero luego mi hermana estaba hablando sobre cómo el testamento decía nietos natos. Yo no lo creí de inmediato, pero luego empecé a pensar en ello. Tiene perfecto sentido. Yo debería haberlo sabido.
Nick: Cálmate. -dijo, sacudiendo su cabeza- No entiendo. Tú deberías haber sabido... ¿qué?
Tu: -Inhaló- Lo siento. -dijo suavemente- Nietos natos, eso quiere decir que una de nosotros no ha nacido naturalmente. Significa que soy... adoptada.

_____ golpeó ligeramente sus uñas contra los patrones de granito de madera en el gran escritorio de caoba del cuarto de estudio. Alguien había grabado Ángela es una perra en la superficie. Se sentía raro para _____ decir las palabras en voz alta, soy adoptada.

Tu: Tal vez sea algo bueno. -meditó, estirando sus largas piernas bajo la mesa- Tal vez mi verdadera madre realmente se preocupa por mí. Y tal vez podría salir de Rosewood.

Nick estaba en silencio. _____ lo miró, preguntándose si había dicho algo ofensivo. Finalmente se volvió y miró directamente a sus ojos.

Nick: Te amo. -anunció-
Tu: -Sus ojos saltaron- ¿Disculpa?
Nick: Es un sitio web. -siguió, imperturbable- Teamopunto.com o tal vez Te es simplemente la letra "t", no estoy seguro. Iguala a los niños adoptados con sus madres biológicas. Esta chica que conocí en el viaje a Grecia me contó sobre ello. Ella me escribió el otro día diciendo que funcionaba. Va a conocer a su madre biológica la próxima semana.
Tu: Oh.

_____ fingió alisar su ya perfectamente planchada falda, sintiéndose un poco nerviosa. Por supuesto que no había estado pensando que Nick realmente le estaba diciendo que la amaba o algo.

Nick: ¿Te quieres registrar para ello? -comenzó a meter sus libros en su mochila- Si no eres adoptada, entonces simplemente no encontrarán una coincidencia. Si lo eres... tal vez la encuentren.
Tu: Mmm... -su cabeza daba vueltas- Muy bien. Seguro.

Nick caminó en línea recta a través de la biblioteca hacia el laboratorio informático, y _____ lo siguió. La sala de lectura principal estaba en su mayoría vacía salvo por unos cuantos estudios nocturnos, dos chicos revoloteando alrededor de la copiadora, sin duda contemplando si copiar sus caras o sus traseros, y lo que parecía una reunión de culto de todas las mujeres de mediana edad que llevaran alguna clase de sombrero azul. _____ pensó que vio a alguien agacharse rápidamente detrás de uno de los estantes de Autobiografías, pero cuándo miró de nuevo, nadie estaba allí.

El laboratorio informático estaba frente a la biblioteca, rodeada por todos lados de grandes ventanas de cristal. Nick se sentó en una consola y _____ sacó una silla al lado de él. Él movió el mouse, y la pantalla parpadeo.

Nick: Bien. -empezó a escribir e inclinó la pantalla hacia _____- ¿Ves?

Reconectando familias, anunciado en unas floreadas letras rosadas en la parte superior de la página. En la izquierda de la pantalla estaba una series de fotos y testimonios de personas que ya habían usado el servicio. _____ se preguntó si la amiguita de Nick de Grecia estaba fotografiada, y si ella era linda. No es que hubiera estado celosa o algo.

_____ dio clic sobre un enlace que decía, Registrarse aquí. Una página nueva apareció de pronto, haciéndole varias preguntas sobre sí misma, que el sitio luego usaría para igualar a _____ con su potencial madre.

Los ojos de _____ flotaron de regreso a los testimonios. ¡Pensé que nunca encontraría a mi hijo! Sadie, de cuarenta y nueve años, escribió. ¡Ahora estamos reunidos y somos los mejores amigos! Una chica llamada Ángela, de veinticuatro años, exclamó, siempre me pregunté quién era mi verdadera madre. ¡Ahora la he encontrado, e iniciamos un negocio de accesorios juntas! _____ sabía que el mundo no era así de inocente e ingenuo, las cosas no funcionaban tan fácilmente. Pero no podía evitar esperar lo mismo.

Ella tragó saliva.

Tu: ¿Qué si realmente funciona?

Nick metió sus manos en los bolsillos de su chaqueta.

Nick: Bueno, eso es bueno, ¿cierto?

_____ se frotó su mandíbula, tomó una profunda respiración, y comenzó a escribir su nombre, número de celular, y su dirección de correo electrónico. Rellenó los espacios vacíos de dónde y cuándo había nacido, algún problema de salud que hubiese tenido, y su tipo de sangre. Cuando llegó a la pregunta que decía: Por favor explique por qué está realizando ésta búsqueda, sus dedos revolotearon sobre el teclado, buscando la respuesta adecuada. Porque mi familia me odia, ella quiso escribir. Porque no significo nada para ellos.

Nick movió sus hombros. Curiosidad, _____ finalmente escribio. Luego tomó una profunda respiración y le dio a Enviar.

Twinkle, Twinkle, Little Star tintineo sobre los diminutos parlantes de la computadora, y encima de la pantalla flotó el dibujo animado de una cigüeña volando alrededor del mundo, como si diligentemente estuviera buscando igualar a _____.

_____ crujió sus nudillos, entumecidos sólo por lo que había hecho. Mientras miraba alrededor, todo repentinamente parecía desconocido. Había venido a esta biblioteca toda su vida, pero nunca había notado que todas las pinturas al óleo en las paredes del cuarto de computación eran de frondosos paisajes. O que el gran letrero detrás de la puerta decía, USUARIOS DE LA BIBLIOTECA: CUANDO ESTEN EN INTERNET, NO USAR FACEBOOK, NI TWITTER, NI MYSPACE, ¡JAMÁS! Realmente nunca había mirado los pisos de madera color arena, o las lámparas con forma de pentágono que colgaban majestuosamente del techo de la biblioteca.

Cuando miró a Nick, también era como un desconocido, en el buen sentido. _____ se sonrojó, sintiéndose vulnerable.

Tu: Gracias.
Nick: De nada. -se puso de pie y se apoyó contra la jamba de la puerta- Entonces, ¿te sientes menos estresada?
Tu: -Asintió- Sí. Lo estoy.
Nick: Que bueno. -sonrió y comprobó su reloj- Me tengo que ir, ¿quieres que te lleve?

_____ asintió. Nick y _____ comenzaron a caminar a través de la biblioteca, se despidieron de la Sra. Jamison, la bibliotecaria, y salieron a través del torniquete. Cuando llegaron al Audi de Nick, él le abrió la puerta del copiloto para que _____ entre, luego Nick se sentó en la del piloto y arrancó el auto.

_____ sacó su celular de su bolso y se puso a revisar su correo electrónico. El sitio de adopción le había enviado un mensaje de bienvenida, manifestando que lo más probable es que oiría los resultados en aproximadamente los próximos días hasta seis meses. Cuando estaba a punto de finalizar sesión, un sonido en el bolsillo de Nick le llamó la atención. Nick detuvo el auto y sacó su teléfono, era un nuevo e-mail en su correo electrónico. _____ miró su propio celular, un nuevo e-mail apareció en su buzón de entrada, también. El nombre del remitente era una confusión de letras y números, y la línea de Asunto decía, Nick y _____, los estoy viendo.

Un hormigueo recorrió la espalda de _____. Abrió el e-mail y Nick hizo lo mismo, ella entrecerró los ojos en las palabras.

Pensé que éramos amigos, chicos. Les envío una dulce notita, y ustedes llaman a los policías. ¿Qué tengo que hacer para mantenerlos quietos? De hecho, ¡no me tienten! -A

Tu: Oh Dios Mío. -susurró-
Nick: No puede ser.

Nick y _____ se miraron, ellos habían recibido el mismo mensaje.

Un ruido de golpes sonó fuera del auto de Nick. Nick y _____ vieron por la ventana, sus musculos estaban rígidos. Nick salió del auto para ver de dónde había venido los golpes pero nadie más estaba cerca. Un foco iluminaba una banca del parque cerca a la biblioteca, pero no había ni una sola huella. Entonces, ellos notaron algo cerca de uno de los cristales de una casa, una mancha rápidamente desvaneciéndose por la respiración de alguien.

La sangre de _____ y Nick se volvió fría. Los estoy viendo. Alguien había estado siguiéndolos hace apenas unos segundos... y no habían tenido ni idea.

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me emcione cuando Nick le dijo te amo a rayita
eres mala u.u
A me asusta :/
SIGUELA PORFA!!