Sweet Love & Hate - Second Season. [Nick&______]

Siguela!! <3 Queremos MARATÓN! Y un Nicholas Junior juju

Me encanto el Capi estuvo genial !!
Los gemelos me hacen reir mucho Smile

No entiendo porque la rayis no le cuenta a nick sobre el embarazo ya estan bien no?
Espero que la sigas proto please

siiiguelaaa!!!!!!!!!!!!!!

siguelaaaaaaaaaaaaa

Hola Chicas.
Se que esperaban capítulo, pero, ¡Lo siento! No tengo nada listo para ustedes.
No he tenido nada de tiempo para poder escribir, y bueno... ¿Porque?

1- Tenía tarea de matemática la cual, aun no termino, pero me falta poco. Gracias a Dios.
2- Castigaron a todo mi Curso en el colegio, hicimos una travesura, y eso.

Perooooooo... El vierrnes, ¡Prometido! Subiré dos capítulos, Si?
Espero que les parezca la idea. Porque enserio, yo quería subirles hoy, pero, ya ve, no pude escribir nada.
Solo espero que les guste la idea de subirles el viernes.
Ese día, por la noche, verán dos capítulos acá, Okay?
Ahora debo irme.
Cuídense, Las Quiero Muchísimo, Bye.

ok no hay problema Very Happy

aki espero Very Happy

ok no problem Smile

esperamos al viernes un abrazo

no te preocupes
te esperamos!!! Smile

esperando caps Very Happy

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Diecisiete.

Suspiré saliendo de la Agencia. Caminé hasta mi auto, y fruncí mi ceño al ver una Nota debajo de uno de los parabrisas. Pensé que se trataba de alguna multa o algo parecido, pero al tomarla y leerla, solo me llevé un enorme susto.

’Te sigo vigilando amor’

Miré a mi alrededor alarmada. Subí a mi auto rápidamente y comencé a manejar. Tomé mi teléfono, y en camino, llamé a Nick, el cual contestó rápidamente.

- Hola Linda.
- ¿Nick?... Dejaron una nota en mi auto.
- Oh hermosa, ¿Qué decía? –dijo preocupado-
- Que me seguía vigilando. Y eso, esto me comienza a dar miedo Nick.
- ¿Puedes venir?
- Eh, si… Esta bien, estaré ahí en unos minutos.

Poco después, estacionaba mi auto frente al enorme edificio de Nick. Bajé con mi bolso y corrí hacia adentro. Saludé a los guardias y algunos empleados antes de dirigirme al elevador. Una vez dentro, me recosté en la pared y comencé a pensar. ¿Sabria esa persona que yo estaba embarazada? Además, ¿Qué buscaba?.
No lo entendía. Llegué al piso de Nick. Sonreí al salir y me dirigi directo al ancho y alto escritorio de su Secretaria. Ella sonrió y avisó a Nicholas que había llegado, entré segundos después, y sonreí al verlo buscar unas papeletas frente a él. Me miró rápidamente y sonrió.

Caminé hacia él y me senté en sus piernas, rodeó mi cintura y sonrió viendo mis labios. Luego me besó y lo abrasé fuerte sonriendo en medio del beso. Nos separamos y suspiré, miré su escritorio y volví a verlo a él.

- ¿Qué buscas? –le pregunté besando sus labios rápidamente-
- Algo relacionado con Los Angeles, no lo encuentro.
- Tal vez, porque a veces eres un desordenado.
- Si, gracias linda. Ahora dime, ¿Dónde está esa nota?
- Oh, la tengo acá.

Suspiré desanimada y saqué la nota de mi bolso. Se la entregué y luego de leerla me miró a mi preocupado. Me levantó de sus piernas y tomó su teléfono, fruncí mi ceño y cuando vi como marcaba el numero de una Agencia de Seguridad, le quité su teléfono.

- ¡Hey! –me dijo-
- ¿Qué haces?
- Debo informar sobre esto linda. No me arriesgaré a que te pase algo malo.
- Pero…
- Informaré a esa agencia y luego a la policía, ellos deben comenzar a investigar esto.
- Nick, no… Digo, no es tan malo.
- ¿¡Que no es malo!? –gritó- ¡Te envían fotografías, notas amenazantes y obsequios! Es un depravado sexual, ______.
- Claro que no.
- ¿¡No!?... ¡La semana pasado te ha enviado Lubricante con sabor a Chocolate y Condones con el mismo sabor! ¿Y es nada? Debes estar loca ______.
- ¡Nicholas! –exclamé-
- Es la verdad ______, no voy a soportar que andes ahí afuera y ese pervertido pueda estar siguiéndote, asi que, dame mi teléfono y dejame informar sobre esto.
- Eres un idiota.
- Pero este idiota te ama y quiere protegerte.

Me quitó el teléfono, bufé y me senté en el sofá que había en su oficina, escuché como llamaba a la policía e informaba sobre esto… Entendí que comenzarían una Investigación Secreta para hallar a ese hombre que me perseguía. Al terminar de hablar lo miré y me senté mejor en el sofá.

- Nicholas…
- ¿Si linda?
- Es que… -suspiré nerviosa-
- ¿Pasa algo? –se levantó rápido y en segundos estaba arrodillado frente a mi mientras tomaba mis manos-
- Si… -miré hacia el enorme ventanal- Estoy embarazada.

Estacioné mi auto en el estacionamiento del colegio de los chicos. Bajé y caminé lentamente hasta la entrada. Los enormes pasillos estaban solos y en silencio. Todos los estudiantes debían estar en sus salones. Caminé hasta Dirección y ahí, la Secretaria me indicó que esperara unos minutos.
Poco después estaba dentro de la oficina de la Rectora, ella sonrió y me indicó que me sentara frente a ella. Era una señora de estatura baja pero muy esbelta y decente.

- La llamé porque necesito hablar con usted.
- Si claro –sonreí-
- Es sobre Dara. ¿Ha presentado problemas en casa?
- No, bueno, hace meses si, pero… Ya no.
- Bueno, ella siempre ha sido una chica que participa en todas las actividades, muy sociable y demasiado buena…
- Si, lo sé.
- Si, pero, desde hace unas semanas, hemos observado un comportamiento diferente. La llevamos con la Psicóloga de la Institución.
- ¿Qué pasó? –pregunte preocupada.
- Digamos que… Dedujimos que Dara, a creado un esquema en su cabeza, en la cual solo existe ella, ¿Me entiende? Es popular, y de buena manera, pero eso ha cambiado.
- Okay… No estoy entendiendo.
- Dara se está convirtiendo en un Estereotipo de chica popular y engreída. Se ha estado comportando de una manera en la cual ella es la Cima del Mundo, ¿Me entiende?
- Oh Dios.
- Dara no es asi, no sabemos que le pasa. Pero ella esta demasiado orgullosa, alardea sobre todo lo que tiene, ¿Me entiende?
- Si, perfectamente. Hablaré con ella, no se preocupe. Gracias por aberme informado sobre esto, nunca eduqué a mis hijos de esta manera…

Entré a casa, dejé mi bolso y llaves sobre la mesa de centro en el vestíbulo. Caminé por el largo pasillo hasta la cocina, una vez ahí, saqué un trozo de pastel que había dejado la noche anterior, tomé un tenedor y salí de ahí comiéndolo.

La casa estaba solitaria. Nick no había llegado y los chicos estaban en casa de su mejor amigo, mientras que Dara estaba con Kelly. Salí al jardín donde me senté en una tumbona y me quedé ahí pensando y comiendo de mi pastel.

Oí como Rain me gritaba, entré a casa y llegué hasta la sala donde ella estaba con un paquete en sus manos. Le agradecí y se sentó a mi lado en el sofá. Al abrirlo, me sorprendí al ver una pijama de bebé rosa. Encima de esta había una nota, fruncí mi ceño y la leí.

Un bebé, eh. Desearía que fuese mio, ¿Te imaginas? Un bebé conmigo, hermosa. Ya quiero ver ese bebé, será mio, y dentro de unos meses, puede estar en mis brazos como tú en mi cama

Grité y en segundos mis ojos se llenaron de lagrimas, tire la caja al suelo y Rain recogió la nota. Luego de leerla me abrasó, me aferré a ella mientras lloraba asustada. No podía soltarla, ese maldito acosador sabia de mi embarazo y eso comenzaba a asustarme, Nicholas llegó, leyó la nota y luego fue el que me abrasó mientras le decía a Rain que me preparara un Té de Manzanilla.

Lo abrasé fuerte, el solo acariciaba mi cabello y me susurraba palabras lindas. Escondí mi cara en su cuello y lo abrasé más fuerte.

- Tengo miedo Nick… -susurré en medio de sollozos-
- No va a pasar nada linda, te lo prometo, ¿Si? Nada va a pasarte mientras estés conmigo, ¿Okay?
- ¿Seguro? –susurré-
- Más que eso hermosa. –y besó mis labios-

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Dieciocho.

Caminaba con Dara por las Calles de esa enorme residencia donde vivíamos. Habiamos decidido salir y caminar un poco. Me quedé observando un lindo auto rojo que pasó en ese momento irrumpiendo un poco con el silencio de la calle.
Lo observé ir por la calle y volvió a mirar a Dara, ella nunca se despegaba de su teléfono. Negué y decidí hablarle.

- Eh, Dara.
- ¿Si?
- ¿Te sientes bien?, digo, no tienes problemas o algo que quieras contarme.
- No –negó frunciendo el ceño- ¿Por qué?
- No, solo pregunto –suspiré- ¿Qué opinas tu sobre que tu padre es un hombre adinerado?
- Que es grandioso –sonrió sin apartar la vista de su teléfono-
- ¿Por qué?
- No lo sé, puede comprar lo que quiere, y si le pido algo, me lo da. Además que no sufrimos alguna necesidad económica.
- Ajá, ¿Y si tu padre no contara con esas enormes fortunas que tiene?
- No puedo imaginar eso mamá. Siento que no podríamos vivir.
- Dara, piensas de una manera tan inmadura.
- ¡Mamá! –exclamó sorprendida-
- Es la verdad. ¿Sabes? Yo a tu edad, solo pensaba en mis amigos, en vivir feliz, sin ninguna necesidad de dinero, no me importaba nada de eso. ¿Por qué? Porque crecí en medio de eso, de algo parecido a lo que tu vives.
- Mamá…
- No Dara, tienes una idea muy errónea de nuestra vida. Tu padre puede tener todo el dinero del mundo pero eso no nos debe importar. Tu debería interesarte por salir con Kelly, reír y bromear sobre la vida, menos en decirle a los demás que no pueden hacer nada porque su padre no es el dueño de uno de los Rascacielos más altos de Nueva York.
- Mamá, yo…
- Se lo que haces Dara, solo te advierto, que si continuas con esa actitud, nunca serás nada…

Dije y comencé a correr nuevamente por la acera. Dara era muy lista, pero tampoco me agradaba que fuese asi con sus amigos. Y eso, le traería problemas si continuaba.

Salí del baño y me miré al espejo. Sonreí y tomé el pequeño bolso. Salí de la habitación y bajé las escaleras rápido. Me encontré con Nathan, del cual me despedí y salí de la casa, subí a mi auto y comencé a manejar. Me miré en el Retrovisor y volví la vista a la calle.
Desde que le había confesado a Nick mi embarazo, eramos muy cuidadosos en no ser muy obvios. No queríamos que los chicos, Rain o cualquier otra persona se diera cuenta sobre eso. Lo diríamos cuanto estuviéramos listos. No queríamos alarmar a nuestra familia cuando el embarazo iba de maravilla.
Tenia ya cuatro meses. Y todo marchaba bien, podía sentir sus movimientos dentro de mi vientre lo cual me encantaba, mi barriga se notaba un poco, pero seguía siendo muy pequeña. El medico decía que el bebé seria pequeño ya que todo era normal como para decir que había un problema. No sabíamos su sexo, y eso nos tenia ansiosos.

Bajé frente a un puesto Callejero pero muy surtido y alegre donde vendían todo tipo de chucherías. La chica que me atendió, me reconoció y pidió un sencillo autógrafo, accedí y luego pedí varias bolsas de Lays y una botella con agua.
Volví a mi auto luego de comprarlas. Abrí una bolsa de Lays con sabor Cebolla y Crema y lancé un pequeño grito de satisfacción al sentir el sabor en mi boca. Al final, llegué al edificio de Nick, deseaba llegar hasta el final de este y luego verlo a él. Bajé del auto, entré y llegué al elevador. Una vez ahí, seguí comiendo mis Lays. Me asusté cuando mi teléfono sonó, lo saqué de mi bolso y sonreí al ver que era Nick, no dudé en contestar.

- Hola Nick –dije sonriendo-
- Hola hermosa, ¿Dónde estás?
- Oh, en el elevador de tu horrendo edificio –dije riendo-
- Bien, luego no digas que gasto demasiado remodelándolo.
- Ya, Okay. ¿Qué haces?
- Nada, bueno si, pero no es mayor cosa.
- Oh, ¿Quieres ir conmigo al ultimo piso? –pregunté mientras el elevador se detenia y un hombre vestido casualmente subia al elevador-
- Eh, sube tu, yo llegaré en unos segundos. ¿Si?
- Okay, te espero.

Colgué y guarde el teléfono en mi bolso. Miré al hombre, era alto, pero no tanto como Nick, robusto y con un aspecto de esos hombres que siempre ganaban en cualquier cosa no importara el que. Fruncí mi ceño cuando noté que llegábamos al ultimopiso y el no bajaba de ahí.
Cuando llegamos, salí rápido sin mirarlo. Queria llegar hasta la pequeña terraza que ese edificio tenia, exactamente en su cúspide. Grité sorprendida cuando el mismo hombre tomó mi brazo agresivamente y me tiró contra el enorme ventanal. Lo miré asustada, el solo mantenía una estúpida sonrisa en sus labios.

- ¡Suelteme!
- Oh no cariño. He esperado tanto por esto –dijo susurrando y acercándose a mi- Eres tan hermosa, y más de cerca –se acercó a mi rostro y lo aparté de un empujón-
- ¡Dejame! –le grité- Dejame tranquila.
- Oh no, cariño. ¿Cómo piensas que te dejaré sola? Necesitas a alguien a tu lado.
- Ya tengo a esa persona, ahora te pido que me dejes tranquila.
- ¡No lo haré! –gritó dejando ver su furia-

Me sorprendí. Miré hacia atrás, el ventanal estaba cortado por la mitad, y una de esas mitades se abria, y para mi mala suerte estaba abierto. El enorme edificio contaba con una Piramida de Cristales, es decir, estábamos sobre ella y las paredes hacia abajo eran inclinadas.
Miré nuevamente a ese hombre, el me sonrió. ¿Por qué me pasaba a eso a mi? ¡Mi acosador estaba frente a mi! Miré hacia las cámaras de seguridad, estaban directamente enfocando hacia mi y ese hombre. El comenzó a acercarse. Lancé un pequeño gritó cuando rodeó mi cintura con un brazo y con su otra mano, tocó el pequeño abultamiento en mi vientre. Sonrió más que complacido, solo me alarmé más.
Traté de separarlo pero el no hacia nada.

- Eres tan hermosa y sexy… Dios Mio, ¿Cómo será en la cama?
- ¡Dejame! –me moví ya desesperada-
- ¡No lo haré! –gritó en mi cara y me asusté más- No, linda. No te asustes, no te haré daño, claro, solo si no me provocas.
- Sueltame –cerré mis ojos dejando caer una lagrima-
- No llores linda, no deberías hacerlo, verás… Solo quiero tenerte para mi, nada más. Comportate como yo quiero y nada de pasará, ni mucho menos a ese bebé.
- Solo dejame…

El elevador se abrió y de él salió Nick. El hombre se giró rápidamente y grité cuando sacó un arma de su bolsillo y apuntó a Nick. El se asustó de inmediato. Me soltó pero tomó mi brazo más fuerte que antes, solo gemí del dolor. Me moví un poco, pero el solo me miró y presionó más su agarre.
Nick trató de acercarse. Pero el solo cargó el arma y grité asustada y tapando mi boca con una mano. El elevador volvió a abrirse y de él salió un gran equipo de seguridad, trataron de acercarse a ese hombre, pero el disparó hacia el techo y grité. Se detuveron.

- ¡No se acerquen! –gritó-
- ¿Qué quieres? –le susurré y el me miró-
- A ti, te quiero a ti.
- ¿Por qué? Hay mujeres que seguramente quisieran salir contigo.
- Pero yo te quiero a ti-me respondió con calma-
- Tengo hijos y un esposo… ¿No entiendes que no puedo estar contigo?
- No me importa, te quiero a ti y a ese bebé que tendrás, podremos criarlo como si fuese nuestro hijo.
- No, no podemos –dije sollozando-
- ¡Claro que si! –gritó y alarmó a todos los que estaban ahí-

Los oficiales trataron de acercarse a el, agitó su arma pero al ver que no los asustó, tomó mi cintura y me levantó dejándome al borde del ventanal, grité y traté de safarme pero el sujetaba más fuerte mi cintura. Miré a Nick el cual estaba detrás de un oficial, quería acercarse, pero no lo dejaban.
Uno de los oficiales se acercó a ese hombre… Pero lo que hizo fue un error, me soltó y me deslicé hacia abajo por los cristales de la pirámide. Grité mientras seguía cayendo estaba realmente asustada, me ensucié completamente con el polvo de los cristales. Mis tacones me ayudaron a detenerme un poco en las pequeñas orillas de hierro que conectaban a todo los vidrios de cristal. Traté de agárrame pero llegué hasta el final.

Logré detenerme. Debia calmarme, o si no, caería al vacio o sobre un auto, lo cual era más seguro. Miré hacia arriba, el miedo y la adrenalina de estar ahí me estaban matando. Pude ver como tomaban a ese hombre. Rapidamente Nick apareció y me miró alarmado, volví a mirar hacia abajo y me deslicé un poco hacia arriba. Sonreí cuando logre hacerlo.

Me quité uno de mis tacones y se deslizó y calló, o caia sobre alguna persona o al suelo directamente. Gracias a mi pie descalza pude deslizarme poco a poco. Llegué casi a la mitad y no pude seguir. Estar a esa altura me estaba provocando un miedo terrible. Varios minutos después, un bombero bajó cuidadosamente hasta mi con un lazo.
Tomó mi mano y comenzó a arrastrarme arriba.

Al llegar, Nicholas corrió a mi y me bajó del ventanal. Lo abrasé y comencé a llorar, el besó mi cara tratando de calmarme, me separé un poco de él. Comencé respirar agitada, el me miró preocupado…

- ¿Estás bien?... Hermosa, ¿Te sientes bien?
- Yo… No…

Segundos después, todo se volvió negro.

Oh Señor... Ya cogieron al fucking depravado sexual, ya era Hora Crying or Very sad

Como ______ pierda el bebé, me cabreeeeo y mucho... Gracias al cielo, Nicholas siempre está con ella Love!

SÍGUELAAA

ese kskhsdjd Bravo!

como
pudo hacerle eso a rayita!!!
que bueno que ya lo atraparon
espero que rayita este bien
y no le pase nada al bebe me
encanto el capitulo!! pleaseee!!
siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

,FYDMIGHDXUSFJ NOOOO NOO QUE LE PASO A RAYITA?? EHDSGDJSJKM ASHGADFDYG ESPERO QUE EL BEBE ESTE BIEN ASJCJSGHDFJCDI AYY DIOS, YO MUERO SI ME PASA ESO AKJSHSJS SIGUELA POR FAVOR!

ay no, Dios D: ¡Síguela AHORA!

wow que intenso!! me quede asi :O
siguelaaaaa

SIGUELA NO LA PUEDES DEJAR ASIII
COMO ME ENCANTA TU NOVEE ES GENIAL
ESPERO QUE A LA RAYIS Y AL BEBE NO LES PASE NADA

SIGUELA!!!

siguelaaaa

Sigueee

hay DIOS!!! como le pueden hacer eso a rayita???
ojala q no le pase nada a ese bb (aunq le daria algo de drama a la nove)
no puedo esperar para saber q le paso!!!
SIGUELA PORFA!!!!

siguelaaaaaa

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Diecinueve.

Desperté un poco cansada. Reconocí la habitación de hospital de inmediato. Me quejé y miré a mí alrededor, cerré mis ojos nuevamente y segundos después, volví a abrirlos y me acomodé en la camilla. Toque mi vientre y sonreí al sentirlo abultado. Bostecé mientras me restregaba mis ojos lentamente.
Suspiré mientras recordaba lo que había pasado. Me quedé un poco confundida mientras pensaba en ello. Miré a mi lado y me emocioné al ver una Cajita de Chocolates, la tomé y la abrí. Eran chocolates con relleno de caramelo y maní en medio. Mordí uno y ese fue el comienzo de mi degustación por esos chocolates. Me asusté cuando la puerta se abrió y entró Nick, el sonrió y cerró la puerta para acercarse a mí.
Me besó y luego me quitó un trozo de chocolate.

- ¡Hey! No debes quitarle la comida a una mujer embarazada.
- Sabes que esto te hace daño.
- Tampoco nacerá obeso idiota –reí-
- Lo sé. ¿Cómo estás?
- Bien, un poco cansada, eso es todo, ¿Qué pasó?
- Tu Presión Arterial se elevó demasiado, has estado un día y medio inconsciente.
- Vaya… -dije sorprendida- ¿Cómo estás tú?
- Aún recuperándome de ese Enorme Shock, fue increíble ver cómo te deslizabas a punto de caer.
- Si, no puedo creérmelo aún –susurré-
- Eres la Comidilla de todos linda.
-reí- Lo imaginaba.

El sonrió y se sentó a mi lado, tomé un chocolate y lo lleve a mi boca, luego lo miré mientras el sonreía observándome. Me estiré un poco y lo besé, me separé y le señalé el control de la televisión, se estiró, lo tomó y me lo entregó, sonreí y encendí el televisor. El besó mi mejilla rápidamente y solo sonreí.

- ¿Y los chicos? –le pregunté-
- Oh, están en la Cafetería, con Joe.
- ¿¡Con Joe!? –dije sorprendida-
- Si, el vino de visita ayer, y cuando se enteró de lo sucedido, se preocupó y ahora esta acá con los chicos.
- ¿Y Dara?
- Está con ellos, sabes que es la consentida de Joseph.
- Si –reí- ¿Ya saben lo de…
- Si –suspiró- No tomaron muy bien la noticia, no me creían cuando les dije que todo estaba bien, ellos mismo buscaron al médico y le preguntaron.
- ¿Qué pasó?
- Les dijo que estabas bien, todo era normal y el bebé crecía bien en tu interior. Es la verdad. Al parecer esta vez sí será enserio.
- Oh, es lo que más anhelo –suspiré- Ya quiero saber que será.
- El médico dijo que dentro de unas semanas podrán decirte que es. Me siento emocionado –sonrió-
- ¿Recuerdas cuando los gemelos? –reí-
- Parecíamos locos ______. Tú tenías una enorme barriga y no podías ni caminar.
- Si, fue realmente gracioso.

Reí a carcajadas y luego el me besó.

Entre a casa peleando con Joe, siempre había sido así, a él le encantaba molestarme y yo terminaba peleando con él, mientras los chicos y Nick se dedicaban a reír cuando yo golpeaba a Joe o le regresaba sus palabras con algunas peores. Corrí y abrasé a Rain cuando la vi, era más bajita que yo y eso me hacía sentir rara.

Le saqué la lengua a Joe y la seguí hasta la cocina donde ella me esperaba con mucha comida, grité emocionada y volví a abrasarla mientras besaba sus mejillas.

- Eres mi Suegra Favorita Rain.
- Solo me has tenido a mí –rió-
- Por eso –la miré sonriendo y probé el decidlos Sándwich de Pavo y Provolone- Esto es delicioso.
- Gracias. ¿Cómo está ese bebé? Eres mala, no me habías contado.
- Tenía intenciones, pero quería callarlo, la última vez no me fue muy bien. He perdido dos bebés, no quería que volviera a pasar.
- ¿Cómo estás hoy?
- Demasiado bien. Mi ginecóloga u Obstetra, no sé –reí- Dijo que todo estaba muy bien. El bebé estaba en perfectas condiciones.
- ¿Cuánto tienes?
- Cuatro meses, ¿Se nota? –Me levanté y me incliné hacia atrás un poco y acaricié mi pequeña barriga-
- Es muy pequeña –rió- Pero si, se nota.
- Lo sé. –Reí- Quiero que se note más –fruncí mi ceño-
- Solo espera un poco más.
- No quiero hacerlo –reí-

…Estaba más que concentrada en el libro que leía. Toda la casa estaba en silencio. Joe había cenado con nosotros y luego de eso se había ido. Vivía en Queens, y su esposa, Demi, debía de haber regresado su estupendo trabajo. Miré a mí alrededor. Enserio, todo estaba en silencio y eso era extraño.
Ignoré eso, miré hacia el ventanal el cual estaba medio abierto. Ya era muy tarde, y me sentía bien ahí. Sentada en mi suave cama, con mi pequeña pijama de camisón color crema que pronunciaba bien mi barriga. Llevaba mi cabello amarrado en una coleta y unos divertidos calcetines de muchos colores.

Me asusté cuando Dara entró en silencio. Le sonreí y ella se sentó a mi lado en la cama. Solo vestida su pantalón largo y holgado de pijama y un Top de Ejercicio que dejaba a la vista su perfecto abdomen, gracias al ejercicio que practicaba conmigo tres veces a la semana. Ella siempre quería verse bien.

Se acomodó entre las almohadas y me quedé observándola.

- ¿Pasa algo Dara?
- No mamá. Nada.
- Okay, ¿Quieres decirme algo?
- Es que… ¿Crees que ahora si sea de verdad? –Miró mi barriga-
- Si Dara. Verás que será un bebé muy hermoso.
- Es que, no quiero que pase lo mismo mamá.
- No pasará linda. Lo prometo, ¿Si?
- Si… -sonrió-

La abrasé y ella se recostó sobre mis piernas, puso una mano sobre mi barriga, me miró y sonrió luego. Era tan tierna sin querer, solo recordé cuando tenía dos años, y le habíamos dado la noticia de que tendría dos hermanitos. Siempre quería tocar mi barriga y planeaba los juegos con los que se divertirían.
Lo malo fue que los gemelos fueron listos, y cuando ella era la maestra y ellos los alumnos, ellos hacían travesuras y la molestaban hasta el colmo. Y ahora los tres tendrían un bebé en casa. Llorando y haciendo travesuras.

- Mamá.
- ¿Si? –Dije mientras acariciaba su cabeza-
- No quiero la Fiesta, ya no.
- ¿Y entonces?
- He visto en Internet, quiero modelar mamá. Igual que tú.
- ¿Quieres ser Modelo?
- Si, modelo y luego entrar a la Universidad, ¿Qué dices? –preguntó emocionada-
- Bueno, está bien. Pero ¿Sabes lo que implica, no?
- Audiciones y ese tipo de cosas. Sí, estoy dispuesta a eso.
- Tienes suerte de tener una Mamá Modelo, eh –reí- Bien, hablaré con tu padre y comenzaré a ver algunas Agencias donde encajarías a la Perfección, ¿Okay?
- Si. Siempre lo había pensado, pero nunca había llegado a una conclusión, ahora sí –sonrió- Quiero modelar, ¡Es Nueva York! –rió-
- Bueno, es verdad. No te preocupes linda. Veré que puedo hacer por ti.
- Gracias mamá.

Se levantó y besó mi mejilla. Antes de salir, se encontró con Nick, lo abrasó y besó su mejilla, reí y ella salió de ahí. Nicholas me miró raro. Se tiró en la cama y recostó su cara sobre mi barriga. Todos querían abrazarme y quedarse ahí. Ese bebé los atraía a todos como imanes.

- ¿Te sientes bien linda?
- Si.
- ¿Tomaste tu Medicina?
- Solo son Vitaminas, Nick –reí-
- Pero esas Vitaminas, harás que este bebé salga como Popeye.
- Eres un tonto –sonreí-
- ¿Qué crees que sea? –Preguntó viéndome a los ojos-
- No sé, pero, si yo decidiera, quisiera que fuese niñas.
- Opino lo mismo que tú

Reí cuando colocó sus piernas a ambos lados de mi cuerpo y besó mis labios. Lo abrasé y lo presioné contra mí. El se levantó rápido, cerró la puerta con seguro y volvió a la cama, donde se desato un calor pasional, que parecía nunca terminar.

SIGUELA

uff q SUERTE q el bebe esta bien!
y ahww q linda es Dara quiere ser modelo Very Happy

ahhh Nick

xD
SIGUELA PORFA!

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