Sweet Love & Hate - Second Season. [Nick&______]

Sweet Love & Hate –Second Season.
Prologo.

Catorce Años Después.

Gemí fuerte arqueándome hacia atrás.
Reincorporé mi cabeza buscando sus labios. Los atrapé y lo besé frenéticamente mientras sus manos se paseaban por mis piernas y subían lentamente el lindo y corto vestido veraniego color café marrón. Me hice hacia atrás en la cama y él se acomodó sobre mi besando mis mejillas.
Lo miré a los ojos y sonreí volviendo a atrapar sus labios de una manera muy salvaje. Reí cuando sus manos se situaron en mis caderas por debajo del vestido y me pegaron a él, gemí más fuerte que antes y me arqueé provocando que él se frotara contra mi dejándome saber la excitación que crecía en el.

Sentí como sus dedos buscaban el cierre de mi vestido, al encontrarlo, lo bajó rápidamente y quitó mi vestido a la velocidad de la luz. Gemí su nombre al sentir sus labios sobre mi abdomen. Dejó besos húmedos, pasó sobre mis pechos presionándolos un poco con sus manos y luego llegó a mi cuello besándolo de manera salvaje.
Desabrochó mi brassier con el broche que tenía al frente. Suspiré en forma de gemido cuando sus labios comenzaron a devorar uno de mis pechos mientras que el otro recibía atención de su mano y dedos. Me arqueé nuevamente y fue ahí cuando mordisqueó uno de mis pezones. Tiré mi cabeza hacia atrás gimiendo más alto, alcancé a ver el reloj digital en forma de Robot.

Eran casi las cuatro de la tarde y fue ahí cuando toda la excitación que tenía se fue abajo, me levanté empujándolo a él y tomé mi brassier colocándomelo rápidamente.

- Es tarde… Los chicos volverán pronto.
- Linda…
- Arréglate tú, y bajas, para que no…
- Ya, ______, cálmate.
- Te dije que no debíamos hacer esto. ¡Lograste doblarme y traerme acá!
- Pero acepta que te gusta –dijo abrazándome-
- Suéltame –lo miré y luego miré hacia la terraza, me solté y caminé hasta ahí- ¡Ya llegaron!
- Ya, ______. Son adolescentes, entienden perfectamente que sus padres deben, hacer, ya sabes…
- Eres un descerebrado –lo miré mal- ¡Suéltame Nick!

Reí moviéndome para que me soltara. Me acostó en la cama y se colocó sobre mí dejando besos desde mi cuello hasta el inicio de mi pantie. Luego se levantó y recogió el vestido del suelo tirándomelo en la cara, me estiré a golpearlo y acomodó su pantalón.

- Bien, por ti, pospondré esto a la noche.
- No lo harás tampoco –reí-
- ¿Cómo que no? –Se acercó a mi furioso en broma-
- Si, Nick, está bien –reí y besé su mejilla-
- Me encantas, me encantas por ese encanto que nunca pierdes.

Reí y besó mis labios para luego salir de la habitación. Suspiré y me senté en la cama poniéndome el vestido. Me levanté y caminé hasta colocarme frente al gran espejo de la habitación, el cual estaba frente a la cama.
En los últimos catorce años, unos muy largos, había pasado de todo. Ahora tenía treinta años y Nicholas tenía cuarenta. Me sorprendía al verlo porque, aunque se veía diferente, quiero decir, sus hombros se habían ensanchado más al igual que el resto de su cuerpo, pero nunca perdía el interés por el ejercicio, lo cual…

Lo ponía más candente con cada día que pasaba.

Y si hablamos de mí, pues mi cuerpo había cambiado mucho también, desde el nacimiento de Dara hasta el nacimiento de los gemelos, Nathan y Caleb. Y, si a eso le sumamos todos los años que había pasado, mi cuerpo había cambiado demasiado pero me mantenía muy bien.
Gracias a las rutinas de ejercicio y más por mi trabajo, modelo. Luego de graduarme de Fotografía Profesional, había entrado en una agencia de modelaje, y ahora estaba ahí.
Si hablábamos de mi relación con Nicholas. Todo estaba más fuerte que nunca. Si alguna vez hubo problemas, habían quedado atrás. Aunque siempre me enfurecía el hecho de que era un fastidioso a veces. Pero nos amábamos y era lo importante.
Y, los chicos. Dara era una hermosa chica de quince años, casi dieciséis, alta, cabello largo y con un color extraño. Ojos extrañamente verdes y que le habían cambiado al cumplir los tres años. Tenía un cuerpo muy esbelto y unos labios idénticos a los de Nick. Era muy simple y sencilla pero cuando se lo proponía, podía llegar a ser la chica más vanidosa del mundo.

Y era la que sufría en casa. Digo, los gemelos, Nathan y Caleb, siempre se la pasaban molestándola, y algunas veces la hacían llorar. Y eso me enojaba.
Si bien Dara era la ‘bebé’ de Nick a ella le enfurecía eso. Estaba en esa etapa de la adolescencia donde no le gustaba que se le dijera nada y por todo se enojaba. Nick no la comprendía y siempre terminaba peleando con ella.
En cambio los chicos, ellos solo se dignaban a ver las discusiones de Nick y Dara. Y eran los más traviesos, pero eran mis consentidos a veces. Ambos tenían catorce años pero se comportaban como unos de cinco, a veces. Caleb tenía el cabello extremadamente rizado, y Nathan tenía un cabello liso y rubio.

Y no se parecían como cualquier par de gemelos. Pero si tenían las mismas actitudes. Y eso era un fastidio, como cuando tenían hambre, si uno lo decía, al otro le daba apetito automáticamente. Era raro completamente.

…Me miré por última vez en el espejo, busqué mis sandalias, pero recordé que me las había quitado antes de que Nick llegara a casa y me encontrara en el jardín hablando por teléfono, y fue ahí donde comenzó todo.
Salí de la habitación y bajé las escaleras para comenzar la pelea de todos los días con los chicos, Nick y Dara.

Era algo típico últimamente. Pero aún así, era una familia perfecta, al menos para nuestras perspectivas. Todos nos amábamos sin importar lo que pasara.
Las imperfecciones de cada uno de nosotros, nos hacían más especiales, y yo, amaba eso.

Muy bien. Soy Leydi y ese es el Prologo de: Sweet Love & Hate - Second Season.
Espero que el prologo les haya gustado. Y... Bueno, al inicio de la novela, todo se centrará en los chicos y en las cosas que han cambiado, pero luego, todo cambiará... Si, eso.
Ya que... Solo espero que les guste chicas. Solo quiero eso. Que les agrade esta nueva novela.
Debo irme, Cuidense, Comenten, Bye.

ME SUPER ENCANTO <3 LA TENES QUE SEGUIR LO MAS PRONTO POSIBLE <3 AMO TUS NOVELAS <3

la AMEEE vamos tieeenes q seguirla si?????
POR FAVOR (carita de perrito triste) xD

Ajksdhkjs ¡Cuanrenta años! hjsdhfsj ¡Gemelos! ¡DARA! jsabdkh
Estube totdo el prologo gritando en susurros (?) "fuck" y diciendo cosas con la voz super
finita
Ajdskhsjk ¡Ya quieor capitulo! OMG me va a dar algo
¿Y Joe? ¿El y la Ratis se han vuelto a ver? ¿Ah?
Ok me calmo.
Bye

PS: SIGUELA

Escribi "ratis" en lugar de "rayis"
Si, quise decir RAYIS, no ratis (?)

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Uno.

Suspiré mientras pasaba de página en el libro que llevaba leyendo desde hace un año. Sospechaba que nunca terminaría de leerlo ya que el tiempo me consumía casi en su totalidad y cuando tenía un tiempo a solas para mí, solo duraba cinco minutos, porque algo o alguien debía interrumpir siempre.
Miré a mi alrededor, la brisa de verano típica de Nueva York golpeaba mi rostro levemente, el agua de la piscina se movía de la misma forma y todo estaba en completo silencio. Eran los momentos así, cuando podía tranquilizarme y alejarme de toda realidad, me senté mejor en la tumbona, acomodando el diminuto short que llevaba puesto, con una camisa corta y pequeña.
El verano en esa ciudad, era algo insoportable.
Cerré mis ojos mientras me recostaba mejor y dejaba el libro sobre mis pechos. Desde despertar temprano, despedir a los chicos, luego ir al pequeño pero muy elegante estudio fotográfico y atender cada problema de cada día, luego regresar a casa y comenzar a atender los problemas que se presentaban ahí.

Al menos Nick y Rain, me ayudaban, si, milagrosamente Rainy aún seguía con nosotros. Parecía tener el elixir de la vida ya que seguía igual. Ella le tenía un infinito amor a los chicos, y ellos a ella. Aunque no era la abuela que consentía, ella era la que castigaba, y por eso la amaba.
Ponía el orden total en esa enorme casa.
Me asusté cuando el teléfono comenzó a sonar, lo tomé y bufé al ver que se trataba de Nick. Presioné la pantalla sobre el botón verde y luego lo llevé a mi oído.

- ¿Pasa algo?
- Hola linda, estoy bien gracias, yo también te amo, eh.
- Amargado, dime qué quieres.
- Nada, ¿No puedo saludar a mi hermosa y sexy esposa? Estás loca eh.
- Deja de decir ‘Eh’, eh.
- ______ -rió-
- Dime Nicholas…
- Nada, ¿Irás por los chicos o pasó yo? –oí como suspiró-
- Pasa tú.
- ¿Estás ocupada?
- No, pero necesito descansar un poco.
- Ya –rió- Ok, entonces iré yo por ellos.
- Está bien Nick –suspiré- Hey…
- ¿Si?
- ¿Puedes pasar y comprarme un Starbucks?
- ¿Quieres que te compre la cafetería? –rió-
- ¡Nick!
- Ya, entendí. Está bien, yo te llevo tu Starbucks, nos vemos en una hora preciosa.
- Te espero –susurré-

Corté la llamada y me levanté de ahí entrando a la casa. Todo seguía en silencio, pasé dejando mi libro sobre la pequeña torre de libros que había en la sala, luego fui a la cocina por agua y me encontré con Rain leyendo los recibos y facturas de la casa. Ella me sonrió cuando entré.

- ¿Te sientes bien ______?
- Si gracias, ¿Qué lees? –dije mientras sacaba una botella de agua ‘Evian’ de la nevera y me sentaba a su lado-
- Esto, es un recibo de la Tarjeta de Nicholas.
- ¿Cuál de todas?
- La que siempre está prestando a los chicos.
- Oh ya –fruncí mi ceño- ¿Pasó algo?
- Si, se han excedido y ahora hay que cancelar casi el quíntuple de lo que Nick les da a los chicos como mesada.
- Oh Dios –reí- Déjalo así y dejas eso en el escritorio de Nick en su oficina, que el mismo vea lo que ha provocado.
- Eso mismo pensé –rió- Ese hombre exagera con sus hijos.
- Si, los ama, pero los consiente demasiado. –reí-
- Ya lo creo. Ya que… ¿Vas a comer algo?
- No gracias.
- Necesitas comer ______
- Lo sé, pero, no quiero en este momento.
- No quiero que Nicholas se enoje conmigo luego.
- No lo hará –sonreí y la abrasé- Muy bien, iré a ver qué hago, te dejo con esas estresantes facturas.
- Eres mala ______.
- Es que tu eres experta haciendo eso –reí- Nos vemos –besé su mejilla-

Cuando salí de la cocina caminé por la enorme casa solitaria, subí las escaleras de dos en dos pero con cuidado, cuando lo hice me dirigí hasta la oficina de Nicholas, cuando entré, lo primero que vi fue el pequeño cuadro de fotografía donde estábamos todos nosotros.
Sonreí y abrí la gran puerta que conectaba con mi oficina de mismo espacio que la de Nick, grande, me senté en mi silla, era grande y me hacía sentir segura ahí, encendí la Mac y comencé a revisar mi correo electrónico, me asusté cuando el teléfono sonó, lo contesté y cerré mis ojos recostándome en la silla al oír que era un cliente pendiente.

Lo atendí indicándole los días que podría atenderlo y como sería la sesión fotográfica con su familia, cuando terminé de hablar, mi teléfono sonó con un mensaje, era Nick avisando que estaban llegando. Ahí me di cuenta de que había pasado mucho tiempo hablando por teléfono.
Seguí mi trabajo en el Mac hasta que oí como subían las escaleras corriendo, en segundos, Dara apareció en mi oficina con su Uniforme de porrista puesto. Era negro con orillas rojas y se veía hermosa y tierna con él. Se acercó a mi escritorio y tiró su bolso rosa pálido de cruzar en el suelo, se sentó en una de las sillas de cuero blanco frente a mi escritorio y bufó.

- Hola Dara –le dije sonriendo-
- ¡Es que papá me está molestando de nuevo! –Se quejó abriendo sus brazos-
- No te pregunté nada –reí-
- ¡Mamá! –suspiró-
- ¿Qué pasó?
- ¡Papá me está molestando por mi uniforme! –se vio a ella misma-
- Bueno… -arrastré la última letra-
- Dile que me deje tranquila, ¿Qué…

Ambas nos asustamos cuando Nick entró y los chicos entraron gritando y riendo, corrieron a mí y me abrazaron fuertemente, reí y besé las mejillas de ambos, ellos eran tan unidos pero diferentes a la vez, los dos se sentaron en una sola silla y miraron a Dara la cual tenía su ceño fruncido y me miraba fijamente a mí.

- Nick… -hablé- ¿Qué pasó?
- ¿No ves el uniforme de Dara? ¡Está más corto cada día!
- ¡No es así! El Uniforme es de esta manera, ¿Quieres que me vista como monja?
- Claro que no, pero esa falda...
- ¡La falda! –Exclamó ella- Mañana será la camisa, luego la chaqueta, ¿Qué, te molesta mi cabello también?
- ¡Dara! –exclamó Nicholas.
- No le faltes el respeto Dara –le dije seria-
- Bien, perdón pero… ¡Mamá es mi uniforme!
- Si, con el que los chicos hacen mil cosas con la mirada.
- ¿Tu como sabes?
- ¡Porque los miro! ¡Dara, se perfectamente cada uno de los pensamientos de esos chicos!
- Al caso, ¿Tú mirabas así a mamá? ¿Pensabas así? –Dara sonrió retadora-
- Eh…
- Vamos, dices que sabes perfectamente lo que esos chicos piensan, debes haber visto a mamá así.
- Bueno, sí, pero…
- Vaya, entonces…
- Entonces tú no deberías ponerte esa falda, ¡Y no vuelvas a cambiarme el tema!
- Ya Nicholas –le dije tranquila- No te alteres.
- No me gusta que mi hija ande por ahí con esas ropas
- Es el Colegio, tiene quince años...
- Casi dieciséis –sonrió ella-
- Exacto, es porrista, y tiene buen comportamiento… El único que la altera acá eres tú.
- ¿Ahora es mi culpa? –dije el sonriendo irónicamente-
- No, claro que no, pero solo cálmate, ¿Si? No resolverás nada así.
- Bien, sigue vistiéndote así Dara, con una condición.
- ¿Cuál? –sonrió ella-
- De casa al colegio y del colegio a casa, ¿Entiendes?
- Pero papi…
- Ya hablé Dara, obedeces si o si…
- Agh, como sea…

Se levantó y tomó su mochila, los chicos rieron y ella les dejó ir un manotazo a cada uno, luego miró a Nick seria y comenzó a caminar hasta la puerta mientras refunfuñaba…

- ¿¡Porque Dios me dio un padre así!? -Gritó antes de salir de la oficina.-
- Mamá –dijeron los chicos al mismo tiempo-
- ¿Si? –los miré-
- Eh, queremos Salir hoy...
- ¿Adónde? –Fruncí mi ceño-
- Al boliche, con unos amigos.
- ¿Irá alguien mayor con ustedes?
- El padre de Bob, papá sabe quién es…
- ¿Eso es verdad? –Miré a Nick-
- Si, es un viejo amigo mío, es muy serio pero divertido cuando quiere. Yo les daría permiso.
- Bien, confió en su padre, chicos, pueden ir.
- ¡Si! –Gritaron ambos chocando sus manos luego besaron mis mejillas, una cada uno- Nos vemos papá.

El les sonrió y los chicos salieron de la oficina. Reí cuando Nick me abrasó, me levantó de la silla y se sentó él a la vez que me sentaba en sus piernas, me besó y luego bajó despacio besando mi cuello.

- Nick –reí-
- ¿Qué pasa?
- No hagas eso –me moví un poco riendo-
- Es que eres tan apetitosa –dijo mientras metía una mano dentro de mi pequeña camisa-
- ¡Déjame! –Reí y me levanté tomando mi teléfono, caminé hasta la puerta y me giré cuando sentí como agarró mi trasero- ¡Eres un atrevido!
- Solo espera esta noche y verás lo que es ser atrevido.
- Oh no.

Reí y corrí hasta las escaleras, antes de bajar, rodeó mi cintura acariciando lentamente mi vientre, sonreí y luego bajamos las escaleras mientras seguía bromeando conmigo.
Cuando llegamos al primer piso, Dara tenía en el suelo a Caleb y este gritaba mientras Nathan solo reía.
Me solté de Nick y comencé a regañarlos, ellos eran como niños pequeños, peleaban, pero a los minutos estaban contentos. Eran completamente extraños.

Forista! Cantidad de envíos : 78 Fecha de inscripción : 18/12/2011

holaa me encanta!! Smile

soy nueva

por lo qu veo y como dice second season! me podrias pasar el link de la primera pofis! Wink

<3

MLexieJ escribió:: holaa me encanta!! soy nueva por lo qu veo y como dice second season! me podrias pasar el link de la primera pofis! <3

Oh, ¡Bienvenida!
Gracias por leer y si, aqui está el Link: https://jbvenezuela.activoforo.com/t10325-sweet-love-hate
Espero que te guste, nuevamente, Gracias. Cuidate.

Jajaja. Digna escena familiar. Amo esta novela.
Siguela pronto, Ley.

ME ENCANTO EL CAPITULO <3 Nick es muy pesado con Dara¬ Yo lo mato si es mi papa¬¬ Pero igual es re tierno <3 SIGUELA PRONTO POR FAVOR

OMG SIGUELA!!!!!

q celoso es Nick!
pobre Dara!!!!!!!
y bueno en cuanto a los chicos...creo q es normal en todos los hermanos no?
en fin Very Happy

SIGUELA!!!

Me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!! I love it! Siguela porfavorsito corazon!!!!
Estoy de vacaciones 2 semanotas! Very Happy

y me voy a ir a lagos de moreno donde vive mi familia(:
Siguela por favor!(:
Gracitas!(:

¿¡Por que siempre quedo de ultima!? Ash
Bueno ya.
La escenita de celos de Nick ahaha y las peleas de Dara con los chicos... me recuerdan a i tirandole
agua fria en la espalda a mi hermano.... y eso que solo tenia como seis el tan inmaduro de 20 por ahi... WAIT
Me sali del tema.
¡La nove! sdnbajadh si supieras lo emocionada que estoy por la segunda temporada.
Que linda Dara, y los gemelos... le doy al de rulos... Okno.
SIGUELA

Hola. Voy a subir hoy porque mañana me voy de Excursión con mis amigas.
Asi que, espero que lo lean y les guste.
Las quiero mucho, ¡Gracias por leer!
Hasta el lunes.

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Dos.

- Mamá...
- ¿Si, Dara?

Ella sonrió y entró a mi habitación, caminó hasta sentarse en la cama con sus piernas cruzadas y me observó mientras yo terminaba a de arreglarme. Me agaché y me puse mis botas y luego me observé en el espejo arreglando un poco mi cabello. Tomé mi bolso y comencé a meter algunas cosas ahí, cuando terminé, lo dejé sobre una linda silla negra y me senté al lado de Dara.
La observé, solo llevaba puestos unos short pequeños de verano y una camiseta que le llegaba al menos cinco dedos debajo de su busto. Y descalza, a ella le encantaba vestirse así cuando estaba en casa. Le sonreí y crucé mis piernas mientras esperaba que ella hablara, lo cual no hizo…

- ¿Pasa algo Dara?
- Eh, no –sonrió-
- ¿Entonces?
- Es que… -suspiró- Mis dieciséis se acercan.
- Ajá –asentí-
- Y bueno, ayer hablé con papá e hizo la propuesta de una fiesta.
- Si, el lo había hablado conmigo.
- Si. Quiero una fiesta, pero… Que no sea inmensa.
- Oh ya –reí- Y el la quiere inmensa.
- ¡Exacto! –sonrió- No quiero eso, y ayer se lo dije, pero pareció no entender.
- Mira Dara… Tu padre fue criado en medio de un mundo donde el tenia todo. No tuvo fiesta de dieciséis años como cualquier adolescente de estos días, pero sí hizo algo…
- ¿Qué?
- El se escapó con su novia y otro par de amigos, todos se fueron a no ser que lugar e hicieron fiesta ahí.
- ¿Qué hicieron cuando el volvió?
- Nada, era el consentido, y poco después, su padre le hizo una fiesta inmensa, que solo terminó en una pelea a golpes.
- Oh vaya.
- Ahora él quiere hacerte una fiesta inmensa, para que la disfrutes y eso… Quiere evitar que hagas algo así como el.
- Ya –asintió- Pero no quiero algo así, solo quiero que asistan unas veinticinco o máximo, cincuenta personas.
- Perfecto –reí-
- Si, pero, el no entiende mamá. Y bueno…
- Hablaré con él, ¿Si?
- Si, y…
- ¿Si?
- Es que, estuve hablando con Kelly –asentí sonriendo, era su mejor amiga-
- Si.
- Y ella cumplirá pronto también, entonces, ambas pensamos, en bueno… Un tatuaje.
- Dara…
- ¡Mamá, uno pequeño!
- No, Dara, eso sí que no…
- Sería en mi muñeca, pequeño…
- Dara, sabes muy bien lo que pienso acerca de eso.
- Tú tienes uno. Y es pequeño.
- Si, lo sé, pero… -dije viendo el pequeño corazón en mi muñeca derecha-
- Por favor mamá…
- ¿Qué piensas ponerte? –dije seria-
- ‘Amore’ es amor en Italiano.
- Dara, no estoy de acuerdo con esto. A penas cumplirás los dieciséis. Si tuvieses dieciocho, te dejaría hasta perforarte todo el cuerpo… Ni aún así, pero igual… No tienes edad para eso…
- Mamá…
- Mira, lo hablaré con tu padre, si el llega, por milagro, a decir que si, entonces te autorizo…
- Solo necesito el permiso de un padre…
- Legalmente, pero sabes muy bien que yo puedo decir que si, y el dirá que no y cumplirá su palabra hasta el fin del mundo.
- Está bien…
- Bien, espero que hayas entendido…
- Si mamá…
- Bien… Rain dijo que iría contigo a no ser que lugar…
-rió- Si, quiere que la acompañe al Mercadito de Pulgas.
- Está bien, ve con ella pero ten cuidado.
- Lo sé.

Tomé mi bolso y me miré por última vez en el espejo. Luego besé la frente de ella y salí de ahí rápido. Bajé las escaleras y me encontré con los chicos y su helicóptero a control remoto en el enorme recibidor, me despedí de ellos y salí de ahí subiendo a mi auto.
No tardé más de cinco minutos en salir de casa, ahora debía atender otros asuntos realmente importantes para mí. No tenia publicista ya que me encantaba realizar mi trabajo por mi cuenta y así, no tenía problemas luego.

~~~~~

Le sonreí a una chica cuando las puertas del lujoso elevador se cerraban. Bebí un poco de mi café de Dunkin Donuts y miré la pequeña pantallita que indicaba el piso por el cual iba. El gran edificio que pertenecía a Nicholas tenía solo veinte pisos, pero era suficiente para derrochar el lujo que poseía, había tratado de que Nicholas lo remodelara de manera más sencilla pero él se había negado rotundamente.
Salí del elevador al llenar vigésimo piso, era el piso más silencioso y ordenado, además de limpio y muy claro. La secretaria de Nicholas, me sonrió detrás de su enorme escritorio, era gracioso, ya que ella era de estatura baja y el escritorio era más un poco más alto que ella, cuando se encontraba sentada.

- Hola –le sonreí saludándola-
- Buenas Tardes Señorita Jonas.
- ¿Sabes si está ahí?
- Si lo está. Y está libre.
- Oh, ok. Gracias. –Reí- Avisa si alguien lo busca.
- Lo haré Señorita.

Le sonreí por última vez y me encaminé hasta la enorme puerta de la oficina de Nick, toqué suavemente y entré al oír su voz. Cuando lo hice me encontré con un Nicholas súper concentrado en el gran monitor de la Mac a un lado de su enorme escritorio de cristal.
Solté mi bolso en el sofá de cuero negro a un lado de la oficina y caminé hasta el, solté mi teléfono sobre un folder y mi café a un lado, lo abrasé por los hombros besando su cuello y bajando mis manos por su pecho.

- ¿Por qué juegas al Solitario?
- Porque estoy muy solitario.
- ¿Sabes? Podrías llamarme y decirme que estás aquí solito, en lugar de estar acá, aburrido.
- Si, pero… Ya que, es raro que vengas por acá linda.
- Si, es que…
- ¿Pasó algo con… Contigo? –me miró preocupado-
- Nada porque molestarse –sonreí emocionada- No te preocupes mi vida, no pasará nada.
- Es lo que más anhelo.

Volvió su vista al monitor, cerró toda ventana que tuviese abierta ahí y luego jaló mi mano sentándome a ahorcadas sobre él. Besó mis labios con deseo y rodeó mi cintura. Sonreí y volví a besarlo con ligereza.

- Es que… Dara habló conmigo.
- Oh, esa chica. No quiere aceptar el tipo de fiesta que le quiero dar.
- Si Nick, pero deberías comprenderla.
- ¿Porqué? Quiero que tenga lo mejor.
- Y ella lo sabe, pero no quiero algo enorme, ella quiere algo sencillo.
- Es idéntica a ti en ese sentido –rió-
- Creo que si… Bueno, deberías aceptar su propuesta, ¿Ya la escuchaste?
- No pero…
- ¿Por qué no lo haces? Verás que ella siempre necesitará de tu ayuda.
- Bien –bufó- ¿Solo eso?
- Y… Ella me pidió algo, no estoy muy de acuerdo pero…
- ¿Qué quiere?
- Un tatuaje… Dice que uno pequeño.
- No ______. Eso sí que no.
- Pero…
- ¡No! Un tatuaje no, menos un piercing, ¡Nada de eso! ¿Okay?
- Nicholas…
- ¿Vas a ponerte de su lado?
- No, pero creo que…
- Dios ______, ¡No le daré ese permiso! ¿Lo entiendes? ¿O no escuchaste? ¿Deseas de que lo dibuje, o qué? –gritó-
- No –susurré y miré el gran ventanal a sus espaldas- ¿Ya te irás? –Me levanté y tomé mi teléfono-
- ______... No…
- Ya, déjalo así… Me voy, te espero en casa, ¿Si?
- Mi vida…
- Ya… -tomé el café y caminé hasta mi bolso-
- Mi amor.
- ¡Déjalo así Nick! –me giré gritándole-
- Pero… Dios.
- Me voy, espero que te detenga una tormenta y no llegues a casa hoy.
- No seas así.
- Soy como soy imbécil.

Lo miré mal y salí de ahí a toda prisa. Corrí hasta el elevador y cuando las puertas se cerraron, me recosté en la pared plateada con líneas doradas. Estar en ese estado solo provocaba en mi, cambios de humor.
Y detestaba eso.

SIGUELA

¡Síguela! Me encantan tus novelas Smile

.

SIGUELA

No entiendo porque la Rayita llora porque Nick no quiso que Dara se tatuara.. y
¿En que estado esta? ya estoy pensando algo... Hmm
¡SIGUELA!

Sweet Love & Hate – Second Season.
Capitulo Tres.

Sonreí al ver a Nathan y Caleb jugar con su video juegos. Me sentía un poco decaída, sabía el porqué, pero no quería llamar la atención. Dara estaba con su teléfono fuera de la casa y podía verla perfectamente desde la ventana.
Si Nick regresaba pronto, la vería ahí y comenzaría a cuestionarla. Esa chica, estaba entrando en una etapa de rebeldía que quizá, no saldría de ahí en mucho tiempo, en parte la comprendía y en otra no. Era una adolescente con problemas normales.

- Mamá… -habló Nat y lo miré-
- ¿Qué pasa?
- Eh, es que…
- Tuvo una pelea hoy en colegio –soltó Caleb-
- ¿Eso es cierto Nathan?
- Si mamá, pero no…
- Dime la verdad Nathan…
- Mamá…
- El se peleó con otro chico de nuestro salón por una chica… -soltó rápidamente Caleb-
- ¡Eres un entrometido! –Le gritó Nathan-
- ¿Yo? ¡Al menos no soy el que le torció la nariz a Thomas!
- ¿Qué hiciste qué? –Miré sorprendida a Nathan-
- ¡Eres un idiota Caleb, nadie te dio vela en este entierro!
- ¡Ja! Tienes miedo de que mamá te castigue, que es otra cosa.
Grité sorprendida cuando Nathan se tiró sobre Caleb y comenzaron a darse golpes. Me levanté y traté de separarlos, ambos estaban furiosos y solo querían matarse en ese momento. Caleb le dio un golpe en el ojo a Nat y este le so devolvió en su boca.
Me aparté y los dejé que pelearan. Crucé mis brazos y solo me quedé frente a ellos. Nick apareció y se quedó sorprendido al ver a los chicos, Dara estaba detrás de el, ambos me miraron y solo me encogí de hombros. Nick se situó a mi lado y miró a los chicos.

- ¡¡Basta!! –gritó y ambos se detuvieron inmediatamente-
- Papá… -dijo uno de ellos-
- ¿Me explican que es esto?... Porque evidentemente es una pelea, ¿Porqué?
- Es que Caleb…
- ¡No! Tú comenzaste a golpearme, yo solo le dije a mamá lo que había pasado.
- ¡Pero eres un entrometido! –Gritó furioso Nat-
- Al menos no soy un cobarde como tú –sonrió Caleb-

Nathan estuvo a punto de volver a golpearlo, pero Nick lo detuvo dejándolo quieto, ambos seguían viéndose furiosos. Miré a Caleb y le indiqué que se calmara, luego Nicholas soltó a Nathan y este comenzó a respirar tranquilo.

- Ambos están castigados –dije-
- ¡Mamá! –Se quejaron ambos-
- Nada, están castigados, una semana, vayan a su habitación.
- Pero mamá, yo no… -dijo Caleb-
- ¿Qué no escuchas a tu madre? ¡Dijo una semana, castigados, sin salidas! ¿Entendieron? –gritó Nick notablemente enojado-
- Si.

Ambos seguían furiosos. Salieron de ahí y alcancé a oír como iban gritándose. Al menos se separarían al entrar en sus habitaciones. Miré a Nick y suspiré sentándome en el sofá, cerré mis ojos y me tranquilicé en segundos. Luego miré a Nick y a Dara los cuales me miraban expectantes.

- ¿Pasa algo?
- ¡El me quitó mi teléfono! –Gritó Dara y cerré mis ojos-
- ¿Por qué Nick? –lo miré a él-
- Porque la saludé y ella tan siquiera me vio.
- Pudiste acercarte a ella, saludarla bajando su teléfono, así como yo hago contigo –le sonreí-
- Si claro.
- Papá, eh…
- ¿Qué pasa Dara?
- ¿Ves? ¡No puedo decirte nada porque respondes así! ¡Eres un desconsiderado!
-rió- ¿Yo? Claro que no Dara.
- ¡No te rías!... ¡Te estás burlando de mi! –gritó molesta-
- No me burlo de ti Dara.
- ¡Claro que sí!
- ¡Claro que no! –rió el-
- ¡Agh! ¡Eres un molesto!

Ella se giró y comenzó a caminar hasta la puerta, salió de ahí y gritó furiosa afuera. Miré a Nick seria y el solo rió suavemente, le dejé ir un golpe y él se quedó callado automáticamente.

- ¡Hey! ¿Qué te pasa?
- ¡La vas a enojar Nick! No te burles de ella.
- Pero, es que… -rió-
- ¡Nicholas! Dios, las cosas son imposibles contigo.
- No hermosa –tomó mi mano- Ven acá.
- ¡Suéltame Nick!
- No, ven acá.

Me abrasó fuerte y yo no tuve otra opción que relajarme en sus brazos, caminó lentamente y me hizo caer sobre él en el sofá, me levanté un poco y lo miré.

- Lamento haberte gritado hoy preciosa. Es que…
- Ya, olvídalo, perdóname tu a mí.
- No, porque tu no habías hecho nada. Solo son tus horribles pero lindos cambios de humor.
- ¿Cómo así? –reí-
- Si, son horribles, pero me encantan.
- Oh, ya.
-besó mi cuello y llevó sus manos hasta mi estomago- ¿Cuándo irás al médico?
- Eh, la próxima semana. ¿Irás conmigo?
- Claro que si hermosa.
- Bien –reí-

~~~~~

Miré a Dara la cual llevaba su pijama puesta y un moño mal hecho que dejaba caer unas mechas de cabello. Estaba muy callada y sus ojos estaban pequeños. En cambio los chicos, ya estaban contentos y se quitaban la comida el uno con el otro, Nick solo los observaba de reojo, pero más a Dara.
Ambos sabíamos que algo le pasaba.

- Dara –le hablé-
- ¿Si? –Me miró rápidamente y luego volvió la mirada a su cena-
- ¿Te pasa algo, cariño? Te noto muy rara.
- No mamá, es… Solo estoy cansada. Hoy tuve práctica.
- Oh. Ya.

Miré a Nick y le hice una mirada de insistencia a que le hablara a Dara, el sonrió y luego miré a los chicos. Ellos me sonrieron pero yo solo los miré seria.

- Dara…
- ¿Qué? –Miró a Nick-
- Nada, solo quería preguntarte de tus planes para tu fiesta.
- ¿Podemos invitar a nuestros amigos? –Dijeron los chicos-
- Ustedes cállense, sigo enojada con ustedes.

Ellos me miraron serios y luego volví a ver mi plato con pollo, arroz y verduras, fruncí mis labios y aparte el plato tomando el pequeño vaso con jugo de pera. Era lo único que se me antojaba.

- Eh, bueno, ya te dije que quiero una fiesta pequeña.
- Ajá. Estoy de acuerdo con eso.
- Si, y… Quisiera visitar lugares para poder realizar la fiesta.
- ¿Quieres que te acompañe a ver? Se de muchos lugares que podrían gustarte.
- Gracias.

Dara sonrió y siguió comiendo, Nick continuó preguntándole cosas para la fiesta y ella con gusto las respondió, si no había ningún problema, ellos harían la mejor fiesta que se hubiera visto.

Miré a Nick desabotonarse su camisa mientras estaba sentado en la cama. Negué y volví a mirarme al espejo y secar mi cabello, por último, lo dejé suelto y me coloqué una bata morado fuerte, quité los aretes pequeños que ese día llevaba y caminé hasta el enorme armario que nos pertenecía a ambos, los guarde en el joyero de plástico transparente donde además, tenía mi maquillaje clasificado por estilo y color.
Tenía mucho ahí, y el último de los cinco cajones, estaban las joyas completamente ordenadas. El armario era enorme y gracias a Dios estaba dividido en dos, uno de Nick y el otro mío, lo cual nos ahorraba problemas en la mañana. Salí de ahí y me tiré en la cama, Nick me miró y sonrió.

- No deberías abusar linda.
- No me pasa nada Nick.
- Solo quiero asegurarme de que esta vez no te pase nada.
- No Nick, Dios, en serio eres molesto.

Me puse boca abajo y tomé una revista que estaba en medio de la cama y comencé a ojearla, reí cuando Nick se colocó sobre mí y comenzó a besar mi espalda medio descubierta. Sentí su mano en mis piernas y subió lentamente levantando la bata y dejando ver el pantie de algodón color morado.
A él le encantaba que llevara mi ropa interior a juego.

- Nick, no hagas eso –reí-
- ¿Por qué hermosa? –Rió y siguió regando besos por mi espalda hasta llegar a mi cuello-
- Porque no. Ve a cambiarte o que se yo. –me moví un poco pero el sujetó mis caderas-
- ¿Qué no sabes que duermo así?

Me giró y noté que solo llevaba puesto su bóxer. Reí y me apoyé con mis codos sobre la cama, el se estiró, abrió mis piernas y se acomodó para luego besarme, rodeé su cuello con mis brazos y le seguí ese beso. Me levantó un poco y se tiró en la cama llevándome con él. Quedé sobre su cuerpo y escondí mi cabeza en su cuello mientras regaba besos por él.
Sentí sus manos bajar mi pantie lentamente, me alejé y terminé de quitarlo, luego me senté sobre ‘el ’ y me moví suavemente provocando que gimiera- Reí y besé sus labios, el subió mi bata y la quitó rápidamente. Sonrió al darse cuenta de que no llevaba brassier. Gemí cuanto tomó uno de mis senos y lo llevó a su boca mientras el otro, solo recibía pequeñas caricias.
Me giró dejándome debajo de él y comenzó a, prácticamente, devorar mi cuello. Gemí al sentir sus manos bajar desde mi estomago hasta mi entrepierna. Bajé mis manos por su espalda y las metí dentro de su bóxer, rió suavemente y él se lo quitó en un abrir y cerrar de ojos.
Minutos después, gemí por lo bajo, mientras me aferraba a las sabanas cuando entró en mi lentamente, sonreí y lo miré a los ojos, solté otro, diminuto, gemido cuando se movió y me arqueé incitándolo a seguir. Sonreí gimiendo cuando sus movimientos se hicieron más precisos.
Por último, ambos nos hundimos en un solo grito de éxtasis y me dejé caer en la cama. El se quedó sobre mí tratando de no aplastarme. Lo empujé un poco y luego, rodeé su cintura con una de mis piernas, sin hacer que saliera de mí. Me moví un poco y el gimió, sonrió y me vio.

- No me provoques más hermosa.
- No tiene nada de malo, guapo –reí y él me abrasó-
- Si claro. Nada. Hey, ¿Cuándo le diremos a los chicos? –susurró en mi oído.
- No lo sé, pero por el momento no. A penas tiene el tamaño de un guisante.
- ¿Lo dices enserio?
- Si –reí- Lo vi en internet, en un sitio especializado en eso.
- Oh ya. –Besó mi frente- Pero debemos decírselos pronto.
- Lo sé Nick, lo sé.

Reí y el volvió a besarme, nos tapó a ambos y yo hice que la sabana nos cubriera de pies a cabeza. Lo besé con desenfreno y volvimos a lo mismo, solo que esta vez, debajo de las sabanas, lo cual, lo hacía más excitante.

Ajdsfslks ¡Sabia que la Rayis estaba embarazada! OMG
Es increible Nick le haya quitado el telefono a Dara porque ella no le correspondio el saludo ._.
¡lo ame!
SIGUELA

Ps: PRIMERA EN COMENTAR. Fuc*k yeah, por una vez minimo ¿no?

¡Síguela! me encanta Smile

.

AWWW, ESTA EMBARAZADA JKJKSJKAJ Me encanto el capitulo, aparte Dara y Nick cuando hablaron de la fiesta se llevaban re bien. Me identifico con Dara, mi papa es demasiado molesto xD Siguela pronto

SIGUELA

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» Sweet Love (Nick y tú) Romantica-Semi Hot
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» when i look at you¡¡¡ i feel...love? i think yes,because i love you... TU Y NICK (romantica-con solo algo de drama)
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