Jonas Brothers Venezuela Foro Oficial
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.


Aqui fanaticas y fanaticos de los Jonas Brothers en Venezuela y como en otros paises.. da click y unete al mundo de la diversion Jobromania
 
ÍndicePortalÚltimas imágenesRegistrarseConectarse
¿Quieres participar en la nueva imagen del foro? Ingresa AQUI y deja tu comentario

 

 La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)

Ir abajo 
+37
Addiction_Jonas
Fany Jonas
K2Mrpresidentedanger
joaliz
Marianna * perez
Cathe
maryfred_jonas
ILoveEzraFitz♥
R@k€l
LauMil
Bacci Heart
Maiih* [:
paurivera
*MiReYa*JM*KiMi
AniTolraJonas...*-*
deidany
GabiJobros
Llala
nickjonas66
nickjonas699
MiriamLondonFoolishly
Gabriiella
Mayree03
2010_YearOfNoFear
Astrid Carrillo
AleJonasNick
mayra d'jb
Alii
MylaSmile JonasLovato
karlha_nick
Lorean De Jonas !
More Jonas
I do Believe ✫
#SkyScraperWithYou.
reymarDejonas
Katyguzman.
Daniela D JONAS
41 participantes
Ir a la página : Precedente  1 ... 8 ... 13, 14, 15, 16  Siguiente
AutorMensaje
ILoveEzraFitz♥
Gran forista y Jonatica
Gran forista y Jonatica
ILoveEzraFitz♥


Cantidad de envíos : 5808
Edad : 28
Localización : Lima - Perú
Fecha de inscripción : 19/02/2010

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 26th 2010, 16:10

wiii trata de subir capiii!!!!!
tambien a mi aveces se me da la locura de hacer tarea
jajaj esperare a que subas no importa si hoy o mañana solo sube
mejor si es hoy Very Happy
Volver arriba Ir abajo
mayra d'jb
Casada Con
Casada Con
mayra d'jb


Cantidad de envíos : 1531
Edad : 31
Localización : Barquisimeto -Lara
Fecha de inscripción : 30/10/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 26th 2010, 21:08

Dale corazon!! Grax por pasar!! ♥

cuando puedas sube el capi!! por aqui lo espero!!
Very Happy Canta
Volver arriba Ir abajo
http://http:/twitter.com/mayra0760
reymarDejonas
Forista!
reymarDejonas


Cantidad de envíos : 96
Edad : 29
Localización : AVENIDA: OJOS DE KEV CALEE: RULOS DE NICK CASA: SONRISA DE JOE
Fecha de inscripción : 12/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 27th 2010, 16:40

hola chicas!!! estoy escribiendo de parte de daniela hoy no podia subir capitulo porque ayer se fue el internet y su hermano nisiquiera termino la tarea dice ella que bien hecho por no dejarla que se metiera en la pc jajajajaaj.... mañana no sabe si va a subir cap porque va a salir con su familia... byeee--
Volver arriba Ir abajo
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 12:24

dale rey siguela tu entoncessssssss
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 14:34

Holaaaa!!!!
volvi!!!!
ya subo cap!!!
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 15:55

CONTINUACION:

LLAMADA TLF

Tu: Alo???

Rey: Hola _____(tsn)!!!

Tu: Hola!! te llamaba para ver si mañana me acompañan a comprar mi auto despues de hay nos vamos a la UNI!!!

Rey: Claro!!! a que hora???

Tu a las 7:00am! yo las busco!!!

Rey: Ok!! entonces nos vemos!!!

Tu: Dale!!! bye!!!

Rey: Bye!!!

FIN DE LA LLAMADA

Te quedastes dormida.......Al dia siguiente te levantastes y hicistes lo de costumbre,(eran las 7:00 am) te pusistes esto: http://4.bp.blogspot.com/_dISkoprgqWc/SpqdxMsX1-I/AAAAAAAACAg/yJl5i2j4iHM/s400/Miley_012.jpg

Bajastes; tu mama estaba en la cocina tomando caffe.

Tu: Bendicion!!! - le distes un beso en la mejilla-

Te dirigistes a la cocina y te servistes caffe y agarrastes unas tostadas. Te sentastes en la mesa y comistes. Luego de terminar de comer te levantastes y lavastes lo que habias ensuciado...
Tu mama ya te estaba esperando en la sala..

Tu: Mama dejame buscar mi cartera!!!!

Tm: Ok!! apurate!!!

Tu: Ok!!! - subistes a tu habitacion y tomastes tu cartera y el celular....bajastes!!!

Tu: Vamos!!!

se montaron en el auto y tomastes tu tlf para llamar a edglys!!!

LLAMADA POR TLF

Tu: Hola!!!

Edg: Hola!!!

Tu: Estoy en camino para tu casa!!!

Edg: Ok!!! ya yo estoy lista!! te espero afuera!!

Tu: Ok!! bye!!!

FIN DE LA LLAMADA

Tm: Ya esta lista???

Tu: Si!!!

Tm: Ok!! - llegaron a la casa de edg y ella se subio-

Edg: Hello!!

Tu: Hi!!

Tm: Hola!!!

Tu: Ahora dejame llamar a las chicas!!

Tm: Ok!!

LLAMADA TLF

Tu: Holaaa!!!

Lise y Rey HOLAAAA!!







chicas la sigo ahora juradito!!!! de verdad!!
tengo muchas cosas que hacer!!! pero de verdaaad la sigo ahora!!!
besos gracias por comentar!!
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 18:42

Tm: Ok!!

LLAMADA TLF

Tu: Holaaa!!!

Lise y Rey HOLAAAA!!

Tu: Estan listas???

Lise: SIII!!!

Rey: Estamos afuera!! esperandote!!!

Tu: Ok!!! ya voy llegando!!

FIN DE LA LLAMADA

Llegaron a la casa de lise y rey ....... ellas se montaron!!!
(iban asi: rey: http://www.blogfashion.net/wp-content/uploads/2008/09/blake_lively.jpg
lise: http://buzznet-00.vo.llnwd.net/media/jj1/2007/12/blake-piper/guggenheim-blake-lively-15.jpg
Edg: https://www.facebook.com/pages/ANAHI/54570640613?v=photos&ref=ts#!/photo.php?pid=269429&id=1849623969)

lise y rey: Buenos dias!!!

Tu y edg: Holaaa!!! - ya iban en camino-

Rey: Ya mas o menos tienen idea de que auto se van a comprar????

Tu: No se todavia!!!

Edg: Buggy!!! rosa!!!

Lise: Woooow, quien aguanta a edglys en un buggy y rosa!!!

Todas: Jajajajaja.

Llegaron y se bajaron..
La tienda era super grande, habia todo tipo de autos.

xxxxx: Buenos dias!!! (eran las 8:00am)

Todas: Buenos dias!!!

xxxxx: Mi nombre es Angeline Diaz!! en que les puedo ayudar??

Tu: Hola mi nombre es__________(tn)!!! y vengo por un auto!! creo que es obvio!!! jajaja

Ang: Uno en especifico??

Tu: Que me recomienda???

Ang: JEJEJEJE, de verdad no se, porqueyo solo ayudo un poco aqui, mi papa es el dueño de esto y cuando me aburro vengo ayudar!!!!, pero lo unico que se es que casi todas las chicas que vienen, es por esa camioneta. es esta: http://repositorio.myautomovil.com/uploads/img/Range-Rover-Sport-movfrente_th_3.jpg

Tu: Es perfecta!!! la quiero!!!

Edg: Yo quiero un buggy!!

Ang: Ven para mostrarte unos nuevos que llegaron!!!

Edg: Ok!!!

Todas se fueron a donde estaban la parte de los buggys

Edg: Wooooow!! to quiero ese!! (era este: http://www.diablomotor.com/wp-content/uploads/2008/02/volkswagen-beatle-pink.jpg)

Ang: Ok!!! - ella iba anotando los modelos de los autos en un papelito- sra. pase por aca que estas son las oficinas!!!

Tm: Ok!!! edglys ven!!!

Edg: Chicas ya vengo!!

Todas: Ok!!!

Rey: Seria divertido trabajar aqui!!!

Lise: Si!!!

Ang: Si!!!! sobre todo cuando vienen chicos lindos!!!

Todas: Jjajajajajaja

Tu: Tu que edad tienes???

Ang: 17 años!!!

Tu: Nosotras igual!!!

Rey: Dame tu numero de tlf!! para ver si un dia salimos de compras!!!

Ang: Oh si es: 00000000000!!! demen el de ustds!!!

Tu: 0000000000!!!

lise: 0000000000!!!!

Rey: 0000000000!!

Paso 1 hora, hablaron mucho!!! (eran las 9:00am) en eso sale edglys con tu mama.

Edg: Si!!! por fin!!

Todas: jajajaja!!

Tu: Gracias mama!!

Rey: Bueno!!! ya vamoss que entramos a las 10:30am!!!

Tu: Si!!

Edg: Byeee!!! me voy en mi nuevo auto!!! vente liseth!!!

Lise: Byeee chicas nos vemos alla!!! chao angeline!!

Ang: Bye!!! -se montaron en el auto y se fueron-

Tu: Bueno Rey vamonos nosotras!!!!

Rey: Si!!! Bye angeline fue un gusto!!! hasta luego sra.___________(el nombre de su mama)!!!

Tu: Bye hablamos angeline!!! chao mami nos vemos en la casa!!

Tm: Dios te bendiga!!! - se montaron en la camioneta-

Tu: Menos mal que es automatica!!!

Rey: Si!!! jajaja

Tu: Quieres que te enseñe a manejar??? - ya iban en camino-

Rey: Ni lok!!!!

Tu: Anda sera divertido!!!

Rey: Bueno esta bn!! pero si me multan tu pagas!!!!

Tu: Ok!! jajaja!!! la semana que viene me voy a las bahamas con la familia de nick!!!

Rey: Que fino!!!

Tu: Si!!! creo que edglys tambn va!!

Rey: Qye que fino!!!

Tu: Si!!!

Rey: Y edglys no esta peliada con Joe???

Tu: Si!!!

Rey: Y va a ir asi peliada con Joe????

Tu: No se voy a tratar de convencerla!!!

Rey: Ahahaha ok!! - pasaron 10 min, ya habian llegado y estaban todas en la caffeteria (eran las 10:00am)

Tu: Y que tal el auto???

Edg: Super!!! y que tal la camioneta???

Tu: Super tambn!!! mira hable con los padres de nick!! y vamos a las BAHAMAS!!! con ellos!!!

Edg: Estas lok??? yo no voy!!!

Tu: Vamos edglys a lo mejor alla se contentan tu y joe!!!

Edg: Tengo que pensarlo!! mañana te digo!!!

Tu: Pero piensalo bn mira que tu suegros estan contando contigo!! te quieren conocer!!!

Edg: Y ellos van?=??

Tu: Quienes??

Edg: Los padres!!!

Tu: Si!!

Edg: Ok!!! te digo mañana!!

Rey: Chicas ya estamos entrando!!!

Lise: Si!! vamos!!

Entraron a todas las clases!!! super aburrido se paso el dia, ya era de noche y estabas en tu habitacion escuchando musica y haciendo tarea.. Ya habias cenado (eran las 9:30pm) te acostastes a dormir ya que mañana entraban a las 7... ustds habian quedado que pasabas buscando a rey y a lise!!!
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 18:44

ahahaha no aparece el vestuario de edglys!!! bueno aqui esta otro: http://www.musicadanny.com/wp-content/uploads/2008/08/anahi-45-musicadanny.jpg
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 18:45

Chicass las quiero camenten!!!!
mañana bajo cap!!!
besos!!
Volver arriba Ir abajo
mayra d'jb
Casada Con
Casada Con
mayra d'jb


Cantidad de envíos : 1531
Edad : 31
Localización : Barquisimeto -Lara
Fecha de inscripción : 30/10/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 29th 2010, 20:09

holaaaaaaaaaa!!!! siguelaaa!!!! Smile
dale que quierooo saber más!!!!! Baila
Volver arriba Ir abajo
http://http:/twitter.com/mayra0760
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 30th 2010, 12:14

siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela
Volver arriba Ir abajo
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeMarzo 30th 2010, 12:19

siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 1st 2010, 16:42

Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!

volvi!!!!!, ya bajo cap!!!
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 1st 2010, 18:14

CONTINUACION:

Edg: Los padres!!!

Tu: Si!!

Edg: Ok!!! te digo mañana!!

Rey: Chicas ya estamos entrando!!!

Lise: Si!! vamos!!

Entraron a todas las clases!!! super aburrido se paso el dia, ya era de noche y estabas en tu habitacion escuchando musica y haciendo tarea.. Ya habias cenado (eran las 9:30pm) te acostastes a dormir ya que mañana entraban a las 7... ustds habian quedado que pasabas buscando a rey y a lise!!!

Al dia siguiente, te parastes, hicistes lo de costumbre.
te pusistes esto: http://3.bp.blogspot.com/_dISkoprgqWc/Spqk3gq0dtI/AAAAAAAACBI/SNkZ8zNJX18/s400/debby-ryan-004.jpg
Agarrastes tu cel y marcastes el numero de Rey.
Mientras que llamabas te montabas en la camioneta.

LLAMADA TLF

Tu: HELLOOOOOOO!!!

Rey: Helloooo!!!

Tu: Ya estan listas???

Rey: No!!

Tu: Ok !!! yo estoy calentando la camioneta!!! apurense!!!

Rey: OK!!

FIN DE LA LLAMADA

Se termino de calentar la camioneta y salistes para la casa de reymar y liseth.
Llegastes a la casa de las chicas y esperastes como unos 5 min. tomastes tu cel y marcastes el numero de edglys.

LLAMADA TLF

Tu: HOLAAA!!

Edg: Holaaa!!!!

Tu: Ya te vas para la uni???

Edg: Si ya estoy calentando el auto_!!!

Tu: Ok!!! entonces nos vemos alla!!!

Edg: Ok!! bye!!

Tu: Bye!!

FIN DE LA LLAMADA
(ERAN LAS 7:00am)
Esperastes 10 min mas y ya estabas super molesta...... Hasta que vistes que venia rey y lise asi: http://www.elrincondemoda.com/wp-content/uploads/2008/08/ashley.gif (reymar es la de los lentes y lise la que esta de negro)

Se montaron rey adenlante y lise atras.

Tu: POR FIN!!!- ya estaban en via-

Rey: No seas tan exagerada!!!

Tu: Yo exagerada???? por que se tardaron tanto???

Rey: Por que LISETH no encontraba su Tlf!!!!

Lise: Sabes que no puedo vivir sin el!!!

Tu: JAJAJAJAJA

Rey: Tengo ganas de comprarme una mini lapto azul!!!

Tu: Si??? yo vi una en un centro comercial super!!!

Rey: Vamos el viernes!!

Tu: Ok!!!

Rey: y como esta Kev???.....Danger y mickey??? ahahaha y frank???

Tu: Super bn gracias a dios!!! poque lo preguntas??

Rey: Nooo por nada!!

Lise: Rey no seas tonta dile!!!

Rey: No!!!

Tu: Que cosaa???? vamos diganme!!!

Lise: Bueno se lo voy a decir!!!! es que a Rey le............. - interrumpida-

Rey: Me gusta Kev!!! Feliz???

Tu: Si y mucho, Wooooow y nunca se lo dijistes???

Lise: No!!

Tu: Porque??

Rey: Por que yo era su mejor amigay a el le encantaba una chica que se llamaba......Danielle!!!

Tu: Si eres tonta!!!

Rey: Buenooo!!! y que querias que hiciera???? que le dijiera " Oye Kev no seas novio de Danielle por que me gustas"????

Tu: Algo parecido!!

Rey: Conociendolo me dejaria de hablar!!!

Tu: Buenoooooooooo!!! si tu lo dices!!

Lise: Por fin llegamos!!!

Tu: Si!! mira alla esta edglys!!!

Rey: Si!!!

(Edglys estaba asi: http://www.shrani.si/f/1f/wk/3l6VdgUf/2/aaaaaa.jpg y estaba sentada en unas mesitas)

Estacionastes la camioneta y se bajaron, Caminaron en direccion a donde estaba edglys (eran las 7:30am)

Edg: Holaaaa!!! ya las iba a llamar!!

Tu: Si!!! nos tardamos por Liseth!!!

Rey: Si!!!

Lise: Ahahahaha no me hechen toda la culpa a mi!!!

Tu: Y aquien se la vamos a hechar??? atu tlf??

Lise: No pero.........Ahahahaha olvidenlo!!!

Tu:y nosotras ya no entramos???

Edg: No tenemos la primera materia!!! la profe no vino!!!

Tu: Ahahahahaha que bn!!!

Edg: Chicas vamos a el caffetin!!!

Tu: Vamos!!!

Bueno paso el dia super rapido y aburrido como siempre ( Ya no hace falta decirlo jajaja)

Bueno llegastes a tu casa y lo primero que hicistes fue entrar a la cocina.
Tu tlf empezo a sonar.

LLAMADA TLF

Tu: Alo???

Nick: Hola!!!

Tu: Holaaaa mi amor!! como estas??

Nick: Bn bn mi vida y tu???

Tu: Bn!!! mi amor el jueves puedes venir a cenar???

Nick: Claro!!! pero llego como a las 8, te parece???

Tu: Si!!! y eso que vas hacer???

Nick: Emmmmm..... yo???

Tu: Si tu!!!

Nick: Bueno....a... terminar....unas cosas para el viaje!!!!

Tu: Ahahahaha ok!!!

Nick: Y que haces???

Tu: Nada buscando que comer!!!

Nick: Mmmmmm!!! Bueno te dejo solo queria saber como estabas!!!

Tu: Que bn!! ok!!! nos vemos el jueves!! le mandas saludos a todos!!! en especial a Frank!!!

Nick: Ok!! bye amor te quiero muchoooooo!!!!

Tu: Yo tambn !!!

FIN DE LA LLAMADA

Tomastes de la nevera una torta de chocolate y subistes a tu habitacion (eran las 3: 45pm)
te sentastes en el suelo (tu habitacion era asi: http://3.bp.blogspot.com/_xW3mrMQRPzQ/SqsisaVQdBI/AAAAAAAAAvo/CeQhJa1rqqI/s1600/dormitorios-juveniles-habitaciones-jovenes-varones-bedroom-colores-verde.jpg) con el suelo fulll de almohadas de colores)
Prendistes la TV y pusistes TNT, estaban pasando una peli y te quedastes dormida en el suelo...

Al dia siguiente te levantastes sobre saltada al ver que te habias quedado dormida en el suelo, vistes el reloj y eran las 9:00am, solo tenias 1 hora para acomodarte, en fin hicistes lo que haces todas las mañanas, te sepillastes, te bañastes, te acomodastes y desayunastes.

estabas vestida asi: https://www.facebook.com/photo.php?pid=189602&id=109907329035535#!/photo.php?pid=245422&op=2&o=global&view=global&subj=317436102574&id=100000162968205
Como habian quedado que edglys iba a buscar a las chicas no te preocupastes mucho.
Ya estabas en la camioneta esperando que se calentara (eran las 09:50am)
Se termino de calentar y arrancastes para la uni.
Llegastes y estacionastes la camioneta.
Te bajastes y agarrastes tu cel para llamar a Rey.

LLAMADA TLF

Tu: Alo???

Rey: Hola!!! donde estas??? ya vamos entrando!!!

Tu: Ok ya voy para alla!!!! en que aula estan??

Rey: En la 7!!

Tu: Ok!!

FIN DE LA LLAMADA

Caminastes super rapido, hasta que llegastes, te sentastes donde estaban las chicas...

(las chicas estaban asi: http://images.google.co.ve/imgres?imgurl=http://static.fannyshow.com/wp-content/uploads/2008/11/demilovatoyselenagomesmejoresamigas.jpg&imgrefurl=http://fannyshow.com/selena-gomez-y-demi-lovato-mejores-amigas-de-paseo-fotos/&usg=__E0bNRoDeRd6PC4gJH9GZp9v4HLo=&h=480&w=332&sz=65&hl=es&start=13&itbs=1&tbnid=maFUk3_DvycM1M:&tbnh=129&tbnw=89&prev=/images%3Fq%3Dropa%2Bde%2Bdemi%2Blovato%26hl%3Des%26gbv%3D2%26tbs%3Disch:1

rey como demi
edg como selena
liseth como la otra)
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 1st 2010, 18:20

Chicas en esta parte:

Al dia siguiente te levantastes sobre saltada al ver que te habias quedado dormida en el suelo, vistes el reloj y eran las 9:00am, solo tenias 1 hora para acomodarte, en fin hicistes lo que haces todas las mañanas, te sepillastes, te bañastes, te acomodastes y desayunastes.

estabas vestida asi: http://4.bp.blogspot.com/_XNaD_rphqOk/SJqgrENXN0I/AAAAAAAAPgA/1kA0Yoa-g-Q/s400/demi-bb-blogdelatele.jpg
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 1st 2010, 18:21

Chicas las quieroo muchoooo grax por comentarrrr
Volver arriba Ir abajo
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 1st 2010, 21:48

siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 3rd 2010, 17:21

Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!

Ya bajo cap!!! corto es que me dieron poco tiempo en la compu que lala!!!
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 3rd 2010, 18:08

CONTINUACION:

LLAMADA TLF

Tu: Alo???

Rey: Hola!!! donde estas??? ya vamos entrando!!!

Tu: Ok ya voy para alla!!!! en que aula estan??

Rey: En la 7!!

Tu: Ok!!

FIN DE LA LLAMADA

Caminastes super rapido, hasta que llegastes, te sentastes donde estaban las chicas...

(las chicas estaban asi: http://images.google.co.ve/imgres?imgurl=http://static.fannyshow.com/wp-content/uploads/2008/11/demilovatoyselenagomesmejoresamigas.jpg&imgrefurl=http://fannyshow.com/selena-gomez-y-demi-lovato-mejores-amigas-de-paseo-fotos/&usg=__E0bNRoDeRd6PC4gJH9GZp9v4HLo=&h=480&w=332&sz=65&hl=es&start=13&itbs=1&tbnid=maFUk3_DvycM1M:&tbnh=129&tbnw=89&prev=/images%3Fq%3Dropa%2Bde%2Bdemi%2Blovato%26hl%3Des%26gbv%3D2%26tbs%3Disch:1

rey como demi
edg como selena
liseth como la otra)

Pasaron las horas, veias que entrabas y entrabas a las clases y nada que se terminaban.
Hasta que por fin llego la hora de salida que era a las 3:00pm
Ya se encontraba en el estacionamiento.

Tu: Bueno chicas!!! Bye me tengo que ir!!!

Rey: Por que tan apurada???

Tu: Por que mi papa llega hoy y tengo que preparar todo para mañana, ya que les voy a presentar mis padres a Nick!!

Todas: Ok!!!

Tu: Asi que mañana no voy avenir!!!!

Todas: OK, bye!!!

Tu: Bye!!!


Te fuistes a tu casa, cuando llegastes subistes super rapido a la habitacion de tus padres, ya hoy llegaba tu papa.

Tu: HOLAAAAAAAA PAPAAAA!!! - Saltastes encima de el abrazandolo -

Tp: Hola hija dios te bendiga, te extrañe!!!

Tu: Yo tambn!!!

Tp: Como te ha ido???

Tu: Super bn y a ti??

Tp: Bn gracias a dios!!

Tu: Papi mañana hay una cena super importante y especial!!!

Tp: Donde?

Tu: Aqui!!!

Tp: Y cual es el motivo??

Tu: Que les voy a presentar a alguien muy especial!!

Tp: Mmmmm, un muchacho???

Tu: Si!!!

Tp:Bueno entonces esta bn!!! a que hora es???

Tu: A las 8pm!!!

Tp: Perfecto!!!

Tu: Mañana no voy a ir a clases!!!

Tm: Por que???

Tu: Por que quiero pasarla con mi papa y planificar la cena!!!

Tm: Espero que ese muchachito no sea igual que alejandro!!!

Tu: Ya mama!!!

Tp: Porque no vamos los 3 a comprar todo para la cena??

Tm: No puedo!! Mañana tengo que terminar el vestido de novia de Jennifer Lopes y el vestido de 17 años a una tal Selena Gomez!!! (Jajajaja)

Tu: Bueno no importa!!!

Tp: OK!!! nos vamos antes del almuerzo!!!

Tu: Ok!!! Bueno me voy!!! hasta mas tarde!!!

Tm y Tp: Hasta mas tarde!!!

Tp: Oye!!! hija pero todavia es temprano la cena podri ser hoy que te parece!!

Tu: Ok!!! dejame llamarlo a ver!!!

tp: ok!!!

Te fuistes a tu habitacion.

(aclaracion: Alejandro fue tu ex novio, terminaron por culpa de tu mama, ya que alejandro tenia problemas economicos, y tu tenias que estar con un chico de la "alta sociedad", despues de eso tu te mudastes y nunca mas se comunicaron)

Tomastes tu cel y marcastes el numero de nick.

LLAMADA TLF

Nick: Alo!!!

Tu: Hola!!!

Nick: Hola mi vida!!!

Tu: Nick te llamaba para ver si puedes venir hoy a mi casa!!! la cena fue cambiada!!!

Nick: Emmmm, si ok a las 8 estoy alla!!!

Tu: Ok mi amor te quiero mucho!!!

Nick: Igual!!!

FIN DE LLAMADA

Salistes corriendo a la habitacion de tus padres.

Tu: Si viene hoy!!!
Volver arriba Ir abajo
mayra d'jb
Casada Con
Casada Con
mayra d'jb


Cantidad de envíos : 1531
Edad : 31
Localización : Barquisimeto -Lara
Fecha de inscripción : 30/10/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 3rd 2010, 21:15

Hola Danii! ♥ siguela porfa!! Baila
Volver arriba Ir abajo
http://http:/twitter.com/mayra0760
deidany
Comprometida Con...
deidany


Cantidad de envíos : 984
Localización : Maracay - Aragua
Fecha de inscripción : 29/10/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 6th 2010, 20:05

siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-
Volver arriba Ir abajo
https://twitter.com/deidany
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 7th 2010, 17:29

siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela-siguela
Volver arriba Ir abajo
Daniela D JONAS
Vecina De Los Jonas!
Daniela D JONAS


Cantidad de envíos : 311
Edad : 29
Localización : En el corazon de los Jonas
Fecha de inscripción : 24/11/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 8th 2010, 11:11

Holaaaaaaaaaaaaaaaa chicasssssssss!!!
gracias por sus comens!!!!!
mañana bajo cap!!! hoy no puedo por que tengo que estudiar para biologia!!! y no eh bajado cap por las pruebas!!!
besos!!!
Volver arriba Ir abajo
I do Believe ✫
Casada Con
Casada Con
I do Believe ✫


Cantidad de envíos : 1151
Edad : 30
Localización : los JONAS son mi VIDA LOS AMO
Fecha de inscripción : 16/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 9th 2010, 21:19

chicas daniela sube capitulo mañana
por ahorita esta estudiando porque tenemos
que presentar la prueba para la uni ella
mañana en lo que llegue a su casa sube capi
Volver arriba Ir abajo
reymarDejonas
Forista!
reymarDejonas


Cantidad de envíos : 96
Edad : 29
Localización : AVENIDA: OJOS DE KEV CALEE: RULOS DE NICK CASA: SONRISA DE JOE
Fecha de inscripción : 12/12/2009

La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitimeAbril 13th 2010, 19:08

siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa esta reee buenaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
Volver arriba Ir abajo
Contenido patrocinado





La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Empty
MensajeTema: Re: La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)   La Vida Tiene sus Sorpresas  ( nick y tu ) (divertida y romantik) - Página 14 Icon_minitime

Volver arriba Ir abajo
 
La Vida Tiene sus Sorpresas ( nick y tu ) (divertida y romantik)
Volver arriba 
Página 14 de 16.Ir a la página : Precedente  1 ... 8 ... 13, 14, 15, 16  Siguiente
 Temas similares
-
» EL AMOR DE MI VIDA (NOVELA ROMANTIK) NICK Y TU)
» (nick y tu) Eres lo que yo siempre soñe, el amor de mi vida (romantica y divertida)
» "La historia de mi vida" Nick y tu (romantica-dramatica-divertida) (:
» mi vida es una caja llena de sorpresas (tu y joe) - de todo un poco
» "Por Ti,Corro Los Riesgos".... Nick Y Tu..Hot-Romantik-Drama.

Permisos de este foro:No puedes responder a temas en este foro.
Jonas Brothers Venezuela Foro Oficial :: Webnovelas/Fics :: Jonas Brothers: Fan ficts :: DE TODO UN POCO-
Cambiar a: