Nunca me Abandones [Joe&__]

Nicholas observó la carretera pensativo. Tan sólo faltaban unos pocos minutos para que llegara a casa, con _____.
Sentía que su corazón palpitaba rápidamente al pensar en ella.
Ahora más que nunca comenzaba soñar con un futuro junto a ella.
Ya podía verse dentro de cinco años, todo un hombre de família.
Junto a la mujer que amaba y con un precioso hijo o una princesita.
Deseaba con todas sus fuerzas que todo saliera como él esperaba, que nada fallase.
Había estado pensando en su extraña situación.
En como el destino podría ser tan retorcido para dejar que la mujer que el amaba con todo su ser estuviese casada con otro hombre.
Cómo había sido tan cruel durante mucho tiempo, cuando era un niño, sin haber hecho absolutamente nada, sin haber herido a nadie lo habían abandonado a su suerte.
Cómo la vida había sido injusta con él durante toda su vida.
En la forma en la que al haberlo arrojado a un mundo se desesperanza, de dolor, lo habían hecho madurar a una edad temprana, no dejandolo disfrutar de una infancia normal, como la de cualquier niño.
Durante todos aquellos años había intentado autoconvencerse de que él tenía la culpa de aquella situación. Había intentado dar respuestas a todas aquellas preguntas que rondaban en su cabeza al observar como los demás niños tenía un padre y una madre que los apoyaba cuando estaban mal, cuando corrían y se lastimaban. Ellos tenían a alguien en quien apoyarse cuando sentía que su mundo se venía abajo.
Sin embargo el no tuvo a nadie cuando había sido herido de diferentes maneras. En lugar de encontrar amor encontraban rechazo y soledad.
Todo lo que tenía se lo arrebataban, no importaba que fuera.

La vida había sido y sigue siendo injusta con él, incluso ahora, que tenía todo lo que cualquiera pudiera soñar tener.
Tenía dinero, una gran casa, un gran coche, un trabajo que le proporcionaba todo el dinero que necesitaba y una cierta fama.
Había estudiado y se había esforazado hasta sentir que su cuerpo no podía más sólo para poder salir adelante y para poder decir que tan sólo él y sus esfuerzos lo habían llevado a estar donde él se encontraba. Se había autoimpuesto aquella meta porque pensaba que cuando la consiguiera iba a sentirse pleno e iba a olvidarse de su terribles recuerdos de la infancia.
Pensaba que todo aquella fama y aquel dinero que iba a conseguir siendo médico iban a rellenar el agujero que sentía en su corazón al pensar en que no tenía família, en que nunca iba a distrutar de una tarde junto a sus parientes, junto a su família.
Pero nada de eso se podía comparar con encontrar la felicidad.
Para él nada de aquella cosas habían coseguido aplacar el dolor de aquellos recuerdos.
Nada pudo hacerle olvidar su triste pasado del que estaba muy seguro que lo perseguiría por todo su existencia.
Sin embargo ahora se le presentaba la oprtunidad de comenzar de nuevo, de formar una familia y hacer todas aquellas cosas que no pudo.
Ser feliz. Con _____.
Ella era su esperanza en este camino.
Con _____ sería capaz de dejar todo su pasado y sus recuerdos atrás y construir unos nuevos.
Podrían casarse y tener hijos tal y como él había soñado. Poder criar y cuidar a sus hijos con amor, jamás abandonandolos ni dandoles la espalda.

Volvió a la realidad al entrever la entrada de su gran casa.
Sonrió involuntariamente y aceleró la velocidad. Estaba ansioso por llegar con ____
Al llegar al garaje metió el coche pero dejó las llaves puestas. Muchas veces se olvidaba de donde las había puesto luego las tenía que buscar por toda la casa.
Además, quería llevar a ____ de paseo y no quería que eso ocurriese.
Sacó el ramo de rosas y se dirigió a la puerta trasera para entrar.

Entró en el gran salón buscando a _____, no había rastro de ella.
Buscó en el baño principal y en la cocina y comenzó a angustiarse al no verla.
Subió rápidamente las escaleras y se dirigió a su habitación. Al entrar se fijó en que las ventanas estaban abiertas totalmente y una suave brisa entraba en la habitación.
_____ había cambiado las sábanas y había puesto en orden la habitación.
Soltó todo el aire que no sabía que estaba conteniendo al escuchar un ruido no muy lejos de allí.
_____ estaba en su propia habitación.
Salió de la suya y caminó lentamente hacia la de ella.
De repente sintió un golpe fuerte, como si algo pesado se hubiera caído y corrió a la habitación preocupado.
Abrió la puerta de para en par y lo primero que vio fueron unos ojos verdes llenos de lágrimas que le devolvieron la mirada más triste que alguna vez había visto.
Aquella mirada le prenetró el alma y sintió que el futuro con el que soñaba comenzaba a derrumbarse.

_______arrastró una gran maleta negra con rabia. O por lo menos lo intentó.
Era muy pesada y sus estúpidas lágrimas no la dejaban ver bien.
Sintió que la ansiedad volvía a ella otra vez gracias al esfuerzo que realizaba al intentar mover la maleta.
Estaba muy agitada y sentía su respiración irregular.
Sin embargo no desistió hasta que movió la maleta utilizando las pocas fuerzas después de haber estado llorando tanto tiempo.
La maleta cayó al suelo con un estruendo y ella gimió de desesperación mientras más lágrimas acudían a sus hinchados ojos.
Entonces un ruido la distrajo de su estresante tarea y sintió un escalofrío en su columna.
Giró su cuerpo enfrentando al hombre con quien había compartido las última semanas.
Sintió un dolor insoportable al ver que su sonrisa se ensanchaba al observarla.
Sin embargo desapareció cuando la observó detenidamente, pasando de su rostro a la pesada maleta que se hallaba en el suelo.

Ella reunió el valor suficiente para mantener su mirada y lo miró con todo el rencor que comenzaba a nacer en su corazón.
- ¿____? Amor,¿qué ocurre? ¿De dónde has sacado esa maleta? - preguntó desconcertado.
Ella lo siguió observando sin responder a su pregunta.
Y cuando Nicholas dio un paso hacia ella, se alejó de él.
- ¿Hasta cuando pensabas seguir mintiéndome? - preguntó en un susurro mientras intentaba secarse las lágrimas que se habían hecho más abundantes por el lacerante dolor que sentía en su corazón.
Necesitaba gritar, sacarlo todo, pero no tenía fuerzas.
Nicholas la miró extrañado - ¿Qué? No se a que te refieres ____. Por favor, dime que ocurre. - respondió preocupado, dando dos pasos más hacia ella.
Esta vez ____ no se alejó. Sólo dirigió su mano al bolsillo trasero de su pantalón y sacó unas hojas arrugadas parra después tirárselas con todas sus fuerzas.
Él equivó el golpe al ladear la cabeza, haciendo que la bola de papeles cayera al suelo cerca de la puerta.
La miró extrañado y recogió los arrugados papeles que reconoció al instante.
Ahora todo encajaba pensó Nicholas con pesar.
Ella lo observó mientras desdoblaba las hojas y las leía.
Observó atentamente su expresión de sorpresa que luego se convirtió en una de tristeza a medida que leía las hojas.
- Eres un maldito mentiroso. Maldito seas Nicholas.- dijo - ¿Hasta cuando pensabas engañarme? ¿Hasta cuando? ¡Dime! -
Entonces supo que estaba gritando. Sus palabras salían roncas y entrecortadas a causa de las lágrimas, que la comenzaban a ahogar.
- ____, iba a decírtelo, te lo juro - respondió con una mirada triste.
Pero no lo dejó continuar.
- ¡Mentiroso! - gritó dolida al saber que Nicholas seguía mintiendo- no me mientas más Nicholas. Pudiste habérmelo dicho ayer, pero no lo hiciste. No era tu intención decírmelo - contraatacó mientras se agarraba la cabeza entre las manos y se derrumbaba a los pies de la cama.
Se abrazó a si misma mientras lloraba desconsoladamente.
- Confié en ti Nicholas. Me prometiste que me ayudarías a recordar. Pero me mentiste. Me mentiste maldita sea. Siempre lo has hecho.- susurró entre las lágrimas. Sentía que se estaba derrumbando. Que estaba cayendo en un abismo negro que comenzaba a consumirla.
Nicholas sintió que su corazón se rompía a verla en aquellas condiciones.
Su instinto lo hizo ir hacia ella para poder estrecharla entre sus brazos.
Sin embargo su corazón recibió otro duro golpe cuando ella, al sentir que la tocaba se levantó de un salto.
- ¡No me toques! ¡Nunca jamás vuelvas a hacerlo! - gritó enfadada.
- _____ por favor. Déjame que te explique lo que ocurrió.- rogó mientras se acercaba.
- ¡No! No quiero oír más mentiras. - respondió dolida - porque eso es lo único que sabes decir, mentiras.
Se alejó de él mientras buscaba algo en los cajones de su escritorio.
Él la observó desesperado mientras ella metía todas sus cosas en la maleta que se había caído.
- ______.
- ¡Cállate! No quiero saber nada más de ti. Nunca más - gritó con rabia.
- Te ruego que me dejes explicarte lo que ocurrió. No es como piensas. - volvió a intentarlo.
- ¿Qué no es como pienso? ¡Entonces como es maldita sea! Me mentiste para que me quedara a tu lado. - afirmó con rabia - Aún sabiendo quien era no me dijiste nada. Me lo ocultaste. ¿Por qué Nick? - preguntó mientras se apoyaba en la maleta. Todo comenzaba a darle vueltas.

- Yo no quise ocultarte nada ____, sólo quería estar seguro de si esa información era verdadera.- intentó excusarse. No quería que ella lo abandonara. Necesitaba actuar rápidamente y hacer que ella dejara de meter cosas en aquella maleta. Sin embargo no podía, sentía sus músculos entumecidos y sentía como lágrimas acudían a sus ojos.
Había hecho todo lo posible porque ella no lo abandonara y ahora todo se volvía contra él.
- No te creo - respondió en tono frío que laceró el corazón de Nick - Pudiste habérmelo dicho y habríamos encontrado la forma de solucionar es "duda", esa no es excusa para lo que has hecho. - lo culpó.
- ¿Y qué es lo que quieres que diga? - preguntó dolido - No me vas a creer. Ya no. Lo hice para que no sufrieras. Yo no podía hacerme a la idea de que le pertenecieras a otro ____. Yo te amo. - respondió mientras la agarraba y a pesar de su intento de alejarse la agarró fuertemente y la aprisionó entre sus brazos.
Ella sintió que su corazón dolía como nunca en su vida. Por lo menos así lo creyó. Porque no podía recordar ningún momento de su vida. Seguía sin recordar.
- No quiero que me toques ¡ Suéltame! - le ordenó, mas él no la escuchó.
Aquello la enfureció y mientras el llanto no cesaba volvió a debatirse entre los brazos de Nick.
- ¿A esto le llamas amor? Tu amor es una mentira. Querías que yo me enamorara de ti. Querías que me enamorara de tus mentiras. - escupió aquellas palabras con todo el rencor que pudo reunir.
- No. ¡Eso no es verdad! - gritó mientras la sacudía - Jamás he amado a nadie como te amo a ti. ¡Jamás!
- Tu amor destruye Nicholas. Tu amor está basado en mentiras. Yo no soy esta que ves ahora, yo era otra persona antes del accidente que me arrebató la memoria. Yo tenía una familia, un esposo... - le recriminó.
- Calla _____. No soporto que digas eso. Tu no.. - ella lo interrumpió.
- ¿No soportas la verdad? - preguntó sarcásticamente - Pues esa es la verdad Nicholas. Yo no te amo. Jamás lo hice y fui una estúpida al pensar que podía darte una oportunidad. - respondió con voz entrecortada.
Él la soltó al esucharla decir aquellas palabras.
Sin embargo sabía que ella no lo odiaba totalmente, ella tenía que sentir algo por él si estaba dispuesta a darle una oportunidad antes de saber toda la verdad.
- ____ lo siento. Perdóname por favor. Podemos olvidar esto y comenzar de nuevo. Los dos juntos. En otro lugar. - rogó mientras agarraba sus manos entre las suyas y las acariciaba
Ella se alejó escandalizada.
- Estás loco Nicholas, lo tienes que estar para pensar que después de esto voy a estar contigo.- respondió sintiendo que su garganta se cerraba, estaba casi sin voz a causa del llanto.
Se alejó de él y cerró la maleta.
- ¿Qué haces ____? - preguntó Nick aún sabiendo la respuesta.
Ella no respondió y arrastró la maleta con todas sus fuerzas hacia la puerta.
Sin embargo Nicholas le bloqueó el paso y se detuvo ante él.
- Déjame ir Nick. Tengo que irme. Ya no tengo nada que hacer aquí. - respondió mientras secaba su rostro.
Aquello lo enfureció.