Solo fue una memoria. [Joe & Tu]

Siguela me encanta tu novela esta buenisima y sube capitulo please pronto!!!!

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Niinoo

oooooooooooooohhhhhhhhhh..... Se paso!
omg! Que va a hacer ahora?
No puede ser
Omg! Tienes que seguirla pronto

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Niinoo

Siguela!

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Niinoo

Capitulo 26:
Nos miramos desafiantes durante unos minutos mientras todo a nuestro alrededor estaba en absoluto silencio. Intente volver a poner en orden todos mis pensamientos y emociones, pero ya era imposible.

-Con que vieja bruja, ah –dijo Denise, con una sonrisa cínica en sus labios-. Aquí la única bruja eres tú. Echando tus hechizos sobre mi hijo. Si quieres dinero consíguelo por ti misma. Deja a mi hijo en paz, por tu bien, bruja.

-Mamá –interrumpió Joe, dando un paso al frente, casi tapándome con su cuerpo. Sin embargo, sobre su hombro, aun ella y yo podíamos vernos a los ojos-. Basta.

-¡Ella comenzó! –exclamo ella, extendiendo su brazo para señalarme, histérica-. ¿No ves todo lo que hace? ¡Te esta cegando!

-No, mamá, tu comenzaste –la voz de Joe era seria; estaba enojado-. ____ no es ninguna baratija. Y tuvo todo su derecho en defenderse.

Denise se indigno, abriendo la boca sorprendida y llevándose una mano hacia su pecho. Yo mantuve mi expresión seria con la mirada fija en ella. Miró a Joe con molestia, al mismo tiempo en el que él me miraba a mí sobre su hombro.

-Aunque no creo que haya sido la mejor manera de hacerlo.

-¡Ella no es para ti, Joseph! –Replico Denise una vez más-. Te lo dije hace ocho años, y te lo repito ahora. ¿Por qué no quieres entender?

-Porque no es tu asunto –exclamó él, mirándola fijamente, tapándome por fin con su cuerpo-. Es nuestro. Y si queremos volver a estar juntos, casarnos, tener hijos, debería ser bueno para ti. Seré feliz. ¿No es lo que quieres?

La mirada iracunda de Denise se movió hacia mí, lo sentí. Sin embargo no vi cuando lo hizo. Mire hacia el suelo esperando alguna palabra de alguien, pero no se escucho nada más que el silencio. Suspire y cambie mi peso de una pierna a otra. Lo único que se escucho en la sala fueron mis tacones. Volví a suspirar. Levante la vista y solo vi la ancha y fornida espalda de Joe. Me canse. Me hice a un lado y mire a Denise al mismo tiempo en que me cruzaba de brazos. Joe y ella se miraban fijamente el uno al otro. Los demás presentes solo miraban hacia nosotros con interés y curiosidad. Kevin y Adam habían salido del lugar, note. Tal vez el no quería que su hijo viera todo la discusión.

-No con ella –susurro Denise, captando mi atención. Dio un suspiro largo y luego cerró los ojos durante varios segundos-. Joe…

-Me canse de todo esto, mamá –dijo él, sorprendiéndome-. Estoy agradecido por todo lo que has hecho por mí durante todos estos años, pero ahora necesito que me entiendas. Amo a ____ con mi vida. Solo quiero que comprendas, que me des tu bendición en esto –agarro sus manos entre las de él y las apretó un poco, mirándola fijamente a los ojos, a su vez-. Jamás te he cuestionado algo. Pero ya llego el momento de que si porque de verdad quiero casarme con ____. Quiero ser feliz a su lado, y recuperar esos ocho años perdidos. Por favor, por favor, solo te pido eso.

La expresión de Denise cambio a una de ternura, iluminando su rostro con una sonrisa. Soltó una de las manos que mantenía Joe y le acaricio el rostro con cariño. Joe le rodeo la mano con la suya y la mantuvo en su mejilla. Cerró los ojos ante su contacto y suspiro.

-Te quiero, Joe, quiero lo mejor para ti al igual que para tus hermanos, pero ____ -me miro y su expresión se endureció rápidamente-, no es para ti. Entiéndelo ya.

Hasta ahí. Ya estaba harta de todas sus malditas palabras.

-¿Qué tengo que malo? –explote-. Mi empleo es bueno, mi sueldo está bien, mi familia es buena, no he hecho sufrir a su hijo jamás. Entonces, ¿Por qué demonios piensa usted que soy tan mala?

Joe abrió los ojos y me miro. Denise soltó su mejilla al tiempo que me miraba con dureza; se quedo en silencio. Eso era exactamente lo que quería. Ella se había quedado sin palabras porque ni ella sabía porque me odiaba.

-Desde el inicio te le metiste por los ojos a mi hijo –dijo con amargura-. Siempre te intereso el dinero, y bien lo sabes. Tú no quieres a mi hijo. Jamás lo has hecho –sacudió la cabeza, riendo con torpeza-. ¿No dijiste que habías superado a Joe? ¿No dijiste que no volverías a caer porque habías sufrido demasiado? ¿Qué paso con eso? Las personas no cambian, ____, jamás cambian. Y tú sigues siendo la misma perra de hace ocho años.

Sonreí, sintiendo mis nervios explotar en cada rincón de mi cuerpo. La adrenalina recorrió cada una de mis venas mientras sentía las ganas de tirármele encima de arrancarle las extensiones de cabello de un tirón. También regarle todo el maquillaje de su cara de bruja. Y luego…

Respire profundo. Basta, me dije, calma. Ella solo quiere provocarte. Relájate.

-Tú tampoco cambias, Denise. Eres la misma serpiente venenosa de hace ocho años –dije con una sonrisa hipócrita-. Con un toque de vieja loca, claro. Los años han pasado por ti como si hubieran sido un camión cargado.

Denise abrió la boca con indignación antes de fruncir los labios y el ceño mientras yo aun mantenía la sonrisa. Dio un paso hacia mí con furia y, soltó una fuerte y sonora bofetada con el dorso de su mano sobre mi mejilla. Caí al suelo de bruces por el impacto. Di un respingo antes de poner mis manos sobre el suelo e intentar levantarme. En poco tiempo, sentí unas manos en mi cintura y varias personas rodearme. Si estaban hablando, no los escuchaba porque mis oídos zumbaban. Poco a poco, lograron sentarme sobre el suelo, pero no sé como lograron mantenerme incorporada. Cerré y abrí mis ojos sin poder ver nada en particular. Me dolía la mejilla, la nariz, los oídos y la cabeza. ¡Denise golpeaba demasiado fuerte para ser -prácticamente-, una vieja!

Agarraron mi rostro entre unas grandes manos e intentaron hacer que volviera en mí, pero era difícil. Ni siquiera yo misma podía volver en mí.

-¡____! –gritaron a lo lejos-. ¡____!

Gire mi cabeza e intente echarme hacia atrás, pero quien fuera el que me estaba agarrando, me mantenía firmemente agarrada a la consciencia. Volví a cerrar los ojos e intente calmar a cada uno de mis nervios. Mi cabeza comenzó a hacer retumbar menos los latidos de mi desbocado corazón, y poco a poco pude escuchar el desorden a mí alrededor. Suspire antes de inclinarme y apoyar mi cabeza sobre el pecho frente a mí. Era Joe; lo sabía por su deliciosa colonia.

-Mi amor, ____, ¿Qué sientes? ¿Te puedes levantar?

Su preocupación me lleno de ternura.

-Deberías levantarla, Joe –escuche la voz de Nick-. Buscare agua y esperaremos hasta que vuelva en sí.

Pero Joe lo ignoro.

-Oh, ____ –susurro, estrechándome entre sus brazos. Poco a poco se sentó en el suelo conmigo sobre su pecho y sus brazos a mí alrededor. Apoyo su barbilla sobre mi cabeza y suspiro. Su corazón estaba agitado bajo mi mejilla mientras que el mío volvía a su ritmo normal. Mantuve mis ojos cerrados mientras sentía el cuerpo de Joe debajo del mío y escuchaba la conversación de las otras personas en el lugar.

-¿Estás loca, Denise? –Escuche la frenética voz de Paul, su esposo-. ¡Dejaste a la chica aturdida!

-Esta fingiendo –replico ella-. No le pegue tan fuerte.

-Te creería si no supiera cuan fuerte pegas, mamá –dijo Nick-. Es obvio que le pegaste fuerte. ¡Choco contra el suelo para el colmo! ¿No crees que te pasaste?

-¡Ella se paso! –Grito Denise-. ¿Quien se cree al hablarme de la manera en que me hablo? A Denise Jonas se le respeta, y tú lo sabes, Nicholas.

-Igual no debiste hacer eso. Ella no te puso un solo dedo encima.

-¡Basta! –Grito otra vez-. No la defiendan. No es justo.

-No es justo lo que hiciste –escuche la voz iracunda de Joe-. Le pegaste muy fuerte, mamá. Te pasaste muy fuerte.

-¡Oh, claro, todos contra Denise! –Dijo ella con burla-. Ella es la nota discordante aquí, no yo. No deberían defenderla con tanta profusión.

-¡Es de mi prometida de la que hablamos, mamá!

-¡Y yo soy tu madre!

Joe respiro profundo antes de hablar y no dejarse llevar por la ira.

-Te quiero y todo, pero te pasaste –dijo, más calmado-. Me voy de aquí.

-¡No, no y no! –Grito Denise-. Ahora te quedas. Hablaremos.

Joe se movió en el suelo con ademan de levantarse. Gemí.

-Lo siento, pero primero el bienestar de ____ es primero en estos momentos. Y tampoco creo que hablemos sin gritar –bufó.

Logro incorporarse del suelo conmigo sobre él. Me cargo como si fuéramos recién casados y dio unos pasos al frente. Aun me dolía la cabeza y no quería abrir los ojos por miedo a encontrarme con algo desagradable… como Denise.

-No te atrevas a irte, Joseph –advirtió Denise-. No lo hagas.

-Mira como me marcho –grito mientras avanzaba conmigo en brazos.

Suspire al sentir la brisa nocturna sobre mi piel cuando Joe salió de la casa. Hundí mi cabeza aun mas entre el hueco de su cuello y el hombro. Pensé en todo lo que había pasado aunque me dolía la cabeza. Todo me dio vueltas antes de poder ordenar algo en su sitio. Lo abandone. No podría hacer nada hasta que el dolor de cabeza desapareciera.

Sentí cuando Joe me dejo sobre el asiento del copiloto en el auto con cuidado. Me queje un poco cuando la cabeza comenzó a latirme después de haberla posado en el reposacabezas. Abrí los ojos para encontrarme con su rostro doblado por la preocupación. Le sonreí, apenas. El se puso de cuclillas a mi lado, con una rodilla dentro del auto y la otra afuera. No me sonrió.

-Estoy bien –susurre en un hilo-. Solo un pequeño dolor de cabeza.

-¿Segura? –paso su dedo por el lugar separado entre la nariz y el labio superior. Limpio algo allí y cuando separo el dedo para enseñármelo, vi lo que era: sangre. Ya sabía porque me dolía tanto la nariz: me la había roto con el impacto. Di un respingo asustada.

-Eso… -balbucee.

-Si, con la caída –afirmo él, limpiando su dedo en su jean-. ¿Quieres que te lleve al hospital y te revisen?

Sacudí la cabeza.

-No es necesario.

-De cualquier manera te iba a llevar –se encogió de hombros-. No voy a permitir que te quedes así durante toda la noche. Y tampoco conozco a un medico…

-No tienes porque llevarme al hospital o conseguir un medico –intente persuadirlo. Quería dormir, no a un medico-. Solo limpio mi nariz, me tomo una píldora para el dolor de cabeza y me doy un baño. Para mañana cuando me levante estaré mejor. Enserio.

-No vas a discutir conmigo, ____. Te vera un doctor y luego iremos a casa ¿de acuerdo?

Rayos, este hueso era duro de roer.

-Bien –rodee los ojos-. Iremos al hospital de buena gana porque como quiera sé que me ibas a llevar.

Sonrió. Entro en el lado del piloto poco después de cerrar mi puerta y rodear el auto. El agarro mi mano izquierda entre la suya y las mantuvo entrelazadas durante todo el trayecto al hospital mientras yo iba dormida. Había sido una mala noche y las siguientes horas fueron aun más torturantes. Oficialmente odio los hospitales, ush.

¡Oh Dios Mio!
Enserio, Denisse es una bruja total... EN LA NOVELA, claro, por que en la vida real, TIENE que ser mi suegra, ya lo es, pero, Shh, no lo sabe.
Ya que. ¿Cuando la sigues?
¡Lo peor es que mañana me voy y no podré leer más!
¡Waaaaaaaaaaaaaa!
¡Que tristeza, eh!
Pero cuando regrese, quiero ver muchos, muchos capitulos, tampoco asi, pero quiero venir a leer de esta MARAVILLOSA y HERMOSA novela.
Enserio. Sigue. Sube.
Cuidate. Bye.

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Niinoo

oh Dios!
Deniise SE PASOO esta vez!
es una bruja!!! (en la vida real claro q no lo es)
porq no puede apoyar a Joe???
uyy le sango la nariz...debe pegar duro u.u
SIGUELA!!!

ohhh.... que maldita, se paso!
/: ayyno! aun no lo supero,
no se porque pero siento que Joe
esta enojado con la Rayis....
ay please, siguela pronto!

siguela!!!

Siguuela!

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Niinoo

Yiaaa llego. El capitulo recién sacado de Word (?
Haha.
Hoooola. Que tal están? Espero que requeteultramegaextrasuper bien!
Estamos de vacaciones, y es semana santa. : )
Sooup (? Por que dije sopa? Nah, anyway xD
Pues, espero que disfruten del capitulo (aunque, sinceramente no me gusto) y que comenten como siempre. : )
Las quiero; se cuidan ♥

Capitulo 27:

Me desperté como a las dos de la tarde con un dolor de cabeza como si tuviera resaca. Y aun así, salí de la cama, me cambie el pijama por una camiseta de Joe que estaba en el armario. Salí de la habitación, descalza, hacia el baño para lavarme la boca y atender mis necesidades. Recogí mi cabello en una coleta desenfadada y salí del baño arrastrando los pies. Joe estaba sentado en el sofá de la sala con los pies sobre la mesa de centro viendo televisión. Sacudí la cabeza y entre en la cocina. Agarre el frasco de píldoras que el doctor me había recetado para el dolor de cabeza y me tome una píldora con agua. Pronto harían efecto.

Anoche, el doctor Hawkins me había atendido al llegar al hospital. Según Joe, ambos se conocían de la preparatoria, pero yo no conocía ningún Hawkins, de modo que lo había dejado pasar. El me había revisado y Joe le contaba lo que había pasado. Hawkins se mostro paciente y amable todo el tiempo. Había diagnosticado que producto de la caída me había dado dolor de cabeza y me había roto algo interno de la nariz, pero este pronto sanaría. Cosas que ya sabía. Sin embargo, me había recetado unas maravillosas píldoras para el dolor de cabeza que me habían mantenido la mitad del día durmiendo.

Camine hacia la sala aun arrastrando los pies y me senté sobre las piernas de Joe después de que él las hubiera bajado de la mesa de centro, y enterré mi rostro en su cuello. Instantáneamente, me rodeo con sus brazos y beso mi mejilla.

-¿Estas mejor? –preguntó.

Asentí en su cuello.

-¿No te duele nada?

-La cabeza. Acabo de tomarme una píldora.

-Dormirás todo el día, ¿no es así? –su mano descendió hasta mi cadera y la acaricio.

-Al parecer, así es –suspire, cerrando los ojos.

-Extraño tu presencia despierta –murmuro-. No te duermas.

-Me encantaría no hacerlo, pero esa píldora da sueño, Joe –bostece-. Lo siento.

-Está bien, duerme lo que quieras –volvió a besar mi mejilla-. Tu bienestar es lo más importante para mí, lo sabes.

-Y gracias por la preocupación –bese su cuello con ternura mientras sentía que el cansancio iba durmiéndome poco a poco-. Te amo.

-Y yo a ti, mi vida –murmuro.

Cerré los ojos casi dejándome vencer por el sueño. Y era maravilloso dormirse en los brazos de aquel hombre con una colonia deliciosa impregnada en su piel y su natural aroma. Cada vez que me despertaba en el día, rápidamente me levantaba de la cama, caminaba hacia Joe y me dormía oliendo su aroma y sintiendo su rico calor corporal junto al mío. Y era justamente lo que estaba haciendo en ese momento. Suspire y me acomode mejor entre sus brazos. El coloco una de sus manos un poco más debajo de mi cadera y comenzó a acariciar el área pasando poco a poco su mano dentro de la camiseta que traía puesta.

-Joe, basta –me queje-. Tengo sueño.

-Yo tengo una manera de mantenerte despierta –murmuro, rozando sus labios en mi mejilla-. Es efectiva.

-No tengo ganas de probarla ahora.

-¿Segura? Esta oferta no se repetirá.

Me reí.

-Se repetirá, Joe, lo sabes -dije, riendo.

-La técnica funciona –el sonrió sobre mi piel-. Te estás manteniendo despierta.

-Déjame dormir entonces –me moví entre sus brazos-. Hablo en serio.

-____, solo quiero tener al menos una hora contigo sin tenerte dormida en mis brazos –beso mi mejilla una y otra vez-. Podemos discutir sobre esto toda la tarde y sería feliz de hacerlo solo para mantenerte despierta.

Sonreí, pegándole en el pecho con toda la fuerza que tenía en aquellos momentos –la cual era casi nula. Bese su cuello con dulzura antes de levantarme de sus piernas. Le sonreí medio dormida antes de dirigirme a la habitación. Sentí su mirada detrás de mí con cada paso que daba. No protestó en ningún momento sobre mi partida. Él sabía que no iba a mantenerme despierta mucho tiempo más.

Parpadee varias veces cuando el lugar comenzó a dar vueltas de repente. Y no era nada relacionado con el sueño. Apoye una mano en el mostrador y la otra la lleve hacia mi sien. Solté un quejido y las rodillas me flaquearon. Todo daba vueltas como un trompo con movimiento infinito. El mareo descendió hacia mi estomago, y le dio varias vueltas a mi estomago también, ya que pronto sentí la bilis en la garganta. Gemí.

-¿Estás bien, preciosa?

Joe se acerco a mí y coloco sus firmes manos sobre mi cintura para darme balance. Su voz sonó demasiado lejos para mí aunque sentí su cuerpo pegado al mío. Suavemente, tire hacia atrás mi cabeza hasta colocarla sobre el hombro de Joe. Volví a cerrar los ojos.

-No, no me siento bien –susurre.

-¿Qué pasa? ¿Qué sientes? ¿Necesitas una píldora? ¿A un doctor? Puedo llamar a Hawkins y enseguida nos vamos al hospital…

-No, no –lo interrumpí antes de que su ataque semi histérico continuara-. Cero hospitales, Joe.

-Entonces, ¿Qué hago?

-Solo llévame a la cama. Dormiré un rato y estaré mejor cuando me despierte ¿si?

Ni yo creí mis palabras. Un mareo no se iba rápido. Aun con los ojos cerrados sentía la habitación girar en espiral. Y mi estomago estaba demasiado revuelto como para poder dormir bien. Además, no entendía porque estaba tan revuelto ya que no había comido nada en el día. Un estomago vacio no podía devolver… ¿o sí?

Mi cuerpo contesto la pregunta. Salí pitada hacia el baño justo para devolver las píldoras que había tomado durante el día. Al parecer, mi cuerpo decía que estaba demasiado contaminada con drogas y había decidido sacarlas del sistema. Y bonita manera de sacarlas. Con la cara prácticamente dentro del retrete, varias lágrimas salieron de mis ojos y los sollozos no se inmutaron. Moví las piernas juntas, a un lado y pegue la cara en la tapa del retrete, empapando esta con las lágrimas. Deje mis manos inertes sobre el suelo, y cerré los ojos aun sollozando. Me sentía fatal.

-Ven, levántate de ahí, linda –escuche la voz de Joe rebosante de dulzura y paciencia-. ¿Te sientes mejor?

Me levantó del suelo tomándome por la cintura. Repose mi cabeza en su hombro en el mismo momento en el que él se inclinaba para bajar la palanca del retrete. Gemí una vez más entre sollozos al mismo tiempo en que Joe me colocaba sobre el lavamanos del baño. Apenas coloque mis manos sobre la solida base que rodeaba este cuando volví a sentir ganas de vomitar. Me escurrí entre los brazos de Joe y volví hacia el retrete. Casi sentía como mi estomago saldría por mi boca. No tenía nada en el, ¿Qué mi cuerpo quería expulsar entonces?

Joe me despego una vez más del retrete después de estar una media hora sobre él. Mis ojos se cerraban solos ya, y mi cuerpo no quería responder a ninguno de los movimientos que le dictaba mi cerebro. Era horrible. Joe estaba sentado en el suelo conmigo sobre su pecho, y con un paño medio mojado en la mano. Limpió delicadamente mi cara y mis labios con él. Aparto de mi cara los mechones de cabello que se habían soltado de mi coleta y me mantuvo en silencio entre sus brazos por un largo rato.

-Joe –susurre, después de un rato.

-Si, preciosa.

-Voy a la cama.

El se rió sin mucha diversión en el tono.

-¿Vas a la cama? –Dijo con tono de burla-. No puedes ni moverte, y ¿vas a ir a la cama? No, yo te llevare. ¿Necesitas algo más? De verdad podríamos ir al hospital una vez más, conmigo no hay problema, ____, lo sabes. Prefiero que te atiendan a que estés todo el día así. En serio. Podría…

-Basta –susurre, con una sonrisa-. Solo llévame a la cama.

-No te ves bien, linda –acaricio mi mejilla con suavidad-. Me preocupas.

-Estaré bien –suspire-. Dormiré un rato y estaré mejor.

-Deberías comer algo antes –sugirió, inclinándose para besar mi rostro-. En serio te ves mal.

Hice una mueca, alzándome un poco para besar su nariz. Me incorpore con suavidad y me senté en el suelo, dándole la espalda. Me sentía muy débil. Le eche la culpa a las píldoras y la falta de comida en el estomago, pero ¿realmente podía devolver tanto sin tener el estomago lleno? Era dudoso.

-¿Me vas a hacer caso o iras a la cama? –dijo Joe.

-Me voy a la cama –dije, tratando de incorporarme.

Al final, Joe me levanto y llevo a la cama. Se acostó conmigo en ella y me abrazo fuerte posicionándose detrás de mí, con el pecho pegado a mi espalda, mientras yo trataba de dormir. Trace unos círculos en sus manos sobre mi vientre y mantuve mis ojos abiertos mirando a la nada. Aun me sentía un poco mareada y cada vez que cerraba los ojos, todo me daba vueltas. De modo que preferí mantenerme despierta. En cambio, Joe se quedo dormido. Escuchaba su respiración pausada sobre mi oído y su relajada posición detrás de mí. Sonreí. Al menos el podía dormir.

Estuve al menos media hora más despierta, con la mente en blanco y mirando a un punto fijo en la pared. Tenía ganas de dormir, mi cuerpo lo pedía, pero el mareo no me permitía dormir. Por alguna extraña razón persistía y me mantenía despierta. El mareo me estaba molestando. El hecho de no poder pegar un ojo me ponía de malas. ¡Y más con un relajado y dormido Joe detrás de mí!

Suspire y cerré mis ojos por fin una hora después. No dormí, sin embargo. Pensé en lo que había pasado el día anterior en la casa Jonas. Ese agrio tema que aun no había tratado con Joe. La noche anterior, al llevarme al hospital, lo único que había hecho era preguntarme como me sentía, si me dolía algo o si necesitaba algo. Se había mantenido al pendiente de mí sin decir nada acerca de lo que había pasado. A Hawkins solo le había dicho que había sido un accidente, y por como su mirada se poso en mi, supuse que había llegado a la conclusión de que había sido maltrato domestico. Pero no proteste para cambiar su pensar ya que básicamente había sido eso.

Joe dio un largo suspiro antes de acomodarse mejor en la cama y cerrar un poquito más sus brazos a mí alrededor. Yo me acomode entre ellos y me dormí poco después.

Me encanto!!
lo siento por ausentarme tanto tiempo
u_u
encerio que si
pero el cole y los examenes mas las tareas u_U
me dejaron en un estado zombiee...
pero ya me puse al dia y skdjlaskjdslak denisse ¬¬
jajaja me rei cuando rayita le dijo "vieja bruja" jaja pobre..xD
para mi que esta embarazada
y aun asi aaaaaaaawww que lindo seria un hijo de Joe
buee xD creo que pase de tema
siguela pronto porfa!! Smile

mareos??? vomitos???? ganas de tejer??? jajaja
rayita esta embarazada?????
Diooos si es asi no quiero ni pensar en lo q pasara u.u
SIGUELA!!!!

Super siguela soon Smile

me encanta

new lectora me encanta tu nove siguela !!! esta buenisima !!!

Siguela me encanta tu novela esta buenisima y sube capitulo please pronto!!!!

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Niinoo

SIGUELA

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Niinoo

siguela porfa!!!

siguela porfavor !!!!

Siguela me encanta tu novela esta buenisima y sube capitulo please pronto!!!!

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Niinoo

licsa!!! hello Very Happy

jajaja
esta increible tu nove
me encanto y denise!!!
como puede ser tan
mala con rayita!!! es
mi imaginacion o rayis
esta embarazada? Exclamation

esos sintomas son de
embarazadas jajaja y
otra pregunta por que
Adam se parece tanto
a Joe?? desde el principio
pense que era hijo de Joe
pero por lo visto no es asi
aunque yo creo que si pero
ocultan algo

pero bue....
ahora que me acuerdo estoy
leyendo tu otra nove Very Happy

y
esta super que increible!!!!
me falta poco por terminar
jajaja bueno ya me voy Razz

espero que subas capitulo
pronto Very Happy

bye!!!

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