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-¡Vamos, ________, tu turno! –grito Paulo luego de que la otra modelo salió de la pasarela.
Ella subió a la pasarela comenzó a hacer lo que más sabía hacer: modelar. Para ella era su mundo, su vida y su pasión. Le encantaba la adrenalina de subirse a una pasarela y modelar frente a miles de personas. Pero eso no era exactamente lo que hacía en ese momento. Si estaba modelando pero no frente a miles de personas, sino para sus compañeras modelos y su magnífico amigo y ayudante de ellas, Paulo. Él se encargaba de la ropa de los diseñadores que iban a modelar, de ver que todo iba bien en peinado y maquillaje y por supuesto de tenerlas en “forma” en caso de alguna emergencia mientras desfilaban y saber cómo arreglarla.
Mientras practicaba, el cabello rojo intenso de ________ se mecía sobre sus hombros y sus caderas se balanceaban de un lado a otro tras cada paso. Al igual que sus largos y delgados brazos, que se balanceaba de atrás hacia delante con cada paso. Su blanca sonrisa hacia que resaltara entre sus rojizos labios. Su increíble personalidad y facilidad de manejar la pasarela, la habían hecho la modelo más famosa en todo el mundo. El que no conociera su nombre vivía en una cueva en las montañas.
-Muy bien, ________. Eres genial, cariño –dijo Paulo cuando ella se bajó de la pasarela.
-Gracias –dijo sonriendo-. Pero es simple practica –se encogió de hombros indiferente. Era bastante modesta.
-Oh, vamos, sabes bien que hay chicas que se morirían por caminar en la pasarela como tú lo haces. Además –se acercó a ella para susurrarle al oído-: sabes que hay chicas aquí que no saben hacerlo tan bien como tú.
-Bueno, eso ya lo sé –dijo riendo-. Pero que no se enteren. No critico a nadie a sus espaldas –levanto la mano derecha como juramento y sonrió inocente.
-Claro, claro, como digas –Paulo bufo-. Pero mira –dijo mirando por la espalda de ________. Suspiro-. ¡Que bombón de hermano tienes, niña! ¿Me lo regalas?
-Claro cógelo para ti –rodo los ojos.
-Hola ________ –dijo su guapo hermano a sus espaldas-. Hola Paulo –lo saludo.
-Hola bom… -dijo el con una expresión ilusionada. Luego se dio cuenta de aquello y se puso serio-. Hola Mark. Bueno yo los dejo –se separó de ellos-. ¡Carolaina! Vas a engordar tanto que te confundirán con una vaca. ¡Deja de comer tanto chocolate y frituras a mis espaldas! –Le grito a una de las modelos.
-¿Siempre es así de gritón? –pregunto Mark mientras veía como Paulo le quitaba las frituras a la chica.
-Siempre –dijo _________ con una sonrisa mirando hacia allá también-. Pero, ¿qué te trae por aquí? –Se giró para verlo a la cara y se cruzó de brazos-
-Venía a ver a mi hermosa hermana y quería salir de la oficina. Además de que venía a traerte tu almuerzo –dijo levantando un bolso de papel marrón hacia ella.
-Oh, gracias. Ya tenía hambre –ella sonrió mordiéndose el labio inferior.
Mark se rio y ella agarro el bolso para luego abrirlo.
-Es una hamburguesa –ella levanto la vista hacia él, fingiendo estar molesta-. Te dije que no me gusta la comida chatarra porque daña mi figura.
-Bien, entonces me la puedo llevar y…
-Ni te atrevas –lo interrumpió-. Tengo demasiada hambre como para preocuparme por las calorías.
Mark volvió a reír cuando ella saco tres papitas fritas del bolso y se las llevó a la boca.
-Gracias. Y ya te puedes ir –le dio la espalda y camino hacia una serie de sillas que había justo al lado de la pasarela de practica-, si quieres –añadió cuando vio que su hermano la estaba siguiendo.
-Me quedare para ver la práctica un rato y luego volveré a la oficina. Tengo varias carpetas que ordenar, un par de discos por revisar y varios contratos por verificar –explico mientras que ________ comía de sus papas fritas y abría y cerraba su mano como diciéndole a Mark que hablaba demasiado.
-Bien, ¿qué haces comiendo chatarra, _______? Sabes muy bien todas las calorías que tiene eso ¿o no? –dijo Paulo una ceja alzada, las manos en la cadera y mirándola escéptico.
Ella le hizo la misma mueca que le hizo a Mark y este le golpeo la mano con la suya. Ella comenzó a reírse. Todas las chicas que estaban en el lugar se voltearon para verla. Esa risa de _______ era escandalosamente hermosa. La mayoría de las personas amaba que ella se riera.
-Oh, vamos Paulo es solo una hamburguesa y un par de papitas fritas más un refresco. Mañana voy al gimnasio quemo las calorías que consumí hoy y listo –dijo mordiendo otra papita frita.
-La cosa es que tú nunca vas al gimnasio y tampoco te preocupas por tu figura.
-Porque _______ come, come, come y no engorda –dijo Mark sentándose al lado de ella.
-Gracias a Dios y a mis padres, por hacerme tan bella, tengo una espectacular silueta sin hacer ejercicio –arrugo la nariz y sonrió.
-Que presumida –comento Mark.
Ella lo miro con los ojos entrecerrados y luego haciéndose la diva antes de romper en carcajadas.
-Bien niña, te dejare comer esta chatarra solo una vez y luego comerás ensaladas –ella arrugo la nariz y rodo los ojos, pero asintió.
Mark se fue una hora antes de que se acabara el ensayo de las chicas. _________, al terminar el ensayo recogió sus cosas y salió de allí junto a Paulo. Un poco después de que las demás modelos se fueran.
-¿Y ahora para dónde vas, cariño? –pregunto el, mientras insertaba la llave en la cerradura de su Ferrari del año.
-Planeo ir a la oficina de mi hermano. Quiero hablar con él antes de irme a casa y decirle que no me gusta que venga a las practicas -se reclino sobre la puerta trasera del auto de Paulo y cruzo los brazos sobre el pecho.
-¿Por qué no, cariño?
-¿No has visto a tus modelitos? Están que llenan 50 galones de baba. Me molesta que vean a mi hermano como objeto sexual –frunció el ceño.
-Las comprendo –dijo el, de repente.
______ volteo la mirada y lo miro ceñuda.
-Es cierto, tu hermano esta para darle toda la noche –se defendió el.
-¡Paulo! –lo reprendió ______.
-¡Es cierto! –Paulo la miro con los ojos estacados y ella se rio.
-Entonces ¿nos vemos en mi casa a la noche para una pijamada mientras vemos alguna película cursi? –Ella reposo el hombro sobre el cristal de la puerta y miro a Paulo fijamente-. Tú llevaras la película.
Paulo coloco su mano sobre la puerta del piloto y la miro.
-Bien, pero por favor ten las palomitas listas cuando llegue. La otra vez te olvidaste de ellas –levanto la mano y la doblo cuando le dijo eso. Un típico movimiento de Paulo, pensó ________ con una risita.
-Bien, lo hare esta vez. Lo prometo.
Ella se incorporó y le dio un beso en la mejilla a Paulo antes de que este entrara en el auto y arrancara. Se despidió de ella moviendo la mano por el cristal de la ventanilla. _______ camino hasta su auto. Le dio un click a la llave automática y su hermoso Jaguar negro del año se abrió. Antes de abordarlo dejo su bolso en la cajuela. Solo se quedó con el celular en mano y las llaves del auto. Cerro la cajuela y abordo su lujoso auto. Arranco y se dirigió hacia la empresa de su hermano. Tendrían que hablar.
No tardó mucho en llegar a Thompson Records, una de las disqueras más reconocidas en todo el mundo, que además dirigía su hermano. Se estaciono y bajo de su auto. Camino con su típico movimiento de caderas atrayendo miradas. Era algo tan normal que ni lo noto. Se dirigió a la recepción del edificio donde una chica con lentes y el cabello recogido algo alborotado, la miro y sonrió.
-Buenas tardes, señorita __________. ¿Qué se le ofrece?
-Quiero ver a Mark.
-Me temo que el señor no podrá atenderla. Tiene una reunión con uno de sus artistas y ya llevan bastante tiempo allí –anuncio la chica.
-Solo avísale que estoy aquí y me hará pasar –sonrió muy segura de lo que acababa de decir.
La recepcionista agarro la bocina del teléfono y marco una tecla que llamaba directamente a la oficina de Mark. En menos de un minuto, este autorizo a que dejaran pasar a ________ y esta le sonrió cortésmente a la recepcionista dándole las gracias por su servicio, entonces comenzó a caminar hacia la oficina de su exitoso hermano.
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Espero que te guste. Aun no empieza lo bueno... pero pronto!