"MAFIA JONAS" (JOE Y TU) Terminada.

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Siguelaaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

capitulo 7
La luz del sol entro por las ventanas, abrió mis ojos lentamente, voltee a mi lado, ahí estaba Joe con la respiración tan tranquila, era tan tierno cuando dormía, tenía una sonrisa dibujada en su rostro.
Salí lentamente de las sabanas y me quede sentada en la cama mirándolo, desde que lo conocí me encanto, pero siento que ahora estoy empezando a amarlo, me ha demostrado que es un chico con sentimientos hermosos, me está ayudando, aunque eso quiera decir que está en contra de su padre, eso me da mucha seguridad, la forma en la que me trata, espero que cuando termine todo esto, pueda conocerlo mejor, y tal vez, llegar a ser más que amigos.
Mire que empezó a moverse, no me importaba si despertaba y me mirara ahí sentada observándolo, se voltee mirando para arriba y abrió los ojos.
-Buenos días ____- Dijo con un tono agradable acompañada de una gran sonrisa.
-Buenos días, ¿Dormiste bien?- Le respondí-
-Aunque no lo creas, dormí estupendamente – Me respondió con una sonrisa de oreja a oreja-
Joe se levanto del suelo y rejunto las sabanas donde durmió, yo me levante y abrí las cortinas del cuarto, el océano estaba tranquilo y el cielo estaba azul, parecía un día estupendo.
-Quédate aquí, iré por el desayuno- Dijo Joe abriendo la puerta.
-Aquí te espero- Voltee a verlo.
Al salir del cuarto entre al baño, como todas las mañanas a darme mi ducha y prepararme para otro día mas encerrada en este lugar, ahora no solo tengo miedo de que puede pasar conmigo, sino que también tengo miedo del padre de Joe, se que Joe me dijo que no debo de temer, que siempre estará para cuidarme, ¿Pero qué pasa si algún día no pueda estar?, sin tardarme mucho, me seque con mi toalla y me puse algo de ropa cómoda, por una extraña razón sentí que la necesitaría hoy.
Abrí la manija del baño y me encontré con Joe sin camisa sentado en la cama con una bandeja de comida, que por cierto se miraba deliciosa, al escucharme, volteo.
-¿Qué haces sin camisa?- Le pregunte con un tono de nerviosismo.
-Necesitaba salir así de la habitación, creo que entiendes- Hizo una mueca.
-¿Qué dijo tu padre?- Le dije mientras iba a mi cama para sentarme.
-Solo me dio un golpe en la espalda y dijo que su hijo estaba creciendo, ya sabes- Dijo mientras tomaba su jugo de naranja.
-Espero que pronto pueda irme- Dije mientras tomaba mi plato.
-Si llega a intentar otra cosa mi padre, saldremos huyendo tu y yo de este maldito lugar- Con un tono de enojo.
-¿Tú y yo?- Lo mire.
-Sí, ya estoy harto de tener que hacer lo que él dice, siendo que lo único que quiere de mí, es su apoyo incondicional para terminarme metiendo a la cárcel culpándome de todo esto, solo que dice que soy su orgullo para lavarme la cabeza- Miro a la ventana con enojo-
Sabía que Joe me ocultaba la historia de toda esta Mafia, y el mismo me dijo que poco a poco la descubriría, pero como el dijo, todo a su tiempo.
Ahora más que nunca lo entiendo, se que él no es culpable, se que todo esto lo hace por temor, ¿Pero porque sigue a su lado ya sabiendo para que lo quiere?
Al terminar de desayunar, Joe se metió a dar una ducha, por mientras, yo salí a mi balcón para ver el océano, como suelo hacerlo siempre en las mañanas, me gusta hacerlo porque me tranquiliza, desde pequeña tengo una obsesión con el océano, siempre que tengo la oportunidad voy y camino por la orilla de la playa, amo sentir la sensación de arena en mis pies y el agua sobre ellos, me encantaría poder salir de este maldito cuarto para ir todos los días, pero no creo que me deje salir de aquí, además, creo que es peligroso.
Mire al cielo, era un día soleado y hermoso, no evite recordar a mi familia, ¿Qué será de ellos? ¿Estarán buscándome? ¿Estarán tristes? Mi familia siempre ha sido la típica familia moderna, con mi padre trabajando, mi madre igual y una hija que no saben de ella, solo la ven en las mañanas y en la noche, ahora viene a mi mente, ¿Qué estará haciendo mi amiga Wendy? La extraño, extraño trabajar en McDonald’s, extraño mi vida de antes, enserio, extraño ir a mi universidad, ¿Ahora qué hare? He dejado de estudiar, no podre terminar mi carrera, además, todo mi ahorro para comprar mi propio departamento se irá a la basura, sin duda todo esto que me ha pasado arruino mi vida por completo, todo empezó por dejarme conquistar por un chico guapo, aun que él ha demostrado su apoyo, no puedo olvidar lo sucedido, no puedo dejarme mentir, siento atracción por él, quien no la tendría con esa sonrisa encantadora y ojos soñadores, además se nota que tiene buenos sentimientos, espero que algún día lo pueda conocer mucho mejor.
Escuche que abrían la puerta de mi cuarto, pero no le preste mucha atención, en unos momentos sentí una mano, que no era nada aparecida a la de Joe, en mis rostro, para taparme la boca y no poder gritar, y con la otra mano me tenía tomada de las caderas.
-Sera mejor que te quedes callada y hagas lo que te digo- Me dijo al oído con una voz grave.
Fue ahí cuando entendí que era Paul, era él, mi corazón empezó a latir con todas sus fuerzas, ahora que podía hacer, Joe regresaría en unos momentos, pero apuesto que Paul cerró la puerta para que nadie entre y nadie salga, me tiro a la cama con fuerza, mientras tocaba mi cuerpo, no quería ni moverme, solo miraba su mirada desquiciada y llena de deseo, metió un mano debajo de mi camisa, apreté los ojos y deje soltar unas lagrimas.
-Vamos, disfrútalo, no llores- Me dijo con un tono divertido.
-¿Cómo quiere que este si alguien está a punto de abusar de mi?- Lo mire con odio.
-Puedes que no tenga que hacerlo, solo tienes que dejarte- Se acerco a mi cuello y lo empezó a besar.
No sabía qué hacer, solo lloraba y sentía rabia, solo pensaba ‘’Llega Justin, vamos, eres mi única salvación’’ paul empezó a tocar mi pierna, y empezó a acelerar sus besos, cuando escuche que alguien golpeaba la puerta.
-¿____? ¿Estás ahí?-Dijo Joe por fuera de su cuarto.

este es el ultimo capitulo ya es tarde tengo que dormir pero mañana la sigo y la termino¡¡¡

Ok entonces espero caps mañana
Por fa que joe entre a tiempo
pobre rayi y ******** paul.
por que le hace eso al rayi
cuidate, besos
Bye

hay uno mas¡¡ espera unos segundos

capitulo 8
-¿____? ¿Estás ahí?-Dijo Joe por fuera de su cuarto.
¡Justin! ¡Llegaste! Solo al escuchar su voz sentí que todo estaría mejor, Paul maldijo al escuchar que su hijo estaba ahí, se levanto rápido y me hizo una señal de que no dijera nada, yo solo asentí.
-Pasa hijo- Dijo Paul mientras abrió la puerta.
-¿Qué hacías aquí?- Le contesto Joe con un seño fruncido.
-Solo vine a ver como estaba la invitada de honor-Me miro con una sonrisa de oreja a oreja.
-¿Y porque cerraste la puerta?- Le contesto Joe tratando de buscar respuesta a su estancia en la habitación.
-Para que no intentara escapar- Le dio una palmada en el hombro y salió de ahí.
En cuanto salió paul de la habitación, Justin cerró la puerta con seguro, yo solo pude entrar en llanto, eso le conecto todo a Joe, el corrió hasta donde estaba yo y me abrazo fuerte, mientras acariciaba mi cabello.
-Dime que no te hizo nada- Aun abrazándome.
-Intento, pero llegaste tu- Lo abrace con mas fuerzas.
-Sabes, ya me canse, nos vamos a ir de aquí, no me importa en el problema que provocare, solo me importa que estés a salvo, te llevare a tu hogar- Me miro a los ojos.
-Gracias Joe, enserio, gracias- Mis ojos aun estaban llenos de lagrimas.
-Ya no llores mas, por favor, odio verte así- Me dijo mientras limpiaba mis lagrimas.
-Joe…¿Pero cómo nos iremos? Esta totalmente vigilada- Le dije mientras miraba sus ojos.
-No lo sé, pero ya estoy arto de todo, se que puede mandarnos a buscar por cielo, mar y tierra, pero ya no importa ya no mas, odio todo lo que ha hecho de su vida, todo lo que nos ha enseñado, odio todo esto, odio ser Bieber- Su voz se oía ahogada.
-¿Y tu mamá?- Trataba de entender mas.
-Mi mamá…ella, según mi padre lo engaño con su mejor amigo, y por esto creo toda esta Mafia para descargar su frustración con las mujeres- Bajo la mirada.
-¿Y eso es cierto, lo de tu mamá?- Acaricie su espalda para tranquilizarlo.
-Según lo que me ha dicho mi padre sí, pero no le creo, en verdad no ve visto a mi madre desde que tengo unos 5 años, no recuerdo nada de ella, mi padre al enterarse de su traición, huyo con nosotros y nunca más la vimos- Me miro con los ojos llorosos.
-Joe, sé que no conozco a tu mamá, pero creo que saliste a ella, porque tú eres todo lo contrario a tu padre, y estoy casi segura que ella no hizo eso, debe de ser imaginación de tu padre- Limpie sus lagrimas que empezaban a salir.
-No lo sé, quiero saber más de ella, pero siempre que preguntaba por ella, mi padre se enojaba y me amenazaba, no solo a mí, a mis hermanos igual, espero poder hablar con ella y aclarar todo, absolutamente todo- Hizo una mueca.
-¿Y nunca ha mandado a buscarla tu padre?- Suspire.
-Al principio no, porque no era rico ni poderoso, pero ya que creo todo esto, la mando a buscar, pero no encontraron nada, he llegado a pensar que la mataron, pero no quiero ni imaginarlo- Dijo mientras negó con la cabeza.
La tarde se fue como agua, platicamos de nuestro pasado, sobre las personas importantes en nuestra vida, fue la primera vez que hable con él sobre mi vida, al igual que él, en momentos nos entro el sentimiento y saltamos algunas lagrimas, pero también hablamos de momentos hermosos que tuvimos en nuestra vida.
Joe y yo estábamos sentados en el balcón mirándonos de frente, como si estuviéramos jugando verdad o reto, el aire movía su cabello haciendo que se despeinara, era gracioso que cada vez que pasaba eso, no dejaba de tocarse su cabello para acomodarlo, y el solo decía ‘’Que, cuido mi cabello’’.
El sol empezó a meterse, y no nos habíamos dado cuenta de algo, no habíamos hablado de cómo escapar.
-Joe, me encanta estar hablando así contigo, pero… ¿Qué pasa con lo de es…-Me interrumpe poniendo su dedo en mis labios.
-No hablemos de eso aquí, ven- Se levanta y me da la mano para ayudarme.
joe abrió las puertas del balcón para entrar, la cerro, y me miro.
-Ahora si podemos hablar- Me dijo sonriendo.
-¿Qué haremos?- Le dije con un tono de inseguridad.
-Nos vamos a ir hoy mismo- Me miro fijo.
-¿Hoy?- Abrí mis ojos como platos.
-Sí, hoy es jueves, justo cuando mi padre va al casino-
-¿Y qué tenemos que hacer ahora?- Lo mire.
-Mira, son las 8, el se va a las 9, en esta hora, preparamos las cosas que necesitamos, ropa y todo eso, toma una maleta y llévate la ropa que quieras, mientras iré a empacar mis cosas- Dijo mientras iba a la puerta.
-¿Te iras de casa?- L e dije sorprendida.
-Sí, ya no quiero tener nada que ver con esto-Con tono firme.
Joe salió de la habitación, yo hice lo que me dijo, fui al armario, busque una maleta y metí algunas prendas cómodas para el viaje que haríamos, no sabía con exactitud donde estábamos.
Cuando termine de meter todo, busque cosas que pudieran servirnos, pero no encontré nada, mire el reloj y marcaban las 9, se paso como agua esa hora, salí al pasillo para ver si estabajoe, pero no lo mire, por una extraña razón me sentí con la libertad de caminar por los pasillos, y así lo hice, camine buscando la habitación de Joe, hasta que mire una puerta abierta, era su habitación, estaba por salir, y al verme ahí se sorprendió.
Su cuarto era grande, con paredes color azul marino, con piso de madera fino, con una decoración muy masculina, con gran cama, y un televisor grande, era una habitación de lujo.
-¿Qué sucede?- Me dijo mientras tomaba su maleta.
-Nada, solo, es mucho lujo para mí- Solté una risa tímida.
-Lo sé, yo quería una habitación sencilla, pero bueno…-Soltó una risa tierna.
-¿Ya se fue tu padre?- Le pregunte mientras sus ojos.
-Sí, vino a despedirse, pensé que me descubriría, pero le invente que me iría de viaje mañana- Caminamos hasta mi habitación.
-¿Crees que te haga algo?- Tome mi maleta.
-Amm, creo que es mejor no pensarlo, ahora, hay que irnos- Me quito la maleta y la cargo el.
Salimos de mi habitación y caminamos hasta la salida, todos los que trabajan en la mansión ya estaban en sus casas, sus hermanos no estaban, de seguro se fueron a un bar a ahogar sus tristezas, solo estábamos nosotros y los de seguridad, Joe se adelanto y les invento que había oído ruidos en la parte de atrás de la mansión, para hacer que se alejaran y aprovechar, y así fue, Justin corrió hasta donde estaba, tomo las maletas y corrimos hasta su automóvil, lo encendió y acelero con toda potencia.

Si!!!! GRACIAS!!!! Andrea por este otro caps

esta terminada. mañana subo los demas¡¡ es que tengo mucho sueño y no puedo mas. hasta mañana¡¡

Espero que no le
su seda nada malo a
joe y la rayis
cuidate, besos
Bye

Chao y hasta mañana
espero que duermas bien
cuidate besos
Bye
y que sueñes con los jonas. jajajaja

si siempre sueño con ellos¡ jjjaaja hasta mañana¡

capitulo 9
Joe volteo a verme con ojos de temor, sabíamos muy bien que los vigilantes estaban armados y podrían empezar a disparar, solo pensé en tomar su mano y rezar.
Joe no soltó mi mano y acelero lo mas que pudo, su camioneta era rápida, no había problemas con eso, cuando menos lo pensamos ya estábamos alejados de la mansión, ya era de noche, el camino estaba oscuro, salvo por las luces de seguridad, Joe volteo a verme a los ojos y sonrió.
-Ya estamos bien, tranquila- Me dijo con una voz tranquila.
-Espero que esto sea todo- Solté su mano.
-No puede prometerte nada, mi padre te quiere, se que…- Miro al frente.
-¿Sabes qué cosa? Que nos mandara a buscar como a su madre- Dije con un tono de tristeza.
-Así es, y no quiero que te pase nada- Me volteo a ver.
-Contigo a mi lado, me siento muy segura, se que no pasara nada.
Mire como se dibujo una sonrisa en su rostro, eso me tranquiliza mucho a pesar de lo que estamos viviendo, creo que la única persona que logra hacerme sentir bien, es el.
-¿Qué es lo que vamos hacer?- Lo mire.
-No tengo idea, solo estoy pensando en pasar la noche manejando hasta alejarnos de aquí, no puedo dejarte en tu hogar en este momento, el sabe dónde vives- Me dijo sin quitar la vista del frente.
-¿Entonces a dónde iremos?- Suspire.
-Por el momento tenemos que cambiar de automóvil, el puede rastrearme con el numero de mi placa, pero... ¿Donde conseguir uno nuevo?- Dijo buscando respuesta.
-¿Crees que te serviría uno viejo?- Hice una mueca.
-¿Tienes uno?- Me miro.
-Yo no, un tío, creo que vive por esta carretera, ese automóvil nunca lo utiliza, puedo pedírselo- Le dijo con un tono de esperanza.
-Dime donde es- Volteo al frente de nuevo.
Le dije exactamente donde era, al parecer no estábamos muy lejos, cando faltaba un poco para llegar, Joe decidió dejar el automóvil en medio de la nada, parecía un bosque sin final, sacamos todo lo que teníamos y caminamos unos 10 minutos, hasta que llegamos a la casa de mi tío.
-Quédate aquí, iré yo- Lo mire.
-De acuerdo- Tomo las maletas que llevaba.
Sé que mi mamá debió haber hablado con mi tío para saber de mi paradero, camine hasta la puerta, mire a la ventana, estaba ahí, sentado en la mesa con una taza de café, le di 3 golpes a la puerta, mire el rostro de mi tío en la ventana y abrió rápido la puerta, el solo me tomo, me abrazo con fuerza y beso mi frente.

-¿Dónde estabas?- Me miro a los ojos.
-Tío, es complicado de decir, sé que mis papas están buscándome, diles que estoy bien, pronto iré a casa, solo…no puedo en este momento- Baje la mirada.
-¿Qué es lo que pasa?- Me dijo desesperado.
-Luego les explicare y sé que todo tendrá sentido para ese momento, ahora solo necesito un favor- Lo mire.
-El que quieras mi niña- Me miro desesperado.
-Necesito tu camioneta vieja, necesito llegar a la ciudad y no tengo transporte, ¿Me lo prestas?- Suspire.
-Claro, pero, yo te llevo, no hay….-Lo interrumpí.
-No puedo tío, no quiero meterte en todo esto, solo préstamelo-
-Claro, ven…-Salió de la casa.
Fuimos a la parte trasera de la casa, ahí estaba el auto tapado con una sábana blanca, era un Toyota rojo, con exactitud un Picap, busco las llaves y me las dio.
-Tío, una cosa más, si mamá te habla, o tu lo haces, diles que estoy bien, llegare a casa pronto, lo juro- Le dije seria.
-Pero dime que es lo que pasa, confía en mí- Tomo mis hombros.
-Por más que quiera decirte, no puedo, está en juego tu vida, y la mía- Baje la mirada.
-Bueno, no quiero que te pase nada, pero, cuídate por favor¬- Me abrazo fuerte.
-Se lo juro, todo estará bien- Voltee a ver, era Joe.
-¿Quién eres tú?- Dijo mi tío.
-El, es el chico que me salvo de todo esto, solo puedo decirte esto- Lo mire.
-Yo la cuidare más que a mi vida, se lo juro- Camino hasta el.
-Confiare en ti- Le dijo serio mi tío.
-Bueno, tenemos que irnos tío, tranquilo, estaré bien- Lo abrace.
-Confiare en el joven- Lo miro.
Joe tomo las llaves, metió las malatas a la parte trasera y se metió para empezar la partida, me metí al automóvil, mi tío se quedo ahí parado, con la mirada perdida, se que en su lugar estaría así, o peor, sin respuesta, Joe salió a la carretera hasta que perdí de vista a mi tío, el automóvil estaba viejo, pero nos serviría de mucho en todo esto.
-Se nota que tu familia estaba preocupada- Me miro.
-Sí, nunca pensé que fuera así-Mire a la ventana.
-¿Por qué lo dices?- Suspiro.
-Porque, no es la clase de familia unida de las series, no la es- Dije con un tono triste.
-Tranquila, sabes muy bien que no eres la única, pero ya viste, que moviste sus vidas, están juntos, para encontrarte- Volteo mi rostro.
-Gracias joe , siempre haces que me sienta más tranquila- Sonreí.
-Así me gusta, ver tu hermosa sonrisa- Sonrió.
La noche ya estaba muy entrada, sabíamos que el padre de Joe ya estaría rastreándonos, pero llevábamos la delantera al cambiar de automóvil, justo cuando hablábamos de eso, el celular de Joe sonó, lo miro, era su padre, Joe bajo la ventanilla y aventó el celular a la carretera.
-También podría rastrearnos con el- Me miro.
-Tienes razón-
-Son las 3 de la madrugada, el sol ya está saliendo- Miro a la ventana-
-Tenemos que parar a descansar, ¿Dónde estamos?- Mire a la ventana.
-Creo que estamos en estamos en Burbank, cerca de Los Angeles, ¿Quieres que lleguemos a descansar a un hotel? Tengo suficiente dinero para vivir en 10 años- Se rio.
-Creo que es lo mejor, pero…- Lo mire.
-No nos encontraran, tranquila- Me miro tranquilo.
-De acuerdo, hay que llegar a uno- Dije tranquila

capitulo 10

joe no tardo mucho en llegar a un hotel llamado ‘’Robert Place’’ era un hotel hermoso, pensé que era demasiado para nosotros, pero encontré la lógica de Joe.
-Se que debes de pensar que es mucho pero…-Lo interrumpí.
-Pero tu padre debe de pensar que pasaremos el día en un motel y no en un hotel lujoso- Le dije sonriendo.
-Exacto, eres inteligente- Sonrió.
Entramos al hotel con nuestras maletas, era un lugar muy elegante y hermoso, Joe fue a registrarnos mientras yo miraba el hotel, hasta que el me llamo.
-¿Quieres cuartos separado o el mismo?- Me miraba.
-Creo que es mejor que estemos juntos, ¿No crees?- Hice una mueca.
-Tienes razón- Dijo.
Mientras pagaba, yo me asome a ver más a ya del hotel, miraba las personas sonriendo y comiendo en el restaurante del hotel, por un momento pensé en mi familia, en verdad los extrañaba, no evite sentir una enorme nostalgia dentro de mí.
-¿Tienes hambre?- Me dijo Joe.
-No, solo estaba viendo a esa familia- Le dije-
-Tranquila, pronto estarás junto a la tuya- Me sonrió.
Solo voltee a verlo y le dedique una gran sonrisa, Joe me dijo que estaríamos en la habitación 201, en el tercer piso, subimos el elevador para llegar a él, cuando entramos era un cuarto con 2 camas, eso me tranquilizo un poco, sería algo incomodo para mi dormir en la misma cama.
-Pensé que así estarías más cómoda- Dijo mientras cerraba la puerta con llave.
-Para conocerme tan poco, me conoces muy bien- Dije sonriéndole.
Joe solo sonrió, pusimos las maletas en una esquina, no estaríamos mucho, pero Joe necesitaba dormir, aparte necesitábamos comer para estar despiertos y alerta.
-¿Mandamos a pedir algo de comer?- Le dije.
-Claro, ya me dio hambre- Se rio.
Joe tomo el teléfono del cuarto y mando a traer algo de comida, filete asado acompañado de puré de patatas y frutas al vapor, no tardaron mucho en traerlo, los 2 comimos en el pequeño comedor del cuarto, con solo 2 sillas, dando una vista a la ventana, donde se miraba la carrera, los 2 estábamos muy hambrientos, no tardamos mucho en terminar.
-Estaba muy delicioso- Me dijo.
-Lo sé, pero con esta hambre, hasta el hígado es delicioso- Dije en broma.
Joe solo soltó una risa tierna y acento con la cabeza.
Los dos nos levantamos de la mesa, Joe se acostó en una de las camas y no tardo mucho en dormirse, yo me quede acostada viendo televisión, estaba relajándome, no tenia sueño, ni estaba muy cansada, pero tenía que tomar fuerzas para lo que seguía.
Me levante de la cama para tomar una botella de agua que estaban en una mesa de madera, al tomarla, me detuve en la ventana, está muy tranquilo, hasta que mire pasar unos automóviles negros, muy sospechosos, estaban muy deprisa, hasta que mire ese gran auto Lincoln blanco, era Paul.



Corrí a despertar a Joe , el apenas abría los ojos cuando le dije lo que pasaba, el se despertó totalmente y se levanto de la cama rápidamente, tomo nuestras cosas y me tomo de la mano y corrió por los pasillos.
-No entiendo como descubrió que estamos aquí-Dijo desesperado.
-No lo sé Joe , a la mejor solo vienen a preguntar, es mejor quedarnos en otro lugar que no sea nuestra habitación- Le dije tratando de calmarlo.
-Tienes razón, hay que buscar un lugar-
Se detuvo y volteo a todas partes, en busca de algún lugar donde podríamos escondernos, fue cuando vio salir a una camarera de un cuarto lleno de toallas, corrió sin pensarlo y entramos rápidamente.
-Ahora hay que quedarnos en silencio, se que los hombres de mi padre subirán a buscar pistas de nosotros- Dijo viéndome a los ojos.
Yo solo asentí con mi cabeza, Joe se apego a la puerta para ver por el pequeño hueco de la puerta, para ver señales de los hombres de su padre.
Pasaron unos minutos cuando él vio pasar a 3 hombres vestidos totalmente de negro, seguidos por su padre, fueron directo a nuestra habitación, no paso mucho tiempo cuando escuchamos que alguien grito ‘’¡CORRAN! ¡BUSQUEN EN OTRAS PARTES!’’ era la voz de su padre, mis nervios comenzaron a notarse más, mi corazón latía con la fuerza de un motor, Joe noto mis nervios y me tomo de la mano, eso me tranquilizo bastante, Joe se alejo de la puerta, se apego mas a mí, para darme seguridad, fue cuando vimos una silueta frente a la puerta, y después se escucho que intentaba abrir la puerta, solo pensé que era nuestro fin, cerré los ojos con fuerza y fue cuando entro luz a la habitación.
-¿Qué hacen aquí?- Nos dijo una señora, la camarera.
-Lo siento, ya nos vamos- Dijo Joe levantándose.
Joe me ayudo a levantarme y tomo las cosas de nuevo, tomo mi mano fuertemente y corrimos hasta las escaleras de emergencia, bajamos hasta el piso de la recepción, Joe miro sigilosamente a todas partes y cuando miro que no había peligro corrió hasta la puerta, corrimos muy rápido hasta el automóvil de mi tío, al entrar Joe lo encendió con mucha rapidez, no había ninguno de los hombres de su padre, todos estaban en busca de nosotros dentro del hotel, eso nos tranquilizo bastante, Joe entro a la carretera de nuevo, pensamos pasar un día entero en aquel hotel, pero no duramos ni 4 horas en el.

capitulo 11

-Odio que estés viviendo todo esto- Me miro.
-Tranquilo, creo que a mi vida le faltaba algo de acción- Le dije bromeando.
-Espero que pronto esto sea solo un recuerdo amargo- Miro al frente.
-Sí, aunque, tu serás lo único bueno en el- Lo mire.
Joe volteo a verme y me sonrió con esa tierna sonrisa que solo él sabe hacer, yo solo le regrese la sonrisa y siguió manejando.
En todo el camino Joe siguió pensado como salir de todo esto, pero todas las ideas tenían pocas posibilidades, mire que empezó a desesperarse.
-¿Quieres que maneje? Para que descanses- Le dije.
-No, yo sigo manejando, quiero que estés tranquila-
-No lo estaré si no descansar, por favor, hazlo por mí- Lo mire.
-De acuerdo, solo porque me lo pediste con cariño- Dijo riendo.
Joe bajo un poco la velocidad y se estaciono en la horilla de la carretera, el salió del lado de volante, al igual que yo, después de que ya estábamos de nuevo dentro del automóvil, pero esta vez estamos en puestos diferentes, empecé a manejar, no paso mucho tiempo cuando Joe entro en un sueño profundo, se miraba tan tranquilo dormido, que no evitaba ser tierno.
El sol ya se había metido, la noche era joven, nos esperaba un gran camino, no sabíamos a donde llegaríamos pero si queríamos llegar lejos de esta zona, mire como Joe empezó a moverse, en pocos minutos el ya estaba despierto.
-¿Cuánto dormí?- Me pregunto tallándose los ojos.
-No tengo idea, pero eres muy tierno mientras duermes- Dije sonriendo.
-Tú eres más tierna, eres como un gatito- Dijo riendo.
-Vasta de jugar, hay que ponernos serios…-Dije tratando de esquivar el coqueteo de Joe.
-Tienes razón, tenemos que tener un plan- Con un tono serio.
-Hay que empezar por saber donde llegaremos- Lo mire.
-Creo saber donde no nos encontrara- Sonrió.
-¿Dónde?- Mire al frente.
-San Diego- Me miro.



Joe manejo hasta llegar a San Diego, la verdad no entiendo porque dice que estar aquí nos ayudara a que no nos encuentre, pero mientras el este seguro de eso, no hay problema.
-Ahora llegaremos a un hotel, nos quedaremos ahí, buscare un lugar donde podremos estar por unos días- Me dijo estacionándonos en el hotel.
-¿Por unos días?- Le dije subiendo mis 2 cejas.
-Así es, es mejor que estemos aquí unos días, para despistar a mi padre, y cuando sea el tiempo exacto, regresaremos a Los Ángeles, y ahí regresaras con tu familia- Dijo bajándose de la camioneta.
-¿Qué pasara contigo?- Me baje del automóvil.
-Ya veremos- Dijo riéndose.
-Vamos Joe, no quiero que te pase nada por mi culpa- Baje la mirada.
-¿Por tu culpa? Tu no hiciste nada- Subió mi mentón y me sonrió.
-Yo hice que tuvieras más armas para rebelarte a tu padre y huir- Lo mire fijo.
-Tienes razón, pero no tienes que sentirte así, yo solo quiero protegerte- Me abrazo.
Estoy en ese momento en el que no se que somos el y yo, ni siquiera hemos hablado de nuestros sentimientos, pero creo que me queda muy claro que hay algo entre nosotros, digo, eso siento yo, por mi lado siento una gran atracción por Joe, y creo que el igual, después de todo me aprecia, eso es algo suficiente.
Tomamos nuestras maletas y fuimos a registrarnos, esta vez Joe tomo una habitación más cercana a la salida para poder escapar fácil, subimos al piso 10, y encontramos nuestra habitación, al abrir la puerta mire que solo había una cama.
-Lo siento ___, pero dijo que era la única que había en estos pisos, las de más de una cama son a partir del piso 18 y sabes que…- Lo interrumpí.
-Tranquilo, no hay problema- Le dije tranquila.
-Yo dormiré en el sillón, como lo hacíamos en la mansión- Me dijo cerrando la puerta.
-Creo que lo de menos es donde vamos a dormir, lo que importa es estar a salvo, ¿No crees?- Le dije sentándome en la cama.
-Tienes razón- Dijo dejando las maletas en el suelo.
-Creo que ahora lo que tenemos que hacer es cambiarnos de ropa y comer algo- Le dije sacando algo de ropa de mi maleta.

capitulo 12
-Sí, ve y báñate, yo por mientras dormiré un poco- Dijo sentándose en la cama.
-De acuerdo- Le conteste.
Saque mis toallas de la maleta y mi ropa, entre a la ducha, deje que el agua callera tranquilamente por mi cuerpo, cerré mis ojos y trate de relajarme unos segundos, esto que estoy viviendo parece sacado de una película, una pareja de jóvenes escapando de un delincuente o un asesino, desgraciadamente es muy parecido a lo que estamos viviendo, en estos momentos desearía estar en mi habitación en mi laptop o trabajando junto a mi amiga para pagar mi departamento, pero ya es hora de que enfrente mi realidad o mejor dijo mi presente, creo que lo único bueno es que ahora esta Justin junto a mí, si, el me da mucha fuerza y apoyo, cosa que me faltaba.
Cerré la llave de la regadera y tome la toalla para taparme mi cuerpo desnudo, lo seque y me puse la ropa rápidamente, abrí la puerta y me encontré con la imagen de Joe dormido como un bebe, se miraba tan tranquilo, como la última vez a que estábamos en un hotel, como reflejo fui a la ventana pero no había nada fuera de lo normal, solo el hermoso océano de San Diego, si no estuviéramos en otras condiciones me gustaría ir a conocer este hermoso lugar.
Saque mi cepillo para mi cabello, me senté en el pequeño sofá café que esta junto a la ventana, cepille mi cabello sin dejar de ver la ventana, ver las olas moverse me tranquilizaba, sentí una mirada asea a mí, voltee a ver a Joe, ya estaba despierto, al verlo me sonrió con sus ojos hinchados.
-Te vez tan hermosa cuando estas recién bañada, aunque, siempre estas hermosa- Dijo sentándose en la cama.
-Basta, harás que me sonroje- Le dije riéndome con pena.
-Pero es la verdad- Dijo sonriendo.
Solo le dedique una sonrisa y seguí haciendo lo mismo, Joe se levanto de la cama y tomo algo de ropa para darse una ducha, tardo un tiempo considerable, creo que también necesitaba algo de tranquilidad después de todo, al salir su piel se miraba mas blanca y limpia, y su cabello brillaba.




-¿Quieres algo de comer?- Dijo mientras secaba su cabello con una toalla.
-Me parece estupendo- Le dije sonriendo.
Joe tomo el teléfono de la habitación, ordeno algo de pizza, los 2 nos sentamos en el sillón, hubo un silencio incomodo, pero sabía que los 2 estábamos pensando en demasiadas cosas, los 2 tenemos diferentes temores, y diferentes perspectivas de esta situación, por mi parte tengo temor por mi familia y por Joe, y creo que él tiene temor por mi y lo que sea capaz su padre de hacernos.
-Joe, ¿Qué pasara con nosotros?- Le pregunte despertando de mis pensamientos.
-¿A qué te refieres?- Me pregunto con una pequeña sonrisa.
-A nosotros, ¿Nos seguiremos viendo?- Le pregunte.
-Es lo que más quisiera- Me dijo tomando mi mano.
-Igual yo…-Lo mire.
-____, tengo que decirte algo…-
Tu tono era serio, y como si fuera algo importante que tenía que decirme, pero tocaron a la puerta, supongo que era la comida, Joe se levanto del sillón y me miro con una mueca, camino hasta la puerta, la abrió.
-Puede dejarlo ahí en medio de la habitación- Le dijo a la camarera.
Joe cerró la puerta y camino hasta mi lado, la camarera empezó a abrir la comida y acomodar los cubiertos, Joe volteo a verla, mire como su expresión se transformo en curiosidad, en felicidad, en confusión cuando la vio, se acerco mas a ella y abrió los ojos como platos.
La camarera se giro sin mirarnos y se dirigió a la puerta, Joe tomo su mano y la detuvo.
-Espere, no se valla, quiero ver algo- Le dijo buscando su rostro.
-¿Qué sucede?- Dijo escondiendo su rostro.
-Eres mi madre, denise - Dijo Joe con los ojos llorosos.
Mire como la camarera, que al parecer era la madre de Joe subió su miraba para encontrarla con la de Joe, no soporto mucho y lo abrazo con fuerza, los 2 empezaron a llorar, pienso que es de felicidad, denise, se notaba que era una madre dedicada y responsable, además de amorosa y comprensiva, no bastaba conocerla mucho para notarlo, duraron mucho abrazados, creo que es un hermoso momento, Joe decidió separarse de ella para limpiarse las lagrimas.

-¿Qué haces hasta acá?- Le dijo denise limpiándose las lagrimas.
-Huyendo de mi padre- Le contesto Joe con firmeza.
-¿Qué te hizo?- Sus ojos se abrieron mucho.
-Es una larga historia, lo que importa es que estés aquí, que estemos juntos- Dijo para volverla abrazar.
-Mi niño no sabes cuánto soñé este día- Dijo emotiva.
Me sentí igual de emotiva por un momento, recordé a mi madre, en verdad necesitaba verla de nuevo para darle un gran abrazo, pero ella está lejos.
-Mamá, ella es ____tn , es una chica que trato de rescatar de mi padre, por eso estamos aquí- Dijo tomando mi mano para acercarme a ellos.
-¿Qué te hizo cariño?- Me pregunto con una mueca.
-Mi padre, como ya sabrás, tiene una Mafia…-Lo interrumpió denise .
-No necesitas decirme, ya sé todo lo que hace tu padre, creo que entiendo lo que trato de hacer con esta chica- Dijo mirando a Joe .
-Sí, y me canse de tener que estar fingiendo algo que no soy, y decidí escapar junto a ella para llevarla con su familia de regreso, pero mi padre no es alguien fácil, nos está persiguiendo- Le dijo preocupado.
-¿Estarán mucho aquí?- Nos pregunto.
-Según lo que tenemos planeado, serán unos días- Le dije.



-Pues yo tratare de protegerlos, no permitiré que les haga daño- Dijo denise con firmeza.
-Mamá, tú y yo tenemos mucho que hablar- Dijo Joe tomando su mejilla.
-Lo sé mi niño, yo igual tengo mucho que decirte- Dijo sonriendo.
Paso un rato, pero denise tuvo que irse, después de todo estaba trabajando y podrían regañarla por estar aquí con nosotros, Joe tomo la mesa con ruedas donde estaba la pizza y la acerco a nosotros, empezamos a comer sin decir ni una palabra, hasta que Joe rompió el silencio como suele hacerlo siempre.
-Como te estaba diciendo antes de que llegara mi mamá- Sus ojos brillaron al decir ‘’mamá’’.
-¿Qué sucede joe ?- Me limpie los labios con una servilleta de tela.
-Se que no es el momento indicado pero…te amo- Dijo Joe.
En ese momento solo podía ver sus ojos que estaban directamente mirando a los míos, tiene razón puede no ser el momento indicado, pero creo que es prefecto en cualquier lugar o situación, yo igual lo amaba, enserio, este tiempo que hemos estado viviendo juntos, aprendí a amarlo con todas mis fuerzas, a necesitarlo cuando me sentía sola, a desear sus labios como a nada mas, simplemente lo amo.
No tuve que decir nada, solo un acto es suficiente para responder, me acerque lentamente a el y lo bese con todas mis fuerzas, al igual que el a mi.

capitulo 13
La noche callo, habíamos pasado una tarde hermosa, platicamos mas sobre nosotros, miramos el reloj, ya marcaban las 11 de la noche, nos acostamos en la cama, me recosté en su pecho, escuchando los latidos tranquilos de su corazón, mientras él me acariciaba el hombro.
-____tn- Me hablo Joe
-¿Qué sucede?- Dije sonriendo.
-¿Somos novios?- Me pregunto.
-Pues no me has preguntado nada- Dije riendo.
-Bien… ¿Quieres ser mi novia?-
Joe levanto mi rostro para que lo mirara a los ojos, me perdí en ellos, ese café miel que tanto amo, por un momento mire sus labios, pronunciando ‘’Te amo’’, solo moví mi cabeza en respuesta a su pregunta y me dirigí a sus labios, puede ser estúpida la forma en la que me enamore de él, pero que pueden esperar, simplemente se metió en mi cabeza y ahora no puedo sacarlo, nunca lo hare.
-Yo igual te amo, demasiado- Le dije a los ojos.
-Me alegra oírte decir eso- Acaricio mi mejilla.
-Quisiera que este momento no terminara- Me recosté de nuevo en su pecho.
-Ahora nadie, escúchame, nadie me separara de ti- Me dio un beso en la cabeza.
Empezó acariciarme hasta que cerré mis ojos.
Poco a poco fui despertando, estábamos de la misma forma en la que nos quedamos dormidos, Joe estaba tan dormido que no quise despertarlo, me levante lentamente de la cama para darme una ducha, deje que el agua callera tranquilamente en mi cuerpo, cerré mis ojos y aparte el cabello de mi rostro, después de todo este momento amargo, algo hermoso salió de él.
Al salir de la regadera seque mi cuerpo para ponerme mi ropa, me mire al espejo y cepille mi cabello para hacerme una trenza francesa, me puse mis sandalias y salí del baño, mire a la cama pero no estaba Joe, di unos pasos al frente y no estaba en el sillón, no estaba en la habitación.
Mis nervios empezaron a aparecer, abrí la puerta con miedo de lo que podría encontrarme, al abrirla no mire nada, mire a los 2 lados y nada, al darme la vuelta para entrar me tomaron por el cuello y taparon mi boca con un trapo blanco, empecé a luchar contra él, pero era inútil, poco a poco sentí que mi cuerpo fue debilitándose hasta que cerré mis ojos.

-Narra Joe-
Me encontraba acostado en la cama, cuando abrí los ojos busque a ____tn pero no estaba, hasta que alcance a escuchar el ruido del agua caer, se está bañando, pensé. Me levante de la cama y salí al pasillo para ver si mi madre estaba ahí, pero no la encontré, estaba por entrar a la habitación cuando un hombre con traje negro y aspecto sospechoso se acerco a mi dándome un golpe en la cara despiadadamente, caí al suelo por el impacto, dirigí mi mirada aquel sujeto, era uno de los hombres de mi padre, volteo a todos lados, estaba por levantarme cuando me dio una patada en el estomago dejándome sin aire, me dio un par de golpes más, hasta que me dejo casi inconsciente, trataba de luchar contra aquel hombre, pero el dolor me venció, me cargo casi jalándome por el suelo y me metió a uno de los cuartos de servició, y cerró la puerta con seguro, todo estaba oscuro y no podía ver nada, y con el dolor por todo mi cuerpo era aun peor.
Solo pensaba en ___tn, de seguro tratarían de llevársela, y ahora si sería la muerte segura para ella, o mucho peor, me arme de fuerzas y empecé a golpear la puerta dándole patadas, era casi sorprendente que nadie viniera, hasta que la puerta callo, corrí hasta nuestra habitación, la puerta estaba abierta, no eran nada de buenas señales, entre casi yendo sobre mis rodillas, pero fue en vano, ella ya no estaba, pase mi mano por mi cabello, respire profundo y corrí por todo el pasillo en busca de señales, pero nada, baje las escaleras casi desmayándome del dolor pero mi amor por ella es mucho más fuerte, al llegar a la recepción corrí hasta la puerta y busque uno de los carros de mi padre, pero no vi nada, y algo aun más frustrante, no estaba la camioneta del tío de ____tn .

-Narra Joe-
Maldita sea, se la ha llevado, sin pensarlo entre corriendo al hotel, subí las escaleras lo más rápido que puede y entre a nuestras habitación a recoger las cosas, me encontré con la camiseta de ___tn, la tome y la olí, aun tenía su exquisito aroma.
-No me cansare de buscarte hasta que estés en mis brazos, lo juro- Dije viendo al techo.
Al terminar de recoger todo salí lo más rápido que puede, aun adolorido por los golpes, pero era lo que menos me importaba en estos momentos, algunas cortadas han empezado a sangrar, pero no les tomo importancia, no me importa nada en este momento más que la seguridad de ___tn.
Estaba por llegar al piso 5 cuando mire a mi madre tirar unas toallas que llevaba en sus manos al verme, corrió hasta estar frente a mí, su rostro estaba asustado.
-¿Qué te ha pasado hijo?- Me dijo mientras tomaba mi mejilla.
-Se han llevado a ___tn, tengo que encontrarla- Tomando su mano.
-Pero hijo, ya viste como te dejaron- Tratando de limpiar la sangre.
-Ahora no me importa eso, quiero estas junto a ella, mamá escúchame, la amo, ella está en peligro- Le di un beso en la frente.
Me le quede viendo fijamente, ella solo hizo una mueca, se que estaba preocupada, ahora tenía que salir de ahí y buscar con que transportarme.
Al llegar a la planta baja salí del hotel tratando de buscar un taxi, al encontrarlo subí rápidamente.
-Señor, ¿Conoce de algún lugar donde renten carros?- Le pregunte.
-Hay uno justo a la esquina de la próxima cuadra- Dijo mirando al frente.
-Lléveme por favor- Le dije viendo a la ventana.
Juro que regresaras a estar a salvo, en tu casa, te lo juro por el amor que te tengo, lo juro.

-Narras tú-
Mi conciencia empezó a regresar, poco a poco recuperaba mi sentido, mire a todos los lados, ¿Dónde estoy? ¿Qué ha pasado? Lo último que recuerdo es que no había encontrado a Joe en la habitación y salí a buscarlo, ¿Joe? ¿Dónde estás? Te necesito junto a mí.
De pronto encontré la respuesta a donde estaba, me encontraba en una camioneta, con hombres robustos y malhumorados junto a mí, con la mirada fría al vacio, solo había una respuesta, Paul Jonas.
Sentí como una ola de miedo atravesó todo mi cuerpo, ¿Qué le habrán hecho a Joe? Sé que Paul lo ama, es su hijo preferido, pero cuando una persona lo traiciona, el pierde los estribos. Mis manos estaban atadas, al igual que mi boca, por un momento empecé a desesperarme, pero llego a mi mente la idea de que no podre salir de esa, ahora estoy atada a ellos, y harán de mi lo que les plazca.
No paso mucho tiempo cuando el automóvil se detuvo, uno de los hombres abrió la gran puerta.
-Anda niña, ¡bájate!- Dijo enojado.
No quiero desobedecerlos, se que pueden sacar una pistola y matarme, aun que prefiero eso a lo que me avecina, baje lo más rápido que pude, uno de ellos me ayudo, pero tire de mi mano para que se apartara de mi, pensé que me llevarían a la Mansión de Paul, pero no era así, era una clase de bodega de metal, caminamos hasta la entrada, solo había una mesa con 2 sillas de madera, sin ventanas, uno de ellos volvió a tomar mi brazo y lo tomo con fuerza, yo solo lo mire con desprecio, el no lo noto, me llevaron hasta una de las sillas y me ataron, los pies, las manos, y mi estomago a la silla, sin quitarme la venda de mi boca.
-Si intentas escapar de dormiremos de nuevo, así que compórtate- Dijo uno de ellos, el más alto.
Los 4 hombres salieron del otro lado de la bodega, supongo que está en mejores condiciones, voltee al frente, no había nada más que yo y esta estúpida mesa, solo pensaba en lo que estaba pasando conmigo hace unas horas, Joe y yo estábamos tan tranquilos en nuestra habitación, gozando de un tiempo juntos, ahora estoy aquí, sin él, empezó a extrañar su sonrisa, sus ojos, sus besos, sus caricias, creo que es hora de que me haga la idea de que nunca volveré a verlo, nunca.