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Perplejo y confundido miró hacia la nada misma.

Jamás en su vida había imaginado que algo así le pudiera pasar a él. Jamás.

Aturdido, se dejó caer al suelo, apoyando su cabeza en la pared de la habitación y mirando a su punto imaginario. Recordando cómo se sintió al tener el miembro de su hermano frotándose contra él. Si bien él sabía que no debía sentir atracción hacia él, ni mucho menos tenía que sentir excitación, era algo que no podía controlar, era algo que iba más allá a la razón de su subconsciente.

Pensó a ver superado “ese” momento en su adolescencia y que jamás le volvería pasar otra vez. Pero ahí estaba, de 21 años, aturdido y extasiado. La sorpresa lo había tomado de respingón, haciendo que sintiera millones de emociones en su cuerpo y su mente combatiera consigo misma. Jamás creyó que su hermano fuera homosexual, y más al saber que él tuvo intención de besarlo. Sí, quizás se confundía con eso de “homosexual”, porque él nunca dijo nada de eso. Sólo dijo “estoy necesitado” y aún así, sabía que sentía atracción hacia los hombres. Y al parecer, él también.

+Sí comentarios √
+Buena onda √

Hoooooooola,

soy Karla Padilla, de Shile, tendré 16 el lunes grrr… una viejita sensual grrr… soy una perv “escritora” que se leyó por primera vez una novela Yaoi de Joe y Nick. Ambos, juntos, pareja. Lo sé, es enfermo, y sé bien que ellos son hermanos, pero me tenté. La culpa… la culpa se la hecho toda amiga, que me mostró una excelente novela de esos hermanitos llamada “Olive & An Arrow” de su excelente escritora Alex. Pero fue taaaaaaaaan ¡MAI GOSH, MIS BRAGAS ESTÁN EN EL SUELO!

Atención, esto va para todas: Odio la gente homofóbica, estúpidamente inflexible y si no te gusta, pues me vale Si no quieres leer porque eres “una santa”, pues te digo, que no lo eres. Básicamente leer “heterosexual” te hace igual que todas nosotras; unas cochinas cachondas sensuales. Así, si no te gusta, NO LEAS, que para eso hay más temas con one shoots o novelas. Si veo un feo comentario de alguna de ustedes, realmente me sentiré mal, muy mal.
Ruego que seas tolerante, enserio, una simple palabra que puedes utilizar simple y fácilmente.
-Nótese lo pesada que fui arriba, pero saben que no lo soy -

A las sensuales que quieren leer, ya saben 1313 ustedes comentan no más y yo subo la historia shoot aún no decido si hacer una mini wn o un one shoot pero lo subo aquí porque hay más foristas.
Será “erótico” y lo sé, será sexy. Grr… nenas, prepárense, que Joick llega para ustedes.
Si eres primeriza; como yo ayer leyendo esa novela, pues te me aguantas y dejas las bragas amarradas e.é.

Ya saben washetas, comentarios,, buena onda, sensualidad, actitud.

Tengan buena noche.

asdfghjklñ...
Debes seguirla mujer, a mi me ha gustado mucho, eh.
Por favor, sube más porque sho si necesito seguir leyendo.
Así qué subes, eh (:

OMG! Síguela mujer!
New reader

nueva lectora, para ser sincera ya sabia algo de la onda yaoi pero
joe con nick? wow me dejast sorprendida...
quisiera ver q mas pasa entre ellos
y si puedes pasat x la mia... y comenta Very Happy

siguela... stoy muy interesada en lo q pasara

Lady_Sara_JB: Jajaja, see.. da miedito, quizás me vaya al infierno o qué sé yo. Wee, no soy la única pecadora, hay más de este género DDD:Gracias por comentar, ojalá te guste. Un beso desde Chile.

PinguinitaJonas: Hola hembra shenshual. Ya subiré, me demoré, es que si tenía internet y eso, pero no me acordé de mi contraseña -.-' Welcome.

- Galletas&Leche -: Welcome! ojalá te guste, enserio. Besos, abrazos, ya subo.

TARDE, LO SÉ.

¿Excusas?, no hay. La verdad es que se me olvidó la contraseña, pero aquí estoy. Lo subiré completo, dado a que ya lo terminé en otro foro... así que... ¡A LEER!

P,D: Me iré al infierno.

Parte 1.

Nick golpeó su cabeza contra la fría cerámica del baño del hotel. Maldiciendo una y otra vez lo que acababa de hacer. Al menos el agua se llevaba su pecado. Pecado, eso era lo que le estaba pasando, lo que sentía. Volvía se sentirse como un chico de catorce años otra vez y sus complejos homosexuales aparecían nuevamente. Odió el hecho de que tuvo que masturbarse pensando en su hermano. No soportando la suciedad que sentía en su cuerpo y mente.

Apestado, su corazón se contrajo en su pecho y pensó en todo lo que habían pasado con su hermano. Quizás estaba siendo paranoico pensando mucho en ese tema, quizás Joe ya lo había olvidado por completo, pero él no, no podía. Las primeras lágrimas de arrepentimiento aparecieron, y el remordimiento de querer a su hermano tocándolo lo ponía enfermo.

Ese día terminó de ducharse lentamente, pensando en las cuatro paredes de la habitación y viendo los pros y los contras. Le gustaban las mujeres, sí, de eso estaba seguro, le gustaban las grandes tetas, coños pequeños y la mujer y su anatomía en sí. Pero ahora la atracción hacia los hombres había tomado más lugar del que debería; podría considerar que tenía un 50% de deseo hacia las mujeres y otro a las 50 a los hombres. Quizás sentía deseo hacia ambos, tampoco lo hacia gay, ¿verdad? Y tampoco era él único hombre que le pasaba lo mismo. La bisexualidad nunca había sido un tema para él, ¿pero ahora?, ¿él lo sería?

Debatiendo entre lo correcto y lo incorrecto, salió de la ducha. Fresco y con más ánimos para enfrentar a su hermano y al mundo entero. Dominando la situación se dijo así mismo mentalmente

“Bien, quizás ni siquiera me gusten los hombres. Está bien, todo estará bien. Fue solo una caída de la cual me puedo levantar una vez más. Eres fuerte, puedes enfrentarte a tu hermano. Quizás ni siquiera tienes que hablar de eso si él no quiere. Y sí, tengo dudas, pero no seré un estúpido iniciando el tema de conversación que para mí jamás debería existir.”

Puso el medidor de insulina en su pantalón y corrió hasta la puerta. Noche de conversaciones necesarias para el equipo de la gira por Norte América y él era más que importante en esa reunión.

Bajó hacia el restaurant del hotel y Paris y Garbo ya estaba ahí cuchichiando y riéndose… y Joe diciéndole cosas divertidas. Él no parecía afectado—pensó Nick—Ni siquiera parece darse cuanta de lo había hecho hace horas atrás. Era el mismo de siempre, bromeando, conversando… Joe. Ocultando lo que había pasado hacía horas, se acercó a ellos. Joe miró a su hermano, de manera extraña, pero Nick se obligó a mirarlo y negar con la cabeza para que el tema no saliera a luz. No quería hablar de ello, ya no.

▽

Joe tomó todo su auto control para no mencionar el tema durante casi un mes, pero estaba a punto de estallar, sintiéndose atraído hacia su propia sangre. Sueños despiertos, sueños húmedos en las noches. En todos estaba su hermano. Ocultó el remordimiento de a verse “caído” en ese momento, y más si fue con su hermano menor. Debió buscar consuelo en una mujer, pero Blanda lo había dañado y el dolor no se le iba. Amó a esa mujer con su vida entera, pero ella no. Odió cuando le dijo que no quería estar con él porque no sentía y tenía “eso” consigo. Fue usado como una bolsa de supermercado, tirada y botada a la basura, y con más basura dentro en ocasiones, y esta era la perfecta para él. Manchó su sexualidad induciéndole a “otras” travesuras, travesuras que a él le encantaron. Jamás había sido tan apasionado con alguien, ni siquiera pensó que el sexo con hombres sería bueno, pero lo fue. No era gay, pero tenía atracción hacia ellos, y ahora hacia su hermano que le atormentaba su mente cada vez que estaba solo encerrado en cuatro paredes. Y ya no podía seguir ocultándolo más, tenía que soltarlo o explotaría.

Nick estaba riéndose de algo que vio en internet con John Taylor. Sin quererlo, sintió la necesidad de salir corriendo cuando Nick lo miró a los ojos con esos penetrantes ojos cafés oscuros. Su garganta se oprimió cuando él le frunció el entrecejo.

—Hey, Nick… puedes ve-venir un momento.

Su hermano pequeño asintió y su rostro aún seguía con preocupación y desentendimiento.

—¿Qué pasó?

—No, es en privado. Nada contra ti J.T.

John Taylor se encogió de hombros y siguió mirando su laptop dándoles espacio a los hermanos.

Joe y Nick estaban en la habitación en silencio. Joe con el corazón acelerado y sin tener idea de qué decirle exactamente a su hermano pequeño miró nervioso a cualquier parte.

—Yo, bien, no puedo aguantar más esa mirada Nick—comenzó.

—¿Qué mirada?—preguntó extrañado.

—Esa mirada, con la que me miras hace… menos de un mes.

—Yo no…

—Tú sí. Lo sé, sé que no debí hacer eso contigo. Lo tengo más que claro. Pensarás que soy un jodido gay, pero no lo soy… enserio no lo soy… Blanda y yo, ella… ¡Dios! No sé cómo comenzar. No sé qué decir.

Su hermano masticó su labio inferior frunciendo el ceño. Se sentó al pie de la cama y miró a su hermano mayor, quien daba vueltos nervioso por toda la habitación.

—Si no quieres decirlo…—dijo Nick ablandando la preocupación de su hermano.

—Tengo que decirlo, necesito decirlo. Es importante. Blanda, bueno, ella y yo hacíamos muchas cosas mientras estábamos juntos. Y cuando digo muchas, son muchas. Una de ellas es el sexo con… hombres y mujeres. Y te aclaro que no soy homosexual. No lo soy. Pero tampoco soy heterosexual. Es complicado, realmente complicado, pero lo que pasó ese día… Nick, yo lo siento mucho, estaba destruido, estaba desolado y no sabía cómo quitarme eso de encima y entonces… pasó lo que pasó contigo. Manchó todo—su voz sonó llena de pánico y lagrimas en su garganta, haciendo que Nick se sintiera abatido con la confesión de su hermano.

En silencio, Nick procesó todo rápidamente; su hermano tenía los mismos problemas que él, sólo que había experimentado en sexo con hombres y no sólo estaba en su cabeza. Blanda era una morbosa mujer que le excitaba la homosexualidad y ésa misma fue la que ensució a su hermano con su perversión. Su hermano también estaba jodido hasta las patas. Y ahora él. También que no sólo fue sexo con hombres, mujeres con Blanda o eso creyó entender. Bien, él sabía que no podía juzgar, pero jamás pensó que su hermano y Blanda hicieran cosas como esas, él jamás habría pensado en cosas como esas. Su imaginación con el sexo jamás superó los limites del Kamasutra y follar con dos mujeres a la vez, ¿pero esto?, ni en sus más sucios pensamientos aparecían.

Silencio; lo único que su hermano menor lo deba. Y lo mataba.

—Lo que hayas hecho con Blanda… quizás sea retorcido, ¿no?, pero ¿qué conseguían con eso? Digo, eran una pareja y ustedes no deberían estar con personas externas a su relación. Pareja es de dos, no dos o uno más que se hayan colado con ustedes.

Joe asintió—Lo sé, ¡Lo sé más que bien Nick!, pero lo único que experimentábamos era el placer y diversión. No todo era así. Enserio. No me arrepiento de nada.

Las palabras llegaron a Nick.

—¿Sientes que de verdad no fue un error acostarte con hombres?

Joe negó con la cabeza—No. Vergüenza sí, pero arrepentirme no, ni tampoco lo veo como un error. Un estilo de vida. Eso es lo que es.

Nick bufó, pasando su mano por su cabello rizado y largo.

—Lo único que quería decirte era que yo no quise hacer eso, enserio, no quise. Pero desde esa vez… sé que me odiarás, que jamás me verás como tu hermano o como tu familia, pero… no puedo dejar de pensar en eso. No puedo, no puedo—dijo sollozando—diciéndote esto he perdido todo contigo.

Nick entrecerró los ojos y desvió los pensamientos que había tenido con su hermano por tres semanas. Tampoco podía mentirle así. Él fue tan sincero con lo que le pasaba, ¿por qué él no podía decir eso? Ahora sabía que era bisexual, su hermano también y ¿por qué no decirle?, ¿por qué no decirle a la única persona que lo había apoyado toda su vida? Había mucho por perder y decirle las palabras sería como si estallara una bomba en medio del hotel en el que se hospedaban ese mes.

—E… no… no sé qué decirte—dijo el castaño, bajando su mirada a sus manos.

—Debes de pensar que soy un cerdo pervertido, ¿no?

No, no pensaba eso, ¿pero cómo le decía que también no había dejado de pensar en eso?, ¿cómo le decía que él también quería experimentar cosas semejantes?

—No lo creo, Joe. No creo que seas un cerdo pervertido. Extraño sí, pero no un cerdo pervertido.

Joe se sentó al lado de Nick. Miró los brillantes ojos avellana fundidos de Joe y luego Nick miró sus manos.

—¿Qué piensas que soy?

—Creo que eres una persona normal. Creo que no deberías sentir vergüenza. Y yo tampoco diciéndote que no he dejado de pensar en ese momento que tuvimos.

Joe se quedó en silencio, buscó la mirada café de Nicholas y luego sintió una punzada de dolor en el pecho. Él había hecho que su hermano menor estuviera pervertido. Él había hecho que su hermano pensara que eso era normal. Lo había arruinado, estaba jodido tal como él, pero eso no se podía detener. No, ya no.

—¿Qué quieres decir con “el momento que tuvimos”?—le preguntó su hermano mayor.

Nick bajó su mirada. Se sentía tan extraño y avergonzado.

—Que desde ahí sé que también me gustan los hombres, y las mujeres.

La confesión hizo que Joe soltara un jadeo de desesperación. Ahora estaban ambos marcados. Jodidos desde la cabeza a la punta de pie. Y lo que sintió después, fue los labios de Nick contra los suyos, la barba que se había dejado crecer rozándole contra la suya y haciendo que fuera excitante e incitándolo a besarlo más fuerte y con más presión. Retirándose y alejándose de los rozados labios de su hermano. Tomándolos y dejándolos. La lengua de su hermano entró en su boca, con experiencia aprendida besó esos labios de poeta.

—Esto está mal—murmuró Nick contra los labios de su hermano.

Joe se alejó y miró los oscuros ojos de Nick. Deseoso, así se encontraba.

—Sí, Nick, está mal.

—Hay que parar—jadeó Nick cuando Joe lo tumbó en la cama.

—No sé si pueda.

Joe tomó los labios de su hermano, dejando sus pensamientos en blancos al igual que Nick. Sólo dejándose llevar por el beso más excitante que habían experimentados los hermanos. Pero aún así, ambos sabían que todo eso estaba mal. Muy mal.

Parte 2.

Joe tocó el miembro de Nicholas a través de sus pantalones de jeans oscuros y encontró su miembro a medio despertar. Sin tiempo de espera, comenzó a frotarlo a través de la áspera tela.

El castaño gimió. Joe tomó los labios entre abiertos de su hermano y Nicholas correspondió. Tanteando, tomó el miembro de Joe entre sus manos e hizo lo mismo que él. La aperes de su barbaba era lo único que podía notar y claro, lo duro que lo estaba poniendo ser besado y tocado por un hombre. Nick apretó más el faro de Joe, y este entre gimió y jadeó.

El oji-café lo tiró a la cama, agarró el botón de su pantalón y cuando iba a desabrocharlo, su hermano puso su mano encima de la suya.

—No…

Nick le ignoró. Mantuvo su mirada fija en él y de vez en cuando relamía sus labios y miraba lo que estaba liberando. No era nada de lo que alguna vez había visto en los camarines mientras de duchaban, pero ahora, así, todo era tan intimo que se sintió avergonzado de sí. Y luego se asustó. Miró el miembro de Joe y luego a él. Este le miró indeciso y con miedo.

—Si no quieres… —comenzó el peli-negro, pero rápidamente Nicholas negó. Él quería, quería enserio hacerlo, pero no podía imaginar que algo así penetrara su única entrada su cuerpo.

—Yo jamás he tenido sexo… hum, por atrás. –dijo apenado, sin saber si mirar a los ojos de Joe o mirar su miembro, o otra parte.

Joe le sonrió con ternura, pasó su mano por el corto cabello de su hermano y negó con la cabeza.

—Jamás te haría algo que no quisieras Nick. *Por que eres mi hermano, iba agregar, pero se dio cuenta que eso jodería malditamente el momento.

El castaño sintió algo… algo inexplicable que llenaba su corazón, pero no quería decir qué era. Ni siquiera pensarlo, así que lo ignoró.

Nick desabrochó y bajó los pantalones de su hermano dejándolo hasta sus tobillos. Bien, ¿qué hacía ahora?, se preguntaba mientras tomaba la erección entre sus manos. Su hermano alzó las caderas y este comenzó a bombearlo de arriba hacia abajo tal como lo haría con su propio miembro. Miró a Joe, quien echaba la cabeza hacía atrás y cerraba los ojos. Su clavícula se marcaba con perfectos rasgos y la manzana de Adán sobresalía en su cuello. Nick comenzó con el trabajo manual, y trató de ponerse en el lugar de Joe, ¿tendría que chupárselo?, ¿tendría que lamerlo?, ¿sólo masturbarlo con la mano?, ¿su mano y su boca?. Había tantas interrogantes. Sí él tan sólo supiera qué hacer en ese momento.

El oji-café se decidió por hacer lo que estimó conveniente. Inclinó su cabeza hasta pillarse con el glande y lo introdujo en su boca, succionando y haciendo que su hermano gimiera despacito, incitándolo. Puso su mano en la base de este, inclinó y alejó la cabeza de su grande pene, metiéndolo y sacándolo. Saboreando el fuerte sabor varonil. ¿Era así cómo las chicas que se había follado lo probaban?, ¿les gustaría?

Sintió las manos de su hermano recorrerle la espalda, luego sentir cómo la tela de su polera se subía.

—Sácate la polera Nick—le susurró este mientras que alejaba sus caderas del alcance de él. Nick asintió tiró de su polera por la cabeza y dejó la prenda caer en cualquier parte. Su hermano ya se había sacado la ropa y desabrochaba sus zapatos y sacaba sus calcetines lo más rápido posible.

Nick se ganó a un lado de él, le acarició la espalda de arriba hacia abajo, lamiendo y relamiendo sus labios por el fuerte sabor de su virilidad. Joe lo miró y tomó la barbilla apretándolo con un beso e introduciendo su lengua dentro de su boca. Nick sonrió su miembro vibrar en sus pantalones de Jeans y aún así no hizo nada más que jugar y recorrer la boca de Joe. ¿Eso estaba bien?, ¿a quién le importaba?, se sentía jodidamente bien.

—Déjame tocarte, Nick.

Su hermano obedeció. Joe, con manos rápidas y expertas, comenzaron a tocar la polla de Nick a través de los pantalones y recorriendo parte que le daban escalofríos. Los labios de Joe descendieron por su clavícula hasta su cuello y luego más abajo, hasta pillarse con los pezones, mordiendo y pasando su lengua repetidamente dejándolos erectos. Luego hizo lo mismo con el otro. El pelinegro desabrochó sus pantalones y sus labios volvieron a estar juntos a los de Nick y sus lenguas siguieron haciendo una danza de pasión.

—Tócame Nick—gimió su hermano y este obedeció.

Nick tomó el miembro de su hermano entre sus manos mientras sentía que este le bajaba los pantalones junto a sus calzoncillos. Alzó las caderas y Joe pudo sacarlos por completo, o más bien hasta las rodillas. Nick movió su mano de arriba hacia abajo, ahora más seguro y confiando de lo que estaba haciendo y con quién lo estaba haciendo. Nick chupó el labio inferior de Joe y luego introdujo su lengua otra vez dentro de su boca. Su hermano tomó su polla y subió y bajó su mano. Ambos comenzaron a mover sus manos en sus sexos, manoseándose y probando sus labios.
Joe, inesperadamente, tumbó a Nick en la cama y le sacó por completo los pantalones. Ahora sí, ambos completamente desnudos. El pelinegro se subió encima de él y comenzó a frotar su polla sobre la de su hermano, moviendo sus caderas de arriba hacia abajo, sintiendo la aspereza del vello púbico de Nick y la suavidad de su polla sobre la suya. Meneó las caderas de forma circular, su pecho descansó sobre el de su hermano, mientras que sus miembros se frotaban.

Éxtasis, el más puro y fuerte éxtasis explotó en Joe, corriéndose duramente sobre el estomago de su hermano y llenándolo de su semilla. Sus músculos del estomago se endurecieron mientras se corría, y sin darse cuenta, tenía la mirada de Nick pegada en la suya. El castaño lamió sus labios y pegó esos contras los de él.

Joe se alejó, y sin más preámbulos bajó hasta encontrarse con el endurecido miembro de Nick. Tomó su base, metió el miembro dentro de su boca y succionó, moviendo su cabeza de arriba hacia abajo, mientras que su mano se movía al mismo ritmo que su boca. Apretaba fuerte, chupaba fuerte y sintió el primer chorro de semen llenar su boca. Espeso y salado—comprobó. Chupó aún después de saber que él se había vaciado por completo, y con un sonido de “pap”, lo sacó su boca.

.~

Una semana, Joe y Nick corrieron por todo el escenario jugando baloncesto y beisbol como en los viejos tiempos. Sí bien ambos sabían que jamás su relación volvería a ser la misma, se propusieron que tratarían de olvidarse de eso cuando no lo necesitaran.

Joe le prometió ser paciente y que su “perfecto culito”, cómo él denominó horas más tarde cuando estaban con toda la banda, estaría a salvo de él. Pero a Nick ni siquiera le importaba.

—¡Hey, nenas!—gritó Joe a un par de nuevas violinistas—¿quieren una noche de pasión con los hermanos Jonas?

Una de las violinistas abrió los ojos con asombro y sus mejillas ardieron, tomando un color rojizo, mientras que la otra casi salta de felicidad. Joe le sonrió a su hermano a sabiondas y ambos asintieron.

—La pelirroja es mía.—dijo Nick con rapidez.

Joe se encogió de hombros y caminó hacia la morena.
Fin.

Muchísimas gracias por leer.

Ojalá les haya gustado y que, hum, no le haya dejado un trauma. Enserio no quiero eso.

Ojalá ustedes nenas setsys se pasen por mi nueva novela que, está inspirada en mi escritora favorita Olivia Cunning.

Ojalá les guste, se pasen, comenten... GIVE ME LOVE.

Puedes decirme lo que quieras Wink

me acostumbré a las malas críticas (y las buenas *-* las adoro)

jgausipokñanmbsku sin más, les dejo el link y ojalá que se pasen. Enserio.

Every Night {nicholas&tú}

Oh Dios Mio!!!
sta... rara pero genial..
ohhh cuando estan los dos juntos...
demonios....
me gusto apesar de ese tipo de relaciones

» мι נєfє ♥ иι¢к נσиαѕ у тυ ♥ * мєgα нσт * || (sin ignorar pleasee!!)
» •ѕ.σ.ѕ...мє єиαмσяé ∂є υи נσиαѕ!• ||иι¢к & тú||
» σиє sнσσт; ♥ вαск tσ dєсємвєг. [иιск&tυ]
» ღ ѕι мυєяιєяα мαñαиα ~ иι¢к נσиαѕ & тυ ღ
» ℓσ qυє мє ∂ємυєѕтяαη тυѕ σנσѕ [Tu & Nick]